— Entonces tú nunca... —Mark niega y Jackson se deja caer sobre aquel mullido sofá.

— Jamás pasó Jackson, nunca te fui infiel —Mark sonrio con tristeza.

— Pero...

Mark negó.

— Lo malinterpretaste todo, y no me diste tiempo de hablar y explicarte todo —A este paso Mark ya tenía un camino de lágrimas en sus ojos y nariz roja.

Jackson pasó sus manos por su cabello ahora de color platino y luego soltó una carcajada, sin poder creer que había estado alejado de su pareja por tantos años por su orgullo.

Mark camino hacia él, dejándose caer sobre su regazo, enrollando sus brazos por sobre el cuello, enterrando de paso su cabeza en la curvatura del cuello del peli platino.

Jackson rodeo su cintura y sin pregunta alguna dejo un camino de besos en su cuello, haciendo reír a Mark, quien simplemente disfrutaba de aquella sensación la que había anhelado por tanto tiempo.

Jungkook soltó un gemido que le avergonzó, a veces solía olvidarse de que su voz en estos casos era demasiada chillona, y aquello solía avergonzarlo.

Taehyung embistió más fuerte y sintió el sabor metálico entrar a su sistema, había mordido tan fuerte su labio que lo había roto, sonrió ladinamente y se acercó a los hermosos y brillantes de su novio para besarlo.

El sabor de la sangre no se hizo esperar cuando Jungkook le dio espacio a la lengua ávida de Taehyung.

Degustó del sabor metálico y los ojos de ambos cambiaron cuando aquella sangre entró en contacto con su estómago, Taehyung le sonrio en medio del beso y dio una estocada más fuerte haciendo que la espalda de Jungkook se arqueara.

— Ya- ya ca-casi —Murmuro Jungkook y Taehyung lo entendió, él también ya se sentia en el límite.

Embistió dos veces más mientras besaba cariñosamente a Jungkook, la entrada del menor se apretó y con eso Taehyung descargo todo dentro del interior del menor.

Y Jungkook terminó manchando el vientre de ambos, Taehyung salió lentamente del interior y se posicionó de lado, atrayendo el cuerpo de Jungkook más cerca del suyo.

— Hay, hay que bañarnos Taetae —Comenta un jadeante Jungkook.

Taehyung pucherea y se aferra a la delgada pero candente cintura del menor mientras niega.

— Mañana, mañana tomemos una ducha, hoy no... Hoy sólo me quiero quedar así a tu lado, toda la noche —Murmura y Jungkook no puede evitar sentir sus mejillas calientes.

A veces le sorprendían las palabras que Taehyung decía, pero en estos momentos lo disfrutaba, porque él también quería quedarse un momento más así, entre sus brazos y su aroma.

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