036. getaway car
CAPÍTULO 38:
auto de escape
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Con su desinterés hacia Robby, Janne ya no tenía motivos para seguir con el karate, le daba igual Cobra Kai, solo quería terminar con las constantes peleas y rivalidades que había.
─ El karate solo genera violencia─ Moon habló mirándola
─ Esta gente no necesita arreglar sus problemas en un torneo, necesitan ir a terapia─ la morocha comentó soltando un suspiro pesado.
Janne se encontraba recostada boca arriba en la cama de su amiga que la había invitado esa tarde para pasar un buen rato juntas después de que Mathews le hubiera contado lo sucedido en la pelea.
» ¿Crees que podamos meditar juntas?─ pidió volteando a mirarla
─ Si, puedo hacerte un masaje para que te relajes un poco y después meditamos─ Propuso
Moon se posicionó detrás de Janne para comenzar a masajear sus hombros. La ojiazul cerró los ojos para disfrutar de los movimientos circulares de las manos de Moon sobre su cuerpo. Se concentró en su respiración tal y como Daniel les había enseñado.
Pero se distrajo al tiempo que Getaway car se reproducía en la bocina de la castaña por lo que Janne comenzó a tararearla mientras hacía leves sacudidas con su cabeza.
Sintió como las manos de Moon se apartaban de su espalda y el colchón frente a ella se hundía, pero Janne no abrió los ojos, ni siquiera cuando sintió los labios cálidos de la otra chica sobre los suyos.
Era un momento increíble, sus labios danzando con los suyos eran tibios y suaves, Janne temía que Moon llegará a escuchar los fuertes latidos de su corazón contra su pecho, estarla besando era como acariciar las nubes algo que parecía imposible pero a la vez tan tentativo. Luego de un momento se alejó lo suficiente para mirarla a los ojos. Aquel beso hizo temblar el mundo bajo sus pies.
Pero la magia se acabó cuando sintió que lo que habían hecho estaba mal.
Y no, no fue porque estuviera besando a una chica, aquello le había parecido magnífico sobretodo si se trataba de Moon.
Lo que lo hacía sentir erróneo era Eli, Janne sospechaba que aún tenía sentimientos por su exnovia y no quería ser ella quien ahora arruinara las cosas, no quería lastimarlo.
─ Lo siento─ Moon dijo al ver el rostro asustado de Janne─. Creí que...
─ Creo que me gustas─ Soltó sin más─, pero también creo que Eli aún siente algo pro ti y... no sé, es mi amigo
─ Está bien─ La castaña colocó su mano sobre la de Janne─, él y yo estamos intentando ser amigos
─ Lo sé, él lo dijo, no quiero lastimarlo─ Admitió─. Si habló con Eli... Tal vez... ¿Podemos ir al baile juntas?─ Preguntó con timidez
─ Claro─ Sonrió abiertamente
Y Moon depositó un corto beso al tiempo que se escuchaba en la bocina el verso de la canción:
"Porque los traidores nunca ganamos, estoy en un auto de escape"
Lo que llevo a qué Janne se preguntará si estaba utilizando a Moon cómo auto de escape para olvidar a Robby.
Janne estaba dispuesta a hablar con Eli, la culpa la llevaba siguiendo desde que salió de casa de Moon y necesitaba decirlo para liberarse de ese malestar que tenía. Había practicado muchas veces frente al espejo pero siempre terminaba hablando sobre un tema completamente distinto.
Con un cosquilleo en el estómago y una dificultad para respirar la Mathews encaminó en busca de su mejor amigo, su vista estaba fija en frente de la calle la cual pareció extenderse en un largo camino sin fin.
Pero se apresuró a tocar la puerta antes de arrepentirse, nadie respondió, reviso en el gnomo dónde dejaban la llave de repuesto pero tampoco estaba así que giró la manija llevándose la sorpresa de que la puerta estaba abierta.
Su preocupación aumento así que entró corriendo a buscar a su amigo.
─ Estás bien─ Soltó un suspiro al verlo sentado en el sillón con su computadora en sus piernas─. Pensé que habían entrado a atacarte de nuevo─ Demetri la señaló como si afirmara un punto─ ¿Qué pasa?
─ Le decía a Eli que debería aumentar su seguridad porque estamos en medio de una guerra de karate─ Explicó─. Pero eso no importa
─ ¿Qué importa entonces?
Al ver los ojos decaídos de Eli cualquier rastro de valentía que había tenido para hablar sobre la reciente escena con Moon se había esfumado. No quería hacerlo sentir peor.
─ ¿No supiste?─ Demetri exclamó con alteración─ All Valley tiene divisiones por género.
