Hace un siglo, la humanidad se enfrentó a un nuevo enemigo.
La diferencia de poder entre el hombre y su enemigo era abrumadora.
Hasta un punto donde el hombre casi se extinguía.

Los humanos que sobrevivieron construyeron tres muros: María, Rose, y Sina. Y gracias a eso, pudieron vivir en paz durante un siglo.

Pero...

¡Apareció mi puto padre como un titán friki acabando casi con toda la raza humana! ¡Que dios me bendiga por traerme al mundo! De no ser por mí, la raza humana ya estuviera por los suelos.

Gomen', me alteré. Ahora sí, ¡opening maestro!

Me adentraba al pequeño distrito ya hecho mierda por lo titanes en la zona, otros iban para el Norte donde se hallaba el segundo Muro María, creo que en donde llegué a parar fue en el Distrito de Shiganshina, pero ya no hay distrito. ¡Gracías otra vez titanes! *Sarcasmo 100%*

—Putos malnacidos.— Murmuré fastidiado, caminando todavía entre las casas medio destruidas, y una que otra gente corrían como locos por salvar sus vidas. Llevé ambas manos a mi bolsillo en la sudadera negra.

—¡¡AHHH!! ¡DETENTE!

¡Aghh~! ¡Uruse vieja bruja!

*CRASH*

Ah~, al fin, el titán que medía 10 metros aproximadamente comió sin pudor alguno y con despreocupación a una señora mayor, aparentemente tenía como unos... ¿50 años? No lo sé.
Me acerqué lo suficiente hacia el titán grande con cara de menso para después llamarle la atención.

—¡Oe!—. El mansito estaba a punto de irse, se detuvo en seco. Volteó con lentitud para mirarme de soslayo, conociendo perfectamente esa mirada morbosa y hambrienta de él. —Estuvo bien que te comieras a la vieja esa por ser tan ruidosa y eso, pero~...— Canturree lo último, para purgarme la nariz con sutileza, ya sacado, lo mandé a volar juntando mi pulgar con el índice, en el acto, mi moco pegó en la frente del titán.

Giró su cuerpo a 80° el pelinegro grandote, sin dejar de mirarme y sonreír más falseadamente para contener su “enojo”, si es que las “personas” como ellas siguen sintiendo eso. Sólo un poco.

El titán gigante (para mí) se lanzó hacia a mí, literalmente, listo para comerme en cualquier segundo. Sin embargo, fui más rápido haciéndome a un lado, viendo en cámara lenta como la cara del titán normal pasaba en frente mío. En un milisegundo lo cacheteé con todas mis fuerzas hasta que su cara explotase. Oh, salió volando su cerebro que conectaban sus ojos y demás. ¡Jejeh!

—¡Adiós, Popó!

Por eso inventé la regla de: ¡No te metas con el apellido Ackerman! ¡O verás las consecuencias, puto!

Suspiré con desgano, hubiera preferido rebanarlo en pedacitos antes que mandar cabezas hacía Marte, la horda de titanes que venía anteriormente no me satisfació como lo imaginaba antes. Tan sólo pienso que es de gran ayuda para darles tiempo a los demás en este pequeño distrito en que puedan escapar. Si aparece la Epidemia Titán, se jode la humanidad nuevamente.

Las áreas pequeñas, que sobresalían de las Murallas de Shiganshina, fueron usadas como cebos para atraer a los Titanes, para poder reducir los costes de defensas y militares.
Como resultado de éste diseño, el pueblo de Shiganshina podía escapar de la invasión de los Titanes con sólo atravesar una puerta

Usando mis poderes telequinéticos, volé hasta llegar al segundo muro que dividía el Distrito Shiganshina. Bajé la mirada donde estaban los soldados esos, que traían un logo bastante peculiar, se miraba diferente a los que miré en las afueras de la Muralla, esos traían alas.

En fondo de todo el pueblo, el hoyo donde hizo ese titán gigante con el píe, seguían entrando de a poco Titanes, se miraban inofensivos ya que eran de ocho o de diez metros, bueno, algunos titanes eran pequeños como de 6 o 5. Suspiré con melancolía al recordar esto como si fuese un déjà vu.

*PUM*PUM*

¿Pero qué...? ¿De repente hay un tipo de temblor o qué? Alcé la mirada de nuevo para ver quien era el causante de esas grandes y pesadas pisadas, las reconozco... ¡¿No es...!?

—“¡Holy Shit!”—. ¡Es un puto titán!

No lo puedo creer, mis ojos van a salirse de su órbita. Pero éste, se mira diferente al que he visto habitualmente, excepto su...

*PUM*PUM*PUM*PUM*

¡¿Nani!? ¡Ahora está corriendo hacia aquí! El impulso que dio cuando estaba a punto de correr, deshizo las casas en pedazos y mandó a volar a los demás titanes por la gran presión de aire que recibieron, rápido miré nuevamente abajo los soldados restantes que quedaban del otro lado del desastre con los titanes.

Estaba a punto de ayudarles, cuando de pronto dieron fuego a los cañones disparándole al Titán quien seguía corriendo. Le dieron, pero seguía inerte por la bala del cañón, dispararon otra vez hacia él pero el Titán de cabello, ¿blanco?, lo esquivó.

Los demás soldados, viendo que no funcionaba, dieron retirada y se echaron a correr hacia la puerta del muro. (En donde estoy ahora, sólo que en la parte superior).
Puse mi mano detrás de mi oreja, agachándome un poco sobre el muro para alcanzar a oír lo que decían.

—¡Cierren la puerta-!

Ya no oí más, cuando otro temblor sacudió un poco el muro en donde estaba, y me caí. ;-;
No me inmuté ni dije nada, límite a sentarme al estilo indio y suspirar con frustración.

Antes de llegar al suelo, paré de golpe mi caída, ayudanme otra vez con mis malditos poderes; al final me puse de pié tocando el suelo.

—¡¿Qué cara...!?

—L-L-a puerta... ya no.. está.

Silencio, era lo que se emitía ahora cuando vieron que ese maldito titán, logró hacer un hoyo gigante, destruyéndola por completo. Me quedé mudo hasta soltar un suspiro asombrado.

No pude aguantar más al ver como se vuelve a repetir esas malas imágenes que vienen a mi cabeza, cerré los puños con impotencia, frunciendo más mi rostro hasta hacerlo uno más... enojado.
Pude ver como el titán de forma acorazado, sacó humo de su boca.
¡Significaba que-!

—“¡Se está destransformando!”—. Eso si que no maldito hijo de...

Con rapidez volé había su dirección cuando se puso recto, saqué mi Katana con rapidez para darle en su mera jeta, grité a lo espartano pero me desconcertó que... ¡Desapareció! ¡¿Pero que mier...!?

A las pocas horas después de que la Muralla María había caído en el distrito sur de Shiganshina, la noticia se difundió a través de los territorios humanos como reguero de pólvora.

—Este es el final.— Decía un pelirrubio mayor con el traje de esos soldados con el logo de rosas. —Se ha acabado...

—No seas negativo, Men.

—¡Ah!—. Ups, no quería asustarlo, ya que aparecí de repente a su lado, sentado en el techo de bloques rojos, él seguía mirándome sorprendido. —T-Tú... ¿de dónde...?

Me puse de píe con rapidez, él se calló abruptamente, estiré mis antebrazos al igual que calentaba.

—Es mejor que vayas con los demás.— Estiré mir brazos, aproveché para tronarme los dedos hasta el... *crack*. Me hinqué para después saltar del techo, pero aún así en el aire como pude le grité. —¡Esto se va a descontrolar~!

Seguía volando en el aire, sólo que está vez sin ayuda de mis poderes telepáticos, iba en dirección a la horda de Titanes con una sonría socarrona. Estaba a punto de chocarme con uno de 9 metros, con rapidez llevé mi pulgar a mi boca, mordiéndola en el acto.

Ese año, el Gobierno Central decidió retirar toda la actividad humana dentro de la Muralla Rose. Los Titanes devoraron a 10,000 personas.

—“Nuevamente se joden los titanes.” ¡ROARHHH~!

La horda de Titanes se detuvieron al oír mi grito, dejando el ambiente en un silencio sepulcral, que para la mí era música para mis oídos, puse mi mano en la cara de uno, específicamente el primero que estaba en frente mío. Por parte de “magia” el contario se fue volando hasta chocar con el Muro María, hasta quedar incrustado en ella. Bajé mi diestra, mirando inexpresivamente a todos los titanes restantes.

Volví a gritarles, o más bien a gruñirles como un maldito animal furioso por proteger lo que quiere.

—¡VAYÁNSE DE AQUÍ, PERRAS!

Wow, me agarré la garganta impresionado por mi voz tosca y profunda, hace mucho que no hablaba en esta forma. Antes intentaba aprender a hablarlo lo más posible al estar transformado en titán, heme aquí hablando como el puto lucifer.

(...)

¡Ohayōgozaimasu! ¡Gomen' si me he tardado en actualizar está historia “random”! ¡Pero heme aquí!

Honestamente; al principio no se me ocurría como inventarle la siguiente parte, pues aquí la tienen como resultado.

Pienso que estoy perdiendo el “poder” de narrarle más específica, pero como es una historia un tanto... Ñeh, me vale. Así que si ven mala ortografía, se joden porque no la volveré a editar x'D, tiene que quedar “original”.
Eso sí, si está copiada (ya que sin querer la hice) me lo dicen y ya la editaré tooodo de nuevo.

Como sea, espero de que les haya gustado el cap con la corta trama que le puse :v.

Pero antes quisiera preguntarles algo.

Pos' como es Yaoi (obvio :V) dejaré las siguientes preguntas.

—¿Quieren qué el prota sea Seme o Uke? Mi respuesta es hacerlo Seme (1), pero no sé ustedes, por eso les dejo la pregunta ya que me encanta leer sus opiniones.

—¿Qué tenga un Harem o un Crush en específico? Ya saben, lo típico :v.

*Cof*Cof*ElEnanoAndante*Cof*Cof*

Ay, esta tos con el calor eh?

Bueno, lamento escribir esta parte de la historia como relleno, así que me despido. ¡Sayōnara~! ¡Nos vemos en sus mentes imaginarias! ¡Sueñen con sus husbandos y con el Yaoi Hard!

¿Ah? ¿Eso no venía en el guión? °_°💧