—No creo que tenga que explicar por qué están aquí ¿Verdad?

La tensión era palpable, Taehyung miró de reojo a JungKook quien se encontraba sumido en el silencio, en la sala también estaban Hoseok, que permanecía con la mirada gacha y Yoongi, quien se mantenía apacible.

—Lo sabemos, continúa—dijo Yoongi.

—Debes tomarte las cosas en serio—le miró con reproche—. Soy tu jefe.

Namjoon estaba molesto, podían verlo a través de su mirada. La puerta se abrió y entró SeokJin, quien tomo asiento al lado de Tae. El gesto de Namjoon se aligeró y todo pudieron notarlo.

—Vaya, veo que el viaje fue interesante—rio Hoseok por lo bajo.

—No estamos aquí para hablar de esto—se dirigió a Taehyung evitando la mirada de Jin—. ¿Tienes algo qué decir?

—Lo siento.

—¿Sólo eso?

—¿Por qué no le preguntas a JungKook qué pasó? Vamos Kook, Namjoon quiere saber.

JungKook miró con odio a Yoongi, pero regresó la vista a Namjoon. Taehyung estaba preparado para escuchar una escusa, para oír que él decía que no sabía nada del asunto, lavandose las manos, cosa que no podría negar, porque era verdad al final del día. Él nunca le dijo a JungKook qué estaba embarazado.

—Taehyung y yo tuvimos algo que ver hace tres meses, fui irresponsable y no me cuide, resultó que estaba embarazado, hablamos y se tomó está decisión por el bien de todos.

Taehyung le miró con sorpresa, a su lado Jin lo maldijo. —¿Y ustedes cómo entran en esta ecuación?

Hoseok se encogió de hombros. —Tae y Yoongi vinieron a pedirme ayuda, para darles acceso al hospital.

—Yo la verdad estoy en esto porque Tae y yo tenemos una relación ¿Lo olvidan? Obviamente tenemos altas y bajas y apoyarlo en el aborto de un hijo de su ex está entre esas cosas que se hacen en pareja.

—Ustedes no están saliendo—dijo JungKook molesto.

—Lo están, deja de joder que tú sabes con Jimin.

Hoseok asintió a lo que Jin dijo. —Todos fuimos discretos Namjoon, ¿Ya puedo irme? Mi error fue ayudarles a que fuera en un lugar discreto, pero no tengo nada que ver con ellos. El equipo médico ha firmado un acuerdo de confidencialidad.

Yoongi miró de reojo a Hoseok con pena, ellos no habían hablado de lo sucedido, no le aceptaba las llamadas y huía de su presencia.

—¿Alguien aparte de ustedes y el equipo médico lo sabe?

—No, nadie...

Yoongi paró al recordar a Jimin, no es como si pudiera salir de su mente después de dos días de permanecer juntos, viviendo dentro de un cuento de hadas irreal, dónde ellos se amaban y no se habían lastimado. Jimin era dulce y amable ante las cámaras, pero fuera de ellas era impulsivo y no pensaba en las consecuencias de sus actos, él lo conocía bien y hasta cierto punto lo justificaba, pero no dejaba de lado el hecho de que lastimaba a los demás.

—Jimin estaba ahí—dijo Hoseok sin rodeos, tratando de mantener la calma, porque no sólo Jimin lo sabía sino también EunHa, aunque ella había prometido que no diría nada, aún le costaba confiar, miró a Taehyung preocupado, aún lo quería, hasta cierto punto lo necesitaba, pero la traición era muy reciente. No quería que lo implicarán de más.

—¿Qué? —susurró con terror Taehyung.

—Jimin no va a decir nada—dijo JungKook de inmediato—. No lo hará, tranquilo—miró específicamente a Taehyung quien negó.

—¿Él no dirá nada? ¿Acaso no acabas de entender que Jimin me odia?

—Taehyung, está situación también me compete a mi, Jimin no hará nada para lastimarme.

—¿Por qué le gustas? Por dios JungKook, todos aquí sabemos que eso no tiene sentido, también quería a Yoongi y ve cómo acabó.

—Gracias Jin—bufó Yoongi.

—Jimin no lo hará—dijo con total seguridad.

Namjoon cerró los ojos unos momentos. —Llama a Jimin—ordenó a JungKook quien hizo una mueca—. Ahora, no estoy jugando, ambos sabemos que Jimin siempre saca provecho de la situación. Hazlo.

JungKook tragó en seco, desde hace días que no hablaba con él, después de haberse perdido un día significativo para ambos, estaba seguro que Jimin se encontraba molesto, tal vez ni siquiera le contestaría, pero para su sorpresa, lo hizo.

—¿Vas a disculparte?

—Jimin—dijo con vergüenza debido a que estaba en altavoz—. Estás en altavoz, Namjoon quiere hablar contigo.

—Ahhh, bien, buenos días Namjoon hyung, es una sorpresa saber de usted ¿De qué quiere hablar?

—Sobre el incidente de hace algunos días, tengo entendido que acompañaste a JungKook al hospital esa noche. ¿Sabes a qué me refiero?

—Ya, sí, lo recuerdo ¿Cómo está Tae?

Taehyung apretó la mandíbula. —¿Qué es lo que quieres para que mantengas la maldita boca cerrada?

—Oh ahí está, me siento en desventaja, ustedes saben con quién hablan, estoy sólo tomando un baño en mi departamento, en unos minutos vendrán por mí para una entrevista ¿No es genial? Me gusta cuando la conversación fluye, ya saben ¿Quienes están ahí?

—Jungkook, Taehyung, Hoseok, Jin y Yoongi—Namjoon habló con los ojos fijos en el teléfono.

—Todo el crew junto, que sorpresa.

—Jimin...

—Quiero la colaboración con Yoongi, eso hará que me quedé callado para siempre. No diré nada, sólo hazlo posible.

Yoongi bufó. —¿Tú nunca pierdes? Pide otra cosa.

—Lo aprendí de ti, vamos todos están sacando algo bueno de esta situación, yo también quiero lo mismo, no pido mucho.

—Jimin, puedes pedir otra cosa. Dinero o...

—No Namjoon, esto nunca fue por el dinero, yo siempre quise esa colaboración, le hará bien a mi carrera, que es lo único que me importa.

JungKook elevó una ceja mirando a Yoongi, quien mantenía la mandíbula tensa, pero en sus ojos se escondía algo, relamió sus labios pensativo, recordando que la ubicación de Jimin ese día estaba en el departamento de Yoongi, algo debería de haber pasado entre ellos y ahora Jimin se estaba aprovechando.

—Lo haré.

—Perfecto, avisaré, espera la llamada Namjoon hyung, esta vez lo haremos legal, nos vemos chicos.

Jimin colgó, dejando un silencio sepulcral en la sala, Taehyung miró a Yoongi con disculpa.

—Lo lamento, todo esto ha sido mi culpa, y los he llevado entre las manos, creo que lo mejor que podría hacer es retirarme, en algún momento todo se sabrá.

—¿Hablas de renunciar? —cuestionó Jin con una ceja alzada.

—Quiero renunciar.

—Esa no es la respuesta—dijo JungKook con seriedad—. Nadie dirá nada, además necesitas el trabajo, y lo sabes.

—Hay otras maneras de conseguir dinero.

Hoseok bufó. —Lo que tienes es porque has luchado duro por ello, sólo hagamos lo que Park dice y ya, sólo que ahora tienes que ser más cuidadoso.

—Yo haré esa colaboración, a cambio de no ir al festival de fin de año.

Namjoon gruñó. —¿Qué todos se creen con el maldito derecho de poner sus condiciones? Habíamos hablado de eso, no hay quien tome tu lugar.

—Lo haré yo—dijo Taehyung de inmediato—. Si él está haciendo algo para ayudarme, yo lo haré igual.

Namjoon negó. —Aunque la idea no está mal, ellos esperan un artista del calibre y la trayectoria de Yoongi. El cabron es muy aclamado, y tú apenas estás empezando a tener una fanbase grande.

—Lo haré con él.

Todos se volvieron de forma directa a JungKook.

—Dijiste que no lo harías, pediste que saliera tu álbum esas fechas.

—Puede salir a mediados del próximo año o a principios, también era mi hijo—bajo la mirada—. La razón por la cual estamos aquí es por mi culpa, así que no puedo dejar que todos arreglen los problemas ni que Taehyung lleve la carga completa. Podemos presentarnos los dos, sabes que lo haríamos igual de bien o mejor que Yoongi. Sin ofender.

—No me ofende. Es mentira igual.

—Está bien, mandaré el aviso, ambos avisos. Si pudieran no meterse en problemas por un tiempo se los agradecería mucho. Váyanse.

Taehyung, JungKook y Jin se levantaron para irse, en cambio Hoseok y Yoongi se quedaron, ambos miraron a Namjoon con una ceja alzada.

—¿Y bien? —preguntó el primero—. ¿Hay algo qué tengas que contar?

—No, nada que les importe.

—¿Te acostaste con Jin? Porque se mirarían así de haber otra explicación.

Namjoon suspiró. —Estamos saliendo, así que espero que dejen que disfrutemos el momento, no es lindo que él se ponga de su parte todo el tiempo, aprendan a comportarse.

—Felicidades Namjoon, has querido esto por doce años—dijo Yoongi con una sonrisa.

—Tienen mi apoyo, no te daré problemas, tengo algo qué hacer, nos vemos después.

Ambos vieron a Hoseok salir rápidamente de la oficina, Yoongi bufó dejando caer la cabeza entre sus manos.

—Sigues lamentando lo que pasó, pero no estás haciendo nada para arreglarlo ¿Verdad?

—Traté de hablar con él, no quiere nada, me odia.

—Besaste a la persona que ama, cualquiera estaría así, pero, lo cierto es que Hoseok te aprecia mucho más de lo que quisiera, deberías ser menos egoísta y pensar más a la hora de actuar.

—Supongo, deséame suerte, la necesitaré.

—Ya lo creo—asintió con una mueca—. Conociendo a Jimin la colaboración será bajo sus términos y sabemos que es exigente.

—Sabes, eso por alguna razón no me molesta tanto, veré hasta donde quiere llegar, nos vemos.

Se levantó para salir de la oficina, dejando a Namjoon confundido con sus palabras, sería una larga semana.

—Taehyung podía iniciar cantando una de sus canciones en solitario, algo que no haya cantado antes, después cantan algo juntos y cierras tú JungKook.

Estaban reunidos con uno de los productores, quien estaba a cargo de su presentación en el festival.

—Nosotros no tenemos una colaboración y es poco el tiempo para hacerla.

—¿Un cover? —dijo JungKook respondiendo al comentario de Taehyung—. Podríamos revisarlo ¿No?

—Dejare que me traigan tres opciones, después trabajaremos con lo demás. Creo que es todo, los rumores y las fotos en Instagram son una buena publicidad. Bien chicos, los dejo.

Se levantó y salió del estudio de JungKook, quien miró a Taehyung, no habían hablado en días, desde aquella reunión.

—Creo que también me voy.

—Espera Tae, podríamos hablar de la canción, ¿Qué te gustaría cantar?

—Realmente no lo sé.

Era incómodo estar uno al lado del otro. JungKook relamió sus labios.

—Jungwon me llamó ayer, dijo que Jin había hecho pastelillos y quería que comiera con él, pero, sabes cómo es Jin, por eso tuve que negarme.

—Jin te odia—asintió—. Pero, si es por petición de Jungwon no te diría nada. Quiere verte, ha estado nervioso por eso.

