Capitulo 2: La reencarnación (Comienza la misión)
Bueno, aquí comienza las aventuras de nuestros héroes, pero antes de comenzar, quiero aclarar de que esto esta ligeramente inspirado en la historia de la vida de Tobias Forge. El líder, vocalista y fundador de la banda Ghost y otros momentos si serán parte de la mitología en si de la banda, tal como lo hice en el primer capitulo.
También quiero decir que como esta es mi propia mitología de la banda, habrá cosas creadas por mi. Su servidora.
Bueno, sin nada mas que decir, comenzamos.
_________________________________________________________________________________________________________________________________
Liköping, Suecia. 3 de Marzo, 1981
Tal y como lo esperaban Terzo y Copia, el ritual había tenido éxito. En el momento en que Copia murió, lo último que vio fue una luz blanca, era la luz blanca de un hospital, una mujer de aspecto agradable había dado a luz a un niño pequeño de cabello oscuro y ojos verdes. Su madre le puso de nombre Tobias al niño.
Desde que Tobias nació, su vida no era muy fácil que digamos. Para empezar sus padres se habían divorciado, siendo el apenas un recién nacido y debido a esa situación, el vivía con su madre y su hermano mayor, aun con la nueva familia sus padres no tenían dinero. Tobias siempre pasaba los fines de semana con su padre y su nueva esposa; con la cual habían formado una nueva familia.
Su madre lo solía llevar a iglesias para admirar la arquitectura y las pinturas en las paredes, pero por alguna razón solo quería en la arquitectura y el arte. A Tobias le gustaba ese tipo de estilos, por que lo hacían sentir cómodo, pero nunca se introdujeron en la religión.
En cambio, su madrastra era una fanática religiosa y a Tobias no le caía bien para nada, mucho menos a los hijos que tuvo con su padre. Ellos dos eran como agua y aceite; por alguna razón Tobias odiaba a cualquier fanático religioso que se atravesaba. Una voz en su interior le decía que ellos no eran buenas personas tal como ellos decían ser. Lo mas sorprendente es que cada vez que estaba con sus nuevos hermanos, aunque no hacía nada, estos terminaban teniendo accidentes por casualidad, eso hizo que su madrastra le dijera pequeño engendro del demonio, entre otras cosas, pero a Tobias no le importaba.
Cuando Tobias estaba en la escuela primaria, tenía una maestra que también le guardaba rencor, por que al igual que con su madrastra, ella era una religiosa y evaluaba a los niños con el temor. Sin embargo con el único que no funcionaba esa técnica de aprendizaje, era con Tobias Forge; como si en una vida pasada se hubiera enfrentado a Dios, o al menos es lo que pensaban muchos de sus compañeros; lo cual generaba asombro en muchos y otros miedo. De todos modos, el nunca fue un niño excepcional en la escuela.
Pasaron los años y Tobias fue desarrollando un enorme odio al cristianismo y amor a la música, pero si era rock o metal, mucho mejor. Sentía que su destino estaba de alguna manera derrocar a las iglesias, comenzando con el Vaticano, la mayor iglesia del mundo, pero lo haría con sus compañeros a través de la música.
Eran las 3:45 am, todos estaban dormidos, incluyendo Tobias, pero luego ese tranquilo sueño terminaría en cuanto el comenzara a moverse mucho en su cama; estaba teniendo una pesadilla.
(Sueño):
Era la edad media, había una guerra contra un ejército con cruces como emblema. Las cruzadas, si somos exactos, ya había muchos muertos, entre ellos, personas con túnicas negras que podían hacer magia, eran hechiceros, brujas y magos, pero también había alquimistas.
Tobias corría hacía al sur y se encontró a un hombre vestido como el resto de los hechiceros del lugar, pero tenía la mascara de un demonio y el símbolo que llevaba en su ropa era el alquímico del fuego. Estaba herido y perdió mucha sangre, pero al llegar, ya no respondía; estaba muerto.
En ese momento otro hombre había llegado delante de el para saber como estaba, y al igual que chico del fuego, traía la misma ropa y mascara. La única diferencia, era que traía el símbolo de la quintaesencia.
-Otro de nuestros compañeros cayó.- dice una voz que se suponía que debía ser Tobias.
Sin embargo, noto de que no respondió el. De hecho, quiso hablar dentro del sueño, pero nadie lo escuchaba. Era como si fuera un espectador de su propia subconsciente.
-Tenemos una emergencia mas. Alguien entró al ministerio.- dice el tipo de la mascara delante de el.
Entonces ellos dos corrieron hacia donde estaba el ministerio, pero Tobias seguía sin entender que estaba pasando, era como si no tuviera control de su propio cuerpo. Antes de que llegaran a donde decía, los emboscaron el ejército enemigo, así que se separaron para que de esa manera pudieran cubrir terreno. El hombre de la mascara se quedaría a cubrir a quien se suponía era Tobias, mientras que el iba a salvar al ministerio del que hablaba ese tipo.
Finalmente llego a lo que parecía ser una iglesia, pero con la temática del ocultismo, magia, hechicería, alquimia y sobre todo, al satanismo. Y aunque Tobias no podía ser escuchado, no podía dejar de decir para si mismo, lo mucho que le gustaba la arquitectura, pero todo estaba cubierto de sangre y cadáveres y casi todo estaba destruido.
Tobias finalmente encontró a quien se metió a la iglesia, El invasor saco su espada para combatir contra el, pero Tobias hizo ¿Levitar? una espada que estaba en una pared. Estaba peleando con la espada, control andola; como si realmente peleara contra el, pero estaba haciendo magia. Tobias no se lo podía creer aun; era un hechicero en sus sueños.
La batalla se estaba poniendo intensa, ambos esquivaban y/o detenían los golpes de su oponente, pero luego el invasor saco una botella de aceite de oliva para impregnarlo sobre el y luego quemar lo. Sin embargo, Tobias se dio cuenta a tiempo y se lo tiro antes de que pudiera cometer. Solo que le había caído a el un poco de ese aceite sin darse cuenta y luego lanzo una vela de uno de los candelabros del lugar y ambos fueron quemados.
Tobias huyo despavorida mente del lugar para pedir ayuda, pero con lo que no contó es que había alguien que lo esperaba para darle un golpe con su espada tan profundo, que haría que muriera desangrado.
(Fin del sueño).
Tobias despertó de golpe sudando frío; lo cual llamo la atención de su madre y fue a ver si su hijo estaba bien.
-Tranquilo, hijo. Estoy segura de que solo fue una pesadilla.- le dice su madre mientras lo abrazaba en su regazo.
Pero Tobias no estaba seguro si lo que tuvo, fue solo un sueño. Era tan real, que parecía mas un recuerdo; como si lo hubiera vivido en carne propia. Y desde esa noche Tobias siguió teniendo los mismos sueños, pero nunca se atrevió a decirle a nadie, por que seguramente lo tomarían por loco.
Los años pasaron y Tobias comenzó a tener una carrera musical como guitarrista, vocalista, bajista y compositor de algunas bandas como Crush Dieth, Subvisions, Manga Carta Cartel, Repugnant, entre otras, pero no eran lo suficientemente exitosas como para ganar dinero y alimentarse, así que también trabajaba en un Call Center de una empresa de telefonía; lo cual odiaba demasiado, por que no era bueno en esto.
Era un día como cualquier otro en la vida de Tobias, se levantaba de la cama, se bañaba, se arreglaba, desayunaba y luego iba al metro para tomarlo e ir al trabajo. A Tobias se le notaban una leves ojeras, como señal de que otra vez no durmió bien la noche anterior, traía a la mano una taza de te para despertarse e ir a su puesto de trabajo.
Durante su turno de trabajo, mientras atendía una llamada, se estaba cayendo de sueño y luchaba constantemente para evitar quedarse dormido por completo, así que le estaba tomando tragos a su te, hasta que se le acerco su vecino de puesto laboral.
-Oye amigo, si quieres mantenerte despierto, necesitaras algo mas fuerte que un te.- le dice.
-¿Y que sugieres que sea algo mas fuerte que un te?- le pregunta un poco cansado.
