— Ah, ¿Puedes ser más brusco? — Dijo el mayor gimiendo — follas como virgen — le gustaba hacer enojar al menor ya que eso le daba ese impulso para que aumente el ritmo y no sea tan sentimental.

— Cierra la boca — Dijo el menor tapándole la boca al muchacho mientras lo penetraba duramente y sin descanso. — ¿Te gusta? Vamos yo sé que sí...

El mayor sintió como el miembro del menor rozaba con su punto dulce provocando ese placer que deseaba, quitó la mano del menor de su boca y comenzó a gemir en descontrol.

— Ay si~ — Dijo el pelinegro en un gemido, estaba de espaldas cargando  su peso en sus manos y rodillas sobre la cama.— Ah Namjoon más fuerte...

El menor subió el nivel de las embestidas sintiendo el orgasmo avecinarse hasta que tocaron la puerta

Toc, toc, toc.

— Demonios — Dijo el mayor llegando al orgasmo, conteniendo esos gemidos que ansiaban salir.

— ¿Q-quien es? — dijo Namjoon para luego morder su labio inferior disfrutando del placer que sentía mientras hacia sus estocadas más lentas pero profundas, corriendose en la entrada del mayor.

—Soy Hope, deja de follar y acompañame hacia el puerto, tenemos un trabajo— dijo este y regresó a la sala.

—Ah, Jin eso fue... Increíble— dice Namjoon saliendo del mayor y recostandose a su lado mientras éste caía rendido boca abajo en la cama.

— ¿Ya son las doce? — Pregunta y observa el reloj sobre la mesa y sonríe levemente para después echarse encima de Namjoon y plantarle un cálido beso en sus labios— Feliz cumpleaños Nammie...

—Gracias por este hermoso regalo— le dice acariciando su mejilla — ¿Sabes cuál sería mi regalo perfecto? Que aceptes ser mi pareja...

—Nam, sabes que no puedo aceptar eso aunque quiera... — dice mirándolo a los ojos y dejando otro beso — No quiero que mi vida corra peligro cada día.

—Prometo cuidarte mucho Jin, tu no estarás en mis negocios solo sé mi pareja, quiero que lo intentemos.

—Namjoon, ¿sabes lo que es para mi saber que cada vez que te vas tal vez jamás regreses? Cualquier día algún trabajo puede salir mal ¿y si te matan? No podría perderte. — dice escondiendo el rostro en su cuello.

— Seokjin mírame— Dice acariciando su mentón y mirando al mayor a los ojos. — Prometo cambiar por ti, hablaré con Yoongi, ya no haré los trabajos sucios, solo me encargaré de los acuerdos y los números.

—Cuando eso pase Nam, prometo que aceptaré con todas las ganas ser tu novio e irme a vivir contigo como siempre me pediste — le deja un corto beso en los labios y el mayor lo corresponde para después sonreír y levantarse para hacer su último trabajo.

⚜

— ¿Por qué nos vendes esta carga? — Dice Hoseok cruzado de brazos y frunciendo el ceño.

—Tony me dijo que son cargas irlandesas, las necesita para renovar su armamento— Dice el hombre mirando como sus hombres cargaban el armamento en camiones para luego ser llevados hacia la mansión Montana.

Namjoon frunce el ceño y le pide al hombre que se vaya para luego quedarse hablando con Hoseok.

—Cuando agarramos a los irlandeses hablaron de que nosotros le habíamos robado una carga del puerto, ahora éste dice que Yoongi la compró y esto me resulta raro ya que si Yoongi hacen una compra así nos diría. — Namjoon mira a su alrededor, eran las doce y media de la noche y la mayoría de las personas dormían.

—Ésto es muy raro, la verdad Yoongi no necesita más armamento ya tiene más del suficiente. —

Un muchacho se acerca a ellos dos corriendo desesperado y Namjoon automáticamente saca su arma y le apunta.

— E-es una trampa — dice el muchacho para después sentir como las balas comienzan a traspasarlo, algunos de los hombres que estaban allí comienzan con el tiroteo. Namjoon y Hoseok salen corriendo para ponerse detrás de unas cajas que contenían armamento dentro y sus hombres comienzan a salir para defenderlos y tirotearse con los enemigos. Namjoon comienza a sentirse mareado y mira su mano que está llena de sangre para luego sentir un dolor punzante en su hombro.

⚜

—Me hiciste cortar una mano— Dice Jimin fumando un cigarrillo.

—Es para que no seas tan débil Jimin— Yoongi preparaba algo de té en dos tazas.

—Pero, ¿sabes lo que fue para mí? — Jimin se cruza de brazos y lo mira — Yoongi que ni se te ocurra hacerme otra vez algo así.

—Sabes que deberás hacerlo tarde o temprano— dice Yoongi tomando un sorbo de su té.

— Me niego y no vas a obligarme —

—Claro que sí, aunque te enojes conmigo y no quieras hablarme te haré cortar más manos, dedos, cuellos y pen... — No pudo terminar la frase que abrieron la puerta de golpe, Yoongi se alteró y sacó su arma para colocarse en frente de Jimin y así cubrirlo. Pero bajo el arma al notar que entraba Hoseok con Namjoon en sus brazos y este estaba manchado con sangre. Yoongi lo ayudó a llevarlo hasta la habitación dónde Jimin los siguió.

—Llama al doctor y dile que venga — Yoongi lo manda a Hoseok.

—Yoongi yo se primeros auxilios, mi hermano es enfermero — Jimin sale a buscar el botiquín de primeros auxilios que estaba guardado y regresa con Yoongi que cortaba la camisa de Namjoon manchada en sangre. Jimin limpió la herida con un algodón bañado en alcohol y observó la herida de bala. — Tengo que sacarla — Dice agarrando las pinzas y Yoongi sostiene a Namjoon que acababa de despertar.

Jimin mete las pinzas dentro de la herida y se notaba que había sido algo  profundo pero no era nada grave ya que sentía la bala en el músculo del hombro y deseaba que no haya tocado algún hueso o nervio pero estaba casi seguro de que tardaría en sanar.

Jimin saca la bala y la deja dentro del botiquín, unos quince minutos después llega el médico y comienza a atender a Namjoon.

—La herida solo ha afectado a el músculo, ya hemos cerrado la herida y el sangrado se detuvo. Estén atentos a que no levante fiebre y que la herida no se infecte. Debo felicitar al joven que logró sacar la bala ya que facilitó mi trabajo y logró parar la hemorragia. Les dejo esto para que tome cada cuatro horas y mañana vendré a ver los avances o si no debería internarse, mientras tanto, dejenlo descansar.— el médico se despide de los que estaban allí dejándolos con Namjoon que se había vuelto a dormir pero su respiración ya estaba normal.

El que no estaba para nada tranquilo era Yoongi, estaba que echaba fuego por las orejas al ver a su amigo en esa cama así de herido.

—¿Quien mierda fué? — dice saliendo de la habitación — ¡Dime quien diablos fué Hoseok!

—¡No lo se! Nos tendieron una trampa, Yoongi nos regalaron prácticamente una carga de armas irlandesas, se deshicieron de ellas. Alguien planeó todo esto en nuestra contra y no son los irlandeses. Estamos hablando de un enemigo más grande.

—Estamos jodidos maldita sea, mataré a todos y cada uno de ellos con mis propias manos — Yoongi patea una silla que había allí y suelta un grito furioso mientras golpea la pared con su puño — Ahora me van a conocer...

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Yoongi se enojó, yo no me metería con el.