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˗ˏˋ 💠 . 𖦹 ˎˊ˗ ➜ Law está obsesionada con la idea de procrear. Cuando lo complaces, actúa como un perro en celo.
ᯤ EMPAREJAMIENTO: trafalgar law X lectora.
ᯤ ADVERTENCIAS: lenguaje explícito.. obscenidad pura.. términos de género ("mami").. eyaculación interna..
ᯤ CRÉDITOS EN TUMBLR A: @shy-writer-999
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Law fantaseaba con tener hijos contigo. Estaba especialmente obsesionado con el acto en sí, es decir, correrse dentro de ti y dejarte embarazada. Realísticamente, no creía que una familia fuera factible en un futuro cercano, pero cuando tocó el tema contigo, tú estabas entusiasmada y dispuesta a todo, especialmente en la cama. Se volvía loco por ello.
Law era insaciable. Te apartaba de la tripulación y te follaba donde pudiera escaparse con ello, ya fuera en su camarote, en el armario de suministros, en la lavandería, en la cocina, literalmente en cualquier lugar. Susurraba o gruñía las palabras más sucias que se le ocurrían (que, en opinión de algunos, también eran muy dulces) y se corría dentro de ti cada vez. También se aseguraba de que te corrieras en su polla cada vez, sin fallar.
Law no se preocupaba por dejarte realmente embarazada, porque cada vez que se corría dentro de ti, o bien usaba su conocimiento médico y lo sincronizaba según tu ciclo, o usaba sus poderes de la fruta del diablo para simplemente eliminar su semen. Era un escenario de ganar-ganar: Law podía vivir sus fantasías sin frenos, y tú te corrías cada vez.
Pero algún día, no iba a hacer ninguna de esas cosas. No iba a planificar según tu ciclo ni sacar su semen de ti. Simplemente te iba a dejar embarazada. Cada vez que te follaba, se decía a sí mismo que era hoy. Hoy sería el día en que finalmente te dejaría llena de sus hijos.
Una tarde al azar te metió en un armario de suministros, te arrancó la ropa y te acarició por detrás hasta que te corriste. Entonces, cuando estabas empapada y temblando, te apoyó contra la pared y deslizó su polla dentro de ti. Su pecho presionaba contra tu espalda mientras una de sus manos agarraba tu cadera. La otra mano llegaba por delante, frotando tu clítoris en círculos ásperos y eufóricos.
Antes incluso de tener sexo, Law empezó a ponerse cachondo con la idea de cómo te verías embarazada, paseando así para que todos lo vieran y supieran que era él quien lo había hecho.
A medida que deslizaba su polla en tu coño desordenado, murmuraba en tu oído.⸺ Déjame hacer todo el trabajo, preciosa.
Las caderas de Law chocaban contra las tuyas y cada vez que lo hacían, emitían un sonido húmedo y sucio. Trataste de morderte la lengua y contener los gemidos, pero estabas luchando. Sus labios estaban a centímetros de tu oído, su voz era ronca y áspera. El deseo goteaba de sus labios a un ritmo comparable a los jugos que se escapaban de ti.
⸺ ¿No quieres formar una familia, cariño? ⸺Law gruñó, enviando escalofríos por tu cuello. Su vello facial áspero te hacía cosquillas en la piel.⸺ Te voy a llenar de semen hasta que te quedes embarazada de mí.
Sus caderas aumentaron su ritmo con cada palabra sucia que murmuraba en tu oído.
⸺ ¿Quieres aceptarlo todo por mí? Te verías tan jodidamente sexy embarazada, nena, ¿no me dejarás correrme dentro y hacerte mamá?
La respuesta era obviamente (y siempre) sí. Cuando gimiste y gemiste, solo lo incitaste más.
⸺ Vas a ser una mamá tan buena para mí, jodeeer.
La polla de Law se frotaba contra ti, raspando tus paredes y golpeando tu punto G. Cada embestida enviaba éxtasis a tu núcleo, haciéndote retorcerte y gemir su nombre. Tus piernas empezaban a ceder, tu cara estaba presionada contra la pared, y apenas tenías fuerzas para mantenerte de pie.
⸺ ¡Law, joder, córrete en mí, lléname, quiero tener a tus hijos! ⸺Gemiste en la pared mientras sus dedos en tu clítoris presionaban hacia abajo.
Tus palabras, por simples que fueran, lo encendieron. Cuando participabas en la fantasía de esa manera, lo volvía loco.
Empezó a besar y mordisquear tu hombro expuesto, mordiéndolo como si estuviera apareándose contigo, como si fueras toda suya. Cuando mordió lo suficientemente fuerte, gimiste. Le encantaba ese sonido.
⸺ Voy a follarte hasta el fondo. ⸺Law gimió y sus caderas temblaron.⸺ ¿Vas a tener mis bebés? ¿Ser una mamá para mí?
Intentaste asentir mientras Law emitía ruidos guturales en tu oído.⸺ Voy a preñar este coño bonito. Embarazada de todos mis- joder- mis hijos, joder nena- yo- jodeeeer.
Law apenas podía hablar. Simplemente te sentías demasiado bien a su alrededor, como si lo estuvieras engullendo, apretándolo, como si tu cuerpo le estuviera suplicando que se corriera dentro de ti. Gruñó, bajo y primal, follándote a un ritmo febril.
Estaba al límite.
⸺ ¡Joder, me corro, me corro!
Con esas palabras entrecortadas, las caderas de Law espasmaban frenéticamente y eyaculaba profundamente en tu interior, tan cerca de tu cuello uterino como le era posible. Podías sentir los chorros de semen caliente y pegajoso saliendo de él, llenándote.
Tu orgasmo llegó segundos después del suyo, dichoso y alucinante. Mientras te retorcías de placer, tus paredes se contraían alrededor de su polla y él volvió a convulsionar. Imaginó tus paredes exprimiéndolo hasta dejarlo seco y casi se desmayó de placer.
Cuando Law terminó de correrse dentro de ti, separó su pecho empapado de sudor de tu espalda y te dio la vuelta. Te besó apasionadamente durante un minuto antes de darse cuenta de lo débil que estabas después de correrte dos veces.
Law usó sus poderes de la fruta del diablo para cambiarte la ropa desde donde estaban arrugadas en un montón en el suelo. Podría haber usado sus poderes para meterte en la cama si hubiera querido, pero prefirió llevarte allí en brazos. Si alguien de la tripulación lo veía, sabrían lo que había pasado (y a él no le importaba).
Cuando te follaba con avidez, Law era muy consciente de los efectos que tenía ese sexo duro en tu cuerpo. Siempre era consciente de eso, pero en los momentos posteriores al sexo se aseguraba de tratarte como si fueras delicada y preciosa para él. Mientras te llevaba a la cama, te dio unos cuantos besos más. Siempre te daba tantos como quisieras.
Te acurrucaste en su pecho y al siguiente momento, él te estaba abrazando en la cama. Law sabía que te encantaba abrazar después del sexo, así que lo hizo con la sonrisa más dulce en su rostro. Se sentía afortunado de que lo dejaras follarte de la manera depravada y fantástica que se le ocurría. Qué privilegio.
Law lo pensó por un rato y decidió que tal vez hoy sería en realidad, si estabas de acuerdo. Si lo dejabas, en realidad te dejaría embarazada esta vez. No usaría los poderes de la fruta del diablo para sacar su semen de ti, si dabas el visto bueno. Y si decías que no, si le pedías que sacara su semilla de ti, estaría encantado de intentarlo de nuevo. Después de todo, si hoy no era el día en que te dejaba embarazada para siempre, tal vez sería mañana. Te daría tantos "mañanas" como quisieras.
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