CAPÍTULO 42:
días oscuros
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La preocupación en Janne volvió, sin embargo, la reconfortaba saber que había descargado ese enojo en alguien que si se lo merecía.

Cerraba los ojos y solo podía verse a ella misma perdiendo el control.

─ No tienes que hacerte la fuerte.─ Janne ni siquiera apartó la vista de su mano lastimada─ Podemos hablar si quieres, algo te pasa y lo estás ocultando.

─ Si quisiera hablar ya lo había hecho─ Se atrevió a mirarlo con total seriedad, tras unos segundos de mantener la mirada, Janne volvió su vista hacia su mano que comenzba a doler

Robby sentía como alguien golpeaba su corazón cada que Janne se portaba indiferente con él, aunque él sentía que se lo merecía, quería disculparse con ella, pero no tenía el valor suficiente para hacerlo.

Sin embargo, en ese momento le dio un golpe de valentía así que se acercó a tomar su mano lastimada provocando que ella volteara a mirarlo. Ver sus ojos cristalinos llenos de miedo quebró su corazón, porque si algo había descubierto en Cobra Kai fue que Janne era su debilidad.

Estaba por hablar y disculparse, decirle que estaba arrepentido de todo lo malo que había hecho. Pero el destino conspiraba en su contra.

─ ¿Cómo vamos?─ Johnny preguntó saliendo del local de burritos

Así que Janne apartó rápido su mano y la escondió en la bolsa de su sudadera.

─ No está tan lejos.─ El chico habló─ Hay muchos bares y restaurantes ahí.

─ Preguntémosle a él─ El rubio se acercó a un hombre

Su teléfono vibró en su bolsillo, era un mensaje de Moon contándole sobre algo espiritual que había descubierto y diciéndole lo mucho que la extrañaba y quería.

Entonces Janne se sintió culpable por sentir ese cosquilleo cuando Robby tomó su mano.

─ Malditas hormonas─ Gimió por lo bajo

─ No puedes quedartela, es muy especial─ Escuchó a Johnny decir a lo que ella frunció el ceño─ Dime dónde está Hector Salazar y te doy dinero, ¿Si?

El hombre hizo una mueca para reírse sin gracia antes de irse y hacer señales.

─ Creo que estaba diciendo que quitarás la camioneta─ Janne supuso al ver una señal de no estacionarse para volver su vista a Johnny

─ Si Héctor Salazar es tan peligroso no deberíamos decir su nombre─ Robby comentó

─ Para cosechar manzanas sembramos el árbol.

─ O podemos trepar el árbol

Janne volteó al escuchar un motor, una grúa había enganchado la camioneta. Por instinto dio manotazos al brazo de Robby para llamar su atención.

─ ¡Hey, oye!─ ambos hombres intentaron correr hacia la grúa.

─ ¡Imbécil!

─ ¡El burrito no!─ Janne se quejó al ver cómo Johnny lanzaba la comida hacia el vehículo.

─ El tipo dijo que necesitamos 4000 pesos─ Johnny dijo─ Es como un millón de dólares.

─ Eres un asco para matemáticas─ Janne habló mirando las piñatas coloridas de un local─ En realidad son 200 dólares.

─ Aun así, solo tenemos la mitad de eso─ Robby habló

─ No hallaremos a Miguel sin la camioneta.

Escucharon una bulla a su lado, había un grupo de gente rodeando una mesa larga donde a cada extremo había dos hombres, al centro un galón de leche y un frasco con chiles. Un hombre recogía dinero que las personas estiran apostando.

─ Es una Savina Roja, te derrite por dentro─ Robby comentó

─ La gente en verdad es masoquista─ Janne frunció el ceño al ver a uno de los hombres sudar.

─ Es nuestra oportunidad.─ El hombre habló llamando la atención de los jóvenes─ Si ves que me ahogo cúbreme la boca para no escupirlo.

─ Espera─ el chico lo detuvo─ yo lo hago─ dijo a lo que Janne alzó una ceja

─ No, yo nos metí en esto

─ Cómo dijiste, es nuestra mejor chance

─ Si no se deciden lo voy a hacer yo─ Janne amenazó

─ No─ Ambos dijeron volteando a mirarla

─ Puedo ganar─ Robby dijo antes de irse a sentar en una de las sillas

Janne y Johnny compartieron una mirada antes de acercarse a Robby y colocarse detrás de él.

─ Apuesto todo mi dinero a este chico─ Janne dijo colocando varios billetes sobre la mesa mientras miraba a quien recogía las apuestas.

Aquello tomó por sorpresa a Robby quién no pudo evitar sonreír, cuando volteó a mirarlo le regaló una fugaz sonrisa antes de posicionarse junto a Johnny.

Pasaba el tiempo y el frasco de chiles se había vaciado, Janne observaba a Robby que había comenzado a sudar y su piel se había enrojecido. Una vena en su frente saltaba mientras su lengua se movía intentando producir saliva para quitar el ardor.

─ Él es mi hijo─ Johnny presumió orgulloso.

Janne solo podía mover sus manos con ansias. Él necesitaba ganar esa apuesta para seguir buscando a Miguel.

─ Uno más─ dijo en español─ el más picante que tengan.

─ Solo recuerda que tienes que ganar─ la chica habló preocupada

Trajeron un frasco con dos chiles que sacaron con unas pinzas para dejar uno en cada lado. Robby vio a Janne antes de tomar el chile.

─ Tú puedes, estoy seguro de que lo harás─ El rubio animó a su hijo.

Él juntó sus palmas con el chile al interior antes de respirar profundamente. Segundos después se lo llevó a su boca haciendo muecas, Janne lo observó perpleja cuando logró pasárselo por completo sin tomar leche. Impulsivamente lanzó un grito de emoción mientras aplaudía.

El otro hombre llevó con desesperación el chile a su boca, como si se sintiera humillado de que un americano le ganara. La vena en su cabeza palpitaba y sus ojos delataban el sufrimiento a su interior. No tardó en beber el vaso de leche.

─ ¡Si!─ Johnny exclamó feliz mientras Janne sonreía ampliamente

Poco después el hombre escupió el líquido en dirección a los tres americanos que celebraban.

─ Eso fue asqueroso─ Janne se quejó tomando el vaso de leche del lado de Robby y lanzándole el líquido al otro hombre.

El hombre se puso de pie escurriendo el líquido lácteo, el enojo en su mirada hizo retroceder a Janne quién tragó saliva. Johnny sacó su pecho al tiempo que alzaba su mentón para encarar al hombre que era más alto y robusto que él.

─ Otra pelea no─ Janne gimió al ver lo que había provocado─ Corre─ tomó la muñeca de Robby para salir corriendo del mercado mientras el chico jalaba del brazo a su padre.

─ ¿Sabías que la leche tiene pus de vaca?─ Janne comentó con burla mirando a Robby tomar un galeón de aquel líquido.

Al escuchar eso de inmediato dejó de tomarlo haciendo una mueca de asco.

─ Aún no se cómo te comiste ese último chile─ Johnny habló

─ No lo hice.

La chica apartó su vista de su teléfono para ver con sorpresa a Robby quién sonreía con complicidad mirando a su padre. De su bolsillo sacó el pequeño chile.

─ ¿Qué masticaste?─ El rubio preguntó

Mostró los dulces mexicanos que Johnny había comprado.

─ Chico astuto─ Janne dijo mirándolo desde atrás a lo que Robby le sonrió.

Volvió su vista a la pantalla de su teléfono mientras Johnny atendía una llamada, al parecer era Carmen dándole noticias sobre Miguel así que dejo de lado para poner atención.

─ Van a el Hoyo Verde─ Anuncio mirando a Robby

─ Eso suena a un campo de golf─ Janne comentó

─ Está por dónde venimos─ Robby anunció tras revisar en su teléfono

─ Estamos en camino─ Dijo antes de colgar.

─ Sabían que el español es muy difícil de aprender porque una palabra puede tener un significado en un estado y en otro tiene un significado diferente, incluso puede que entre colonias tengan diferentes significados, también tienen modismos y ¿Albures?─ Janne habló leyendo la información en su teléfono─ Miren, aquí hay algunas frases mexicanas, Me estás dando el avión─ Pronunció con dificultad el español─ ¿Por qué alguien le daría un avión a otra persona? Oh, no se refiere a eso, por ejemplo, Johnny siempre me da el avión cuando hablo

─ Yo nunca te doy un avión─ El rubio dijo sin apartar su mirada del sendero.

─ Llegamos─ Johnny anuncio

─ Que bueno, ya necesito respirar aire que no huela a queso─ dijo intentando abrir la puerta, pero esta tenía seguro─ ¡Hey!─ se quejó al ver a los dos bajar─ Abre la puerta─ Exigió mirando al rubio

─ No irás, este lugar parece peligroso.

─ Sabes que de alguna manera voy a bajar de aquí y no voy a hacerme cargo de los daños que le haga a tu camioneta─ Dijo cruzándose de brazos─ Voy a romper una ventana.

La mirada de Janne le hacía saber que hablaba en serio así que no tuvo otra opción más que abrir. Una vez que bajó Janne le dedicó una sonrisa inocente.

Caminaron por un callejón hasta llegar a una puerta de servicio. Lograron escabullirse detrás de unos hombres que habían entrado justo antes de ellos.

─ Artes marciales mixtas, que mierda─ Johnny se quejó entrando al lugar─ Héctor el Salazar, ¿lo conoces?─ preguntó a un hombre que parecía estar entrenando.

─ No creo que la gente piense que son FBI─ Janne dijo mirando a su alrededor.

Llegaron a una gran sala donde había una gran multitud de gente gritando y animando la pelea que estaba sucediendo al centro donde había una gran tarima con rejas alrededor de ella. Las luces azules y rojas predominaban provocando que hubiera algo de opacidad.

Janne recorrió el lugar con su vista, había un segundo piso donde parecía haber gente importante, entre ellas había un muchacho moreno que ella conocía muy bien.

─ ¡Miguel!─ gritó extasiada de verlo─ ¡Ahí está, es Miguel!─ sacudió emocionada a Johnny.

Estaba por correr a su encuentro cuando un gran hombre robusto se interpuso en su camino haciéndola retroceder. Johnny la tomó delicadamente del brazo al ver qué ella apretaba los puños encarando al hombre, la colocó detrás de él al tiempo que se enfrentaba al moreno.

─ No te acerques a Héctor─ amenazó el luchador.

─ Parece que el lobo tiene problemas entrando al ring─ La voz de alguien se escuchó en los altavoces.

Así que Johnny lanzó el primer golpe. Pero el otro no se quedó quieto y detuvo una patada que el rubio lanzó hacia sus costillas antes de cargarlo y azotarlo al suelo. Se puso de pie y ambos adolescentes iban a entrar a la pelea.

─ No, yo puedo, quédense aquí─ Dijo colocando sus manos sobre sus hombros antes de ser jalado hacia atrás.

─ Ya se lo cargó el payaso─ Janne hizo una mueca.

─ ¿Cómo te aprendiste tantas frases?─ Robby cuestionó sorprendido

─ Era un camino demasiado largo y sin nada que hacer─ Se encogió de hombros.

Al parecer la pelea no iba a favor de Johnny, le habían arrancado un pedazo de tela de su playera y el hombre lo ahorcaba tirados en el suelo.

─ ¡Papá!─ Robby gritó

Lanzó el chile que había escondido en su bolsillo, cayó justo en la palma de Lawrence quién no dudó en exprimir su jugo en los ojos del contrario que de inmediato lo soltó para llevar sus manos hacia sus ojos soltando varios gemidos de dolor.

─ Gran idea, Keene─ Janne elogio mirándolo

─ No eres la única inteligente aquí, Mathews─ respondió con una sonrisa.

Johnny quería lanzar a Janne por la ventana, apreciaba a la chica, pero comenzaba a ponerlo nervioso.

─ Conduce rápido, puede pasarle algo, lo vieron irse del lugar con ese tal Hector, tenemos que encontrarlo ya o le va a hacer algo─ Hablaba ansiosa.

─ ¡Janne ya cállate!─ Johnny intentó guardar la calma.

─ Lo siento, estoy sobre pensando todo y no pienso cosas buenas cuando eso pasa. todo es horrible y creo mil escenarios donde uno es peor que el otro, termina en catástrofe y... ¡Ahí está! Para, para, para─ Gritó señalando a una persona de pie en medio de la calle.─ ¡Miguel!─ lo llamó

En cuanto el hombre detuvo la camioneta, Janne bajó de ella y corrió hacia su amigo. Lo abrazo cortamente por el cuello antes de separarse para tomar su rostro entre sus manos.

─ Estás aquí, te encontramos─ Dijo intentando contener las lágrimas de alegría que amenazaban con salir─ Migue...

El chico se refugió en los brazos de su amiga, estaba roto. Ver las lágrimas que bañaban sus mejillas quebró el corazón de Janne quién lo abrazó con fuerza como si eso lo reconfortase. En su interior, Janne tenía que algo muy malo le hubiera pasado a su amigo, se veía muy mal, sus ojos lo demostraban y el sufrimiento en su llanto lo hacía más notorio.

─ Está bien, volveremos a casa, tranquilo─ murmuró contra su cuello mientras repartía caricias a su cabello.

─ Lo siento, Janne, perdón por haberme ido─ Sollozó aferrándose a ella.

Ari's Notes
Acabo de subir un tiktok del fanfic, el link está en mi perfil y de paso me siguen para que vean los demás videos que voy a subir. Las/ los amo muak.