Ser curioso y extremadamente bueno leyendo a las personas no era lo mejor a veces. No sabía si eso aplicaba exclusivamente en Jimin o lo podía distinguir en varios ámbitos de mi vida, pero sentía creciente este dolor y, tal vez, una pizca de culpa, por preguntar.  ¿Pero qué debía hacer cuando esos moretones en su cuerpo me llamaban tanto a cuestionar su razón? ¿Cuánto tiempo llevaba con eso? ¿Cuánto tiempo había estado pasando con moretones? ¿Hace cuanto hay agresividad al rededor de él?

⸺Puedes no responderme, lo sabes. Sin embargo, agradecería si lo haces. Estoy preocupado por ti.

⸺No tienes que estarlo.

⸺Jimin, no puedo no estarlo. Me importas. Me interesa saber que estés bien y si por mí fuera, te tendría viviendo aquí en mi casa.

⸺¿Y los gastos de mi universidad, de mi persona?

⸺Los pagaré vendiendo helado todas las tardes después de la universidad.

Escuché una risa nasal de su parte. Sardónica. Luego el lastimero brillo de sus ojos que reflejaba en su rostro esa conocida oscuridad que veía en él como una penumbra odiosa, dolorosa, mortificante en toda la extensión de la palabra sobre de sí mismo. Una mirada onerosa.

⸺Aunque sé que no me dejarías pagar nada y posiblemente conseguirías tres trabajos de un momento a otro ⸺solté ⸺. Así de autosuficiente eres.

⸺¿Te molesta mi enorme capacidad de cuidarme a mi mismo? ⸺parecía una mentira con su tono de voz.

⸺Para nada. Solo que, tampoco es malo dejarse cuidar un poco, ya sabes.

Giramos sobre la cama para estar cara a cara, mis manos juntando sus palmas para apoyar mi cabeza sobre ellas y las suyas, estando una debajo de su mejilla y la otra sobre su estómago. 

⸺Puedo cuidarme solo.

⸺Lo estás haciendo muy bien, amigo.

Sus cejas se juntaron. Mis palabras pudieron escucharse con poca confianza sobre él y suavice mi rostro. Él no tenía la culpa de nada. No podía enojarme por su poca libertad de decir lo que siente. No debía enojarme con él de ninguna forma. Suspiré dejando ir toda esa cosa que se instalaba en mi pecho. Este sentimiento de querer protegerlo aunque no tuviera siquiera las armas para hacerlo.

⸺Lo digo en serio ⸺agregué después ⸺. Lo haces muy bien solo, pero no tienes por qué estarlo más. Estoy aquí. Puedes hablarme de lo que sea, contarme lo que quieras o no contarme nada y quedar en un cómodo silencio. Puedo hablar yo y llenar los huecos.

⸺¿Cómo has hecho desde que nos conocemos?

⸺Lamento obligarte a escuchar mi irritante voz de rata fresa podrida.

Se rió.

⸺Lo siento.

⸺No, no, es un apodo único. Definitivamente lo usaré como nick name en algún videojuego. Comandante rat strawberry eeeh... ¿ew?

⸺Tu inglés es una porquería.

⸺Mira quien lo dice.

Asintió, sin poder debatir el asunto. Respiró tranquilo, tirando del pellejo de su labio roto y, mi mano se movió a sus bonitos carmines heridos para detenerle. No necesitaba más heridas. Mi índice acarició su inferior de extremo a extremo, pasando delicadamente por su herida horas antes, oculta por el maquillaje y la falta de luz. ¿Cómo no la sentí cuando nos besamos? ¿Tan atrapado en él estaba?

Podía ver las heridas mucho antes de la aparición física en su bonita anatomía. Porque sus profundos ojos siempre eran tan sinceros dentro de todo ese misterio. Le dolía todo y yo sabía leerlo, comprenderlo, aunque no como ayudarlo.

Una vez más, lo ví a punto de romperse frente a mí, desarmarse, volverse un pequeño ser de carbón que se hacía polvo en mis manos y sus lágrimas corrían libres con una herida abierta.

⸺Son cosas de mi familia ⸺reveló ⸺. Son cosas que duelen y no puedo explicar. Pienso diariamente que no debería importarme, no deberían importarme. Desde hace mucho tiempo deberían dejar de ser razón para que yo esté mal. ¿Cómo hago para que no me importen y hacer lo que yo quiera? ¿Por qué sigo sintiéndome tan culpable cuando decido hacer algo para mí? Papá hace todo porque estemos bien y está tan mal, yo siento su tristeza, su dolor, su cansancio. Lo veo diariamente soportando y al mismo tiempo no haciendo nada. Soy quien lo hace todo y me siento como una carga por no ser suficiente por todo lo que me da.

Contradictorio.

⸺Él me paga todo y me da todo. Lo menos que puedo hacer son cosas de la casa. Pero no me corresponden cieeentos de cosas. Como encargarme de Alex, salir a los mandados, hacer cosas de la comida, asear lugares que le tocaban a mis hermanos, entre variedad más. No quiero que siga dándome cosas si dirá que es el pago por hacer tanto y luego me diga que le debo algo por darme esa cosa. Me siento tan confundido con todo. Me siento una cosa más que una persona. Ellos pelearon y yo.. me metí en medio para que no fuera a peor.

Apoyé mi mano en su mejilla, acariciando la zona con mucho cuidado, registrando en mi memoria la mirada de sus ojos y mentabilizandome para no fallar en mi intento de reaccionar tranquilamente a algo que, de cualquier forma, me estaba causando estragos.

⸺Tengo tan solo diecinueve años. Me estoy encargando de mantener a mi padre que me lleva casi veinte años, de que siga esforzandose por vivir, al mismo tiempo en el que lucho por ser alguien digno de su mirada y de expresarle cuanto me lastiman muchas de las cosas que dice. Me mantengo yendo a la universidad donde todos me odian e intentan sobrepasarse conmigo, de tener buenas notas para cumplir mi sueño y aun así sentir que no hago nada. Intento que mis hermanos vean que su hermano mayor es alguien que merece la pena, pero ellos no me respetan. Lidió con una mujer machista y homofóbica todos los días. Estoy cansado de sentir que el cuerpo en el que vivo está mal.

Se detuvo de la nada cuando sus palabras sonaban escabrosas y el blanco de sus ojos se manchaba de rojo, mientras que el azul lucía más brilloso. No volví a escuchar su voz, no supe entender su mirada, pero le vi cerrar los ojos, soltar un enorme suspiro y negar como si no se lo creyera, lo que sea que hubiera reflexionado.

Hasta que habló y me dijo la cosa más triste que en mi vida había escuchado.

⸺La vida se me acaba. Sin siquiera vivirla, mi vida no es mía y se me está yendo. Mi tiempo en la conciencia misma de existir aquí, ahora o antes no es nada más que un poco de polvo en el mundo, en la historia, en la vida de cada persona cercana y no a mí. En mi corazón reconozco la idea de morir ahora y no importar mañana. Sé perfectamente que todo seguiría siendo igual si yo no estoy más. El mundo seguiría su curso porque no hago ninguna diferencia. ¿Y sabes qué es lo peor? Que lo he aceptado tan rápido que no me parece descabellado. Porque ahora mismo y tampoco mañana, menos en los siguientes minutos que tú hables tratando de convencerme de algo, voy a creer en mi futuro.

Claro que vió mi cara reflexionando palabras de aliento para él, algo que pudiera decirle. Algo que mis padres me hubieran dicho en mis momentos difíciles. Necesitaba sujetarme de palabras correctas para este momento que yo mismo cree, que provoqué en él. Porque había estado tan tranquilo que mi curiosidad me hizo hacerle esto, sacar esto. Lo cual no era precisamente malo, pero era año nuevo, primero de enero y yo estaba aquí, recordándole lo que él seguramente vino a olvidar.

⸺No voy a decirte lo que todos dicen: "Échale ganas", "tú puedes", "el cambio lo verás en el momento que cambies tú". Son frases positivistas que marcan una... clara desvalidación de los sentimientos y el esfuerzo de una persona que está triste. Menos, jamás, te diré que todos en el mundo sufren. No eres todos, eres tú. Y no intentaré convencerte de pensar en tu futuro, porque el futuro es una incógnita. Reflexionar en la idea de no ver tu futuro y los sueños que me has contado, me deja inquieto, no porque yo me sienta incómodo, viéndome representado en tu vida al no poder salir de un pensamiento egoísta de "yo, yo, yo me sentiría mal", no busco apropiarme de tu dolor. Más que nada, me refiero a que, hablas con tanta ilusión de muchas cosas que, mereces eso. Mereces con cada fibra de tu ser, el conseguir eso que tanto añoras y por lo que luchas cada día. Tal vez no necesitabas palabras, tal vez solo querías un abrazo y estoy dispuesto a no soltarte jamás si me lo pides, pero necesitaba decirte todas estas palabras desordenadas. Porque yo sé, perfectamente, que el mundo puede seguir su curso si ya no estás, pero yo notaré que no será igual de ninguna forma si tú, precisamente tú, dejas de existir.

No hubo más palabras profundas, significativas, dolorosas e intentos de aliento. Pero sí, calor, dedos traviesos y pies que se acariciaban, piernas entrelazadas, brazos curvándose al rededor del otro, respiraciones unidas, perfumes combinados, besos adormilados y arrastrados por piel desnuda, mejillas cálidas y frías, cabellos despeinados siendo peinados con movimientos lentos que se volvían más pesados con el sueño, suspiros llenos de aire por inflar tanto el pecho y paz. Se instaló una paz que se sentía en cada parte de mi habitación, en cada poro de su piel. Hasta que no supe cuando perdí conocimiento y él tampoco.

[...]

Él no era bueno diciendo lo que quería.

Fácilmente podría mandar a la mierda a algún presidente que le dijera "usa esto", decirle palabras dolorosas a la mujer más buena del mundo, criticar en la cara a alguna persona que le cayera mal, rodar los ojos frente a la reina de Inglaterra o comentar alguna osadía sin importar nada. Pero, él nunca iba a decir con facilidad lo que quería hacer, comer o cualquier cosa por su cuenta. Le era tan fácil expresarse que prefería evitarlo.

Notaba cuando su rostro tenía esa expresión de llevar tiempo pensando lo que desea realizar lo más pronto posible, como si estuviera a punto de decir algo que provocara la más fea guerra mundial. Solía adivinar sus palabras por algo llamado costumbre. Me volví un genio leyendo los pensamientos de Park.

Así misma sucedía ahora.

Él no quería irse. No quería abandonar mi casa, mi habitación, mi cama. Prefería estar acostado debajo de las mantas fingiendo dormir aunque sabía que tenía los ojos abiertos y mantenía su mirada fija en alguna parte de mi habitación, dándome la espalda.

⸺El torneo de Lol está cerca ⸺comencé a hablar ⸺. Deberíamos levantarnos y ponernos a practicar, Jimin.

No respondió, continúo de la misma forma.

⸺Sé que estás despierto hace más de una hora, despertaste antes que yo. Tú cuando duermes respiras fuerte.

⸺¿Y como sabes? ⸺giró para darme la cara, con la mirada clara por la luz del sol y un rostro totalmente descompuesto por el golpe, pero igual de atractivo que siempre. Tenía el cabello despeinado, acomodado tal cual como lo aplastó al dormir ⸺. ¿Me miras mientras duermo?

⸺Lo hago. Eres demasiado atractivo como para no hacerlo, Park. Luces muy tranquilo y me gusta ver qué duermes profundamente, más porque sé que tienes insomnio. Llegas a mi cama y te pierdes.

Sus cejas se juntaron, arrugó la nariz y decidió levantarse. Logré ver su desnuda anatomía de forma descarada mientras buscaba ropa.

⸺Vamos a entrenar. No quiero que perdamos por alguna jodida razón. Uhm... ¿Me la prestas un poco antes? Necesito registrar mi asistencia para el feriado de mi carrera. Se supone que todos tenemos que hacer una presentación para cuando vengan empresas y las familias.

⸺Oh, sí. Lo ví el año pasado por chismoso, no sabía que ibas a estar, se supone que solo es para los de tercero.

El pelinegro se encogió de hombros, adentrandose en la camiseta que era de mi propiedad y moviéndose hasta la silla con toda la confianza del mundo.

⸺Lo adelantaron porque dicen que el segundo año es la parte más creativa de los alumnos, ya que el tercero se trata de terminar la carrera y ya, mucho estrés para ser creativo. Lo combinarán con el proyecto final de este período y debemos armar un portafolio. Ni siquiera sé que voy a poner en él.

⸺Yo te puedo ayudar a eso. Sé mejor que nadie lo importante que es para ti y soy tu fan número uno.

Me sonrió. Le sonreí. Y sentí cálido mi corazón.