CAPÍTULO 115
Valery.
Maya y yo después de pensar por un momento decimos quedarnos con la segunda casa porque necesitaba menos trabajo, y para que fuera decidí purificarla comenzó por el primer piso la sala, el comedor y el baño después de recitar un hechizo de purificación dejaron de tener una mala vibra también parecían más acogedores, pero volvieron hacer contaminados por una energía oscura que venía del sótano por lo fui para acabar con el problema de raíz cuando entre rápidamente me di cuenta que la energía oscura de debía a rituales satánicos donde hicieron sacrificios y por eso me dio más lidia purificar el sótano también eliminar las manchas de sangre.
Purificar el resto de la casa fue más sencillo al terminar le dije a Maya que ya podimos irnos, pero cuando estaba por recitar el hechizo de teletransportación se abrió un portal que salieron dos chicas vestidas de negro que al vernos se convirtieron en demonias después nos comenzaron atacar, pero logramos esquivar todos sus golpes eso las hizo enojar invocaron sus armas
en cuánto a mi recite dos hechizos uno de protección, y otro para invocar unas criaturas luego me transforme, después de un feroz combate donde las demonias sí no fuera por el hechizo nos hubieran vuelto pedazos logramos salir victoriosas. Mientras eso pasada Luisa volvía a su forma humana.
Luisa.
Al ver qué las sirenas y tritones estaban muy asustados opte por volver a mi forma humana, y después de meterme al agua comencé a pasar mi lengua por el cuello de Roxana quien estaba entre molesta y excitada, pasado un rato mi chica hizo las presentaciones pertinentes. Mientras estábamos jugando en agua note que al tritón que le estuvo coqueteando a Roxana no había entendido del todo que ella era mia por lo que después de acercarme le susurré que sí seguía que seguía mirándola lo iba a casar eso fue suficiente para que optará por retirarse, pasado un rato como quería tener relaciones con mi chica le dije que fuéramos a un lugar donde nadie nos molestará y Roxana acepto sin pensarlo dos veces cuando estuvimos lo suficientemente lejos salimos del agua.
Luego de acostar a Roxana en el pasto me acomode en medio de sus piernas para pasar mi lengua por su vagina aumentando lentamente la intensidad de mis lengüetazos luego comencé a chupar y morder su clítoris mientras introducía dos dedos en el coño, mi chica mientras gemía movía sus caderas pero cuando estaba por llegar al orgasmo comenzamos a escuchar unos ruidos muy fuertes
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