Apaga el cigarrillo antes de cruzar la calle, cuando el semáforo peatonal cambia a verde. Hay muchas personas en la calle, que, así como él, esperan ir a algún club a beber y bailar. Pronto llega a su destino, pero se detiene antes de entrar cuando siente su teléfono vibrar; lo saca y nota que es un mensaje de Mark.

     Mark
Llegaré un poco tarde, lo siento :(

     No contesta al mensaje y simplemente lo apaga, listo para seguir su camino.

     Cuando pasa por seguridad, piensa que Tae Yong hyung realmente se lució al escoger ese club para el cumpleaños de su novio. Está lleno de personas, algunas caras le son conocidas y otros son simples desconocidos que fueron a pasar el rato en el club. La música se escucha bastante bien y solo es iluminado por estratégicas luces de colores.

     Y puede ver como en una mesa al fondo están sus amigos, quienes también lo ven y enseguida hacen señas para llamarlo.

     Jae Hyun sonríe y se escurre entre las personas que bailan para poder llegar a la mesa, donde todos lo reciben felices.

     —Pensé que no vendrías —El primero en hablar es Johnny, chocando su puño con el del menor.

     —Quería sorprenderlos —Se encoje de hombros y toma asiento a un lado de Yuta—. Por cierto —Gira su rostro hacia el japonés, a la vez que extiende un regalo—, feliz cumpleaños, hyung.

     —¡Oh, Jae! No te hubieras molestado —Enseguida el japonés sorprende al menor con un efusivo abrazo.

     —No fue nada, hyung —Corresponde el abrazo, con una ligera sonrisa.

     —Pero, vamos —Yuta rompe el abrazo y dice—, dime que quiere tomar. Hay de todo, cerveza, sujo, vodka, whisky y hasta ¡Tequila y sakeeeee! —explota de la emoción y toma al menor de los hombros, sacudiéndolo por completo.

     Jae Hyun ríe por lo eufórico que está su hyung, mareándose un poco cuando lo deja de sacudir.

     —Ehh... —Cierra los ojos y espera que el mareo pase rápido, para después de un segundo, poder abrirlos— quisiera una cerveza.

     —Oh, vamos, Jae —habla Johnny, captando enseguida su atención—, toma algo más fuerte, para que te puedas relajar.

     —No me quiero emborrachar porque regreso solo a casa.

     —Por eso no te preocupes, Jae. Yo no podré tomar esta noche porque estoy tomando medicamento, así que podré llevarte a tu departamento. Lo prometo.

     Jae Hyun lo piensa algunos segundos, pero, al diablo, se supone que fue a esa fiesta a despejar su mente y divertirse un rato.

     —Está bien —Voltea a ver a Yuta y dice—, quiero tequila.

     —¡Perfecto! —Se levanta de un salto y toma la mano de su novio— Amor, vamos por tequila para todos.

     Tae Yong sonríe y acompaña a su novio a la barra, siendo seguidos por la mirada de Jae Hyun. Y mientras la pareja se va y deja sus asientos vacíos, Do Young aprovecha para sentarse a un lado del menor y poder hablar con él, sin la necesidad de gritar.

     —Sabes que no tienes que tomar, si no quieres, Jae —El menor lo voltea a ver, solo para regalarle una sonrisa y poder tranquilizar a su hyung.

     —En realidad, sí quiero tomar. Quiero divertirme y olvidarme de todo.

     Do Young frunce los labios, queriéndole decir que no es necesario perder la consciencia para pasársela bien. Pero, antes de que pueda decir algo, Yuta y Tae Yong llegan a la mesa con dos botellas de tequila y varios vasos tequileros, captando enseguida la atención de todos.

     —¡A emborracharnos! —grita Yuta, dejando las cosas sobre la mesa.

     Jae Hyun suspira cuando ve como Do Young pierde el hilo de la conversación cuando Tae Yong le pasa un shot y lo obliga a tomarlo; lo que causa una tonta discusión entre ambos.

     —Su tequila, señor —Le habla Yuta, pasándole su trago.

     Jae Hyun sonríe como agradecimiento y sin pensarlo, se lo toma, sintiendo lo caliente y fuerte del sabor pasar por su garganta. Pero está bien, ya no necesita pensar, solo dejarse llevar.

     Aunque sea, solo por esa noche.

     —¡Oh, a mí también me gusta el tequila! —grita con emoción un moreno alto, que está atrás de Yuta.

     Todos en la mesa voltean a ver al dueño de esa voz, quedando sorprendidos, pero, sobre todo, felices por verlo.

     —¡Lucas! —El primero en saltar sobre el recién llegado es el cumpleañero.

     Todos se levantan de sus asientos y hacen una bolita alrededor del chico, aún no creyendo que sea él.

     —¡¿Cuándo llegaste?! ¡¿Por qué no habías avisado?!

     Ataca con preguntas el japonés, al momento de deshacer el abrazo. Lucas ríe y procede a responder:

     —¡Sorpresa! —Agita las manos con emoción.

     Pero, lo que recibe, es en realidad un golpe en el hombro por parte de Johnny, quien al parecer luce molesto.

     —Tenemos meses sin saber de ti y de pronto, apareces —Cambia radicalmente su cara a una de alivio—. Pero es bueno volver a verte, idiota.

     —Oh, hyung —Finge limpiarse lágrimas falsas—, me conmueve. Pero lo siento, ¿Sí? No fue algo que estaba en mis manos, pero aquí estoy.

     —Idiota —El siguiente en darle un golpe en el hombro es Do Young, quien parece querer llorar.

     Jae Hyun ríe cuando ve como Lucas trata de consolar a Do Young. Aunque se distrae cuando Tae Yong le toca el hombro y con la cabeza le dice tácitamente que quiere hablar con él. Jae Hyun asiente y sigue al mayor, solo alejándose un poco, procurando no llamar la atención. Entonces, Tae Yong, dice:

     —Si esto es muy incómodo para ti, po-...

     —Hyung, ¿de qué habla? —corta de pronto Jae Hyun, teniendo una mueca de desconcierto en su rostro.

     —Lucas es hermano de... —No termina de hablar, no queriendo nombrar aquel nombre.

     —Lo sé —baja la mirada, pero pronto compone su actitud—, pero él no tiene nada que ver con lo que pasó. Además, es un buen amigo, así que no pasa nada.

     —¿Seguro? —Jae Hyun asiente— Bien, entonces, volvamos con los demás.

     Tae Yong sonríe con los labios sellados, para después, caminar hacia su novio y abrazarlo por detrás. Jae Hyun no se mueve y por un momento solo observa a los demás, específicamente a Lucas. Piensa si Ren Jun ya le habrá dicho que terminó su relación y cómo habrá reaccionado Lucas a eso. Pero en un momento abrupto para sus pensamientos y se dice a sí mismo que ese no es su problema.

     Humedece sus labios con su lengua y piensa que solo tiene que disfrutar esa noche y pasársela bien con sus amigos. Y tomando un gran suspiro, camina con sus amigos con una sonrisa y sus hombros relajados.

.

.

     Pronto el ambiente entre ellos se torna divertido y lleno de risas; están sentados en la mesa, tomando tequila como si fuera agua, lo que causa un rápido efecto en todos. Y podría decirse que el más divertido de todos es Jae Hyun, dejando salir de nuevo ese lado risueño, que hace mucho no se le veía.

     —Y entonces, sin pensar, ¡me lance sobre la anciana! —Termina de contar Lucas, haciendo estallar en carcajadas a sus amigos.

     —Si no... —Intenta hablar Yuta, pero su propia risa lo interrumpe— Si no hubiera escuchado toda la historia, pensaría que eres el asalta ancianas 3000.

     Y de nuevo todos no pudieron contener las risas. A ese punto, Jae Hyun podía jurar que está llorando de la risa, por lo que piensa que ir al baño a echarse un poco de agua fría, es una buena opción para tranquilizarse, o podría terminar por orinar sus pantalones.

     Se va sin llamar mucho la atención, para minutos después volver con la cara mojada y darse cuenta de que ya no están sus amigos en la mesa, solo estaba Lucas viendo algunas cosas en su teléfono.

     —¿A dónde fueron todos? —pregunta, mientras toma asiento a un lado del moreno.

     Lucas le sonríe y apaga su teléfono para después guardarlo en su bolsillo, mientras dice:

     —Fueron a bailar.

     Jae Hyun voltea el rostro y nota como los mayores bailan alguna canción de moda, realmente no le toma mucha importancia y voltea su rostro hacia la mesa.

     —¿Y cómo te ha ido con Ren Jun, hyung? —pregunta el menor, de nuevo captando la atención de Jae Hyun.

     Por un momento, a Jae Hyun se le corta la respiración y se da cuenta que Lucas no sabe nada de su ruptura, por lo que, por un momento se queda en silencio, pensando en qué responder.

     ¿Mal?

     ¿De la mierda?

     ¿Cuáles son las palabras correctas a esa pregunta?

     —Nosotros... —No puede terminar, aún lo sigue pensando; sigue desconcertado.

     De pronto, poco a poco, Lucas va borrando la sonrisa de su rostro, pareciéndole que algo no está bien.

     —¿Qué pasó? —pregunta despacio, no queriendo presionar al mayor.

     —N-nosotros... —Baja la mirada y siente como su corazón de nuevo se aprieta— terminamos.

     Lo último lo susurra y se muerde el labio, no queriendo decir más. Lucas, por otra parte, se sorprende de sobremanera, pues según Ren Jun, iban bien, como cualquier otra pareja enamorada y feliz.

     —No lo puedo creer —Suelta sin pensar el moreno, aún inmerso en sus pensamientos, pero pronto sale de ellos y coloca su mano sobre el hombro de Jae Hyun—. Hyung, no sé qué haya pasado entre ustedes, pero puedes contar conmigo.

     Jae Hyun lo mira de reojo y asiente, para después tomar la botella a medio terminar de la pequeña mesa.

     —Entonces, sé un buen amigo y acompáñame a terminar este tequila —dice, con una sonrisa rota, para después tomar un traga directo de la botella.

     Lucas lo mira con un nudo en la garganta, desconcertado del porque su hermano le habría mentido, y triste de ver a su amigo con esa expresión rota. Pero antes de hacer o decir algo, Jae Hyun le ofrece la botella, y, sin pensarlo, la toma, dándole un corto trago, para después regresársela al mayor. Jae Hyun termina con el líquido en dos largos tragos y después deja la botella en la mesa, sin voltear a ver a Lucas.

     —Y-yo aún lo amo, pero... —Pareciera que Jae Hyun habla sin razón y con la mirada perdida hacia enfrente.

     No termina la frase, simplemente se queda callado. Lucas ya no sabe cómo reaccionar, así que no responde, sintiéndose mal y sobrepensando un poco las cosas. El ambiente entre ambos se volvió pesado.

     Y antes de que la mente borracha de Jae Hyun piense en irse, ve como Mark ya está con los mayores, dándole un regalo a Yuta. Suspira con un poco de alivio y pronto la mirada de Mark está sobre él, dándole una ligera sonrisa. Jae Hyun solo le mantiene la mirada, esperando a que el menor se acerque.

     Mientras, Lucas no está prestando atención a su alrededor, por estar contestando algunos mensajes, lo cual causa que salga del lugar sin llamar la atención.

     Y Jae Hyun no lo nota, hasta que Mark está enfrente de él, que se da cuenta que Lucas ya no está ahí. Lo cual no lo piensa mucho y solo le presta atención a la voz de Mark.

     —¿Tomó mucho, hyung? —pregunta, apuntando las botellas de la mesa.

     —Sí, un poco.

     Se lame los labios y después sonríe como tonto, intentado olvidar su conversación con Lucas. Mark sonríe mientras niega con la cabeza, tomando asiento a un lado del mayor.

     —Entonces, supongo que se la ha pasado bien —dice Mark.

     Jae Hyun solo asiente y cierra sus ojos, para luego lanzar lentamente su cabeza hacia atrás y chocarla contra la parte detrás del asiento, de pronto sintiéndose mareado -quizá el efecto del alcohol ya llegó a él-. No dice nada, solo se queda escuchando la música y el bullicio del fondo.

     Mark observa su perfil, preguntándose si habrá hablado con Lucas, aunque la respuesta es más que obvia. Pero, aunque se muerda los labios por no preguntar, un cosquilleo se forma en su estómago por saber de qué hablaron exactamente, lo cual lo obliga a hablar sin pensar.

     —¿De qué...? —Se muerde la lengua. No, no debe de preguntar cosas que no lo incumben.

     —¿Qué cosa?

     Jae Hyun abre los ojos y se queda expectante a lo que dirá Mark, sonríe, pareciéndole divertida la expresión del menor.

     —Eh... —Piensa rápidamente qué puede decir y su vista cae en la camisa que está usando Jae Hyun— ¿De qué marca es su camisa, hyung? Es muy linda.

     Ríe con nervio al terminar, esperando que el mayor no note su intento estúpido por cambiar sus palabras. Pero, al parecer, está tan ido que no lo nota.

     —Prada, mi madre me la regaló la navidad pasada.

     Sonríe al recordar el bello momento, aunque, poco a poco su sonrisa se apaga al caer en cuenta que esa navidad también la pasó junto a Ren Jun.

     Enseguida Mark se preocupa por el repentino cambio en Jae Hyun, pareciendo que quisiera llorar.

     —Hyung, ¿qué-...?

     —¿A acaso todo lo que pasamos juntos, no significó nada para él? —interrumpe al menor, aun conteniendo las lágrimas.

     Bien, la noche de: "no pensar en Ren Jun y pasársela bien", ha terminado.

     Baja la cabeza, con su mente ebria reviviendo el dolor. Mark se le aprieta el corazón y lo único que hace es colocar su mano como apoyo sobre el brazo de Jae Hyun. Pero ese contacto termina enseguida, cuando Jae Hyun se levanta y sin voltear a ver a Mark, dice:

     —Iré a tomar un poco de aire, en un momento vuelvo.

     Mark intenta hablar para detenerlo, pero el mayor simplemente se va.

     Jae Hyun enseguida sale del lugar y toma un gran respiro cuando siente al aire frío abrazar su cuerpo. Y sin pensarlo, saca la cajetilla de cigarros que guarda en su pantalón y un encendedor. Pero, mientras lo enciende, camina hacia el pequeño callejón, a un lado del bar, para estar un poco a solas.

     Al llegar, su mente ebria tarda un poco en procesar lo que están viendo sus ojos, pero cuando comprende que debe irse, es demasiado tarde.

     Unos pequeños ojos marrones lo ven sobre el hombro del más alto, causando que se congele en su lugar y ni siquiera pueda apartar la mirada. El chico alto que cubre al de ojos marrones, voltea a ver a Jae Hyun, sorprendiéndose de verlo ahí.

     —Hyung...

     Jae Hyun no responde al llamado de Lucas, solo se puede enfocar en aquellos malditos ojos marrones. Tan desgarradores. Tan bellos.

     Y está tan borracho que no sabe si es su imaginación o de verdad es él.

     Siente su corazón agitarse y su estómago revolverse. Quisiera correr y besarlo, decirle que lo ama y rogar para que vuelvan a estar juntos. Pero antes de que dé un paso hacia al frente, nota como el chico de ojos marrones trata de irse.

     —Ren Jun —Lo llama Jae Hyun, provocando que enseguida el menor detenga sus pasos—, ¿p-podemos hablar?

     Ren Jun siente un nudo en la garganta y aprieta sus puños, pero, aun así, asiente a la pregunta de Jae Hyun. De nuevo se regresa sobre sus pasos y le da una última mirada a su hermano antes de que se vaya en silencio.

     Una vez Lucas se va, Jae Hyun se toma otro momento en admirar el bonito rostro del menor; pareciéndole que fue hace mucho desde la última vez que lo vio. Y antes de hablar, le da una calada a su cigarrillo y suelta lentamente el humo, aun con la mirada fija en Ren Jun.

     —¿Por qué? —Es lo primero que puede formular su mente, pareciéndole que solo está en su imaginación.

     La pregunta no la entiende Ren Jun. ¿A qué se refiere? ¿Qué es lo que realmente quiere que le conteste? ¿Por qué lo engañó? ¿Por qué ya no lo ama?

     Jae Hyun enseguida nota la confusión en el rostro de Ren Jun, por lo que, con una sonrisa amarga en su rostro y apunto de soltar lágrimas, procede a decir:

     —¿Por qué nuestro amor no fue suficiente para que te quedaras?

     A Ren Jun se le aprieta el pecho al escuchar esa pregunta y ver a Jae Hyun con esa expresión rota, pero, aunque quiera, no tiene una respuesta; porque -así como de seguro Jae Hyun se la hizo durante mucho tiempo-, Ren Jun tuvo rondando en su mente esa misma pregunta, sin aun hallar la respuesta.

     —N-no fue algo que-... —La voz de Ren Jun se rompe y no termina.

     Jae Hyun ya tiene lágrimas escurriendo por su rostro, pareciéndole ver que a Ren Jun le está envolviendo una especie de culpabilidad.

     Da pasos hacia al frente al mismo tiempo que tira el cigarrillo al suelo, pero Ren Jun intenta detenerlo, poniendo una mano hacia al frente, pareciendo totalmente frágil. Sin embargo, eso a Jae Hyun no le importa, porque termina con el menor entre sus brazos, sintiéndose tan correcto y, a la vez, tan doloroso ese acto.

     Ren lucha por un momento para salir de ese agarre, pero es inútil, Jae Hyun es demasiado fuerte. Ambos terminan mirándose a los ojos, en una conexión culpable y dolorosa.

     —Déjeme ir —susurra Ren Jun.

     —No —Niega lentamente con la cabeza—, hasta que me respondas, por qué Dong Hyuck y no yo.

     —No lo meta a él.

     Responde rápidamente el menor, de nuevo intentado romper el agarre. Aunque Jae Hyun pone más fuerza y mira con enojo a Ren.