─ ¿Qué dices?─ Janne preguntó con sorpresa
─ ¿En realidad parezco la mejor opción para derrotar a Robby Keene?─ El chico siguió quejándose─ El señor LaRusso dice que todos pueden ser héroes pero no soy Batman. Soy más como Alfred. Tú eres Batman─ Apuntó hacia el chico de gorra quien pareció ignorarlo─. Olvidé que no te gustaba DC. Bien olvídate de él, eres el Halcón
─ Si, ya no lo soy─ dijo quitando las gorras que cubrían su cabellera
─ Al menos se ve mejor que la última vez que te vimos─ Janne comentó sentándose a su lado
─ Toda la escuela se enteró─ Habló con voz apagada─. Es vergonzoso
─ ¿A quien le importa su opinión? Además, volverá a crecer
─ No importa. Arruine mi reputación, hablé mucho y probé que fui un idiota─ Lo interrumpió─. Con Moon, con Miguel... y sobretodo con ustedes. Recibí mi merecido
─ Si, pero te perdonamos─ La chica le recordó─. Y no nos importa si tienes un corte mohicano, un mullet, te quedas calvo o tienes trenzas
─ Miyagi-do te necesita─ Demetri dijo desesperado
─ No volveré a Miyagi-do
─ Genial. Eliges estar en Eagle Fang con Janne y no conmigo─ Dijo con indignación
─ Tampoco volveré a Eagle Fang─ Bramó antes de que Janne pudiera hacer un comentario burlesco al respecto─. Me cansé del Karate
─ Eso lo he dicho yo demasiadas veces─ La chica dijo─. Y siempre vuelvo, supongo que ahora sí es definitivo. Soy demasiado indecisa
El silencio se había instalado en la habitación, Eli continuó jugando en su computadora, Janne pensaba en su beso con Moon, se encontraba boca abajo con sus pies descansando sobre el respaldo del sillón y su cabeza colgando en el borde, tenía una boba sonrisa en su rostro ante el recuerdo del delicado tacto de los labios de Moon; y Demetri procesaba la decisión que su amigo acababa de tomar.
─ No pueden renunciar─ Les dijo mirándolos
─ Ya te dije, tome mi decisión
─ Hey, ustedes fueron los que me metieron en el karate ¿Recuerdan?─ Los cuestionó─ Era feliz jugando Dungeon Lord después de la escuela y por ustedes me vi forzado a unirme a un dojo ¿Y saben qué? Es lo mejor que me ha pasado. Me volví fuerte, gane confianza, conseguí al a chica de mis sueños. Incluso si me deja por un australiano. Incluso estoy entusiasmado por el torneo All Valley. Nunca pensé que diría eso. Pero si no están, no será tan emocionante.
─ Al menos para uno de nosotros el karate le trajo algo bueno─ Janne murmuró mirando la pared frente a ella
Por su parte, Eli ignoró por completo a Demetri para volver a jugar su videojuego.
─ Bien, tu me obligaste a hacer esto─ Se paró de su asiento para sentarse junto a Eli aplastando a Janne en el intento la cual soltó un quejido y golpeó a su amigo
─ Dijiste que lo habías borrado─ Eli se quejó
─ Digo muchas cosas─ Demetri respondió─. Es una característica polarizadora
─ Demetri y Eli, hermanos binarios, uno o cero, seremos tú héroe. Hermanos binarios─ Las voces desentonadas de los chicos se escucharon en las bocinas del teléfono.
Janne se puso de pié para poder ver el vídeo mientras mostraba una sonrisa. Recordaba muy bien haber visto como sus amigos grababan ese vídeo al cual ella se negó a salir con la excusa que le daban terror las cámaras y es que era cierto. En un pasado la idea de que cualquier persona tuviera acceso a un vídeo suyo como ese la hacia sentir náuseas.
─ ¿Por qué me enseñas esto?
─ Porque esto es lo que eres─ Demetri respondió
─ ¿Un perdedor?─ Cuestionaron los otros dos a la vez
─ Mi mejor amigo─ Respondió─ Ambos lo son─ Dijo mirando a Janne─ Se que crees que ese mohicano definió quién eres y a tú crees que nadie más te querrá como Robby lo hizo, pero no es así. Ustedes son mis mejores amigos y nada cambiará eso.
─ Siempre seremos nosotros contra el mundo─ Janne sonrió entrelazados sus manos con las de sus amigos.
Tenía todo claro y había entendido algo: hasta que Cobra Kai no se terminara, ella no iba a poder alejarse del Karate.
Si quería que todo se acabará tenían que vencer a Kreese y Silver en el torneo, para eso ella tenía que participar en la categoría femenil con Eagle Fang, lo cual la asustaba porque Sam y Tory podían ser sus contrincantes y aún tenía miedo de perder el control.
─ No tenemos el dinero de Cobra Kai. No hallaremos una campeona─ escuchó la voz de Johnny
─ Yo no era un campeón cuando lo conocí─ Miguel lo enfrentó─. Me convirtió en uno. Vio algo en mi que nadie más vio. Ahora debe ver eso en otra persona
─ Si, vi eso en Janne y ahora nos abandonó
Janne apretó con fuerza sus labios, Johnny confió en ella desde el primer día en que la vio, no le importó que se viera insegura o torpe, él había visto la verdadera fuerza de voluntad que tenía, la valentía y coraje que cargaba para lograrlo.
─ ¿Quién dice que los abandoné?─ Janne salió detrás de los estantes llenos de polvo.
Lo siguiente que paso Johnny Lawrence no lo esperaba, la joven se encontraba abrazándolo con tal fuerza que sentía que se estaba aferrando a él como si su vida dependiera de ello. Lo que él hizo fue pasar su brazo por su espalda con algo de sorpresa y una sonrisa plasmada en su rostro.
─ Gracias por confiar en mi─ Susurró aún abrazándolo─, prometo no volverlo a decepcionar
─ Nunca lo hiciste─ Respondió
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