En ese momento su compañero le da a Tobias un vaso de café, salido de una cafetería y una barra de chocolate, también le entrega un chicle junto con ellos.
-El café y el chocolate tienen mas cafeína y mientras mas tiempo mascas el chicle, mas evitaras caerte de sueño, pero hazlo rápido.- le dice mientras volvía a su puesto.
Después de esa charla, Tobias se tomo el café, se comió el chocolate y continuo con su trabajo. Termino su turno laboral, se fue a almorzar donde siempre. Mientras estaba comiendo, estaba escuchando alguna conversación de sus compañeros, y escuchó que existe el rumor de que su jefe iba a despedir a aquellos que...Bueno, tenían un problema grave de salud mental y aunque el esperaba de que solo fuera un rumor, le daba igual si el estaba en la lista, siempre soñó con el día en que le pudiera decir a su jefe : "¡Adiós, renuncio!".
Finalmente Tobias termino su almuerzo, decidió caminar un poco para estirar las piernas. Sin embargo, cuando estaba caminando hacia la entrada, se topo con un hombre de cabello largo oscuro, piel pálida y con los ojos que parecía que tenía ojeras mas marcadas. Parecía mas, un personaje de una película de terror; a Tobias le fascinan las películas de terror de los años '80, pero le estaba dando escalofríos; lo miraba como si lo estuviera buscando.
-Disculpa, soy el nuevo.- dice para romper el silencio.
-Hola... Soy Tobias Forge.- le dice para extenderle la mano y saludarlo.
El hombre espeluznante se la estrecha, pero no deja de verlo de la misma manera en la que Tobias estaba muy seguro que lo hacía.
-Dime, ¿Y la oficina del que esta a cargo?-
-Es...ta hasta arriba.- le dice sintiendo que le daba un ataque de pánico., -Solo, toma el elevador, último piso, tercera oficina a la izquierda.-
-Muchas gracias.- le dice para dejarlo, pero no sin preguntarle sobre el vendaje que traía Tobias en su mano izquierda., -¿Que te paso en la mano?-
-Este... me...queme al hacer algo frito. Me cayó aceite hirviendo en la mano.- le decía. Luego el hombre aterrador se fue.
Tobias siempre les decía eso a todos cada vez que miraban su mano izquierda para satisfacer su curiosidad, pero la realidad es que había algo que estaba ocultando. Entro al baño y se aseguro de que nadie viniera o saliera de ahí para poder quitarse la chaqueta y luego el vendaje. Realmente lo que tenía parecía una cicatriz de una quemadura por el brazo izquierdo, pero resulta que era una marca de nacimiento, aunque si parecía una quemadura y siempre se la ocultaba por que si no pensarían todos que si es una.
El día continuo con normalidad hasta la hora de salir, y como siempre Tobias volvía a casa muy cansado, pero esta vez no dejaba de pensar en aquel hombre tenebroso que no lo dejaba de ver como si lo buscara a el específicamente. Por lo tanto, decidió no ponerse los audífonos, para escuchar todo a su alrededor. A Tobias le gustaba caminar a casa con los audífonos puestos, ya que era algo que habitualmente hacía para no caer de sueño y era muy buena compañía la música y de vez en cuando volteaba por los lados para saber si no lo estaban siguiendo.
Llego a la estación del metro, pero aun así no se sentía seguro; le estaba dando un ataque de ansiedad, paranoia y pánico, sentía la necesidad de ir a un hospital, pero esos pensamientos terminaron cuando llego el tren. Tobias lo tomo y se pudo ir a casa.
A pesar de estar en el vagón del metro, decidió voltear a su alrededor, para asegurarse de que nadie lo estuviera siguiendo, también reviso por los demás vagones para saber si no se subió a tiempo cualquiera que lo estuviera persiguiendo.
Después de eso, vio un asiento vacío, se sentó y pudo ponerse los audífonos y ver desde la ventana los lugares afuera del metro, pero por un momento cuando miraba por la ventana su propio reflejo, le pareció ver algo extraño. No era el mismo a quien veía delante de el, si no a un cardenal con los ojos como el mismo sujeto del trabajo.
Tobias cerró los ojos por unos segundos y se sacudió la cabeza, al abrirlos la figura desapareció y volvió a ser el mismo. Finalmente llego a la estación donde estaba mas cerca de su casa, pero antes de salir, se había asegurado si no había nadie que lo siguiera entre la multitud y cuando iba caminando, volteaba de vez en cuando.
Llego a su casa sano y salvo, hizo lo que mas habitualmente hacía que era tocar la guitarra y componer temas para sus bandas. Siempre luchaba con no quedarse dormido, debido a los sueños que tiene, pero después de pensar en ese hombre que entró a trabajar y que sospechaba que era a el quien lo buscaba, si sería posible que no pudiera dormir esa misma noche, aunque el sueño le ganara.
Al día siguiente, Tobias salió de su casa, pero al salir se puso lentes oscuros, un sombrero y una gabardina para asegurase de que nadie lo estuviera vigilando, también tuvo que tomar una ruta diferente para ir a trabajar. Cuando llegó al trabajo, le pidió al guardia que vigilara muy bien la entrada, y que no dejara entrar a alguien que se viera extremadamente sospechoso, comenzó a vigilar cada paso, cada suspiro que el daba para asegurarse de no llamar la atención, pero se encontró con su jefe.
-Forge ¿Que crees que estas haciendo?- le dice al ver que aguantaba la respiración.
Tobias tardo un poco en contestar, ya que no contó con que su jefe estuviera de repente detrás de el y por que no podía respirar. Después del susto, Tobias tomo una bocanada de aire y luego hablo.
-Es que tenía hipo desde que entré aquí, y por eso caminaba así. No podía respirar.- le dice.
Al final su jefe se lo creyó y le pidió que fueran a su puesto de trabajo; lo cual Tobias no dudo en hacer. Cuando llego, vieron sus compañeros que llego un nuevo empleado, quería conocerlo y darle una cálida bienvenida, pero en cuanto llego para presentarse, se dio cuenta de que era el tipo del día anterior y le dio un escalofrío en la espalda.
En ese momento, Tobias lo ignoro por miedo y decidió irse a su puesto de trabajo, pero con lo que no contó era de que el nuevo tenía su puesto detrás de el; lo cual hacía de que Tobias le diera ataques de ansiedad.
-No entiendo de que te aterras Tob. ¿Que a ti no te gustan las películas de terror? Bueno pues tienes a alguien que parece traído de una de ellas.- decía un compañero suyo.
-Tu también estarías nervioso si alguien tuviera es aspecto y fuera a trabajar todos los días en una oficina normal.- le dice Tobias un poco furioso.
Para evitar sentir miedo mientras hablaba con los clientes, Tobias de vez en cuando se distraía con algo, en este caso estaba dibujando el logotipo que tenía en el fondo de su ser. Poco después sintió que algo ligero, pero solido como una bola de unicel lo golpeo. Se volteo para ver quien fue. No vio a quien se la lanzo, pero si vio una bola de papel tirada en el piso, la recogió y luego la desarrugo. Resulta que la bola de papel tenía algo escrito y era para el:
"Debes recordar tu pasado. Recuerda quien eres en realidad."
Lo que decía en el papel, le heló la sangre a Tobias y comenzó a tener un ataque de pánico, todo pasaba mientras el estaba hablando con un cliente, por lo tanto decidió hacer el viejo truco de interrumpir la llamada usando un papel y arrugan dolo en el micrófono del teléfono y decir que la señal se cortaba para colgar e irse temprano a casa.
Tobias recogió sus cosas y se fue lo mas rápido posible, pero al cruzar el pasillo, se encontró de nuevo con su jefe; el cual le pregunto a donde iba muy apresurado.
-No me siento bien.- le dice mientras se agarraba el abdomen., -Me duele el estomago y me empieza a dar nauseas.- dice para hacer como si le dieran ganas de vomitar.
Al final su jefe se lo creyó y le dio unas vacaciones para que supuesta mente descansara y fuera a ver a un doctor. Aunque pensándolo bien, tal vez Tobias si iría con uno por los ataques de pánico y por lo de las "pesadillas"
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro