7:45 a.m

Ahora ¿como se hacia esto?

9:43 a.m

Si pudiera volver a empezar de nuevo ¿que haría diferente? Tal vez llegar un minuto antes. Aunque eso no cambiaría nada de lo que pasó. Era gracioso, llegar un minuto antes no cambiaría nada, porque un minuto no importaban, ni siquiera cinco minutos lo hacia. Un segundo. No importaba porque nada iba a cambiar.

Suspiró sintiéndose especialmente amargado ese día, no debería ser así, miró el reloj en su muñeca y suspiró colocando su cabeza entre sus manos. No podía amargarse ese día, era especial despues de todo, Jeonghan apenas había comenzado a trabajar, y su oficina estaba en orden, el edificio tan tranquilo que debería de ser un grandioso día. Un día especial para él y todo lo que había hecho. Era temprano. Solo faltaban 8 horas con 28 minutos.

Tomó su celular observando la conversación que tuvo la noche anterior con Jihoon.

"No puedo mañana, tengo demasiadas tareas que entregar."
11:19 p.m

"Por favor"
11:19 p.m

"Hoshi puede llevarte."
11:20 p.m

"Hoshi pasará al primer lugar y tu al segundo."
11:20 p.m

"Bien, puedo ser el segundo"
11:20 p.m

"Soy tu omega"
11:26 p.m

"No soy tu esclavo, no puedes usar esa carta todo el tiempo."
11:26 p.m

"Pideselo a Hoshi."
11:27 p.m

"Olvidalo, Hoshi tampoco puede"
11:29 p.m

"Pide un taxi como la gente normal"
11:30 p.m

"Solo pide un taxi, Jeonghan"
11:32 p.m

"Puedes pagarlo"
11:35 p.m

"No estas en bancarrota, puedes pagar un taxi"
11:39 p.m

"Eres irritante, esta bien, te llevaré"
12:42 p.m

"Gracias alfa!!"
12: 42 p.m

Alfa. Que gracioso, antes de Jihoon no había conocido a ningun otro alfa, o a un omega. Solo conoció detritos y demasiado pocos como para contar. Asi que, de pronto conoció a este alfa y se aferró a él como si fuera lo único que lo que pudiera agarrarse, como si fuera a caer. Y Jihoon lo sostuvo solo porque si. Era un poco gracioso. Dejó caer su espalda contra el respaldo de la silla y miró el techo viejo y corroído. Tenía que arreglarlo antes de que se hiciera tarde.

10:56 a.m

—¡Jeonghan! ¡Ten cuidado! ¡No sabes que tipo de cosas puede haber allí!

Suni estaba gritando, y cada grito que ella daba era un pequeño balanceo de la silla que sostenía. Jeonghan la ignoró, no tenía miedo del agujero que estaba cubriendo en el techo, sino que tenía miedo de que la chica lo hiciera caer con sus constantes gritos y temblores. Solo le pidió ayuda porque lo encontró infraganti robando una silla de sus empleados, la suya era tan frágil y vieja que podría romperse en cualquier momento.

—Solo quiero tapar el hueco...— Balbuceó tratando de colocar la primera capa de yeso. —Solo...

La puerta se abrió, y la sorpresa de Suni fue tal que al girar la silla giró con ella y Jeonghan vio alejarse el techo, como si de pronto flotara, solo que estaba cayendo, vio algunos mechones de su cabello alzarse y sus brazos quedando arriba impidiendo cubrirse el rostro. Sus ojos enfocaron el techo, y después la pared, y después a Seungcheol quien estaba en la puerta. Y después sintió el golpe. Por suerte cayó sobre su lado izquierdo.

—¡Jeonghan!— gritó Suni tratando de levantarlo, aunque ella primero levantó la silla. —¡Lo siento! ¡Te dije que era peligroso!

Solo era peligroso porque ella estaba allí.

—Jeonghan... ¿que haces?— Seungcheol sonaba tan decepcionado como siempre. Se quedó en el suelo. —Contrata a alguien, ya no eres joven, una caída así te romperá la espalda.

Seungcheol se acercó con las manos en los bolsillos y Jeonghan se sentó sacudiendo el polvo, Suni aun intentaba ayudarlo pero la redirigió con la mano para que viera el desastre en el suelo, ella se apresuró a limpiarlo olvidándose por completo de Jeonghan. Su cabello tenía plastas húmedas de yeso ahora. Grandioso, lo que le faltaba.

—Hola Cheol.— Saludó tratando de limpiar su cabello. —Ugh... ¿tendré que cortarlo de nuevo?

—Si no quieres pagar por ello pideselo a tu novio ¿donde está Jihoon?

En lugar de que Jeonghan se levantaron Seungcheol se agachó para hablarle, Suni terminó de limpiar y se fue de inmediato.

—Mi novio se fue a la escuela, es un estudiante muy aplicado.

—Eso te pasa por buscarte jóvenes.

—¿porque piensas que Jihoon podría hacerlo? Es más bajo que yo.— Miró al techo y el enorme hoyo que se había formado tras su caída. —Mi novio es solo un estudiante.

—Solo pienso que Jihoon se ve capaz de hacer cualquier cosa que le pidas... Se te caerá el techo en algun momento.

Rodó los ojos y se puso de pie, Seungcheol lo siguió aun burlándose de él. Para tener una empresa más grande y exitosa que la de Jeonghan Seungcheol se la pasaba demasiado tiempo sobre él, lo visitaba casi todos los días o se paseaba por allí mientras que Jeonghan tenía que trabajar como todo el mundo. Su sueño no era ser rico, no le importaba, solo quería algo que fuera suyo y que lo ayudará a vivir hasta llegar a la vejez. O algo, si es que no moría en el intento, claro.

A veces Jeonghan ni siquiera necesitaba dinero, solo necesitaba que An-Gel no fuera a la quiebra porque tenía empleados que dependían de él para su sueldo. Jeonghan siempre tenía la posibilidad de vender una historia interesante sobre el señor Choi y vivir de ello, o de Seungcheol, o como sea, siempre podría encontrar a alguien con el suficiente dinero. O podría morir y ya, lo que sea.

Apostaba que Jihoon tampoco aspiraba a ser millonario.

—Tiene exámenes.

—Jaja.

—Callate.

La sonrisa burlona de Seungcheol no desapareció. El tipo agitó la mano cerrando el tema y se lanzó a la silla frente al escritorio, Jeonghan se quedó de pie.

—Es el aniversario ¿cierto?

Si, lo era. Se encogió en hombros.

—Seis años de An-gel, se conmemorará con una reunión, Suni ya se encarga de eso.

—Quien debería encargarse de eso eres tú, eres el dueño.— Seungcheol rodó en su silla. —Pero como no lo harás puedo hacerlo yo por ti.

—Suni trabaja aqui. Tu no.

—Pero soy inversor así que no puedes quejarte.

—Si sigues así lo terminaré haciendo yo.

Bromeó, pero la sonrisa de Seungcheol desapareció de un momento a otro.

—¿lo harás?

—Si ¿porque no? Estaré aqui despues de todo, no voy a irme. Se cumplen seis años así que será una ocasión especial.

—¿aqui?

Exhaló una risa porque Seungcheol estaba haciendo demasiadas preguntas. Como sea. Aun tenía cosas que hacer. Miró el reloj. Solo faltaban siete horas con seis minutos.

1:44 pm

Que irritante. Aunque Suni le había asegurado de que ella se encargaría de todo ahora había problemas, no por culpa de Suni, sino por el molesto dueño del salón que cambiaba las reglas a cada momento. De pronto no podían usar el estacionamiento por una absurda razón, o no podían entrar a la cocina hasta cierta hora demasiado tarde. Suni hizo todo lo posible para tratar con ese hombre, pero al final Jeonghan tenía que ir y aclarar las cosas. Bueno, aun tenía cuatro horas con veintisiete minutos libres.

—Tuvimos remodelaciones hace poco así que los baños tambien están cerrados.— El hombre no paraba de hablar. Jeonghan estaba cansado ahora. —Estoy siendo demasiado amable al no subir el precio, como dije, está remodelado, eso aumenta el costo del salón.

Bien, quizás era un poco su culpa, Jeonghan había buscado lo más barato que le recomendó Seungcheol, y tambien tuvo advertencias de que el dueño anterior había muerto y a cargo se quedó uno de los hijos consentidos. Un dolor de cabeza que nadie quería soportar. Pero Jeonghan lo aceptó por que el precio era barato.

—No cocina, no estacionamiento, no baño... Bien.— Aceptó con calma. Alegar con esta persona no le serviría de nada, a este hombre no le interesaban los contratos o los acuerdos serios. No había nada que Jeonghan argumentara que fuera de utilidad, era como discutir con un niño. —¿cuanto más piensas cobrar por abrir los baños?

El hombre sonrió.

—Aunque no están listos podría hacer una excepción...— Este tipo...sonrió lo mejor que pudo. —La chica de antes...

—Olvidalo, pide otra cosa.— Respondió tan rápido que su sonrisa titubeó. —

—entonces no se podrá hacer esa excepción.

Ugh... Si tan solo fuera como antes Jeonghan podría convencerlo, incluso si este tipo no estaba interesado en los hombres terminaría por caer después de confesarle que era un omega, pero ahora las cosas eran diferentes. Jeonghan no podía cometer los mismos errores. Ni siquiera intentarlo, aunque... Si Jihoon se pusiera celoso sería interesante, gracioso, quizás Jihoon sentiría el "aroma desagradable" en él y lo sabría.

¿volvería a comportarse como un alfa? ¿algo como morder a este tipo y hacerlo sangrar?

Sonrió con la idea en su cabeza. apretó los labios y cubrió su rostro con una mano.

—Ah... este estrés...— Llevó una mano a su estomago. —Es malo para un omega gestando ¿lo sabes?

El hombre abrió los ojos con sorpresa.

—No... no eres un omega ¿lo eres?

Jeonghan aflojó su corbata un poco, como si quisiera respirar y desabotonó los dos primeros botones con una sola mano, tratando de "tomar más aire" y tambien dejó ver su marca.

—Mi alfa y yo queriamos tanto este lugar, es un día especial para nosotros. Y aunque le prometí que no me esforzaría por el bien de bebé... estoy aqui.

Los alfas daban miedo. Aunque Jeonghan pudo haber usado unicamente la carta del alfa, añadir un bebé ponía más presión y le daba una carta de vulnerabilidad. Sin mencionar que intensificaba su carta de alfa, porque si un alfa daba miedo, un alfa protegiendo a su omega y a su bebé era demasiado peligroso. Jeonghan tenía una marca facil de mostrar. Si este tipo no era un completo idiota sabría que era el momento de ceder. No tenía opciones.

—Vere que puedo hacer...

Por suerte su marca era tan escandalosa que fue suficiente. Incluso Suni quien estaba varios pasos atrás tuvo un escalofrío.

2:16 pm

—Que alivio...— Suni suspiró revisando que todo estuviera en orden, las personas entraban y salían del salón. —Jeonghan.

—¿um?

—Tu estás...

—No, no lo estoy.— Sonrió queriendo reír del enorme respiro que dio Suni. —Por suerte el tipo no indagó... la marca fue suficiente.

—Es bastante grotesca...

Jeonghan no podía negarlo, lo era, casi como una cicatriz abierta, un pedazo de piel faltante que no dolía en absoluto, Jihoon la había hecho hace un par de días atrás, y la hizo más profunda que de costumbre, quizás dolió en el momento, Jeonghan no podía recordarlo bien, su cabeza estaba nublada de aquella vez y apenas había visto a Jihoon después de eso.

Exhaló una pequeña risa ante la idea.

Tener un hijo justo ahora no era lo indicado. Lo mejor era nunca tenerlo.

Él no merecía hijos. Seokmin si porque era una buena persona, pero Jeonghan era un monstruo.

Los monstruos no tenían hijos.

3:37 pm

—Huele mal.

Si, no era algo que Minghao tenía que decir para saberlo, ni siquiera necesitaba decir lo que pensaba, su rostro era capaz de expresar el desagrado de una gran manera. Jeonghan exhaló una risa y miró la calle con el alcantarillado desbordándose, ese problema era nuevo y aunque no era suyo Jeonghan tenía que resolverlo antes de que fue demasiado, no quería su edificio inundado con aguas negras.

No esperaba encargarse de eso hoy. Porque hoy no tenía tiempo, pero cuando vio a los trabajadores acercarse y solo "echar un ojo" Jeonghan supo que tenía que hacer algo, tomó a Minghao de la mano, y lo llevó con él hasta ellos, quizás para mostrarle las pocas cosas que sabía hacer bien.

Pero después de ese comentario...

—Este trabajo es muy tedioso, no hay mucho que podamos hacer, es demasiado papeleo antes...— El tipo habló pasándose una toalla por el cuello. Ellos no habían hecho nada aun. —Ya casi son las 4 así que deberíamos irnos ahora y volver otro día.

—Parece que no quieren trabajar.— Dijo Minghao y Jeonghan le dio un golpe.

—Hace demasiado calor hoy, mi sobrino se pone irritante con este clima.— Suspiró Jeonghan. Los hombres sudados asintieron, ninguno estaba especialmente molesto con Minghao, al parecer el niño no era capaz ni levantar esas reacciones. —Tengo algunos refrescos guardados en mi oficina, si gustan mi sobrino los traerá. Si esperan un poco más tambien podremos darle refrigerios.

—¿esperar? ¿cuanto?— Preguntó otro trabajador del fondo.

—Unos minutos más.— Jeonghan sonrió mientras que Minghao lo miraba como si fuera un animal extraño. —Tenemos una reunion más tarde y el olor del alcantarillado nos hizo mover de lugar la reunión. Si tarda otro día no me quedará de otra más que darles trabajo en casa a mis empleados.

¿No era más facil decir que solo les ofrecería algo esta vez? No, no lo era. Jeonghan no tenía que ofrecerles nada para que ellos hicieran su trabajo, pero ellos seguirían dandole vueltas porque no tenían interés en los demás, para ellos este era solo otro dio aburrido de trabajo, si podían escaparse antes mucho mejor.

—Pues ya que...

El hombre giró con los demás alzando el brazo, gritó algo para sus compañeros y por fin se pusieron a trabajar. Así que se giró y obligó a Minghao a llevarle refrescos a los trabajadores mientras que el chico se quejaba en silencio.

—Es su trabajo.— Se quejó Minghao cuando entraron de nuevo al edifico. —Esta bien si quieres darles refrescos o lo que quieras, pero no lo hagas a cambio de que trabajen.

—Es mejor así. ¿prefieres discutir con ellos?

—Si.

Soltó una risa. Minghao era como un niño testarudo, tan inocente y bueno como Seokmin pero con un sentido de la moral más fuerte.

—Seokmin no discutiría con ellos.— Se burló mirando su reloj mientras que Minghao comenzaba a quejar de nuevo. eran las tres cincuenta y dos —Dos horas...diecinueve....

—¿que dijiste?

—Nada.

4:48 pm

una hora veintitrés minutos. El edificio estaba solo ahora, casi todos sus empleados tenían el día libre, y los que no lo tenían ya se habían ido. Por lo general salían hasta las siete pero ahora era especial. Tenían el aniversario de la empresa. Suni terminó de recoger sus cosas y se despidió con la mano. Entonces jeonghan pudo observar lo oscuro que se veía todo.

Minghao ya se había ido por lo que ahora Jeonghan solo estaba esperando. ¿esperando que? Ya tenía que irse. Su teléfono sonó.

—Hola Cheol.

—No irás ¿cierto?

Que gracioso. Respiró profundo.

—Da un buen discurso por mi. Como inversor, y que Suni de el suyo tambien, luego la gente va a pensar que por fin LuminA adquirió An-Gel.

Hubo silencio a traves de la linea. No supo cuanto tiempo pasaron así, callados con el celular pegado a la oreja. Sabía que Seungcheol quería decir algo así que esperó.

Por que en realidad si sabía cuanto tiempo estaba pasando.

Una hora veintiuno.

—Puedo...

—No, no puedes.— Interrumpió porque sabía lo que estaba a punto de decir. —Da el discurso por mi, Cheol.

De nuevo, en silencio.

Una hora diecinueve.

—Esta bien, Han. Nos vemos.

—Nos vemos.

Colgó.

Una hora dieciséis.

Solo tenía que esperar.

5:14 pm

"No podre ir por tí, tengo cosas que hacer."

5:14 pm

Llamó tan rápido recibió ese mensaje. Jihoon respondió, por suerte.

—¡Dijiste que...!

—¡Se lo que dije! Pero no tengo tiempo ahora, tengo un problema y necesito...

—¡Necesito que me lleves!

—Pide un taxi, Jeonghan. No sé, aun estas a tiempo, por eso prefiero llamarte y avisar, se que tienes el tiempo contado, yo ya conte el mio y no puedo ayudar esta vez.

Cincuenta y siete minutos.

—Intenta... no se ¡Haz lo que tengas que hacer más rápido! Aun quedan cincuenta y siete minutos ¿donde estás? ¡Si es algo con tus tareas puedo ayudar a conseguirte otra fecha de entrega o pagare tus exámenes de recuperación!

