HyungWon se despidió de todos y subió a la oficina de Hoseok. Este estaba haciendo unas facturas cuando la puerta se abrió y el rostro sonriente de Wonnie se asomó.

—Hey, ¿ya terminaron los ensayos? —preguntó mirando el reloj— no me di cuenta de la hora. Pasa...

HyungWon dejó su morral en el asiento y se arremangó la camisa color borgoña. Hoseok miró con detenimiento los movimientos suaves del muchacho y no pudo menos que sonreír.

—Bien —dijo poniéndose de pie— entonces, ¿qué parte quieres ensayar hoy?

HyungWon barrió su cabello hacia atrás con una mano y sacó el libreto de su morral.

—Mmm —hojeó el guión y señaló una página. — página 7...

Hoseok asintió y agarró su copia que estaba sobre el escritorio para abrirla en la página que Wonnie le había indicado.

Y entonces lo miró.

—¿Quieres ensayar esta parte?

HyungWon asintió con las mejillas encendidas.

—Si, bueno... es que aún me ganan los nervios.

Hoseok intentó no pensar en lo que implicaba ensayar esa escena, si quería que Wonnie ganara confianza en el escenario, él debía ayudarlo a lograrlo. Así que sonrió apenas y caminó hasta el sofá donde podrían ensayar la escena de la postración de Demian.

—Bien, empecemos con tu monólogo. DongSuk descubre que tiene sentimientos por Demian y está asustado por lo que siente. Dime, ¿qué puede estar sintiendo DongSuk?

HyungWon lo pensó un momento.

—Bueno, supongo que, además de miedo, sería... ¿inseguridad?

Hoseok lo instó a seguir hablando.

—Ok, ¿por qué te parece que siente inseguridad?

—Está enamorado de un hombre. Él es un muchacho simple, de campo, que no conoce mucho del mundo. Y aparece este soldado. Uno que es amable con él y que le habla de cosas que él nunca conoció. Lugares, personas... Supongo que es normal que DongSuk esté deslumbrado.

Hoseok asintió de acuerdo con las palabras de Wonnie.

—Recuerda que tú antes que nadie, tiene que creerse el personaje. Una vez que subas al escenario, Wonnie deja de existir para darle paso a DongSuk. —HyungWon asentía absorbiendo cada palabra que Hoseok le decía—. DongSuk vive a través de ti. Tú y él son uno arriba del escenario. ¿Sí? Entonces, empecemos.

Wonnie se acomodó la camisa y miró el papel.

'—¿Esto que siento? ¿Qué es? Si es amor, entonces estoy condenado. ¿Cómo pudo pasar esto? ¿Qué fuerzas oscuras lo permitieron? ¿Qué haré si esto que siento en el pecho sigue creciendo a la par de mi desazón? Mis padres, mis adorados padres, ¿qué pensaran de este hijo indecente? Apenas si me atrevo a decirlo en voz alta... —DongSuk cae de rodillas, escondiendo la cara entre las manos—. 'Dios mío, ayúdame... La angustia me corroe por dentro y no encuentro salida...'

Hoseok aplaudió.

—Eso fue estupendo, Wonnie. Pudiste captar la angustia que DongSuk estaba sintiendo. Continúa...

'—¿Cómo lo miraré al rostro ahora? No seré capaz de soportar su mirada...

Hoseok se aclaró la garganta. —Hijo, ve a llevarle la comida al señor Parker que ya debe estar despierto.

HyungWon se levantó del piso y caminó hasta el escritorio para agarrar una carpeta que simularía ser la bandeja. Golpeó la madera con los nudillos. Hoseok sonrió, satisfecho.

'—Toc, toc.

—Adelante —dijo Hoseok con la voz animada. HyungWon dio un paso al frente. —Oh, DongSuk, qué alegría verte esta mañana...

HungWon dejó la bandeja a un lado y se arrodilló al costado de la cama. —¿Cómo se siente hoy, señor Parker? —HyungWon estiró una mano y la apoyó en la frente de Hoseok.

Este miró al hermoso muchacho a su lado, sus labios rosados y voluptuosos eran una locura.

'—Ahora que te veo, DongSuk, mucho mejor, ¿cómo has estado? —Respondió Hoseok clavando sus ojos en los de Wonnie y tomando su mano, como debía hacer su personaje. Wonnie bajó la mirada y Hoseok tocó su mejilla.

—E... E... está un poco afiebrado, señor Parker... —Wonnie sabía que su tartamudeo nada tenía que ver con su personaje. Hoseok lucía perfecto con esa camisa negra que resaltaba la blancura de su piel.

—Por favor, llámame Demian. —La voz de Hoseok bajó de intensidad y se tornó extrañamente ronca.

—Señ... Demian, por favor. Alguien podría entrar...' —Hoseok sostenía la mano de HyungWon entre las suyas. Este tragó con fuerza, perdido en los ojos oscuros de Hoseok que se incorporó —como decía su personaje— y le tomó la cara entre sus manos, acercándose despacio.

Ambos podían sentir la respiración del otro. HyungWon sentía los latidos de su corazón golpeandole los oídos, sus ojos enfocados en los labios de Hoseok. Sintió las caricias de los dedos contrarios sobre sus mejillas.

Hoseok no creía poder detenerse a tiempo, disfrutaba de la proximidad con Wonnie, era tan hermoso que no podía apartar la vista aunque lo hubiera querido. Sus manos se manejaban solas, trazando los pómulos de su 'estudiante'. El aliento frutal de Wonnie estaba haciéndole perder la cabeza y cerró los ojos, obligándose a detenerse para no cometer una locura.

—Wonnie —susurró. Su pecho subiendo y bajando agitado— creo que deberíamos detenernos... Quiero que tu primer beso sea con alguien especial... —esas palabras no fueron fáciles de decir, pero no podía permitirse cruzar el límite aunque estuviera tentado a hacerlo cada vez que Wonnie se aparecía en su campo visual.

—Está bien, Hoseok —murmuró Wonnie en voz baja—, está bien si eres tú...

Hoseok abrió los ojos y se encontró con la mirada más tierna que jamás hubiera visto. Y entonces asintió, perdiéndode en esos grandes ojos café. Sus mejillas estaban sonrojadas y su boca ligeramente abierta. Y entonces la mente de Hoseok por un momento viajó al diario.

'Fue tan inesperado como perfecto. Mi primer beso...'

Tenía que ser especial, debía hacer que su primer beso fuera perfecto... Aunque solo fuera un ensayo.

Tomó una de sus manos y dejó algunos besos sobre la piel tibia del interior de su muñeca y Wonnie suspiró por lo bajo. Hoseok no sabía qué estaba haciendo exactamente solo que quería hacer de ese momento algo inolvidable para Wonnie.

Un suave rubor cubrió las mejillas del alto y sus ojos se pusieron vidriosos.

Los primeros besos suelen ser memorables por su incomodidad y torpeza. Y en un punto Hoseok no quería robarle esa experiencia, pero tampoco quería privarse de la dicha de probar esa boca preciosa que se ofrecía para ser besada. No iba a poder perdonárselo jamás.

Con el corazón en la boca, deslizó sus dedos temblorosos por detrás del cuello de Wonnie e inclinó la cabeza para terminar aplastando su boca contra esos labios que amenazaban con alzarse con su cordura. Wonnie gimió bajito y entreabrió los labios por instinto, encantado con las nuevas sensaciones. Los labios de Hoseok eran suaves y dulces moviéndose sobre los suyos con ternura y firmeza. Sin pensarlo siquiera, se vio rodeando el cuello de Hoseok con sus brazos y queriendo sacar más de ese beso único y perfecto.

Su primer beso.

HyungWon cerró la puerta de su apartamento y se apoyó contra la madera. Llevó una mano a sus labios y los acarició con los dedos. Había sucedido. Había besado a Hoseok. O Hoseok lo había besado a él. No estaba muy seguro de haber contribuido mucho al beso ya que apenas sintió los labios contrarios sobre los suyos, su cabeza dejó de funcionar en el plano terrenal. Pero había sido perfecto. Sonrió y  tocó sus mejillas calientes.

—¿Te sientes bien? —preguntó Min entrando a la sala y secándose el cabello con una toalla.

HyungWon asintió y pasó por su lado sin decir una palabra para dirigirse a la cocina. Min lo siguió.

—¿Qué quieres cenar? —preguntó apoyándose en la mesada.

—Lo que sea —respondió Wonnie mojándose la cara.

—¡Yah! —Gritó Min sobresaltando a Wonnie que se giró asustado—. Ya dime que pasó.

Wonnie puso los ojos en blanco.

—No pasó nada...

Min se acercó y estudió el rostro de su amigo. Al final alzó una ceja en una expresión divertida. Min podía leerlo como un libro abierto.

—¿No pasó nada? —preguntó con una media sonrisa.

HyungWon sacudió la cabeza, negándolo.

—¿Entonces si le pregunto a Hoseok qué pasó me va a responder lo mismo?

Los ojos de HyungWon se abrieron con horror.

—¡No! —Min ladeó la cabeza, aguantando la risa— es... yo... Bien, ¡nos besamos!

Apenas lo dijo se tapó la boca con las dos manos. Min casi se va para atrás y esta vez fueron sus ojos los que se abrieron al límite.

—¿What? ¡AHH, me muero! —Min empezó a dar saltitos a su alrededor y Wonnie se arrepintió en el acto de haber abierto la boca.

—Shh —Wonnie juntó las manos en alto— por favor, Min... Te lo ruego, no digas nada...

Min aplaudió, feliz.

—Ok, ok. ¡Pero dime cómo fue! ¿Fue con lengua? ¿Lo tocaste?

Wonnie se sentó y suspiró.

—Fue... fue perfecto. Claro que fue un ensayo...

—¡Ensayo mis polainas!

—Min, estábamos ensayando. El guión decía que debía besarme.

Min soltó una risotada.

—Él no debía besarte. JungWoo era el que debía hacerlo. Pero fue un buen cambio para tí, ¿o me equivoco?

Wonnie frunció la boca, pero no dijo nada.

—De todas formas fue tu primer beso y con alguien que te gusta. Eso es genial.

—Yo no... —pero al final se recostó sobre la mesa y suspiró. No tenía sentido seguir ocultando lo que sentía—. Está bien... Sí, me gusta. Me gusta Hoseok. Es tan dulce y paciente conmigo. Y siempre se preocupa por mí. ¿Estoy muy mal con lo que estoy sintiendo, Min?

Min le palmeó la espalda con afecto.

—No. Nunca está mal enamorarse, Wonnie.