     —¡Lo meto porque, por su culpa, nuestra relación terminó!

     Ren Jun se queda estático, pero eso no evita que apriete los puños.

     —¡No terminamos por su culpa!

     —¡Entonces dime porque terminamos!

     Ambos, a este punto están enojados, viéndose directo a los ojos con ira. Y aun con ese sentimiento vil quemando en su pecho, Jae Hyun no para de llorar; y, aunque Ren Jun también sienta el nudo en su garganta y tenga los ojos brillosos, su orgullo no le permite ni siquiera soltar una lágrima.

     —P-por favor —Jae Hyun cierra los ojos y junta su frente con la del menor, chocando a su vez sus alientos—, merezco saber por qué no fui suficiente para ti.

     A Ren Jun se le deforma su cara cuando deja salir las primeras gotas en una mueca de llanto. Su orgullo se quebró.

     Y, aunque quiera seguir callando, tiene que decirlo.

     —Terminó nuestra relación porque me cansé de esperar y rogar el apoyo que necesito —Su voz es baja, pero, aún así, Jae Hyun las sintió como hierro caliente cruzando su pecho—. Esperé mucho para que pudiera enfrentar las cosas y no escapara, pero eso nunca sucedió.

     —P-perdón por no ser el novio que necesitabas —dice con culpa, llorando con más fuerza.

     Ren Jun niega con la cabeza, porque, aunque la razón principal de su ruptura fue esa; una gran parte de la culpa se la lleva él, por no ser claro desde el comienzo y preferir engañar a Jae Hyun, antes que terminar su relación.

     —No —Sigue negando, mientras que su ligero llanto va en aumento—, no fue el único en cometer errores. Yo no fui honesto con usted y lo engañé.

     —¡Entonces podemos cambiar! ¡Ser mejores! —Abre los ojos y mira directamente al menor con esperanza, aún sin separar sus frentes— Todavía podemos arreglar nuestra relación. Una segunda oportunidad... Te extraño.

     Ren Jun deja salir sollozos cuando escucha las últimas palabras, a la vez que ahora es él, el que cierra los ojos. Duele haberlo escuchado, porque sabe, sin discusión alguna, que Jae Hyun no miente. Pero ya es demasiado tarde para un "nosotros".

     El silencio de Ren Jun desespera a Jae, sintiendo como su quebrado corazón termine por romperse. Pero, incluso con ese dolor, su desesperación lo anima a seguir hablando.

     —Te amo tanto, que duele.

     Y, quizá por su corazón roto y el alcohol circulando en su cuerpo, que no lo piensa y solo toma el rostro de Ren Jun para juntar sus labios en un beso brusco, solo buscando un poco de contacto. Pero Ren enseguida se separa del beso y rompe el agarre, aumentando la distancia entre él y el mayor.

     —¡Ya no lo amo! —grita con enojo, limpiándose las lágrimas con su mano— Ahora amo a Dong Hyuck. Él me ama y me trata como usted nunca no pudo hacerlo.

     Quizá fue el enojo del momento o algo que realmente siente. Aunque, sin poder negarlo, no se arrepiente de haberlo dicho.

     Jae Hyun siente como su pecho se presiona en algo muy doloroso, difícil de explicar. Baja la mirada y piensa que el del problema siempre fue él; que solo él pensaba que tenían una bonita relación.

     Ren Jun ya no dice nada y por última vez se limpia las lágrimas de su rostro, antes de empezar a caminar.

     Jae Hyun aprieta sus puños y su cuerpo tiembla cuando Ren Jun pasa por su lado. El alcohol, su amor y el dolor hacen que quiera gritarle a Ren Jun todo lo que sintió durante todo ese tiempo. Por lo que se limpia las lágrimas en un movimiento brusco con su antebrazo y se voltea, viendo como la espalda del menor se va alejando.

     Ren Jun va a medio camino antes de salir del callejón, dispuesto a no voltear al mayor, aunque le grite que lo haga, no lo hará. Esto tiene que terminar ahora.

     Jae Hyun suelta el aire y cierra los ojos con fuerza cuando grita, liberándose y sintiendo -por fin- su despedida.

     —¡Vete al infierno, Ren Jun!

.

.

.

F I N

Holis, he aquí la escritora floja, jeje. 

Pero escríbanme, ¿qué les pareció? ¿les gustó?

Espero hayan disfrutado de esta lectura y confío que en un futuro pueda traerles más historias jaeren y volver a encontrarlos ahí. 

Gracias por su apoyo, lo agradezco muchísimo  <3

Nos leemos pronto.

Aquí, Jor.