—Ustedes tres ¿que clase de mierda se creen para entrar a mi mansión y generar un escándalo? — Dice Yoongi sentándose frente a los tres irlandeses que estaban atados de manos mirándolo asustados.

—Hemos traído un mensaje — Dice uno de los tres — nuestro jefe, Cian Kelly nos ha enviado a advertirle que pronto tendrá un encuentro con usted, es el encargado de la mafia irlandesa y está muy enojado de no poder extenderse aquí en Londres por la culpa de los Montana... Además, tiene la sospecha de que ustedes robaron una carga de armas que desapareció del puerto.

—Los mandó como paloma mensajera ¿uno solo no alcanzaba? — Yoongi chasquea su lengua y mira a Namjoon — RM, dejame a ese en el calabozo, a los otros dos cortale las manos y envialas a su jefe con una nota que diga que lo estoy esperando.

—¿Para que quieres a éste vivo? — Namjoon preguntó.

—Tengo un destino peor para el — dice Yoongi con una sonrisa maliciosa y luego mira al hombre— Lástima que tu jefe te haya mandado como carnada para los tiburones...

—No le temo a la muerte—

—Desearas estar muerto—

⚜

—Yoongi... — Repitió Jimin con el ceño fruncido, se repetía el nombre cada minuto desde que el mayor se había ido — ¿por qué lo llamó así? — Comenzó a revisar los cajones de la habitación de Yoongi, debajo de la cama, sobre los estantes, los muebles, todo para ver si encontraba algo. Debajo de la cama solo habían muchas municiones.
Tenía dos armarios, uno estaba lleno de ropa y el otro estaba lleno de armas con algunas granadas.
Relamio sus labios y comenzó a meter su mano en los bolsillos de los abrigos y sacos de Yoongi, hurgando ahí solo encontró cigarrillos, cerillos, cadenas, anillos y pañuelos de seda. Luego vió que sobre la cama Yoongi había dejado el sofisticado saco de gala así que pensó que tal vez habría algo allí. Revisó el bolsillo izquierdo y habían solo una pequeña caja de cigarrillos, en el derecho había un pañuelo blanco. El saco estaba pesado a pesar de que la tela era ligera así que buscó esos bolsillos escondidos que solían usarse para en la parte interior encontrar un cuchillo bastante grande y filoso. En el bolsillo interno contrario al principio pensó que estaba vacío pero se sorprendió al sentir una cadena de un material que Jimin conocía bastante. Sacó la cadena para ver de que se trataba y frunció el ceño al verla.

—¿por qué tiene mi pulsera? — Dijo al ver la pulsera que su mejor amigo de la infancia le había regalado hace tanto tiempo— Seguro revisó mi habitación... — dice entre dientes y guarda la pulsera en su bolsillo para luego salir de la habitación y bajar por las escaleras en busca del mayor.

⚜

—

Jimin aquí estás— Yoongi dice cruzándose al menor en el pasillo, Jimin hace un paso hacia atrás. —Acompáñame...

—No, debo hablar con usted antes— dice Jimin con el ceño fruncido, tenía miles de preguntas que hacerle a Yoongi.

—Yo doy las órdenes aquí— Dice Yoongi y agarra el saco del menor para arrastrarlo con el, Jimin no tiene otra opción que seguir a Yoongi ya que él no estaba en posición de desobedecer. Caminan algo apresurados hasta una habitación bastante oscura que era alumbrada con un pequeño foco y algunas velas ya que al parecer la luz allí era muy débil. Jimin observa que allí dentro está RM, el socio de Yoongi, dos hombres maniatados y nadie más. Hay dos sillas libres las cuales una se sienta Yoongi, en la otra se sienta él y para separar a los hombres de ellos hay una mesa en frente.

—¿que hago aquí? — pregunta Jimin y RM sólo se dedica a ver a Yoongi esperando a que le diga.

—¿Recuerdas lo que hablamos hace un rato? — Dice Yoongi apoyando sus manos en la mesa y Jimin no puede evitar mirarlas ya que las venas que las recorrían eras más notorias con esa tenue luz— Quiero que comiences tu entrenamiento hoy, estos dos tipos, entraron a la fiesta y comenzaron a disparar a los invitados. Dos de las personas fueron heridas, una es mi asistente Jackson... La otra es la hija del que era mi jefe, al parecer le dispararon en el brazo.

—N-no, señor Montana no quiero hacer esto yo... No quiero matar a nadie— dice Jimin tragando la saliva algo asustado viendo a los hombres frente a él que tenían la boca tapada.

—¿A caso te pregunté si querías? — Yoongi lo mira serio y agarra un cuchillo filoso que estaba sobre la mesa y se lo entrega a Jimin  — Quiero que a uno le cortes ambas manos...

—No, no señor Montana se lo imploro, cualquier cosa menos eso yo... No soy capaz de algo así — A Jimin se le humedecieron los ojos y un nudo se formó en su garganta, estaba asustado.

—Eres tan débil— Yoongi lo mira amenazante y le entrega el cuchillo— ¡Tomalo! — le dice y Jimin con su mano temblorosa agarra el cuchillo levemente. —RM, sosténlo — le dice y Namjoon desata a la primera víctima para luego posar una de sus manos sobre la mesa mientras éste se remueve un poco y empieza a quejarse con gritos que no entienden ya que tenía la boca cubierta.

Jimin posa el cuchillo sobre la muñeca del hombre y muerde su labio inferior para que no temblara, por dentro Jimin gritaba en desesperación que su mayor le pidiera que lo deje pero no fue así.

—Lo siento...diablos, Lo siento tanto— Repite dejando caer lágrimas por sus mejillas y eleva su mano junto con el cuchillo tomando impulso. — Dios perdóname— de un movimiento limpio hace un corte perfecto gracias al filo del cuchillo. Yoongi sonrie expectante al ver como el menor había seguido sus órdenes a la perfección. Cortó la mano del hombre y luego gritos de dolor comenzaron a oírse. Jimin soltó el cuchillo y notó que le había salpicado algo de sangre en el puño de su camisa blanca. Sus lágrimas caían pero estaba sin formular palabra aún, como en una especie de trance. A Yoongi le pareció suficiente con una sola mano y agarró del brazo a Jimin para luego salir de aquella habitación junto a él.

—Y-yo... N-no, no quería, no quería— si bien Jimin había sido entrenado para saber disparar armas y defenderse no estaba listo para amputarle una parte del cuerpo a alguien así tan obligadamente, con toda esa presión en el pecho.

— Te felicito, por ser la primera prueba lo has hecho bien aunque esas lágrimas te hacen ver débil— dice Yoongi agarrando un trapo y se lo da a Jimin para que se limpie las manos. — Es que eres muy débil, crees que tienes todo bajo control y no es así, te voy a hacer una persona firme y segura, Jimin no te imaginas todo lo que tengo pensado para tí

—No quiero saber... No quiero más esto por favor— dice secando sus lágrimas que habían parado de caer — No me gusta hacerle daño a las personas.

—El se lo merecía— a Yoongi tampoco le gustaba ver a Jimin así, tan asustado y llorando. Pero sabía que luego eso tendría sus recompensas.

—No, nadie merece ser castigado de esa forma —

Yoongi no siguió a hablando porque no lo vió necesario, sólo observo como Jimin se limpiaba la sangre de las manos.

—¿Que me querías preguntar hoy? — Dice apoyándose en el marco de la puerta ya que se encontraban en la habitación de Jimin.

—Tengo algunas preguntas... — Dice mirando a Yoongi pero aparta la mirada al notar el semblante frío de este que lo intimidaba demasiado.

— Comienza por la más importante—

—¿usted entró a mi habitación y tomó ésto? — pregunta sacando la pulsera de su bolsillo y mostrándole al mayor.
Yoongi lo mira frunciendo el ceño.

—¿Que hacías revisando mi saco? —

—Disculpe pero usted robó esto de mi armario. —

—Yo no robé nada porque esa pulsera que tienes en la mano es mía—

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Me van a querer matar por dejar el capítulo ahí
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