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—¿Luego vendrás al dorm de nuevo o...? —preguntó Sumin sin apartar la vista de Eunji, quien estaba siendo maquillada por Hana.

Las chicas no pudieron evitar emocionarse cuando se enteraron que iría a visitar a los miembros de Stray Kids para presentarse de forma oficial, llegando incluso a preparar todo, dándole igual que la cena no fuese hasta unas semanas después. Les había dicho tantas veces que no hacía falta que había perdido la cuenta, pero siguieron insistiendo, poniendo como excusa que eran sus amigas y que se lo debían al no haberla podido ayudar cuando conoció a los padres de Jisung.

—Estamos hablando de Eunji, seguro que volverá, además de que Shadow está aquí —respondió Jisu, que estaba jugando con el perro junto con Haru—. Además, tampoco es como si vosotras la dejarais otra opción, en cuanto esté de vuelta, la acribillaréis a preguntas.

—Qué va, no haremos... —empezó a contradecir Hana, pero se calló al ver la mirada de Jisu y Haru, quienes no se creían lo que iba a pronunciar—. Vale, sí, es verdad. No es mi culpa tener un lado cotilla, además, seguro que a Eunji no le molesta.

—Y si lo hiciera, no lo diría —comentó Haru acariciando al perro, que parecía estar muy feliz por las atenciones recibidas.

—Exacto, y eso no lo podéis negar —apoyó Jisu a la vez que Sumin rodaba los ojos.

—¿Podéis dejar de hablar de mí como si no estuviera aquí? —pidió Eunji riendo. Al hacerlo, se movió, causando que Hana se quejase porque estaba a punto de terminar de rizarle las pestañas—. Y no me fastidia que me pregunten cosas...

—¿Veis? —interrumpió Hana burlándose.

—Hasta cierto punto —terminó con una sonrisa, lo que causó la risa de Jisu y Haru y un suspiro de Hana. Su mirada se dirigió a la única que no había hablado, y no pudo evitar preocuparse, ya que era extraño que estuviese en silencio—. Sumin unnie, ¿estás bien? No has dicho nada.

—Sí, sí, solo pensaba en algunas cosas —respondió con una sonrisa dulce, aunque eso no aminoró la sensación que tenía, sino que incluso la incrementó.

—Cuando pasa eso, siempre tengo miedo —confesó Haru, haciendo que todas, excepto la líder, se rieran al mismo tiempo que asentían.

—¿Por qué? —preguntó de forma incrédula.

—Unnie, eres la que siempre sabe todo antes que nosotras y cuando ocurre eso, te pones en modo... reflexivo —contestó Hana a la par que daba los últimos retoques al maquillaje, a lo que Sumin hizo un gesto con la cabeza, como si afirmara lo que había oído—. Ya he acabado y estás preciosa, aunque no lo necesitas para eso.

—Gracias —sonrió de forma tímida.

Sentía que nunca se acostumbraría a los elogios, daba igual si eran de gente cercana a ella, lo cual era irónico cuando tendría que estarlo al recibirlos también por parte de sus fans, pero le era algo imposible.

Cuando todas salieron de la habitación para dirigirse al salón, Eunji empezó a ponerse la ropa que Sumin había escogido, intentando no manchar ninguna prenda. Agradecía que la joven no hubiese elegido un conjunto algo formal, pese a que seguro que deseaba hacerlo, y que fuera algo sencillo a la vez que cómodo.

—Me encanta —expresó Hana mientras Eunji entraba a la sala—. Además, aún no me hago a la idea de que has vuelto a ser rubia, después de tanto tiempo llevándolo azul.

Hacía ya unas semanas que había decidido volver a ese color de pelo, creyó que necesitaba un cambio y más cuando llevaba bastante tiempo con el mismo, algo extraño en ella. Había pensado en teñirse de un color oscuro para probar algo nuevo, incluso ya había hablado con las chicas para que le dieran ideas, pero terminó regresando a él después de pensarlo mucho.

—Todas estamos de acuerdo con Hana —habló Jisu, a lo que las otras dos asintieron—. Sobre lo de que nos gusta cómo vas vestida, no a lo otro, dado que eso ya nos lo imaginábamos.

—Gracias por vuestra ayuda —sonrió Eunji y miró al reloj que estaba colgado a la pared—. Todavía quedan unos minutos para irme, no quiero ir muy pronto y parecer nerviosa o algo parecido.

—Pero seguro que lo estás —contraatacó Jisu, haciendo que la joven pusiese los ojos en blanco—. No puedes negar lo obvio.

—No iba a hacerlo, aunque es raro que esta vez no lo esté tanto —confesó mientras se sentaba al lado de Haru, quien tenía a Shadow en su piernas y parecía querer ir donde Eunji, consiguiéndolo al final.

—Eso sí que es extraño, y más siendo tú —apuntó Hana incrédula.

—Yo creo que es porque ya los conoces, porque como no es la primera vez, no tienes que estar tan nerviosa —explicó Sumin. Eunji pensó que tenía razón, ya que era muy raro que estuviera tan tranquila en un momento como ese—. Y deberías ir yendo, no vaya a ser que haya ocurrido algo en la carretera y llegues tarde, sé que no te gusta hacerlo.

—Cierto, luego os contaré, adiós —dijo de forma rápida poniéndose el calzado y el abrigo.

En todo el camino al dorm, estuvo reflexionando en cómo iría la velada, incluso estuvo pensando en temas de los que podían hablar para que así no se formara algún silencio incómodo, odiaba cuando eso pasaba.

Al llegar, le dio gracias a su mánager, quien siempre era el que se encargaba de llevarla a los sitios, y bajó del coche rápidamente para tocar el timbre. Aunque no hubiese nadie debía tener cuidado, porque siempre había la posibilidad de que se formara un escándalo.

—Te extrañé, pequeña —dijo Han en cuanto entró, y le sorprendió la calma que había, eso significaba que Jiyong se encontraba allí. Cuando no estaba cerca, todo era un caos—. Estás preciosa, aunque eso siempre.

—Nos vimos hace unos días, Sungie —sonrió mientras sentía las manos de él en su cintura. Comenzó a preocuparse de que alguno pudiese llegar a verlos—. ¿Y los chicos?

—Cada vez me cuesta estar más lejos de ti —confesó, causando la sonrisa de ambos—. Están en la cocina, Jiyong les ha dicho que nos dejen un momento a solas, a lo que la mayoría empezó a molestarme —contestó Jisung y al oír eso, la idol pasó sus brazos por su cuello, sabía que nadie se atrevería a no hacerle caso a la actriz.

—Como si tú no hicieras lo mismo con ellos —contraatacó con una sonrisa burlona.

—No estábamos hablando de mí —respondió y al escuchar eso, Eunji no pudo evitar reírse.

—No, pero ahora sí.

—Vale... ¿Y si pasamos a ti? —preguntó Jisung acercándose a ella—. Como ese día, en el que...

Al creer saber qué era lo que iba a decir, le besó. No lo hacía solo para que se callara, sino porque desde que había llegado, le apetecía hacerlo, y mucho. Nunca se cansaría de la sensación que le producía sus labios contra los suyos o cómo le daba caricias en la cintura cuando se besaban, era una de las manías que tenía Jisung.

—¿He llegado bien? —interrogó después de separarse, temía haberlo hecho tarde al final.

—Sí, has venido a tiempo, aunque pensaba que llegarías más pronto. Al menos eso fue lo que ocurrió cuando conociste a mis padres —bromeó Jisung, lo que provocó que Eunji le diera un golpe de forma suave en el brazo.

—¿Qué pasa? —cuestionó al ver que el chico no quitaba la mirada de ella.

—Estoy pensando...

—Uy, eso es muy raro —molestó intentando ocultar una sonrisa, por lo que recibió una mala mirada por parte de él.

—Voy a olvidar que has dicho eso —apuntó todavía sin soltarla de la cintura—. Aunque ahora no pienso decir nada.

—Sungie... —se quejó la idol.

—Nada de Sungie, te lo mereces por burlarte de tu novio. —Eunji le miró con los ojos entrecerrados.

—Vale, vale... —contestó de forma seria.

—No hagas eso, sabes que me pone muy nervioso, pienso que vas a hacerme algo. —Ella seguía sin cambiar su expresión de la cara—. Pero no te lo diré, te quedarás con la duda.

—Sé que Jiyong nos ha dicho que os dejemos un momento a solas —escucharon al lado suyo y Eunji sonrió al ver que se trataba de Changbin—, pero yo también quiero hablar con mi amiga.

—¿Celoso, Binnie? —rio la idol mientras se dirigía a él, quien le hizo un gesto para que la siguiera.

—¿De él? Nunca —contestó al mismo tiempo que llegaban a la cocina, en la cual se encontraban parte de los chicos y Jiyong.

—Eunji, hola —habló la actriz acercándose a ella con una sonrisa, la cual siempre le transmitía calma—. ¿Qué tal estás? Changbin no os ha molestado, ¿no?

—No, no, tranquila —respondió de forma rápida—. Yo estoy bien, ¿y tú? —preguntó, pero de repente se acordó de que no estaban solas, de que había más gente, por lo que hizo una pequeña reverencia y añadió—: Encantada de volver a veros.

—Nosotros igual —respondió Chan por todos, dado que Minho, Hyunjin, Felix y Seungmin estaban atentos a la comida, aunque los dos últimos estaban haciendo lo que parecía ser el postre.

—Contestando a tu pregunta anterior, estoy bien, aunque preocupada de que no me dejen cocinar —confesó Jiyong acercándose a ella—. Quieren hacerlo solo ellos y no me fio del dúo de Minho y Hyunjin.

—Por todo lo que me ha contado Jisung, es normal —susurró riendo para que solo la actriz lo oyera—. Y quería felicitarte por tu comeback, sé que fue el mes pasado, pero no he tenido oportunidad de hacerlo antes.

—Gracias, no esperaba tener tanto apoyo —respondió con sinceridad—. Además de que Jisung me confesó que solías escuchar bastante las canciones.

—Le avisé de que no te lo comentara, me daba vergüenza —admitió a la par que pensaba en que a partir de ahora le recalcaría más a su novio cuándo no podía decir algunas cosas.

—No tienes por qué, nos conocemos desde hace meses y sigues siendo igual —sonrió de forma dulce.

No pudieron conversar más, ya que los chicos habían acabado de preparar la comida y era hora de poner la mesa, lo cual se encargaron los otros cuatro. Eunji y Jiyong quisieron ayudar, pero a la primera no la dejaron por ser la invitada, y a la segunda porque siempre hacía las cosas y ahora les tocaba a ellos, aunque no pudo evitar insistir por mucho que no sirviese para nada.

Todos se encontraban ya sentados en la mesa, Eunji y Jisung al lado del otro. Al principio había silencio, pero para ella no era incómodo, solo que le parecía extraño al saber que eran bastante ruidosos. Luego, empezaron a conversar entre todos, aunque con alguna pelea de Minho y Hyunjin, mientras Jiyong y Chan intentaban pararles, lo cual le causaba gracia, sobre todo por los comentarios que solía hacer Seungmin en contra del mayor de los dos. También charló bastante con Jeongin, ya que al ser ambos los maknaes de sus respectivos grupos, tenían muchas cosas de las que hablar.

Estaba muy cómoda con todos y no podía evitar sentirse feliz al ver que todo iba bien, incluso mejor de lo que pensaba, al igual de creer que estaba encajando como Jisung lo había hecho con sus compañeras.

—Felix, ¿podría llevarme unos brownies? —preguntó Eunji mirando al joven, que estaba al lado suyo—. Seguro que a las chicas les encantará.

—Claro, han sobrado algunos, luego te los pongo en un táper. Espero que les gusten. —Al escuchar eso, se emocionó. Nunca había probado un postre tan bueno y se había quedado con tantas ganas de seguir comiendo, que sería muy difícil no hacerlo de camino al dorm.

—¿Qué se siente que haya disfrutado más del postre de Felix que de tu comida, Minho? —molestó Hyunjin, a lo que recibió una mala mirada por parte del mayor.

—Hyunjin... —advirtió Jiyong y a continuación, dirigió su mirada a ella—. Lo siento por ellos dos, suelen estar así siempre y no hay quien los pare.