—Podría venir un día a cenar, tú...los dos podrían hacerlo.

Taehyung boqueo. —No creo que sea buena idea.

—¿Por qué no?

—Jungkook, nosotros...

—Podríamos ser amigos, no te estoy pidiendo más que eso, quiero que nos llevemos bien por Jungwon, él estaría bien.

—¿Estás seguro que puedes respetar ese límite?

—Sí, puedo, quiero estar con él.

Taehyung supo que estaba siendo sincero, podía verlo en sus ojos y facciones, sin embargo, había algo en él que no le dejaba confiar, esa espina que se clavaba en su pecho.

—Jungwon te quiere, en verdad lo hace, y te admira, si tú tomas esto como temporal, bueno...

—No es temporal, voy a estar ahí, contacté con un doctor podríamos ver otras opciones y desde ahora me haré cargo de él al cien por ciento.

—No, es mi hijo y...

—También es mi hijo Taehyung.

—A la mitad, es lo que puedo aceptar.

—Bien, también quiero estar con él los días que tengo libres y, sé que no te va a agradar la idea, pero quiero llevarlo a Busan, mi familia ha preguntado por él.

—¿De verdad lo han hecho? ¿No nos culpan por arruinar tu vida? Ellos no lo conocen.

—Quieren hacerlo.

—Lo de los días libres está bien, siempre y cuando no se lo digas, sino estará esperando, es mejor que sea espontáneo, lo de tu familia, lo siento, pero tengo que pensarlo, no quiero que vaya a un lugar donde lo traten mal.

JungKook asintió. —Me conformo con eso, podríamos llevarlo a Daegu al festival. Seguro le gustará.

—Podría ser complicado. Deberíamos saber la organización y esas cosas.

—Tienes razón—le sonrió tenso—. ¿Cómo te sientes?

—Bien.

—¿Fuiste al doctor después de...?

—Dijo que las cosas estaban bien.

—Lamento...

—No hablemos de eso, por favor.

—Está bien, Taehyung creo que tengo la canción perfecta, para los dos.

—¿Cuál?

—Ve a mi departamento está noche, la escucharemos juntos. ¿Te parece? Tengo vino.

Dudo unos momentos, estaba seguro de que tenía que decir que no, era su deber, se lo había prometido. Pero estúpidamente asintió.

—Bien, nos vemos entonces.

El anuncio estaba lanzado y Namjoon tenía razón cuando dijo que todo se haría bajo los términos de Jimin, este había dicho que quería un single para su próximo album, con un vídeo oficial dónde ambos aparecerían, una sesión de fotos y una presentación en su próximo concierto, Yoongi se sentía usado. Y mientras se ponía aquel traje de seda quería matarlo.

Las fotografías estaban sabiendo bien, ambos acostados en una cama, con un aura oscura y llena de lujuria o al menos él sentía el erotismo de la escena, lo tenía cerca, muy cerca, y después de haber estado juntos de muchas formas posibles, su estómago se estrujaba.

—Bien, un descanso.

Jimin lejos de separarse le miró desde donde estaba, con su cabeza recostada en su hombro, se acercó a su oreja y susurró.

—Tenemos por lo menos diez minutos.

—No cojo cuando trabajo.

—Yo tampoco, pero hay sus excepciones, ven. Ayúdame.

Se levantó y le tendió la mano, Yoongi la tomó y le sonrió, ante todos eran buenos amigos, por algo la sesión era discreta.

—Estaremos hablando en mi camerino, hagan el llamado cuando estén listos.

El manager de Jimin le miró con cara de pocos amigos y el de Yoongi, que con el tiempo había aprendido a dar la vuelta a las cosas se encogió de hombros. Jimin pasó a un pasillo, directo a los camerino, entró en el suyo y despacho a las dos chicas que estaban ahí, entró con una mueca, dejando seguro a la puerta, se acercó lentamente a él y lo abrazo por la espalda oliendo el aroma dulce en su nuca.

—¿A qué estás jugando Jimin? No entiendo.

—Te he echado de menos, quería alargar esto lo más que pude. Besame, por favor.

Se volvió y lo tomó de las mejillas besando sus labios, moviéndose al compás, con una sincronización excitante, sus lenguas se acariciaban, robando sus suspiros, Jimin tomó con fuerza sus hombros queriendo más, pero tenían que ser discretos.

—Basta, no podemos. No aquí.

—Ven a mi casa está noche, no, mejor yo iré a la tuya, mañana tenemos una reunión para ver la canción, podemos ir juntos, por favor.

Sus ojos brillaban de deseo, Yoongi mordió su labio inferior.

—¿Por qué Jimin? Juegas con mi autocontrol.

—Simplemente no te resistas—le sonrió lujurioso—. Ambos sabemos que queremos esto, ¿Por qué tenemos que negarnos?

—Tenemos parejas.

—Ah, los padres del año, deja que ellos jueguen a la casita, así somos felices los cuatro ¿No? Por dios Yoongi, lo nuestro siempre fue así, ¿Qué más da ahora?

—Estás jodido Jimin.

—Tú también—bajó la mano por su pecho hasta su entrepierna dura—. Ambos estamos jodidos, pero funcionará. ¿Qué dices?

Su conversación fue interrumpida por el sonido de la puerta siendo tocada.

—¡Tienen que cambiarse de vestuario!

Jimin bufó, miró a Yoongi y le sonrió. —Piensalo.

Yoongi se separó, trató de arreglar su ropa, pero era imposible, su miembro se notaba, mandó todo al carajo y salió directo a su camerino, estaba jodido, muy jodido. Ese pensamiento le acompañó toda la sesión, Jimin parecía tan tranquilo y él tan frustrado, al terminó, salió del edificio y espero en su auto en el estacionamiento, con lentes de sol, fumando un cigarrillo.

Escuchó los pasos que se acercaban, Jimin le sonrió antes de subir en el lado del copiloto, maldijo y subió, manejando directo a su departamento.

No todo era lo que parecía, era extraño, una atracción que no era normal, que estaba acabando con su autocontrol, maldijo el instante en qué entraron y Jimin de abalanzó contra él, besándolo con tanta necesidad que en un momento pensó que se pondría a llorar debido a la frustración.

—Un condón...

—No, me cuido yo—dijo Jimin al tiempo que le daba la vuelta y subía a su regazo, dejándose caer contra su miembro, brincando sobre él de una forma desesperada.

Lo que Yoongi no sabía era que Jimin quería todo o nada y que esa necesidad de tenerlo junto a él iba a despertar sus peores instintos.

Acostado en su pecho suspiró. —Yoongi ¿Aún me quieres?

—Tú sabes esa respuesta.

—Quiero escucharlo.

—Te quiero Jimin, aunque tú no lo hagas.

—Yoongi, tú no sabes lo que siento, creo que te daría miedo.

—¿Miedo?

—Estoy enfermo por ti, es peligroso ¿Sabes? Pero, estamos aquí, y eso está bien.

Yoongi entrecerró los ojos, algo en la voz de Jimin hizo que su cuerpo se erizaba.

—El enfermo y el irracional, somos tal para cual.

—Pero, está vez no va a terminar mal, tendré lo que quería en ese entonces. Ambos lo haremos.

—Hablas entre líneas, no lo entiendo.

—Tengo hambre, preparemos algo.

—Bien, vamos—dijo con una sonrisa estúpida, al tiempo que besaba su cabeza.

Taehyung esperó a que Jin y Jungwon se durmieran, porque no quería ser juzgado y porque no quería que su hijo deseara ir y se desvelara. Tocó la puerta, mordiendo su labio inferior. No pasó mucho para que abrieran, JungKook estaba en pijama.

—Pensé que no vendrías, pasa.

—Estoy aquí de incógnito.

—¿Estamos en secreto? Esto es extraño, pero bueno ¿Vino?

Asintió. Miró las nuevas figuras de acción y bufó. —Siempre tan infantil.

—Quería regalarle uno a Jungwon, pero, diablos que son mi tesoro.

—Él tiene demasiadas, cada quien con sus juguetes.

JungKook se acercó a darle la copa de vino. —No sé nada de él.

—No es un niño complicado. Es muy dulce y aún es un niño pequeño, le gustan las cosas que a los niños les gusta, como jugar, comer, desobedecer órdenes. Lo simple.

—Sientate. ¿No te parece extraño? Actuar de forma tan política.

—Si, es raro, no puedo evitar de estar a la defensiva.

—Me gustó pasar el día con ustedes el otro día, me sentí como un padre, Jungwon es dulce y tierno, y tú...

—No, yo no entro en esa ecuación.

—Entras, eres su papá y mi esposo.

—Hace años que no hablamos de eso, pero, ya que sacas el tema, quería preguntar sobre el divorcio.

JungKook se tenso, bebió de su copa antes de mirarlo de nuevo.

—¿De verdad quieres eso?

—Han pasado muchos años, siempre quise mantenerlo así, como si me aferrara a lo último que quedaba de nosotros, pero, ahora, ya no le veo sentido.

—Yo no quiero darte el divorcio, soy un estúpido egoísta, pero, si lo hago te voy a perder.

—Igual ya me perdiste. No hay nada entre los dos, no queda nada JungKook.

—Lo sé—desvió la mirada—. Hablaremos con Namjoon, él sabrá cómo hacer las cosas en silencio.

—Gracias.

—Aun te amo ¿Sabes? Aún no hago, lo que dije en el hospital, fue una estupidez, tenías razón las cosas habrían sido muy diferente de ser valiente y congruente. Pero, te quiero mucho, eres y siempre serás especial para mí. Lo mejor que me pudo pasar, no lo veía así antes, pero ahora que ni te tengo sé que fuiste lo mejor.

—Tambien te ame mucho, ahora te tengo aprecio, y, sé que estaremos bien, son enseñanzas de la vida, mientras tengamos a Jungwon y trabajemos juntos, deberemos comportarnos.

JungKook le miró con una sonrisa. —Siempre fuiste el más dulce de los dos, el más amable y sensato, podemos hacerlo bien ¿No? Cuidar de Jungwon y ser amigos.

—Ser amigos está bien, pero es la última oportunidad que te doy, no por mí, sino por mi hijo.

JungKook asintió. —Lo haremos funcionar.

—Dijiste que me enseñarías la canción. Vamos a escucharla.

—Claro—aclaró su garganta antes de poner play con el control.

La música se escuchó en todo el departamento, conocía bien esa canción, no era un casualidad y lo sabía, la letra era tan... significativa para ellos, que bebió el vino para evitar mirarlo o que sus ojos se llenaran de lágrimas. Ya no podía llorar por ello. La decisión estaba tomada, ellos se iban a separar y tratarían de ser amigos.

Lo sintió acercarse, JungKook tomó la copa vacía que estaba en sus manos y se la quito, poniéndola en el mesa, junto su frente con su sien y suspiró, llevando un escalofrío a su cuerpo debido al aliento en su cuello.

—¿Fue divertido?

—Lo fue—asintió cerrando los ojos.

—Siempre lo recuerdo, siempre te recuerdo, en mis mejores años, cuando éramos jóvenes y felices. Lamento haber roto mis promesas.

—También lamento que lo hayas hecho, tengo que irme. Nos vemos mañana.

—Descansa—dijo separándose.

Taehyung salió casi corriendo de ahí, porque no podía caer, no así..

Hace mucho que no aparecía por aquí, espero que les haya gustado. Lamento la tardanza patos 🖤

🖤🖤🖤