"¿Nayeon?" llamó Jennie, y cuando se dio cuenta de que sí era ella, se alteró "¡Nayeonnie!" se acuclilló frente a la castañita, su cuerpo daba espasmos a causa del llanto. "¿Nayeonnie, qué ocurre?" preguntó con más suavidad, queriendo saber por qué estaba llorando en uno de los baños, escondiendo su rostro en sus piernas flexionadas.

Nayeon negó, aun llorando.

"Vamos, dime qué pasa, NayNay." pidió, dando caricias en su cabello con cuidado, tratando de calmar al menor.

Todo se mantuvo en silencio por unos minutos, hasta que decidió hablar.

"Mi-Mina..." contestó.

"¿Mina? ¿Myoui Mina? ¿La tipa que está enamorada de ti?" preguntó, sin poder creer que la causa de su llanto fuese Myoui.

El llanto de Nayeon fue aún más grande al escuchar lo que Jennie le había dicho.

Nayeon negó con la cabeza.

"Se e-equivoca, Mina no está en-amorada de m-mí." dijo entre lágrimas, sosteniendo más fuerte sus piernas, enterrando su carita más en ellas.

"¿Qué?" dudó Jennie.

Claro, Mina no estaba enamorada de Nayeon, ja ja.

"Y-Yo... yo la v-vi..."

Un nudo estaba instalado en su garganta y no dejaba que las palabras surgieran de su boca.

"Si no quieres hablar de esto, está bien, NayNay. Ven aquí." extendió sus brazos al cuerpecito de la menor, quien levantó un poco la cabeza, aceptando el abrazo y llorando ahora en su cuello.

"V-Vi a Mini y a un ch-ico..." pausó, llorando un poco más "besando-se" completó. Los espasmos a causa del llanto tampoco dejaban que hablara.

"¿Qué?" murmuró sin poder creerlo. "¿Estás segura de lo que vis-"

"¡Nayeon!" el llamado de Myoui hizo a Nayeon temblar, escondiéndose más en el cuello de Jennie, esta la rodeó con sus brazos al notarlo.

"Por favor, no le diga que estoy aquí." negó con la cabeza.

Jennie negó. Claramente no iba a decirle si Nayeon no quería.

"Tranquila, ya no llores, pequeña." calmó, acariciando las hebras castañas de su crush.

Los gritos desesperados de Mina buscando a su mejor amiga cada vez se escuchaban más cerca. Sabían que le estaba preguntando a cada uno de los alumnos que estaban en el pasillo si habían visto a Nayeon.

Hasta que escucharon a una responder: "Creo que la vi entrando al baño."

Nayeon balbuceó, parecía una maldición.

La puerta se abrió, impactando fuertemente contra la pared.

Jennie puso su mano en alto cuando la azabache quiso acercarse rápidamente a Nayeon.

"No te acerques." ordenó la castaña oscura.

Y Mina creyó que se le había roto el corazón cuando vio a Nayeon llorar y aferrarse más al cuerpo de Jennie.