Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

OO7

NaEul lloraba en los brazos de su querido mejor amigo, este la sostenía con calidez en la cama, escuchándola sufrir por cada rechazo tan 'repentino.' 

—E-Es que no entiendo, pensé que yo le gustaba. Le iba a dar una oportunidad. 

JiMin apretó su mandíbula— Tal vez, es una señal del destino, te quita a los fracasados porque sabe que en el futuro llegará algo mejor para ti. 

—¿Algo mejor? Tch. Yo solo quiero a alguien que no corra de mi a la semana. 

—Ya vendrá esa persona, ¿Quién sabe? Puede que sea quien menos te imagines. —canturreo.

Para NaEul enamorarse es algo serio, algo que por el momento no ha experimentando. Por supuesto, quiso a personas, quiere que le demuestren afecto de distintas maneras. Tiene a personas que la quieren, entre ellas, Park JiMin. Su lindo, adorable y manipulador vecino, el cual jamás sería capaz de hacerle algo malo a ella. Entre sus brazos, no se percató del momento que se quedó dormida. 

AÑOS ATRÁS

JiMin observó al individuo dentro del local. Aquel joven un poco más mayor era hijo del dueño, el amable Señor Min, quien siempre les daba dulces para devorar en segundos. Su pálido hijo era conocido en el vecindario por siempre estar con una expresión fría en su atractivo rostro, hacia sonrojar a las niñas sin siquiera intentarlo, y entre ellas, NaEul. Al Park realmente no le interesaría la vida de Min YoonGi si fuera en un contexto diferente, pero la persona que amaba estaba enamorada de él, así que… ¿Por qué no romperle la ilusión de una vez? Después de todo ya lo había hecho antes. 

Entró, escuchando la campanilla sonar. YoonGi levantó la vista de su móvil y lo vio.

—JiMin —lo saludo— ¿Lo mismo de siempre? 

—En realidad, hoy buscaba interferir en la rutina. 

Según sus cálculos, NaEul estaría entrando al local entusiasmada en dos minutos. Puesto que a las cuatro salía de su clase de piano, y media hora después corría hacia allí para ver al Min. Teniendo el tiempo contado, JiMin estiró su mano por sobre el mostrador para jalarlo de la playera, el contrario no pudo verlo venir cuando ya lo estaba besando. 

Era su vieja técnica, tomarlos desprevenidos, y luego recibir un fuerte golpe por herir sus masculinidades sensibles. 

—¡Yoon oppa, ya vi… —su voz se apagó al verlos, la puerta quedó semi abierta y los ojos en grande de YoonGi la vieron— ne.

Más, NaEul no dijo nada. En silencio retrocedió hasta irse. El mayor de diecisiete años se separó bruscamente del menor de quince, este pasó un dedo por sus gruesos labios y sonrió divertido. 

—Muchas gracias por tu contribución, hyung. En un futuro no dudes en buscarme si necesitas algo.—con solo un guiño se fue de allí en busca de su mejor amiga. 

—E-Esta loco.—exclamó aturdido.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro