24
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- Sirius. Sirius fue con quién pasé la noche. - es lo que quise decirle a Marlene.
- ¿qué? - era como esperaba que fuese su reacción.
- y creo que lo amo. - es lo que quizás si quería decirle a Marlene pero principalmente a mi misma para poder aceptarlo y también decírselo a el.
Pero nada de esas cosas dije, solo las pensé y me odio por ello. Por mentirle a mi mejor y por haber herido a Sirius. Pero es que jamás ha sido fácil para mí el decirme como me siento.
- ¿podemos ya no estar peleadas? - me senté en la orilla de la cama de Marlene. - lamento mucho no poder decírtelo pero es mas que nada porque esa persona aun no esta lista para decirlo.
- ¿a quién?
- a los demás. - y a decir verdad, yo tampoco. Y me gusta mucho que esto que tenemos sea nuestro y solamente nuestro. - mira, incluso...
- ya se que es lo que pasa. - la miré con asombro, no estaba segura de que era lo que me iba a decir. - Snape te mataría si se entera ¿cierto?
- si. - eso también es verdad.
- y por eso nadie puede saberlo... - Marlene se queda analizando las cosas. - okay, es una persona problemática. Seguramente de Slytherin por algo no estabas ni siquiera en la torre.
- ¿me odias por no decírtelo?
- no, jamás podría odiarte. - hace una mueca. - no quita el que me duela pero... lo entiendo. Y respeto tu privacidad y tu relación.
- gracias. - sonreí. - en serio muchas gracias, Marlene. Honestamente, me calma mucho que seas tu la única persona que sepa que estoy viendo a alguien. - tomé de su mano. - eres mi mejor amiga.
- lo sé. - se ríe. - ¿al menos es lindo?
- bastante. - sonreí. - fue mi primer beso y... no, antes de que lo vuelvas a preguntar, no me he acostado con el.
- ¡qué haces perdiendo el tiempo! - me agita los brazos. - o... ¿te estás esperando para James? me imagino que hasta que terminé con Camille pero...
- ¡no! no, no, no. - negué varias veces con la cabeza. - no, por James yo no siento nada.
- no te creo.
- puede que si pero ya no de esa manera. Te lo juro que yo... la verdad es que lo veo como un amigo. - sonreí. - es un gran avance.
- si, al menos ya no lo odias. - se ríe. - entonces quieres mucho a este chico.
- con todo mi corazón. - ella me sonríe con ternura y me alegra de que este feliz por mi y por lo nuestro. - algún día te contaré.
- espero ese día con ansias. - se recuesta de nuevo y pasa sus manos por detrás de su cabeza. - hasta entonces, voy a quedarme con la duda y odio eso.
- si te hace sentir mejor, tener que estar guardando el secreto tanto tiempo, es cansado. - me recosté yo por igual.
Y estaba lista para dormirme, para seguir con mi noche y descansar para el día de mañana pero no podía. Estaba pensando todo el tiempo en Sirius y en lo molesto que estaba conmigo. Me sentí triste en cuestión de segundos. Tan triste y tan mal que hasta... hasta empecé a llorar. Wow, no podía creerlo. Estaba llorando... por un chico.
¿Por qué no lo hice una vez que salí de la biblioteca? ¿por qué después de hablar con Marlene? ¿Por qué me duele tanto esto? Quería salir de aquí, correr y buscarlo y decirle lo mucho que lo amo pero no se como hacerlo.
Estoy mal y eso lo lastimó y no se que hacer ahora.
...
Al día siguiente, me desperté con muchas ganas de arreglar mi error. De estar mas que dispuesta de sacarle una sonrisa a Sirius y hacerlo sentir bien. Fue por eso que me metí a bañar, me cambié y me fui directo al gran comedor para desayunar a su lado. No creo que Remus, James y Peter me digan algo. No tienen ni la mas mínima idea de porque los busco. Seguramente pensaran que es porque Remus es mi mejor amigo. Si, claro que haré aquello.
Lo que pasa, es que recién llego y Sirius no esta. Busqué por todos lados pero nada, así que lo hice, me fui a sentar enfrente de los chicos.
- hola. - me saluda James con alta emoción. - ¿y esta sorpresa?
- um... ¿dónde esta Sirius? - pregunté, pero antes de James pudiera contestarme, Camille llega y se sienta a su lado, donde este la recibe con un tierno beso y le abraza.
- se siente mal. - me contesta Peter, ya que James estaba algo ocupado. - creo que fue a la enfermería.
- ¿en serio? ¿qué le pasó? - Remus me patea el pie por abajo y voltee a verlo de lo mas confundida.
- ¿no crees que es raro que te muestres tan interesada en Sirius ahora? - me susurra y si, supongo que estoy siendo algo obvia.
- ¿y por qué no están con el?
- tengo hambre. - Remus me dice mordiendo de su emparedado.
- no pienso empezar el día sin desayuno. Mucho menos cuando hay partido de Gryffindor contra Hufflepuff, lo espero con ansias. - dice Peter.
- aparte, creo que Felicia fue con el. - James me contesta por fin y voltee a verlo. - la chica linda que siempre lo esta buscando últimamente.
- ¿qué chica linda no busca a Sirius? - dice Peter riendo. - desearía que una de esas mil mujeres se fijara en mi.
- no tienes un cabello largo y sedoso. - dice James jugando y burlándose de Sirius, moviendo su cabeza de lado a lado como si moviera su cabello. - ni unos ojos así de hermosos y coquetos.
- mis ojos son hermosos. - dice Peter muy pero muy serio. - ¿no?
- claro que lo son, Peter.- Remus le dice y suspira hondo para voltear a verme. - yo no iré al juego, estaba pensando en acompañarlo.
- ¿por? ¿no vas con Mary? - Camille le pregunta. - estoy segura de que le emocionaría verte ahí con ella.
- si pero, pobre Sirius. Odiaría que este solo.
- te acompaño. - le dije a Remus y todos ellos voltean a verme de inmediato. - quiero decir, no me encanta el quidditch.
- augh Lily. - dice James cerrando los ojos y apretándolos. - no sabes nada de la vida.
- y me importa mucho la salud humana. - que pésima excusa, pero fue en la única que pude pensar. - podemos ir un rato.
...
Dicho y hecho, llegó el momento del partido y llegué a la enfermería con varias cosas para que el se sintiera mejor. Solo que si, el estaba con Felicia. Sirius estaba en la camilla acostado y acobijado mientras ella sentada en la orilla, riendo y pasando un buen rato con el. Celos, unos terribles celos sentí en ese momento. No quería que le sonriera a ninguna otra persona. Mucho menos a ella. Es terrible, yo estaba llorando toda la noche porque mis sentimientos y emociones me mataban cuando el esta de lo mas a gusto. Con esa chica que evidentemente esta enamorada de el y no solo eso, sino que es perfecta y mas para el porque es Slytherin y sangre pura y sus padres la aman y le daría la vida perfecta que yo no.
Solo duele, duele demasiado nunca poder ser suficiente.
- hola. - dije llegando a su lado y cuando me muestro, su sonrisa se borra. No lo puedo culpar, me debe odiar en estos momentos por lo de ayer. Pero pensaba enmendar mi error. - ¿cómo te sientes?
- creo que esta mal del estomago, algo así entendí. - levanta ambos hombros ella. - pero ya le dieron medicamento. Solamente esta algo cansado, es todo.
- que linda que viniste a verlo. - le dije abrazando de mi canasta.
- bueno, desde ayer que nos quedamos platicando, me dijo que se sentía mal y ahora me entero que esta aquí. - en ese momento voltee a ver a Sirius pero el se dignó a no verme para nada.
- ya llegué. - Remus se muestra. - descuida Felicia, me toca a mi checarlo. Tu ve a ver el partido.
- admito que me emociona mucho ver quien gana para cuando nosotros juguemos. - se levanta de la camilla y voltea a verme. - linda canasta. - fingí una sonrisa. - adiós Black, me avisas si te mejoras.
- adiós. - el le dice y cuando ella se retira, nos quedamos en el silencio mas incomodo de todos. Nadie dijo nada, yo porque seguía molesta por cierta situación y supongo que Sirius por lo de ayer.
- bueno... ya que solo estamos nosotros tres. - Remus me hace a un lado y se sienta en la orilla de la camilla. - ¿me ocupas para algo?
- no realmente.
- perfecto, entonces voy a estar allá a lo lejos leyendo de mi libro y si me necesitan, me vienen a hablar. - se levanta rápido y se va justamente a la cama de hasta el final para darnos nuestro espacio.
- te traje algunas cosas. - me senté ahora yo, donde mismo y le mostré. Al fin volteaba. - tenemos... libros.
- ¿libros?
- si, se que no eres fanático de la lectura pero... es lo que tenía. - levanté ambos hombros. - bueno, sino... musica. Mira, audífonos, los tomé prestados de Marlene ya que yo no tengo pero puedes usarlos y... - empecé a buscar mas cosas. - te hice un té.
- muchas gracias. - lo toma entre sus manos y empieza a tomar.- no te hubieras molestado.
- también te traje una cobija, por si te daba frío. - le tapé con ella. - me imaginé que sería mas un resfriado pero debe ser por algo que comiste y...
- ¿qué les dijiste a tus amigas que harías en la tarde como para que pudieras venir a verme?
- bueno, todos están en el partido. - hace una mueca. - y saben que no soy fanática del deporte.
- igual si quieres irte a leer... eres libre.
- no, no me voy a ir. - tomé de su mano. - quiero estar contigo.
- ¿en serio? ¿eso quieres?
- vamos Sirius, no puedes seguir molesto conmigo. Pareciera que me odias en estos momentos. Estabas mas feliz cuando estabas con ella que ahora aquí conmigo.
- bueno, ella me trata bien. - se cruza de brazos. - me busca, me escoge, me hace sentir bien.
- ¿dices que yo no?
- Lily, me pongo a pensar mucho en las cosas y en serio, yo soy el que ha hecho todo y no me molesta, jamás ha sido así pero... yo fui a buscarte en vacaciones, yo soy quien te dijo que quería intentarlo y quien literalmente te ama. Soy el que ama en la relación.
- si, pero... - me interrumpe.
- no puedo sentir tanto por los dos. Es como si yo diera el cien por ciento cuando es cincuenta y cincuenta.
- es muy injusto lo que me estás diciendo, pareciera que soy una mierda de persona.
- no dije eso.
- bueno, no de persona pero si pareja. - me puse de pie y dejé la canasta ahí en su camilla. - Sirius si tanto crees que eres así de miserable a mi lado, lo lamento. Lamento no ser perfecta y hacerte sentir mal pero juro que es lo que menos quiero.
- descuida, olvidemos eso.
- no, ya no puedo. Ahora me siento terrible.
- no tienes que hacer esto sobre ti, en teoría yo era el que estaba triste. - reí cínicamente.
- perdona, ahora también te quité tu momento. - negué varias veces con la cabeza. - okay, deja busco a Felicia... no debe estar lejos de aquí. Seguramente ella regresa de inmediato a buscarte.
- como gustes. - abrí la boca sorprendida y le lancé encima sus libretas. - ¿qué?
- te hice la tarea. - dije con los ojos llorosos. - te hice la tarea de ayer y la de hoy. No tienes ya porque estresarte.
- Lils... - se que solo me habló así de nuevo porque se sintió mal de verme llorar.
- iré a buscarla, no te preocupes. - y me fui de ahí. Realmente no tenía nada mas que decirle.
SIRIUS POV
Definitivamente no quise que se pusiera así de mal por mi actitud, nunca fue mi intención. Pero me sentía mal, en parte por mi repentina enfermedad y también porque anoche fue un desastre. Mientras a mi me nació el decirle que la amo, ella no solo no me lo dijo. Porque si no se siente lista para decirlo, yo lo entiendo. No puedo obligarla. Pero fue como lo dijo.
Me dijo "¿preferirías que te mienta?" eso no suena para nada bien. Como si casi casi estuviera forzando el sentimiento para que yo este bien. Yo no quiero eso. Pero en realidad no se que hacer ahora.
- Sirius, eres en verdad un idiota. - Remus llega a donde estoy. - ¿por qué le dijiste todo eso?
- tu sabes porque. - anoche le conté a Remus lo sucedido, pero no tuve tiempo de que me dijera su opinión porque James y Peter llegaron a la habitación y cortamos la conversación.
- si pero... - hace los ojos hacia atrás y se queja. - Padfoot, la única manera de decirle a alguien te amo, no es con palabras.
- ¿qué dices?
- Lily te ama, como no tienes una idea.
- ¿te lo dijo? - no pude evitar emocionarme en ese momento, hasta me enderecé aunque doliera.
- no tiene que decírmelo, es a lo que voy. Ella estuvo buscándote desde temprano, no le importó que los chicos pensaran mal de eso, aun así les preguntó por ti. - levanté ambos hombros. - hizo tu tarea, dime ¿te suena a algo que Lily haría? ¿la persona mas intensa respecto a calificaciones? claro que no, ni siquiera a mi me ayuda con mi tarea. - hice una mueca. - te trajo todo este tipo de cosas y... ella en serio lo esta intentando.
- creo que fui muy duro con ella.
- bastante.
- me siento mal ahora. - tomé de su canasta y la miré con nostalgia. - quizás si fui muy mierda con ella.
- si no lo dijo fue por algo, pero estoy seguro de que si lo siente. Es mi mejor amiga, creo que la conozco mejor que nadie y se que... se que en serio le importas mucho.
- quiero hablar con ella. - estaba por ponerme de pie pero el me detiene. - no tardo, solo iré a buscarla y...
- si, no. También me importa tu salud así que espera mínimo un día acostado. - lo miré molesto. - yo le diré que venga.
- dudo que te haga caso.
- oh, tu déjamelo a mí. Sí vendrá.
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