🔪19🔪
Un silencio sepulcral envolvía la penumbra de aquella noche nublada. Todo estaba, aparentemente, en total y absoluta calma. Un aire tempestuoso mecía los árboles y los revueltos cabellos de las tres personas que, recostados en el húmedo y verde suelo, estaba atentos a cualquier señal de movimiento humano.
El tiempo no estaba a su favor. Parecía que una tormenta muy fuerte se avecinaba y no les convenía para nada porque les dificultaría aún más la visión de los alrededores.
Hoseok sacó de uno de los bolsillos de su chaqueta el plano de aquel almacén que parecía vacío, pero que estaba lleno de escorias por dentro. Lo desdobló y lo tendió en el césped frente a todos.
—Logré conseguir este mapa del lugar con un policía amigo mío— mencionó Hoseok.
Aquello a Jimin le causó cierta curiosidad. Al parecer tenían nexos entre las autoridades. Aunque no tenía porque sorprenderle, eso pasaba muy a menudo cada vez que se les hacía difícil capturar a alguien. Siempre ataban los cabos sueltos y terminaban saliendo a la luz los topos que se hacía llamar policías.
—Esto que ven aquí— continuó mientras iba señalando minuciosamente para que se comprendiera mejor la zona— son las diferentes salidas— marcó con su dedo ambos lados del mapa— y como podrán ver el lugar también cuenta con túneles subterráneos de difícil acceso.
—¿Hay alguna salida por ahí?— preguntó Jungkook que se mantenía escuchando y prestando toda su atención.
—Desde luego, pero, todos esos túneles tienen muchas trampas de las cuales no conocemos localización exacta, es muy peligroso adentrarse sin conocer nada por dentro. Además, también hay caminos sin salida. Es todo un laberinto— observó a su jefe esperando una orden clara.
—No tenemos otra opción que caerles por detrás. ¿Cuántas personas custodian esa parte?
—Son unas cinco señor, creo que será fácil si derribamos primero a los más alertas y así los que estén desprevenidos no notarán nada extraño.
—Me parece bien esa estrategia. Tenemos que movernos con mucha cautela por entre los árboles, cuando estemos detrás subiré a uno y desde allí acabaré con ellos. Ustedes me pueden cubrir desde abajo.
—Por supuesto jefe, no se preocupe.
Jimin, que mantenía estudiando más a fondo el plano dijo:
—¿Y si entramos por arriba?.
Captó de inmediato la atención de Jungkook.
—¿Como sería eso?
—He estado observando bien el plano. El sitio también cuenta con una azotea, lo más seguro es que haya una puerta o algo por donde entrar. Sería más conveniente hacerlo por ahí y así no nos arriesgamos a ser descubiertos si alguien se da cuenta de lo que ocurre.
Jungkook lo observó con ojo avizor. Sabía a dónde quería llegar pero quería poner a prueba la inteligencia, que ya sabía que tenía, el rubio.
—Ya que sugeriste esa idea, ¿por dónde subimos sin que nos vean?
—Primero, el lugar solo tiene tres pisos y cuenta con soportes de hierro en las paredes. Al parecer fue una fábrica a la que le construyeron lo necesario para que los trabajadores no quedaran atrapados en caso de incendio o cualquier otro peligro.
—Sabes que el lugar está rodeado. ¿Cómo vamos a entrar sin ser vistos? A parte de que está todo cubierto de cámaras aunque no las veas.
—Es cierto. Pero las cámaras tienen un punto ciego, por si no lo sabías. Si nos cubrimos con algo que nos sirva de camuflaje podemos arrastrarnos hasta la pared. Cuando estemos allí las cámaras no nos pueden captar porque no cuentan con la rotación hacia abajo. Podemos caminar pegados a las paredes y no seriamos vistos por las cámaras.
Jungkook sonrió. Sabía que Jimin tenía potencial pero nunca se imaginó que tanto.
—A ver sabelotodo, ¿qué vamos a hacer con las personas? Por si no te has dado cuenta de su presencia.
—Hoseok— intervino Jungkook— el personal solo vigila la entrada del frente y de la parte trasera. No están en los alrededores porque están las cámaras, debido a ellas pensaron que esa parte del edificio no necesitaba personal, y cometieron un error porque precisamente ese es un punto débil muy bueno y del que nos podemos aprovechar.
—Exactamente, ahí es donde quería llegar. Nos arrastramos cubiertos por el suelo y caminamos hasta los soportes y subimos muy pegados a las cámaras, ellas tienen alcance de visión a lo lejos pero son incapaces de captar cuando hay alguien tan cerca. Esa es mi idea, ¿que dicen?
—A mi me parece mucho mejor que la anterior.
—Luego que estemos dentro tenemos que pensar muy bien por donde nos vamos a mover. No sabemos cuántas personas hay dentro por lo que es imposible trazar un plan concreto para esa parte. De lo que si tenemos que ser conscientes es de por donde vamos a salir cuando el trabajo esté hecho— continuó sugiriendo Jimin.
—Está más que claro que los túneles quedan descartados— intervino Hoseok.
—Por supuesto que sí— sonrió en cuanto una idea cruzó su cabeza— ¿pero que te parece si les hacemos creer que el laberinto es nuestro lugar de salida? Sería una perfecta opción de despiste y así todos atravesarían el lugar sin medir consecuencias.
Jungkook escuchaba todo el plan maravillado. Nunca había conocido a alguien que ideara un plan tan perfecto en tan poco tiempo.
—Tu idea parece muy fácil. ¿Pero como rayos hacemos eso?.
—Pues tú mismo lo has dicho, fácil— rió por lo bajo— te vas a disfrazar igual que uno de ellos y los vas a alertar cuando el caos comience. Dirás que llegaste tarde para poder atraparlos que viste por donde se habían ido, y ahí es cuando das las coordenadas de por donde se fueron.
—¿Porque tengo que ser yo el que haga eso? Lo puedes hacer tú perfectamente.
—Es que la idea se me ocurrió a mi por eso te toca a ti desarrollar la parte que te he asignado.
—Baf— protestó mientras giraba su cabeza hacia otro lado.
—Luego mientras todos estén ocupados buscando en el laberinto nosotros saldremos por detrás o mejor, por donde mismo hemos entrado, ya se verá. Y ese es todo el plan.
—No me equivocaba cuando decía que ambos hacemos un buen equipo— reiteró el pelinegro.
Jimin sonrió y asintió. Tenía que admitir que eran un equipo fantástico.
—Creo que es hora de comenzar.
—Estoy de acuerdo, colega.
Estaban a punto de comenzar con aquella locura. Locuras de las cuales Mr Gold ya estaba acostumbrado pero que Jimin desconocía. Todo podría salir perfectamente bien así como perfectamente mal y eso solo dependería de las circunstancias y del trabajo en equipo, un trabajo que ya era costumbre en Jimin pero que para Mr Gold era totalmente desconocido.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro