-¡No es verdad!

Draco Malfoy salió a pasos rápidos de su sala común mientras que Pansy y Blasie caminaban tras él.

-Draco calmante, solo ha sido un comentario.

La morena agarró el brazo del rubio consiguiendo detenerlo.

Draco se cruzó de brazos y miró a sus dos amigos con una expresión de molestia.

-A mi no me gusta Potter.

Blasie rodó los ojos agotado.

-Si, eso díselo a mi espalda, la cual usaste para subirte al árbol el día que Potter caminaba por el patio.

El rubio se dio la vuelta ofendido y se marchó de allí.

Pansy fulminó con la mirada a su moreno amigo, quien se encogió de hombros.

-Sólo he dicho la verdad.

La chica suspiró.

-Lo sé, pero ya sabes como es Draco. No nos dirá nada a si le echamos cosas en cara.

Blasie asintió y ambos partieron en busca de su rubio amigo, el cual parecía haberse ido.

Cuando salieron a los patios y encontraron a su amigo este estaba apoyado en un árbol completamente rojo.

-¿Qué ocurre Draco?

Preguntó Pansy preocupada.

El rubio no dijo nada, simplemente señaló con la cabeza a un punto tras el árbol.

Cuando sus amigos se asomaron para ver lo que ocurría divisaron a Harry hablando con Cho Chang.

Ambos Slytherins pusieron muecas de asco y miraron con desagrado a la chica.

-Puede que si me guste Potter.

A pesar de haber sonado como un susurro ambos lo escucharon bien, ya que se giraron rápidamente hacia Draco.

-¿Qué has dicho señor odio a Potter?

Dijo Blasie sonriendo divertido.

Draco se sentó en el suelo y les miró a ambos molesto.

-No pienso volver a repetirlo.

Pansy se sentó al lado de el rubio y apoyó su mano en su hombro.

-Odio a esa perra.

Susurró Draco.

Blasie se sentó también junto a sus dos amigos y miró al rubio con una sonrisa comprensiva.

-Está bien si te gusta Potter, podría ser peor.

-Si.

Interrumpió Pansy.

-Podría gustarte Weasley.

Blasie se removió incómodo en su sitio al escuchar lo que dijo la chica.

-¿Cuál de todos?

Los tres amigos soltaron carcajadas y Draco sintió como la ira bajaba poco a poco.

-Ahora enserio, si tan enfadado estas con Chang siempre podemos castigarla. Somos de la brigada inquisitorial.

Dijo el moreno con una sonrisa.

-Ooo, podemos hechizarla y hacer que se le caiga el pelo y se le llenen la cara de granos con pus.

La sonrisa de Pansy podría haber aterrado a cualquiera, pero no a sus amigos.

Draco les miró pensativo a ambos, intentando llegar a una solución.

-Me gusta lo que ha dicho Pansy.

La chica aplaudió divertida.

-Vayamos al aula de pociones, creo que a esta hora está vacía.

Los tres Slytherins se levantaron y encaminaron sus pasos hacia las mazmorras.

Al pasar al lado de Harry, Blasie tuvo una gran idea.

-¡Nuestro pequeño Draco se ha enamorado!

Blasie no pudo hacer nada más, pues un Draco enfadado y sonrojado le agarró del brazo y le arrastro lejos de allí, insultandole.

Pero Pansy se quedó a observar, y pudo ver como Harry había perdido todo el interés en su conversación con Cho y ahora seguía con la mirada a Draco.

La chica sonrió satisfecha y se dispuso a seguir a sus amigos.

Potter no odiaba tanto a Draco como aparentaba.