Nuevo amor
Se encontraba mirando la pantalla de su ordenador con seriedad, observaba de vez en cuando el reloj que estaba sobre la pared, su teléfono no dejaba de sonar y él estaba nervioso, había algo que lo mantuvo despierto por la noche y es que, después de la pelea con Taehyung todo parecía muy confuso, había preguntas que este hizo cuyas respuestas estaban rondando su mente. Unas más difíciles que otras, relamió sus labios intranquilo, ese día, se estrenaba el programa en el que Jimin y Tae estarían juntos como jueces, no le importaba, aunque sabía que sería un desastre, había algo más que estaba en su mente.
Taehyung antes de todo lo sucedido le había concedido el estar con Jungwon mientras él se encontraba en el programa, claro que todo se fue a la mierda y él tenía estrictamente prohibido verlo, jamás pasaba tiempo con su hijo, era un niño ajeno a su vida, pero estaba creciendo y se lo estaba perdiendo.
Salió de su estudio, ese día no tenía tanto trabajo por lo que no dudo en acercarse a la oficina de Namjoon. Llamó a la puerta, ambos eran buenos amigos, siempre estaban para el otro, aunque este no se metía en sus decisiones personales, le daba algunos consejos que no seguía.
—Hola—dijo cuando pudo entrar.
Namjoon estaba igual que siempre, trabajando, se esforzaba mucho para dejar todo listo antes de su viaje a Dibai, que le tenía entusiasmado, todos sabían la razón de su felicidad, pero nadie se atrevía a hablar, primero porque era el jefe y segundo porque SeokJin no dudaría en romperles la cara. Ellos no se llevaban bien, ya no más, estaba seguro de que Jin lo odiaba y no lo culpaba, era mejor amigo de Taehyung.
—Quisiera pedirte algo—dijo sentándose frente a él.
—Claro, dime ¿Qué quieres? —hipz una mueca—. Espero que no me pidas cubrir otra de tus estupideces, no tengo tiempo.
—No es eso, no he hecho nada, quería pedirte que me dieras el día, necesito ir a casa.
—¿No que estabas muy ocupado en el nuevo álbum? Dime ¿Qué vas a hacer hoy? Por lo que sé Jimin está en el programa.
—Voy a pasar la tarde con Jungwon.
Namjoon le observó con una ceja alzada. —Pensé que Taehyung te había prohibido verlo.
—Lo hizo—asintió—. Pero él está ocupado y el niño se encuentra con sus padres que viven en a dos departamentos de mí, no tiene nada de malo que quiera pasar tiempo con mi hijo ¿No eres tú quien ha insistido en eso?
—La realidad es que estás haciendo esto para joder a Tae, no porque quieras pasar tiempo con el niño, el cual ni siquiera te importa Jungkook.
—Es mi hijo, claro que me importa—respondio molesto—. Y esto no es por Taehyung, no me importa lo que él haga o deje de hacer, ambos estamos separados hace mucho, y no vivo para joderle la vida, tu sabes lo importante que fue para mí.
—Yo sólo te advierto que jugar con el niño no te va a traer nada bueno, no puedes ignorarlo, después querer verlo y volver a ignorarlo, él no merece la mierda que son ustedes como padres.
Jungkook gruñó. —Quiero tener una relación buena con él, ha crecido mucho y no estuve para verlo, así que esto puede ser bueno, en fin ¿Me darás el día?
Namjoon bufó, no le parecía nada lo que ellos estaban haciendo, no creía que era justo ni bueno, sobre todo, porque sabía lo mucho que Jin quería a ese niño.
—Bien, pero Jungkook piensa bien las cosas, no uses al niño.
Jungkook no dijo nada, simplemente se levantó y abandonó la oficina, él no quería escuchar a nadie opinando sobre lo que no sabían, porque nadie estaba al tanto de lo que sucedió, en su camino recordó, cuando tenía diecisiete años y su vida cambió, cuando todo a su alrededor se nubló, porque nadie en la vida lo había preparado para tener aquellas dificultades, por eso, no dejaría que le juzgaran, él sabía lo que estaba haciendo.
Su sonrisa era tierna, la más hermosa que había visto en su vida, lo conoció en el instituto, y se enamoró desde el primer momento en que lo vio, alegre, sencillo y con un carisma excepcional, en ese entonces estaba luchando por su sueño, estaba siendo entrenado para ser un idol, pero poco importó cuando lo conoció, cuando se hicieron amigos y vieron que tenían más en común de lo que habían pensando, mucho menos cuando lo besó por primera vez después de la escuela, cuando ambos estaban en la estación, Jungkook era joven para saber que su relación escalaria a un nivel mayor, sobre todo, cuando Taehyung lo invitó a su casa y ambos experimentaron por primera vez lo que era la pasión, una que desencadenó lo peor a su corta edad, un bebé.
En ese entonces no supuso lo duro que sería y que perdería todo por lo que había luchado, su mayor sueño se nubló, su familia le dio la espalda y la familia de Taehyung, aunque los apoyaban, no estaban de acuerdo con sus decisiones. La madre de Tae sugirió deshacerse del bebé, pero Taehyung no lo quería así, en ese entonces aunque no lo dijo, él hubiese querido acabar con todo, pero se quedó, Taehyung le dijo que no intervendría en sus sueños, así que aceptó cuando le dijo que no le daría el apellido al niño. Todos los demás se molestaron.
—Es lindo—dijo Taehyung mirando al bebé recién nacido.
—Es bonito—asintió, aunque estaba feliz por su hijo, la incertidumbre crecía, porque ¿Cómo cuidaría de él? Tendría que esforzarse al máximo.
—Estaremos bien Kookie.
Sin embargo, no lo creía así, era difícil, pero él tenía en mente seguir con su sueño, para así darle todo a Taehyung y a su hijo, aunque todo al final salió mal. No pudo hacer nada.
—¿Qué haces aquí?
La madre de Taehyung lo odiaba, sabía que desde el principio nunca le cayó bien, trataba de separarlos, fue la más feliz cuando ellos se alejaron. Pero, aunque a él tampoco le cayera muy bien, seguía siendo la abuela de Jungwon y en esos momentos la única que podía darle el permiso de estar al lado de su hijo.
—Buenas tardes señor Kim, vine a hablar con usted.
—Yo no tengo nada que hablar contigo. Todo lo que quieras llamale a mi hijo.
—Taehyung no responde mis llamadas.
—¿Y eso te sorprende? Has sido un desgraciado.
—Lo sé, pero señora, usted sabe muy bien que Taehyung no puede sacarme de su vida así a la ligera, nosotros tenemos un hijo, y Jungwon no ha pasado tiempo conmigo, eso es parte mi culpa porque he trabajado mucho estos últimos meses, pero tampoco Taehyung está dejándolo fácil, no puede molestarse y evitar que vea a mi hijo, mucho menos cuando no puedo pasar mucho tiempo con él.
La vio dudar, él la conocía y sabía que ella no estaba muy de acuerdo con que Taehyung y él tuvieran esas peleas donde ponían en medio a Jungwon, también estaba seguro de que ella no quería que descuidara a su hijo. Lo sabía, y se aprovechó de eso.
—No, no estoy de acuerdo con Taehyung, pero es su hijo y yo sólo sigo las indicaciones que él me dio.
—Quiero ver a mi hijo señora Kim, y él quiere verme a mi, entonces ¿Por qué seguir con estas estupideces? Sólo déjeme verlo.
—No lo sé...
—Taehyung no está aquí, mi departamento está arriba, quiero que pase este día conmigo, y antes de que Tae regrese yo lo traeré, él no tiene por qué enterarse, por favor, quiero ver a mi hijo.
Su súplica pareció convencer a la mujer, quien suspiró sonoramente.
—Está bien. Pero, tienes que regresarlo antes de que llegue.
—Lo haré—asintió con una sonrisa.
—Lo llamaré—dijo cerrando la puerta y haciéndolo esperar en el pasillo.
Entonces, la sensación que siempre lo acompañaba cuando estaba cerca de su hijo hizo su aparición, era una mezcla de felicidad y de temor, porque a pesar de que ese niño llevaba su sangre y era muy parecido a él, no lo conocía, no sabía cómo es que tenía que hablarle o reaccionar a él.
La puerta se abrió y mostró al pequeño pelinegro que le sonrió, era una sonrisa bonita parecida a la de Taehyung.
—Hola—saludó con su manita.
—Hola Jungwon, me preguntaba si querías ver una película conmigo.
No pudo ignorar la forma en la que sus ojos se iluminaron. —Si.
Asintió, miró a la madre de Taehyung quien le torció el gesto, desvió la mirada y caminó con Jungwon a su lado, su departamento estaba en el siguiente piso, por lo que tomaron el ascensor en silencio. Ambos incomodos.
—¿No estabas trabajando? —preguntó cuando las puerta se abrieron y ambos bajaron, se fijó que nadie estuviera en el pasillo y camino tranquilo.
—No, hoy no.
—Papá si trabaja hasta tarde hoy—suspiró.
—El tiempo pasa rápido, pronto lo verás.
Abrió la puerta de su departamento y lo dejó entrar, se dio cuenta que era la primera vez que estaba ahí, lo vio impresionado, su departamento era más grande y lindo que el de Tae, aunque sus gustos eran más sobrios. Caminó alrededor, mirando con asombro las figuras de acción de superhéroes que tenía en una repisa.
—¿Te gustan?
—Son geniales, yo tengo algunos, pero no están en sus cajas.
Jungkook asintió, era su más preciada colección, había pasado meses consiguiendo todos.
—¿Cuál te gusta más?
—Soy fan de Iron Man. Ese es increíble—dijo señalando un Iron Man edición especial.
—Ammm si—asintió cambiando de tema—. ¿Qué película quieres ver?
—Avengers—se sentó en el sillón con una sonrisa.
—Traeré frituras ¿Qué quieres tomar?
—Leche de banana—se encogió de hombros.
Parpadeo perplejo, bien, era su hijo, por po que no era tan extraño que tuviese algunos gustos suyos, fue a la cocina y preparó algunas cosas, no sabía lo que le gustaba comer, así que llevo varias cosas, entre ellas dos leches de banana, las puso en la mesa de centro y prendió la televisión para buscar la película. Jungwon parecía más relajado, tomó unas galletas y las abrió, comiendo con total confianza, sonrió tenuemente, nunca imaginó que tendría una tarde libre con su hijo. Era agradable.
Taehyung se sentía mal, las nausea esa mañana estaban siendo peores, les tuvo que decir a las personas de maquillaje que hicieran lo imposible para que no se viera enfermo, ese día comenzaba el programa y estaba nervioso, por tener que enfrentarse a Jimin y por estar en televisión en vivo.
Un mensaje de Yoongi diciendo que para traseros, pero no literal, hizo que su ánimo mejorara. Dejo el camerino cuando le llamaron y caminó con tranquilidad, estaba ahí para demostrar que era profesional.
El set era impresionante, le gustaba como se veía, Jimin ya estaba sentado en una de las sillas de jueces, agradecía que no los hayan puesto juntos, a esas alturas ya todos sabían que ellos no se llevaban bien, pero gracias a su empresa nadie hablaba del asunto.
Jimin le miró con sorna. —Hola Tae, te ves bien.
—Hola Jimin, me gustaría decir lo mismo, pero no te ves muy bien ¿Subiste de peso?
Jimin le miró con reproche. —Eres un asco, ya quisieras verte como yo, ¿Por qué crees que Jungkook te dejó?
Quiso contestarle, pero recordó las palabras de Namjoon, él tenía más que perder, porque todos amaban a Jimin, lo idolatraban. Tenía que irse con cuidado, no por él, sino por su hijo.
—Empezamos en cinco—dijeron al tiempo que las luces se hacían más prominentes.
Jimin le miró y sonrió. —Suerte Tae.
—Suerte.
—Oh por cierto, Jungkook me mandó una foto muy tierna del pequeño Jungwon, me alegra que hayas dejado que pasara tiempo con su padre—lo dijo en voz baja, para que sólo ellos escucharan. Taehyung miró la foto y algo dentro de él hirvio.
Quiso llamar a su madre, pero era tarde, el show estaba comenzando.
—¡¿Te importa más una presentación que llevar a tu hijo al hospital?! Esta hirviendo en fiebre Jungkook.
Le miró con fastidio. —No va a morir de una fiebre Taehyung, llévalo tú, yo tengo cosas que hacer.
Taehyung le observó herido, era esa misma mirada que siempre ponía cuando él no hacía lo que se supone que un padre tenía que hacer, pero no podía hacerlo, porque tenía compromisos, porque eso era en ese momento mucho más importante.
—Está bien yo lo llevaré.
—Gracias, cuando vuelva yo...
—Estoy cansado Jungkook—suspiró y habló con voz temblorosa—. Muy cansado de esto, no puedes tener las dos cosas, en una siempre fallaras, yo quiero que elijas.
—¿Qué? —preguntó consternado.
—Nosotros o tu carrera, no te pido que lo dejes, sólo que estés más presente, que te incluyas en las cosas de Jungwon.
—No puedo Taehyung, si hago esto es para que en un futuro no tengamos que preocuparnos por nada, es que no lo entiendes, estás mal...
—¡Lo que quiero es que seas un padre para Jungwon!
—¡Pues no puedo serlo, jamás quise serlo!
Ambos pararon abruptamente, Taehyung frunció el ceño lleno de dolor, Jungkook se arrepintió de sus palabras, se acercó, pero Taehyung se alejó de su presencia.
—Tae, lo siento yo...
—Creo que debemos darnos un tiempo Jungkook, úsalo para pensar qué es lo que realmente quieres. No vuelvas hasta que lo sepas.
—¿Harás está estupidez? Bien, no me interesa—dijo molesto saliendo de aquel pequeño departamento, con la furia contenida, tomó su teléfono—. Hola Jimin, te quería pedir un favor ¿Puedo quedarme contigo unos días?
Jungkook observaba como Jungwon analizaba la película, estando emocionado y serio en las partes más sentimentales, era muy parecido a Taehyung.
—Creo que ya inicio el programa de papá, quiero verlo.
Le miró con una ceja alzada, pero asintió, a decir verdad él no quería ver ese programa, porque sabía que las cosas podían salirse de control teniendo juntos a Jimin y a Taehyung.
—Está bien—dijo al no encontrar una escusa para negarse.
Tardó un poco en poner la televisión, el programa comenzó, vio a Jimin quien se veía espectacular como siempre y a Taehyung, quien era la personificación de la belleza misma, los papeles se habían investido, Jimin siempre fue lindo, Tae, tenía una belleza normal, pero ahora parecía todo lo contrario.
—Me gusta el cabello de papá, ahora es más largo, a veces juego con él y lo peino.
—Sí, es un lindo cabello.
—Tío Jin dice que papá floreció después de sacar la plaga—río posiblemente sin entender lo que querían decir esa palabras.
—Que gracioso es tu tío Jin—bufó.
El programa era simple, pero lo que estaba llamando la atención eran los ataques "amables" que Jimin y Taehyung se daban, tanto era que le hizo reír, Jungwon no sabía de qué se reía, pero hizo lo mismo.
—La presentación fue maravillosa, por unos momentos pensé que se trataba de playback, pero bueno, yo no sé de eso, el experto aquí es Jimin.
—Las expresiones fueron algo exageradas, casi una actuación de novatos ¿No Taehyung?
Jungkook negó, había un tiempo en donde ellos dos eran inseparables, donde su amistad parecía sacada de un ciento de hadas, Jimin y Taehyung eran tan buenos juntos que Namjoon pensó en debutarlo con Jin y Tae, pero todo llegó a su fin y parte de la culpa recaía en él. No sólo había destruido su matrimonio, sino también una linda amistad.
—¿Por qué quisiste pasar este día conmigo?
La pregunta de su hijo lo tomó por sorpresa, le miró con un nudo en la garganta, habían tantas cosas que pudo decir, justificaciones que lo salvarían o la verdad que sería dolorosa, pero no podía, porque Jungwon sólo tenía diez años.
—El trabajo es demandante, pero espero tener mucho más tiempo libre para estar contigo.
—Está bien, es lo mismo que dice papá, a veces hay que hacer sacrificios, lo entiendo.
Jungkook apretó la mandíbula, sabía que era un mal padre, pero no sabía cuánto su hijo había crecido hasta que lo escuchó hablar de esa manera, le sonrió y acarició sus cabellos. El sonido del celular le distrajo. Lo sacó y miró sus notificaciones, algo dentro de él se encendió, no era posible.
Estaban en comerciales cuando Taehyung observó el mensaje de Yoongi y su garganta se secó. Miró de reojo a Jimin, quien le observaba con odio, como si quisiera matarlo en ese instante, desvió la mirada y suspiró.
—Maldita sea.
Porque la noticia de su relación con Yoongi ahora estaba en todo internet.
Hace mucho que no había actualización, espero les haya gustado.
1/?
🖤🖤
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro