Tratos especiales
La escena que se desarrollaba dentro de aquella oficina era tal, que los presentes se sentían incómodos por el silencio profundo del cabecilla de la mesa, este les observaba con una ceja alzada mientras su mano descansaba en su barbilla, lo conocían lo suficiente como para saber que estaba analizando y pensando lógicamente lo que acababa de escuchar, aunque no querían demostrarlo, estaban tan nerviosos que el jugueteo con sus manos, el movimiento de sus piernas y el rechinido de los dientes eran inevitables.
—Déjenme ver si comprendo—suspiró al cabo de unos minutos—. Ustedes me están pidiendo ayuda para sacar a la luz su relación falsa ¿Verdad? Bien, entiendo, pero ¿De quién fue esa estupida idea?
—Fue mía—respondió un pelinegro con seguridad.
Namjoon miró a SeokJin, quien parecía estar demasiado cómodo en su posición, aquella mañana lucia diferente, podía reconocer a siempre vista cualquier cambio en él, por mínimo que fuera, era imposible no hacerlo su vista siempre estaba sobre SeokJin, como en ese momento, donde sus ojos no se separaron ni un centímetros de su rostro, a diferencia de otros días, no le miraba con admiración o picardía, sino con sorpresa y un poco de molestia.
—Creo que saben la respuesta, ahora váyanse de aquí.
—Deberías al menos escuchar el plan y los beneficios que puede traerte—dijo Jin con una ceja alzada.
—¿Beneficios? ¿Han perdido la cabeza? ¿No saben acaso que ustedes son una marca? El deber que tienen es mantener felices a los fans, y estos no estarán muy contentos de que Taehyung y Yoongi estén en una relación.
—Los mismos que Jungkook y Jimin—respondió tajante—. ¿Qué los diferencia? Yoongi ha tenido relaciones falsas antes, Taehyung rumores de citas ¿Por qué ellos dos no pueden fingir como tu niño de oro? Nosotros también le damos ganancias a tú empresa.
Namjoon se recargó en la silla y suspiró sonoramente. —No desvies la atención, yo no soy el malo, soy quien queire protegerlos y también a la empresa de mi padre ¿Qué creen que dirán los inversionistas? No estarán felices. Y me sorprende que hagan esto—miró a Taehyung específicamente—. Sobre todo tú, estás exponiendo a tu hijo de forma irresponsable.
Yoongi chasqueo la lengua. —A él no tienes por qué decirle algo, los de la idea fuimos nosotros, prácticamente lo obligamos y antes de que digas algo, no seas hipócrita, tú sabes bien que Taehyung tiene mucho apoyo, claro, sus haters están a la hora del día, pero sus logros sólo demuestran que internacionalmente es muy poderoso y yo, vamos, mis fans son monstruos. Te conviene.
Namjoon negó. —Taehyung es un padre soltero y viudo ante el mundo, es la definición de todo lo que está mal en este país, lo aceptan por su carisma y por la historia conmovedora que inventamos, pero ¿Qué crees que pase si se descubre que mintió? Y tú, estás en la cuerda floja, en dos cadenas importantes de televisión no reproducen tu música por ser un busca pleito. Ustedes juntos sólo estarán bajo la lupa pública, criticados y atacados, bajarán sus ventas, clubs de fans cerrados y perdidas para los inversionistas, tendrán que entrar en hiatus, sus carreras suspendidas. ¿Quieren eso?
—Pero fuiste feliz cuando sucedió lo de Jungkook y Jimin—gruño Jin.
—Porque al lado de ellos están en gran desventaja, Jimin es el chico adorado, el niño de la nació, lo aman, a donde va lo idolatran, Jungkook es un puto amo, ha sabido conquistar a todos, es oro puro. Ustedes no cuentan con esas ventajas.
SeokJin cansado de aquel discurso soltó una carcajada que llamó la atención de todos, miró fijamente a Namjoon quien sostuvo su mirada sin mayor problema. Tanto Yoongi como Taehyung lo único que vieron en ellos fue una tensión que ambos conocían muy bien.
—Si el mundo supiera lo que Jeon Jungkook y lo que Park Jimin hicieron, no volverían a ser capaces de salir al mundo sin ser odiados. Abandonar hijos no es lo más lindo y admirable.
Yoongi observó a Jin con una ceja alzada. —Amanecimos bravos, pero sí, él tiene razón. Al menos escucha el plan—le dijo con una sonrisa ladina—. SeokJin es un genio.
Namjoon levantó una ceja volviendo a posicionar su mano en su mentón, desvió toda su atención al pelinegro, quien parecía satisfecho por aquel halago. —Te escucharé antes de negarme por completo.
—Bien—sonrió ligeramente—. Entiendo tu punto, eso mismo es en lo que me he basado para este plan, no podemos presentarlos de la noche a la mañana como pareja, eso sería un caos, pero qué te parece vender una historia de amor que ni el mismo William Shakespeare pudiese haber pensado, no lo sé, piensa, Taehyung es un padre que está solo, sabemos lo que la gente piensa sobre eso, la soledad hace sentir la necesidad de proximidad, además el pequeño necesita una figura paterna ¿No? —cuestionó con una ceja alzada, sin despegar los ojos de los de Namjoon—. En cambio, Yoongi, un chico rebelde que necesita quien lo mantenga con los pies en la tierra, es el drama perfecto y lo sabes, el cliché de película que todo mundo quisiera, es gradual, pequeñas salidas, colaboraciones, interacciones en redes, no sé, puedes ganar mucho, ambos fandoms son poderosos, juntos, te aseguro que te dará más que la historia de amistad y amor de Jimin y Jungkook.
—Estoy impresionado—susurró encogiéndose de hombros—. Pero hay una cosa que no han previsto, Jungkook no aceptará que Yoongi se acerque a su hijo.
—Pero ni siquiera lo ve como su hijo, todos en esta sala sabemos que ser padre no está en los planes de Jeon—soltó Yoongi mirando de reojo a Taehyung quien bajo la mirada—. A él sólo le importa su carrera.
—¿Qué ganan con esto? —chasqueo la lengua—. Esforzarse mucho por esto requiere una buena razón.
—Oh Namjoon, ellos quieren lo que todo el mundo desea—rio por lo bajo SeokJin—. La verdad.
—Yoongi se ve convencido con esto—asintió—. Pero tú Taehyung, siempre creí que estabas aquí para proteger a Jungkook, si hubieses querido hace mucho lo habrías hundido, entonces, ¿Por qué ahora?
—Quiero que Jungkook entienda de una vez por todas que no soy de su propiedad y que me dé el divorcio—relamió sus labios, nervioso.
—Juegan con fuego—negó acomodando su saco—. Lo pensaré, en caso de que acepte, bueno, no le diremos nada a nadie, no hasta que la bomba explote, después hablaremos con los inversionistas y darán la cara, de una mejor forma de la que Jimin y Jungkook lo hicieron, si perdemos por su culpa, entonces ustedes pagaran por los daños, si me niego, van a desistir de esto, ¿Entendido? No olviden que sus carreras siguen estando en mis manos y que faltan años para que terminen sus contratos, pueden intentar irse, pero mis abogados son tiburones hambrientos.
—No hace falta las amenazas Namjoon—soltó Yoongi con una carcajada—. Si quisiéramos lo hubiésemos hecho por nuestra cuenta, pero te respetamos como jefe y amigo, estamos pidiendo tu ayuda, tu sabes, hacerlo legal.
Namjoon asintió. —Mañana recibirán mi respuesta, por lo pronto vayan a realizar sus tareas, tengo el tiempo medido—asintieron al tiempo que se levantaban, sus ánimos habían mejorado, porque de alguna manera tenían la esperanza de haberse adentrado en el corazón avaricioso de Namjon—. Quédate Jin.
SeokJin quien ya estaba levantado volvió a sentarse, los otros dos les miraron como si quisieran hacer la mayor de las burlas, pero se abstuvieron, salieron de ahí en silencio, cerrando la puerta, Namjoon relamió sus labios antes de hablar.
—¿Por qué los estás ayudando a hacer esto? Entiendo lo que ellos quieren, pero tú, ¿Qué ganas con esto?
—No lo hago para ganar o perder—le respondió con claridad—. Lo hago porque son mis amigos, sabes bien lo que Jimin y Jungkook hacen y las consecuencias que dejan detrás, esto es sólo el karma que necesitan.
—Si te involucras de más, serás puesto en medio de una disputa que no te corresponde ¿Lo entiendes?
—Claro, pero vivo con Taehyung y su hijo, salgo con Yoongi cada semana, ellos ya me han involucrado demasiado, ahora sólo les estoy dando un pequeño empujón, vamos, puedo ver en tus ojos que sabes que esta es una idea que te puede dar mucho reflector y dinero si sabes cómo usar la oportunidad.
Namjoon rio por lo bajo mientras negaba. —Entonces, si eres uno de los involucrados y como veo las cosas el intermediario, hagamos nosotros un trato, yo los ayudo, intercedo por ellos y controlo a Jungkook, pero a cambio quiero algo.
—No me voy a acostar contigo—respondió de inmediato cruzando los brazos—. Olvídalo.
—Aunque me encantara tenerte en mi cama, no es lo que quiero, no aun—le miró de forma profunda.
—Esto podría tomarse como acoso laboral—se encogió de hombros—. Pero deja de jugar, dime qué es lo que quieres.
—Tengo un viaje a los Emiratos los primeros días de diciembre, tendré algunas reuniones, entrevistas y quiero que seas mi acompañante. Es completamente laboral, te pagaré y te presentaras en un concierto privado a un jeque.
—¿Estás en negocios turbios Namjoon? —cuestionó con una ceja alzada.
—No cariño, es todo legal—le sonrió satisfecho, porque podía ver en sus ojos que había llamado su atención—. ¿Qué dices?
SeokJin recargó los codos en la mesa y puso su barbilla en sus manos, sonrió ladino y disfruto la manera en la que Namjoon le observaba, no era estúpido, podía ver que lo tenía completamente en sus manos, podía aprovecharse antes de que este se aburriera y fuera tras de otro, no era ambicioso, pero tomaría las oportunidades si se le presentaban, no era sólo por él, sino también por sus amigos.
—Hecho, viajo contigo como un acompañante y tú ayudas a la falsa relación de Yoongi y Taehyung.
Namjoon se recargó en la silla sonriendo encantado. —Siempre es un placer hacer negocios contigo Kim SeokJin, nuestros hijos estarán encantados escuchando la historia de cómo nos enamoramos en territorio Árabe.
—Sueñas—bufó, pero sus mejillas estaban ligeramente coloreadas.
—Quita esa cara ¿Qué pasa?
Taehyung negó mientras movía el té con la cuchara pequeña, ambos se encontraban en un restaurante cercano a la empresa, habían decidido tomar algo para hablar después de la reunión con Namjoon, la cual fue difícil, más de lo que imaginaron, puso en él mucho más peso del que tenía, no había analizado las cosas con el detenimiento necesario, después de las palabras de Namjoon, su mente estaba repleta de esos cuestionamientos en donde la mayor parte de sus reclamos era que estaba tomando decisiones apresuradas sin pensar en el mal que podría hacerle a su hijo, que era lo más importante.
—Creo que independientemente de lo que diga Namjoon tenemos que dejar ese plan—susurró sin mirarle—. Tal vez tú no tengas mucho que perder, pero yo, tengo que ser maduro y cuidadoso por Jungwon.
—Mira, entiendo lo que quieres decir, bueno, no, no lo entiendo, porque no soy padre, pero, tú mismo lo dijiste, sino le demuestras a Jungkook que eres más de lo que él te ha permitido ser, entonces estarás encadenado toda la vida con él y no de la manera que deseas, seguirán siendo un secreto, cuando encuentres a la persona ideal, ni siquiera podrás casarte con ella. Las pruebas de la vida son complicadas, pero Tae, tienes que hacer algo ahora.
Taehyung le miró con cansancio, Yoongi siempre parecía estar tan tranquilo y decidido con todo lo que hacía, llegaba a preguntarse si realmente algo podía afectarle, pero después recordaba los días donde al igual que él estuvo destrozado por amor, y comprendía que sólo era una buena fachada.
—Quiero ser buen padre, un buen artista, una buena persona y parece que por más que lo intento, siempre hay algo que me detiene.
—Tuviste un hijo a los diecisiete años, realmente jamás has vivido la vida libremente, pero lo estás haciendo bien, Tae está es tu oportunidad para luchar por ser libre.
—Es cansado—bufó con una mueca—. Estar trabajando, llegar a casa y encontrar a mi hijo desvelado por verme o dormido, escuchar a mis padres decir que estoy haciendo mal las cosas, escuchar a Jin diciendo que debería ser mejor por Jungwon y hasta Jungkook criticando mis métodos de crianza, a veces sólo quisiera tomar a mi hijo y huir.
—Bueno, ¿Quieres saber lo que pienso? Tus padres están preocupados, toma lo que te parezca mejor de sus consejos, pero no te enfrasques en sus opiniones, Jin ni siquiera es padre, no sabe de lo que habla y Jungkook, a ese hijo de puta no deberías de creerle nada, ni siquiera escucharlo, Taehyung lo haces bien—rio por lo bajo—. Jungwon es un excelente niño, lindo, amable, educado, inteligente y comprensivo, algo estás haciendo bien.
—A veces pienso que es él el que me cuida—negó con una sonrisa—. ¿Por qué estás arriesgando tanto por Jimin?
Yoongi relamió sus labios antes de contestar. —Amo a Jimin, no importa las veces que me joda, lo amo, y la realidad, mí realidad, es que quiero que se dé cuenta que también me ama y que sea él quien regrese a mí.
—¿Y qué pasa si él no regresa? ¿Qué harás? Siento que esperas mucho de él—le miró con compasión.
—Tú lo dijiste, yo no tengo nada que perder, sólo tiempo, esta es mi última oportunidad, mejor dicho, nuestra última oportunidad, si Jimin no regresa a mí, entonces haré lo que mejor sé, escribiré canciones, que serán un éxito, me enlistaré y dejaré todo atrás.
—¿Crees que Namjoon acepte el plan? —preguntó alzando una ceja—. No lo vi muy convencido.
—Namjoon sólo necesita un par de ojos castaños y unos apetecibles labios para aceptar, Jin lo tiene en sus manos, este sólo piensa con la polla, así que en eso tenemos ventaja.
Taehyung comenzó a reír. —Espero que su preciado enamoramiento y juego de seducción nos dé un comeback.
—Se supone que pronto es ese programa en el que estarás con Jimin ¿No? —preguntó con una ceja alzada.
—Sí—bufó—. Tendré que tener mucha fuerza de voluntad para no golpearlo.
—Sólo no lo golpees en el rostro que es muy lindo—le sonrió divertido, antes de mirar sobre el hombro de Taehyung—. Creo que nos han reconocido.
—Eso es malo ¿No? —dijo temeroso.
—No, porque si Namjoon acepta, bueno, esta es nuestra primera cita en público.
—No me gustan las citas públicas—bebió de su té.
—Si no te gustan, bien podemos ir a mi departamento—le guiñó un ojo—. Oh no espera, recuerdo que estás en algo extraño con Hoseok ¿Qué es lo que son? Amigos con derecho a manoseo, ¿No quieren ser un trío?
—Eres un asqueroso—gruñó, pero después rio divertido—. Se supone que debería de estar con nosotros en la reunión ¿Dónde se metió?
—Además de meterse contigo—se encogió de hombros—. Creo que fue a un técnico de celulares, no lo sé, no le presté atención.
—A veces me pregunto por qué somos amigos.
—Podemos ser algo más, abre tu mente al trío—le dijo con una sonrisa satisfecho de escucharlo reír, porque Yoongi sabía lo que Taehyung estaba sintiendo, ambos entendían al otro, por eso era sencillo estar con él, le gustaba pasar tiempo a su lado, sin embargo, esperaba que eso no se convirtiera en un problema.
—No, Jungkook estoy bien, ahora déjame—gruñó apagando el celular—. No soy un niño, nadie tiene derecho a decirme qué hacer.
—En eso tienes razón primor—asintió su acompañante.
Jimin le miró con cara de pocos amigos, no estaba para bromear, para trabajar o para escuchar a otras personas, lo único que él quería hacer en esos momentos era olvidar, perderse en sus pensamientos, dejar de lado aquellos recuerdos, el dolor y la angustia, además de la culpa, sobre todo la culpa, aquella que carcomía sus entrañas y no le dejaba tomar bocado, se sentía un fracaso, desde su fiesta de cumpleaños que resultó ser un fracaso total, estaba a la deriva.
Miró las tres franjas blancas y bufó, una parte de él creía que era suficiente, que debía parar antes de que la perdición se apoderara de su vida y de todo lo que con trabajo había adquirido, sus malas decisiones siempre fueron beneficiando su carrera, entonces, ¿Por qué continuar con algo que sabía podía arruinarlo para siempre? Aquel reclamo interno fue callado cuando se agachó para aspirar, su nariz quemó casi al instante, pero a diferencia de las primeras veces ese ardor no fue incomodo sino placentero.
Esperó unos momentos hasta que su cuerpo obtuvo aquellas sensaciones a las que se estaba volviendo tan adicto, sonrió cerrando los ojos, pequeñas lágrimas surcaban estos, sus manos se sentían ligeras.
—James ¿Alguna vez estuviste enamorado? —preguntó mirándolo con una media sonrisa—. ¿Alguna vez amaste tanto que entregaste todo de ti quedándote sin nada?
—El amor es una pérdida de tiempo Jimin—se encogió de hombros.
—Lo es—asintió riendo por lo bajo, se hincó en el piso, puso las manos en la alfombra y comenzó a gatear hacía James, quien le miró con una ceja alzada—. ¿Qué tan bueno eres? —preguntó con voz seductora.
—¿Quieres que te muestre? —preguntó tomándolo de la cintura.
—Hazlo—asintió al tiempo que besaba sus labios.
Jimin estaba perdido por el momento de lujuria, estaba obnubilando sus sentidos, estaba completamente drogado, disfrutando de las manos sobre su cuerpo, de aquel hombre que tomaba todo lo que quería de él, quien se reía mientras tomaba el teléfono de Jimin y le sacaba algunas fotos, además de audios.
—¿A quién deberíamos mandarle esto? ¿Cómo se llama el que amas? —preguntó mientras seguía entrando en él.
—¡Yoongi! —gimió con fuerza.
—Enviado.
El Namjin en esta historia es caliente, y lo que sigue wuuuuuuuu
Espero les guste n.n si quieren más entonces ayúdenme con votos y comentarios 🖤
🖤🖤
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