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Pasaron unos días y las cosas estaban ya mejor, para mi suerte. Me sentía mas tranquila conmigo misma y estaba dispuesta a enfocarme de nuevo en las cosas que me importan. Como lo es la clase de pociones. Donde en estos momentos me encontraba. Veíamos en clase sobre el elixir para inducir euforia. Bastante sencillo, si me lo preguntan.
- ¿alguien sabe para qué sirve? - pregunta el profesor Slughorn y levanté la mano de lo más emocionada de poder participar. - ¿Alguien mas que no sea la señorita Evans?
Literalmente nadie levanta la mano hasta que es Severus quién lo hace y lo escogen a el.
- induce euforia repentina en el bebedor, causando una tendencia exagerada a cantar y picor en la nariz.
- excelente. Diez puntos para Slytherin. - odio saber que su casa tiene mas puntos, mucho mas ahora que sé que es por una pregunta que yo misma pude contestar. Pero a la vez, me hacía feliz verlo enfocado en la escuela... es mejor eso a que este pasando tiempo con sus amigos tan detestables. Tengo que admitir que en parte... lo extraño un poco. No deja de ser esa persona que estuvo para mí tanto tiempo en un pasado. Desearía que todo fuera diferente.
- obviamente el rarito iba a saber como contestarlo. - escuché que dice Sirius en la mesa de atrás y se reía con James, por lo cual voltee a verlos molesta.
- usted joven Black... ¿sabe cómo contrarrestar los efectos anteriormente mencionados? - evidentemente estos dos no sabían la respuesta. Pero Remus estaba sentado en la mesa de a un lado con Peter y no hay manera que le pueda susurrar la respuesta. Fue por eso que empecé a anotarla en la orilla de mi cuaderno y corté el pedazo de papel para entregárselo. Lo cual hice, por debajo de la mesa se lo mostré. Lo toma, y de nuevo presto atención a clases.
- un ramito de menta añadido a la poción durante la preparación ayuda a contrarrestarlos. - volteé a verlo y este estaba tan feliz con su respuesta que pasa sus manos a su cabeza y descansa.
- ¡perfecto! diez puntos a gryffindor. - James lo felicita y ambos voltean a verme con una sonrisa. Les sonrío a ambos y me volteo.
...
En cuanto salgo de la clase para quedar como siempre en la biblioteca con Sirius y darle sus clases extras, Severus me toma del brazo y me coloca detrás de una columna para que nadie nos viera hablar.
- ¿qué rayos haces? - le pregunté mientras me soltaba fuerte de su agarre. - ¿qué te pasa?
- ¿por qué ayudaste a Black?
- ¿qué?
- tu nunca dejas que nadie mas se quede con tu crédito... mucho menos en esta clase. ¿por qué ayudarlo? ¿solo por qué es amigo de James? creí que los odiabas. Los odiábamos juntos.
- Severus, por si no es obvio... muchas cosas han cambiado. - dije refiriéndome a nosotros y este se da cuenta por lo cual, da dos pasos atrás. - no los odio, son... son mis amigos.
- oh por las barbas de Merlin... estas enamorada.
- por supuesto que no, yo jamás pero jamás me fijaría en Sirius. En mi vida y...
- me refería a James. - en cuanto el dice eso, me quedo en silencio. Tan solo lo miro y hago una mueca. - si te gusta, no puede ser.
- ¿qué tiene de malo? - no me contesta. - ¿Severus?
- ¿te esta molestando? - Sirius llega y se coloca justo enfrente mio para verlo de frente a el. - ¿Qué es lo que quieres Quejicus? ¿no estás harto ya de molestar tan solo con tu presencia?
- lindos amigos. - me dice Severus, y pude ver sus ojos llorosos, por lo cual me sentí muy pero muy mal y quería irme con el pero Sirius me detiene tomando de mi mano.
- woah ¿cómo por qué quisieras ir con el? - lo miré molesta. - literalmente te acabo de defender y a mi es a quien ves con rabia, no a él.
- el no me hizo nada malo.
- ¡yo no te hice nada malo! - le puse los ojos en blanco y caminé hacia la biblioteca, donde este me empieza a seguir porque como dije, íbamos juntos, pero estaba algo molesta y ni quería voltear a verlo. - el si, por si lo olvidabas... ese idiota te dijo "sangre sucia".
- no tenías qué repetirlo.
- oírlo de nuevo se siente feo ¿verdad? entonces estoy en todo mi derecho de molestarme cuando lo veo y querer defenderte. - alcé las cejas sorprendida de lo que acaba de escuchar y voltee a verlo. - ¿te sorprende?
- obviamente.
- no debería ser así. - el ríe y sigue caminando hasta que toma asiento en nuestra mesa habitual y saca sus libros. - somos amigos ¿no?
- supongo... - dije en voz baja y me quedé aun pensando en ello. - en ese caso... gracias.
- no es nada, literal. Siempre es un placer alejar a Quejicus.
- no lo llames así.
- ¿cómo lo puedes seguir defendiendo? honestamente no lo entiendo. - abre su libreta para empezar a checar de la tarea y se la retiro. - ¿ahora qué?
- ¿quieres ir a otro lugar?
- James se va a poner muy celoso, pero acepto. - lo miré con asco y tomé de su mano para que me siguiera.
Normalmente yo suelo hacer mis tareas en esa parte del castillo que el ya también conoce, pero lo que no muchos saben es que hay cubículos para estudiar aquí en la biblioteca. Y fui al que habitualmente voy.
- lo mejor de todo es que nunca cambia. - dije con emoción al ver que todo estaba como siempre. - con mi librero y mi toca discos...
- wow ¿dónde estamos?
- ¿nunca has venido a un cubículo para estudiar? - el niega con la cabeza. - me lo imaginé.
- no vine a que te burlaras de mi, Evans. ¿por qué esto parece mas un estudio que algo dentro del castillo?
- porque se rentan, al inicio del semestre y es tu lugar de estudio... ¿Remus no tiene uno?
- no que yo sepa. - levanta ambos hombros y camina para ir a ver todos mis libros que se encontraban en el librero. - vaya que pasas mucho tiempo aquí.
- lo llevo rentando desde el segundo año, obviamente por eso hay muchos libros. - obviamente yo justificando el que paso mas tiempo leyendo que haciendo algo con mi vida. - pero esta perfecto para estudiar sin distracciones ¿no crees?
- me agrada. - dice tomando asiento en la silla justo enfrente de la mesa. - ahora entiendo porque estas todo el tiempo en la biblioteca, te gusta estar mas aquí que en tu habitación.
- quizás.
- ¿y soy la primera persona que conoce este lugar? - me pregunta sin dejar de sonreír. - debo ser muy importante entonces.
- no, solo resultas ser el chico al cual tengo que darle clases. - dije dejando caer el libro sobre la mesa para empezar de una vez por todas las tareas. - ahora si, a terminar esto.
- regresando al tema de Severus... - puse los ojos en blanco y luego lo miré para saber que tiene que decirme. - al menos esta vez no lo nombre Quejicus.
- ¿qué con el?
- ¿lo extrañas? - creo que nunca antes nadie me había hecho esa pregunta. Ni Marlene, mi Mary ni Remus. Creo que esta sería la primera vez que hablo del tema. Terminé asintiendo con la cabeza. - entiendo.
- ¿no piensas burlarte de mi?
- noup.
- oh... okay... - no esperaba eso pero también lo apreciaba. - fue mi mejor amigo por mucho tiempo ¿si? no es fácil alejarte al cien por ciento de una persona a la cual quisiste mucho.
- entiendo... se puede decir que me pasa lo mismo. - lo miré con confusión. - con mi hermano.
- Regulus Black. - dije y este me mira con asombro al saber que lo conozco. - es también un gran alumno de pociones... lo conozco gracias a las reuniones con el profesor Slughorn. Pero no tenía idea de que se llevaran mal.
- ¿alguna vez nos has visto platicar de la vida por los pasillos? - se ríe y negué con la cabeza. - exacto.
- pero eso es diferente... hablamos de hermanos. Hermanos de sangre.
- y como la sangre es muy importante en mi familia, con mas razón es difícil hablar con él. Descuida, no esperaría que lo entiendas.
- de hecho, si. - me crucé de brazos. - paso por algo muy similar con Petunia.
- ¿tus padres acaso llamaron a todos sus hijos como flores? ¿tienes otra hermana llamada Rosa que no conozca?
- basta. - me reí y el por igual. - digamos que no soy su persona favorita debido a que soy la bruja de la familia.
- olvidaba que eres hija de padres muggles.
- ¿algún problema con ello?
- ninguno. - me dice mientras recarga sus brazos en la mesa y se acerca para verme más de cerca. - ninguno Lily ¿okay? no vuelvas a pensar en ello. No todos somos como Severus. - quería sonreír, porque fue muy gentil de su parte el que dijera eso. - si te hace sentir mejor, mi familia odia que sea un gryffindor y me junte con ustedes.
- pues, creo que es bueno saber que eres tu propia persona y no intentas seguir a fuerzas las creencias de tu familia.
- es el plan Lily, ese siempre es el plan. - dice regresando a su posición habitual y abre de su libro. - ahora si... la aburrida tarea.
- no tardaremos mucho, lo prometo.
- no importa realmente, no es como que tenga algo que hacer ahora.
...
Regresamos a la sala común de gryffindor y lo acompañé con sus amigos porque yo quería aprovechar el que Remus estaba ahí para preguntarle una ultima duda con la poción pero James es de hecho, el primero en acercarse a saludarme.
- hola Evans. - me abraza, lo cual es extraño ya que hace tiempo que no se muestra cariñoso debido a su nueva relación. - ¿cómo les fue estudiando?
- bien. - dije.
- aburrido. - dice Sirius al mismo tiempo que yo y lo miré molesta. - pero hey, al menos Remus ya no estará haciendo mi tarea esta vez.
- te lo agradezco mucho Lily. - me dice Remus y Peter se ríe. - eres mi salvadora.
- bien que me extrañas, tonto. - Sirius va a donde este se encuentra y empiezan a jugar los tres. Dejándonos a James y a mi solos.
- ¿cómo te fue a ti? - le pregunté, captando de nuevo su atención. - ¿entrenaste?
- si, como todas las tardes.- dice mientras se retira la corbata. - estoy demasiado cansado, ni siquiera quiero ir a cenar.
- igual tus amigos pueden traerte algo. - dije levantando ambos hombros.
- oh, si tengo que ir... quedé de comer con Camille. - hice una mueca una vez que la mencionó. - es... es mi amiga.
- ¿tu novia?
- algo así. - levanta ambos hombros.
- igual que Sirius ¿eh? - me acordé de su situación con Marlene. - bueno, entonces... descansa un poco antes de irte a cenar.
- tan linda como siempre, Evans. - se acerca para darme un beso en la frente y me despeina el cabello para después voltearse e irse con sus amigos.
Exactamente... no se como me sentí con esa situación. Se que si me gustó ya que me voltee y todas las mariposas en mi estómago se mostraron, pero no podía demostrarle eso. No ahora que tiene novia y no ahora que el esta tan decidido a dejar de pensar en mi y no puedo estar aquí buscándolo. ¿cierto?
- Lily ¿dónde has estado toda la tarde? - Mary me detiene tomando de mis hombros. - te extrañé.
- estaba en la biblioteca.
- fui y no te encontré. - pone sus manos en la cintura. - pareciera que te escondes de nosotras.
- no, lo que pasa es que... - estaba a nada de contarle de los cubículos en la biblioteca pero, amo que sea un gran secreto, que uno o dos personas sabemos.
Bueno, y ahora...
Sirius Black.
NOTA: perdón si va algo lento pero apenas vamos en el cap 4 y quiero que si se vaya formando mas su amistad antes de algo de drama.
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