—No te preocupes, unnie, también ocurre lo mismo con algunas de las chicas, ya estoy acostumbrada —rio para no darle importancia a eso.

—Pero de igual manera, no quiero que te sientas incómoda por sus cosas —contestó, por lo que Eunji sonrió como respuesta.

El tiempo pasó tan rápido que ni se dio cuenta de que tenía que irse, aunque no sin antes agradecerles por todo y hablar con Jiyong para quedar alguna vez, pero tristemente no pudo despedirse en condiciones de Jisung, sabía que tardarían mucho y no quería hacer esperar a su mánager. Iba con tantas prisas que casi se olvidó de los brownies para sus compañeras, pero Felix se había acordado y ya se los había preparado para que se los llevase.

De vuelta al dorm, pensó en lo bien que había ido la velada y en todo lo que había evolucionado su relación con Han, se sentía muy feliz, demasiado. Tenía ganas de llegar y hablar con las chicas, era lo último que le quedaba para que ese día fuera perfecto.

—Ya estoy aquí —anunció después de cerrar la puerta y de repente, se oyó como unos pequeños pisotones, indicando que Shadow estaba corriendo en su dirección—. ¿Me has extrañado? Solo me he ido unas horas, pero no voy a mentir, yo también lo he hecho —apuntó, teniéndole en sus brazos mientras que le daba lametones por la cara y se dirigía a la sala.

—Si quieres, ponte cómoda y luego nos cuentas cómo fue todo, podemos esperar —dijo Sumin en cuanto la vio entrar.

—Habla por ti, no creo que Hana pueda aguantar —contradijo Jisu mirando de mala manera a la anterior mencionada, quien estaba inquieta.

—Intentaré hacerlo rápido, aunque prefiero primero tumbarme un rato, estoy algo cansada —respondió a la par que soltaba a Shadow con cuidado.

—Está bien, la retendremos en ese tiempo —apuntó Haru a la vez que cambiaba el canal y dejaba un kdrama, ya que Hana era una viciada con esas cosas.

Se dirigió a su habitación para colocarse el pijama, el cual había preparado antes de irse, y después de ponérselo, se acostó en la cama con el móvil. Quería mirar un poco lo que había publicado Moonsun, no solo sobre el dance cover, si no también en general, pero lo último que se esperaba era ver lo que estaba pasando.

—Eunji, entiendo que quieras descansar, pero hay algo de lo que tenemos que hablar —abordó Sumin entrando la habitación, a lo que Eunji la observó con una expresión triste—. Por tu cara, ya sabes lo que está ocurriendo.

La idol era trending topic y no por algo bueno, como elogiando su dance cover, sino criticando. Al parecer, el tema de hacía unos meses había vuelto a crecer y la gente lo había usado para hacer daño.

En ese instante, todo sus miedos e inseguridades volvieron, más fuertes que nunca, había leído muchos comentarios antes de que la líder llegara a su cuarto, las personas buscaban hacerle daño y lo estaban consiguiendo.

Lágrimas empezaron a formarse en sus ojos, pero no caía ninguna, solo lo hicieron cuando sintió el abrazo de Sumin mientras le susurraba algunas cosas para calmarla, pero nada parecía funcionar. Esas palabras tan hirientes ya habían hecho efecto en ella, y no quería volver a aislarse de todo, aunque eso fuese lo que mejor se le daba en esas ocasiones.

Solo esperaba que las cosas no fueran a peor, porque no sabía si podría aguantarlo.

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Hola!! Hoy es jueves y eso significa nuevo capítulo de Going Dumb, ya que ayer no pude subir ¿qué tal os va la semana? Yo estoy agotada y aún me queda mañana y el sábado, no sé si podré jajajaja.

Pobre nuestra chiquita, no se merece lo que está pasando :((, espero que las cosas le vayan mejor.

Os recuerdo que tenemos un server en discord, donde damos adelantos, spoilers... si queréis uniros, mandarnos a una de nosotras un mensaje privado.

Espero que os haya gustado el capítulo, os deseo un buen comienzo de año y nos leemos el próximo 💕