Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

cuatro

Besarse no era la cosa mas superficial. Son labios que se tocan, lenguas que se saborean y saliva que se mezcla, Jihoon nunca le tomo importancia. Así que era casi inexperto. Cuando estuvo con Seungcheol muy rara vez se besaron, era extraño hacerlo por eso Jihoon nunca aprendió a besar bien.

Pero Jun parecía devorarlo de uno solo, lo tomaba tan descaradamente que pensó que moriría asfixiado.

Jun por el contrario ha besado a muchas chicas y pocos hombres, cuando toco los labios de Jihoon supo que era casi como su primera vez. Sonrió, seria la primera vez en ese hombre, sintió mucha alegría.

Jihoon no sabe como llegaron a eso, solo termino la lata y Jun lo jalo a las afueras del bar para comenzar a besarlo y dejarlo sin aire.

Mentiría si dijera que lo estaba asustando.

— Listo.

Jun por fin lo soltó. Por su parte prefirió dejarse caer, ese beso fue tan agresivo que parecía haberle absorbido todas sus fuerzas.

— Tu maldito.

— Oh vamos, admite que te gusto. —no, no iba a admitirlo.

Trago grueso intentando calmar su respiración.

— Bien, gracias por la coca cola, de haber sabido que me lo ibas a cobrar con un beso. Lo hubiera pensado mejor.

Y era cierto, pensó que era una broma en cuanto se lo dijo, pero conforme termino de tomar la lata fue arrastrado y besado al instante llenándose de la saliva de Jun. No le dio asco, solo estaba sorprendido.

— Puedo darte mas latas a cambio de mas besos. —dijo sonriéndole de oreja a oreja.

Y enserio lo detestaría.

— Esta bien.

De todas maneras, aun faltaba bastante para que pasara a recoger a Mingyu.

Jun lo miro asombrado, lo mando a sentarse al mismo lugar, poco después apareció con más latas. Casi una bolsa llena.

Y cada lata que se iba vaciando Jun se abalanzaba hacia él para besarlo sin piedad. Era tan estresante. O tal vez sorprendente. Ya ni le importaba ser visto dentro del bar, porque algunos lo hacían también.

La última coca cola sobraba, así que Jihoon se dedico a tomarla muy lento. Demasiado lento para que Jun se sintiera desesperado y pudiera verlo.

— ¿Ya te acabaste la lata? —pregunto impaciente.

— No. Aun no llevo ni a la mitad.

Jun suspiro.

— Conseguiré mas latas, así que acábate esa rápido.

¿Era una orden? Jihoon lo ignoro. Se dispuso a mirar cualquier otro lado que no fueran los ojos de Jun, o en especial a Jun. Suspiro cuando fue por el segundo sorbo. Sin duda no se sentían como los besos que recibió de Seungcheol, los de Jun eran un poco mas agresivos y casi sexuales. Nada inusual.

— ¿Dónde consigues la coca cola?

— Es un secreto.

Lo miro esperando a que respondiera.

— Si te lo cuento entonces iras a comprarlas por ti mismo y no habrá beso. —vio como formo un puchero. Parecía un niño mimado.

No pregunto más después de eso. Prefirió guardarse la última coca cola sobre la mesa, esperando a que el chico se volviera loco.

— ¿Tienes pareja Jihoon?

— No

— Que suerte, de haber dicho que si entonces me sentiría muy mal por haber besado al novio.

Jihoon solo lo miro, sin duda Jun era atractivo, tanto que acaparaba su mirada, pero no le interesaba. Solo lo miro como cualquier persona, justo como miro a Seungcheol.

— ¿Y tú? ¿tienes pareja? —inquirió, no le importaba, pero no era menos si preguntaba.

— Si, ¿Qué harás al respecto?

No haría nada, porque sabia bien que estaba mintiendo ¿Quién besaba a un desconocido cuando tenia pareja? O tal vez algunos, pero Jihoon al menos no lo haría, tal vez Jun si porque era coqueto y parecía que le gustaba tomar y soltar cualquier persona que le pasara enfrente o llamara su atención, como si buscara algo extraordinario o simplemente distraerse, tal como Jihoon.

Jihoon no era el mejor para tener una vida amorosa, tal vez estable sí, pero aburrida porque no haría nada para hacerlo o hacerla feliz, solo existía. Miro a Jun y era casi igual, o así lo pensó.

El chico lo seguía viendo, casi traspasando su piel, era la primera vez que conocía a un chico tan raro.

Busco a Mingyu y lo encontró en la mesa de siempre, seguía bebiendo y bebiendo distintos tipos de vino que imagino que haría un revoltijo dentro de su estómago, solo esperaba que no vomitara en medio camino porque iba a ser un desastre. Suspiro cuando volvió su vista a Jun.

— Ya puedes besarme si eso te inquieta.

Dejo la coca cola a un lado y este se abalanzo sobre sí.

No, no se había terminado su coca cola, solo quería volver a sentir los labios de Jun.



________________________________________

Y aquí es donde termina mi inspiración.

*Desaparece* gracias por leer~

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro