XXXVI
—Perdonen la interrupción pero realmente necesitamos hablar —Se oye desde el otro lado de la puerta, Hoseok llamaba a Jimin y Yoongi para reunirse esta vez en privado.
—Supongo que nuestra apasionante velada deberá posponerse un poco —Susurra Yoongi más que cabreado, toma el mentón de Jimin y se acerca a darle un pequeño beso en sus labios.
—Estaré esperando ansioso a llegue el momento indicado —Dice el menor al terminar el beso y dirigirse a paso acelerado hasta la puerta, abre esta misma y ambos salen de la habitación para seguir al contrario. Hoseok por su parte los guía hasta la sala en dónde estaban Namjoon y Seokjin esperándolos.
—Acabo de recibir una llamada de Jisoo —Dice Seokjin cruzándose de brazos —Al parecer Kelly ha tomado las riendas en Londres más pronto de lo que parecía, como nuestra fortuna recae sobre los hombros de Jisoo, se está acercando a ella con todas las intenciones de seducirla.
—Esperemos que esté llevando a cabo el plan como lo teníamos acordado —Yoongi se sienta frente a Seokjin encendiendo un cigarrillo.
—En efecto, llamó especialmente para mantenernos al tanto de cómo está la situación por ahí —Seokjin se sirve whisky en un vaso — en tres días realizarán una fiesta, y por idea de Jisoo, Kelly aceptó que sea una mascarada.
—Fantástico, así que el plan va siguiendo su curso —Acota Jimin sentándose en el regazo de Yoongi —Entonces tenemos tres días para comprar nuestros disfraces.
—Ya están listos Jimin, llegarán aquí mañana en la mañana —Seokjin bebió un trago de su whisky tras decir aquello. El resto de la noche se ocuparon en planear paso por paso la estrategia, según habían acordado con Jisoo, la mascarada sería en la mansión Montana. Eso era un completo beneficio para todos ya que conocían de punta a punta toda la residencia, todos sus atajos y habitaciones, estaba claro que llevaban ventaja pero también debían tener cuidado puesto que sus enemigos no eran idiotas y estarían repletos de guardias.
La mansión Montana se encontraba algo alejada del centro de Londres, en la cima de una colina y cualquiera la confundiría con un castillo, tenía algunas entradas subterráneas pero preferían no ocuparlas debido a que no se podían confiar en la "suposición" de que sus enemigos no sepan de dicha entrada, así que ingresarían por la puerta grande y se infiltrarían luego de eludir a los guardias.
En la mañana, como lo habían esperado, recibieron sus prendas y la de sus aliados. Llegarían como irlandeses infiltrados a la fiesta, previo a esta deberían asaltar el carro donde viajarían invitados exclusivos de Kelly, luego de esto tomarían sus invitaciones y todo estaría listo.
El día restante transcurrió mas rápido de lo que esperaban, compartieron sus estrategias con los Butler, sus aliados, tras ello habían acordado lo que harían y como se iban a dividir los grupos.
Yoongi y Hoseok irían juntos mientras que Seokjin y Namjoon se irían por otro lado. Jimin era el único que iría solo debido a que él si tenía invitación y podría ingresar sin problema alguno.
[...]
Yoongi se encontraba con su pistola apuntando a la cabeza del irlandés que al parecer era muy cercano a Kelly mientras que Hoseok le ataba las manos y los pies, su boca la tenia amordazada y algunas lágrimas caían de sus mejillas.
—Escoria Irlandesa, voy a exterminarlos a todos por querer tomar mis malditas tierras —Se oyeron dos disparos, uno para el irlandés, el otro para su acompañante. Hoseok miró a Yoongi algo atónito, no esperaba que hiciera aquello pero tampoco iba a formular queja alguna, a estas instancias Yoongi estaba cegado por su sed de venganza y la ira que lo carcomía internamente. Hoseok ayudó a Yoongi a cargar los cuerpos en el maletero mientras emprendían viaje hacia la residencia Montana, estaban vestidos con finos trajes hechos a medida bien ajustados a su figura. Como extra llevaban antifaces dorados ya que debían cumplir con dicho requisito para poder ingresar a la fiesta. Mientras Yoongi conducía, Hoseok revisó la invitación formal en donde decían los nombres de los dos tipos que acababan de fusilar.
Antes de ingresar, esperaron unos minutos a que llegaran Namjoon y Seokjin, por fortuna el carro de Jimin ya se encontraba estacionado a las afueras de la mansión así que él probablemente ya había ingresado hace un buen rato.
Yoongi le dio la señal a Seokjin para que ingrese primero, el mayor de todos se dirigió hacia la entrada en donde le entregó la invitación al guardia que se encontraba verificando que todos los que ingresaran al evento tengan en su posesión dicho papel. No hubo contratiempo ni problema al ingresar así que luego de que ingrese una pareja de jóvenes Yoongi le dio la autorización a Namjoon para ingresar, mientras tanto seguía observando, formulando una sonrisa victoriosa notando que estos entraban por la puerta grande sin ser reconocidos. Los Butler llegaron poco después ingresando de igual forma, algo raro pasaba, Yoongi no se confiaba mucho del hecho que los dejen ingresar tan fácilmente.
Se bajó del carro seguido de Hoseok, ambos caminaron con la invitación en mano hacia la entrada.
—Buenas noches, por favor ¿me haría el honor de enseñarme su invitación? —Aquella voz llama la atención de Yoongi de inmediato y le entrega el papel, una sonrisa se forma en los labios del guardia y este le extiende la mano al mayor, Yoongi sin dudarlo la estrecha —Disfrute de la fiesta señor "Smith" —Una pequeña risa acompaña aquellas palabras y automáticamente Yoongi sabe que se trata, ni más ni menos que de el mismísimo Jungkook. Sabía que ingresar resultaría sumamente fácil con un aliado en la puerta, Jisoo había planeado perfectamente la estrategia, ella lideraba todo en la fiesta y sabía que Jungkook era perfecto para recibirlos, más aun sabiendo que este mismo tiene ganada completamente la confianza de Kelly y Myers.
Hoseok y Yoongi ingresaron a su mansión acomodando los puños de sus trajes y tras ello encendieron un cigarrillo para ambos seguir su rumbo escabulléndose entre la multitud, buscando sus puestos tal cual lo habían planeado. La primera fase del plan había sido llevada a cabo con completo éxito, ahora quedaría ubicar a sus enemigos en aquellos puntos acordados con Jisoo y Hwasa, para así culminar con el plan en la sala privada que estaba ubicada en el segundo piso de la casa.
[...]
—Si, aquí está la reserva de vinos de la que te había platicado hace unas horas, puedes tomar las botellas que gustes para ofrecerle a los invitados —Hwasa sostenía una botella de vino mientras acompañaba al hombre que atendería el bar en la fiesta, dicho hombre tendría el control de las bebidas por el resto de la noche.
—Fantast...—No pudo terminar la frase que cayó al suelo inconsciente debido al fuerte golpe que había recibido en la cabeza, la mujer le había partido la botella contra esta y luego de amordazarle la boca se limpió las manos mientras caminaba hasta la salida de la bodega para finalmente tomar las llaves y cerrar la puerta. Minutos después se encontró con Seokjin en los pasillos tal cual habían acordado y esta lo acompañó hasta donde sería el bar, el mayor era un completo experto en las bebidas y conocía todos los efectos que estas causaban, cual era la que contenía mas alcohol o lo contrario, preparó sus bebidas mas fuertes y se las entregó a Hwasa, esta misma iría tras Kelly mientras que Jisoo se encargaría de Myers.
Se oían las pisadas de ambas chicas que caminaban a la par hasta la sala privada en donde se encontrarían con dichos invitados, a ninguna de las dos le gustaba ser la "carnada" pero ambas estaban dispuestas a darlo todo para que la misión salga perfectamente. Ambas llegaron a la sala y vieron a dichos hombres sentados mientras platicaban sobre sus planes a futuro con Londres, no querían excluir a las mujeres de la conversación así que el primero en hablar fue Myers.
—La fiesta es más que maravillosa, ya veo por qué tienen buena fama de crear los mejores eventos, sin duda esto es algo a lo que deben estar acostumbradas —Jisoo toma asiento frente al hombre y le dedica una coqueta sonrisa, jugando con su sensualidad notando como el mayor dirigía la mirada a su notorio escote.
—La verdad es que las fiestas me fascinan, disfruto muchísimo de estos eventos, soy una mujer muy extrovertida y adoro complacer a la sociedad —Se le daba bien actuar, sonaba convincente —Aunque debo admitir que últimamente me he sentido muy sola, desde que enviudé solo han habido desgracias en mi vida, esta fiesta me anima bastante y quizá si todo sale bien conozca a algún futuro esposo. Ya sabe como son los hombres con las mujeres viudas... —suelta una risa que se oye por toda la sala.
—Comprendo, si usted está buscando un pretendiente —Myers toma la mano de la dama y deja un beso en el dorso de esta misma. Jisoo aguanta las ganas de hacer gestos para no expresar el desagrado que le causaba tal hombre. Deseaba que ya mismo acabara aquella tortura y poder estar junto al hombre que amaba, aquellos días que había estado lejos de Hoseok la estaban volviendo loca, jamás había estado tan lejos de él. Sus ánimos subían al saber que pronto lo vería pero así de rápido también bajaban al extrañarlo tanto. Los dolores de cintura, la jaqueca y los vómitos la estaban volviendo loca, en su condición necesitaba a Hoseok, necesitaba verlo una vez más para darle en persona la noticia que tanto había ansiado, en el peor momento, pero aun así él necesitaba saber que su familia estaba a punto de agrandarse, Jisoo esperaba un hijo suyo.
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Tremenda actualización, muy merecida y con un inesperado final. Espero que les haya gustado, nos estamos leyendo más pronto de lo esperado.
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