—Wah...— La sorpresa de Jihoon lo hizo sonrojarse. —¿es demasiado importante? Le diré a Hoshi que...

—No. No quiero que me ayude Hoshi.

—¡Entonces pide un taxi!

Este hijo de...

Cincuenta y cinco.

—No tengo tiempo para esto...— Su reloj seguía avanzando mientras que él discutía. —Vete al demonio.

Colgó.

5:26 pm

Estaba bien, aun tenía cuarenta y cinco minutos. Miraba por la ventana del taxi el continuo trafico por delante y detrás, el auto estancado en medio de la calle. Estaba bien, aun tenía tiempo, estando en medio de la ciudad era común que hubiera trafico a esta hora. Pero estaba bien, Jeonghan podía esperar. Miró su reloj de nuevo. Cuarenta y cuatro.

Podía llegar.

Eran treinta y tres minutos de camino y ya habían pasado algunos minutos desde que salieron así que no había tanta prisa, con el trafico se sumaban un par de minutos. Unos... ¿cuantos? ya habían pasado un par de minutos así que... quizás veinte minutos de trafico, o... menos ¿porque no estaba pensando bien?

Estaba bien.

Cerró los ojos.

5:39 pm

El golpe lo hizo saltar. Y tenía que ser una jodida broma. Giró a ver y si, el auto de atrás había chocado con el taxi. Genial. Apenas escuchó lo que dijo el hombre, solo pagó y se bajó del auto, corrió por la calle hasta llegar a la estación de tren. Aun no era demasiado tarde.

treinta y dos minutos eran suficiente, ya se había acercado por lo que el tren tomaría unos dieciséis minutos en llegar más los cuatro minutos que tardaría ahora en llegar a la estación, despues tomar el autobus le tomaría otros cinco más dos esperarlo si tenía suerte, veinticinco minutos, llegar al destino en siete, por lo general, bajar y caminar unos cuatro. treinta y seis minutos. No, no era suficiente tiempo. Si corría podía hacer de esos cuatro minutos dos, pero no era suficiente... Si se apresuraba ahora, entonces, llegaría a tiempo.

5:57 pm

Su celular sonó. Apenas había bajado del tren y tenía que correr, pero aun así respondió.

—¿que quieres?

—Estoy libre ahora.— La voz de Jihoon lo irritó. —Si necesitas ayuda...

—¿puedes llegar en cinco minutos?

—¿a donde?— Mandó la ubicación mientras seguía caminando. —Si, ahora voy.

6:00pm

El sonido de la campana sonó tan bajo que apenas lo escuchó, tomó sus cosas y saltó de su pupitre corriendo entre los demás. Aun tenía tiempo para llegar, si corría rápido entonces estaría allí en poco tiempo, quizás unos minutos, no importaba, mientras más pronto llegara entonces era mejor, solo tenía que esforzarse un poco.

Tropezó con alguien pero no le importó, siguió corriendo ignorando a todos, incluso si tenía que empujar o saltar personas entonces lo haría.

—¡Jeonghan!

6:02 pm

Tan pronto vio a Jihoon llegar se subió a la motocicleta. Aun estaba a tiempo ¿porque tan alarmado? Solo quedaban nueve minutos, pero cuando le mostró la dirección a Jihoon.

—¿estás loco? Son trece minutos.

—No, son nueve.

—No soy Flash, son trece minutos.

—Haz que sean nueve.

—Tengo una motocicleta, no una maquina del tiempo.

—Por favor... haz que sean nueve.

—Aunque...

—Por favor, Jihoon.

Jihoon suspiró.

—Eres imposible.

El que Jihoon arrancara fue un alivio.

6:04 pm

Apenas podía respirar, el aire no le llegaba a los pulmones pero seguía corriendo incluso cuando las personas trataban de detenerlo, intentaban hablarle pero los estaba ignorando a propósito, no quería perder más tiempo.

10:06 am

—Mira Hannie ¿te gusta él verdad?

Jeonghan asintió recostado sobre la cama, daba vueltas en ella aunque su papá le había pedido que no lo hiciera porque podría molestar a otros. Jeonghan no molestaba a nadie.

—Si, me gusta.

El hombre que estaba en la televisión continuaba hablando, era solo un comercial.

—Si, se ve divertido.

—¿el tipo de las noticias?— Preguntó su papá confundido dejando la bandeja de comida frente a Jeonghan. —¿porque les gusta verlo?

—Es divertido.— Dijeron al mismo tiempo.

—Dice chistes.— Aclaró Jeonghan.

—Si, nos gusta.— La mujer sonrió. —Han y yo siempre lo vemos ¿verdad hannie?

Asintió.

—Umm... parece que va a cambiar de horario.

— pm

—¿En que casa?

Preguntó Jihoon haciéndolo mirar, iban tan rapido que estaba a punto de vomitar. Las casas frente a ellos parecían todas iguales, una tras otras viéndose como en un catalogo o una revista. Ahora pocas personas vivían allí. Todos preferían vivir en edificios en el centro de la ciudad.

¿que hora era? intentó ver su reloj, pero sus ojos se abrieron al verla. Apuntó.

—Allí.

10:08 am

—¡No puede cambiar!— Jeonghan se quejó. —¡No podré verlo! ¡Ya no quiero ir a la escuela!

Escuchó la risa de su padre, pero él no dijo nada.

—Hey, sales a las seis de clases, tienes diez minutos para llegar a casa ¡Si corres lo veremos juntos!

—No le enseñes eso al niño... Jeonghan, tienes que venir con cuidado.

—Diez minutos es muy poquito...No quiero ir a clases.

La sonrisa de ella iluminó el cuarto, era bonita.

—Confio en que llegaras a tiempo, te prometo que lo veremos juntos. ¿esta bien?

Y aun con un puchero en el rostro asintió.

— pm

Bajó de la motocicleta buscando las llaves, no tardó en encontrarlas así que solo abrió la puerta empujándola y subiendo por las escaleras, no había nadie en casa así que no tenía que saludar, ni siquiera se preocupó por Jihoon. Solo corrió escaleras arriba.

Entró a esa habitación y buscó el control remoto. Aun tenía tiempo, estaba seguro de que aun tenía tiempo, Jihoon conducir tan rápido que se saltaron todos los rojos e incluso casi chocaron una vez, así que había llegado a tiempo. Encendió la televisión con las manos temblando, apenas podía respirar.

Y entonces vio la hora.

6:10 pm

¿6:10?

¿porque?

—¿es tu casa o estas hallándola?— Preguntó Jihoon cruzándose de brazos en la puerta. —Te voy a matar por hacerme venir hasta aqui para ver la televisión...

6:10 pm

Miró la casa y trató de entrar, pero tan pronto dio un paso dentro...

—¡Jeonghan!— Su padre lo sostuvo.

—¡Llego tarde!— gritó tratando de zafarse. —¡No voy a alcanzar a ver al señor Jungchan!

—Jeonghan...— Su padre sonó triste.

—¡Le prometí a mamá que lo veríamos juntos! ¡Tengo que llegar a tiempo!

6:11 pm

Comenzó a reir. Claro, era una tontería, algo tan absurdo que Jihoon debería estar confundido, Jeonghan siempre fue un poco extraño, pero esto rayaba en la irritación, no debería estar haciendo este tipo de cosas siendo un adulto. Tenía que disculparse con el alfa.

Pero aun así dio una enorme sonrisa y miró la televisión.

El programa apenas comenzaba. Una mujer apareció.

—¿um? ¿donde está Jungchan?

—¿Jungchan?— Jihoon alzó una ceja. —¿el viejo de las noticias? ¿que no se retiró a mediados de año?

¿retirarse? ¿porque?

—¿como?...

Claro. Jeonghan ya no era un niño, en cualquier momento este hombre iba a retirarse por la edad. Claro. Se sentó en la cama mirando al suelo.

—Hey...

¿pero porque se había retirado? Justo ahora que llegó a tiempo... Los años anteriores siempre llegó tarde, cinco minutos, tres minutos, catorce, no importaba cuanto se esforzara al llegar a la casa y mirar el reloj el programa ya había comenzado, y era llegar tarde. Esta vez se aseguró de hacer las cosas bien, y llegó a tiempo, incluso cuando tuvo problemas. Él había llegado a tiempo. ¿entonces porque ahora? Debería de ser gracioso y reírse, pero solo estaba mirando la pantalla.

Miró la cama.

Solía recostarse allí para ver el programa. Todos los años venía aqui solo para ver ese estupido noticiero, era absurdo. Muy absurdo, pero era lo que hacia todos los años. A veces con Seungcheol, a veces solo. Y esta vez... Que tonto.

—Tengo treinta años...— Balbuceó. —Es normal que las cosas cambien... pero no esperaba que Jungchan se fuera tan pronto.

—¿el...presentador? ¿estas bien Jeonghan?

Miró la fotografía del buró. Su madre sonreía, y su padre. Y él. La televisión era vieja, casi obsoleta, la cama, y los muebles tambien, pero no tanto, las cosas guardadas tenían cierto aroma que delataba su edad. Y todo parecía igual.

—Cuando era niño... Mi madre...— Su garganta se cerró. Ya no era un niño. —Hoy...

Sintió la mano de Jihoon en su mejilla.

—No hace falta que me expliques. Ya sé que eres extraño.

Tomó la mano de jihoon y cerró los ojos.

Ya no era un niño. Entonces ¿porque estaba llorando como uno? Su corazón apretado mientras las lagrimas caían y su garganta se abría solo para sacar los quejidos vergonzosos. No había razón para que llorara, no había razón para regresar a esa casa no había razón para ver un estupido noticiero. No había razones... él no...

Tal vez si hubiera llegado un minuto antes...

Al menos habría podido verla de nuevo. Su madre había tenido el control remoto en la mano, el canal y el noticiero corriendo mientras que su padre iba a revisar que todo estuviera bien. Y después escuchó a Jeonghan entrar.

Después de esa mañana no la volvió a ver nunca.

Deseaba ser un monstruo y no sentir nada.

6:38 pm

—Si te pidiera que te lanzaras desde mi piso apuesto que aceptarías.

—Si.

—¿ni siquiera intentarás negarlo?

—¿para que? ya lo sabes.

Jihoon suspiró dejándose caer en la cama. Jeonghan lo siguió recostandose a su lado. Ninguno sabía que hacer ahora, el noticiero era aburrido y Jeonghan había llorado lo suficiente sin decirle una palabra a Jihoon.

Miró al alfa en silencio y él le regresó la mirada. De alguna forma se sentía como si Jihoon fuera capaz de hacerlo todo, como si pudiera hacer cualquier cosa que Jeonghan le pidiera a pesar de estar ocupado o lidiando con su propia vida. Y eso era encantador. O no, Jeonghan no debería ser así, jeonghan debería ser un adulto y saber que eso no estaba bien.

O debería ser egoista y quedarse a jihoon. A pesar de la diferencia de edad. A pesar de que Jihoon podría conseguir a alguien mejor. A alguien que no le ocultara nada y no fuera tan ridículo. Sonrió.

—Eres libre de irte cuando quieras.

—No.

—¿crees que no te dejaría ir?

—No. Te obligaría a atarme a ti. Ya no tengo salida desde que esperé esos siete minutos.

Bien, Jihoon tenía razón. Ninguno era libre ahora. Extendió los brazos atrapando al alfa y rodó sobre el colchón quedando sobre él. Ninguno de los dos era libre ahora, y estaba bien, porque este era un mutuo acuerdo sin sentido.

—Que bien.

Jihoon volvió a colocar una mano en su mejilla, apartando su cabello.

—Este lugar huele tanto a ti. No quiero irme.

—Bienvenido a mi casa, Jihoon.— Lo besó. —Y bienvenido a la cama donde murió mi mamá. —Jihoon se levantó tan rápido que Jeonghan comenzó a reir. —No deberías empujarme así.

—¡No te habría empujado así de haberlo advertido antes!

—Solo digo... que no deberías empujarme así, esta mañana caía de las escaleras.

Jihoon apenas giró.

—¿te lastimaste?

—Y también corrí mucho.

—¿estás lastimado?

Jihoon se acercó. Jeonghan volvió a sonreir, y quizás fue su sonrisa que lo delató, Jihoon se preparó para lo que sea que se le ocurriera decir a Jeonghan.

Por suerte Jeonghan siempre iba adelante.

Abrió la boca y habló.

8:00 a.m

Mierda...

Jeonghan no había esperado esto, aunque fuera un omega ¿no era demasiado extraño? Aunque pasar un celo con un alfa no debería significar nada aun así compro una prueba de embarazo por curiosidad, o por intuición.

Porque al parecer los monstruos tenían premoniciones.

...
Pinche capítulo eterno y de paso culero. ni modo, asi se queda.