Doce meses después...

"¿Estás seguro de que deberíamos estar aquí?" Estirando el cuello de su camisa y corbata, Ryan gruñó mirando a Tyler. Estaban en el Museo de la Ciudad, donde se estaba realizando la fiesta de Shawn anterior al día de las elecciones. Parecía una muy mala idea. Tal vez si solo estuvieran ellos y Shawn, pero Charlie también estaba aquí. Y sostenía un arma, muy bien, podía destacar. Frunció el ceño, viéndolo guardarla dentro de su saco con una mirada perdida. "Sé que ya dijiste el plan, pero..."

Tyler sacó el cigarrillo de su boca y escupió en el suelo. "Es una trampa. Necesitamos sacar al príncipe de sus casillas donde esté rodeado de toda la prensa. Además, ¿no es lindo?" El hombre sonrió, llevándose el cigarrillo a los labios otra vez. "Exponer su miserable persona la noche antes del gran día."

Una risita detrás de él lo hizo mirar. Charlie apretó los labios, intentando contener su sonrisa. 

"Lo siento. Es la adrenalina." Levantó las cejas sugestivamente y Ryan ladeó la cabeza, apretando los dientes. "Lidiaremos con eso más tarde."

"¿En serio?"

Charlie se encogió de hombros. "Es algo que aprendí mientras recibía entrenamiento sobre armas." Le dio una sonrisita inocente. "Ahora comprendo por qué estos sujetos aman esta vida."

"¿Huh? No estamos cachondos todo el tiempo." Los dos miraron a Tyler y él se encogió de hombros. "No todos nosotros, al menos." Miró a Ryan y le dio un golpe en el pecho. "¿Quieres una?"

Miró el arma que Tyler sacó de su cinturón fijamente antes de sacudir la cabeza. "Nah. Realmente no me gustan. Prefiero usar las manos."

"Está bien. Charlie es bueno, te cubrirá." 

Tyler tocó el pequeño audífono en su oído antes de murmurar algo y decir que regresaría pronto. Ryan se recostó al gran muro de piedra antes de exhalar con fuerza, volviendo a tirar del cuello de su camisa. Estaba apretado como el infierno y era una noche caliente. Claro, no tenía nada que ver la situación en donde estaban. Era lo que habían esperado por meses, ¿no? 

Charlie se apoyó contra él, envolviendo los brazos en su cintura, haciéndolo sentir ligero y más tranquilo.

"Es increíble que hayamos regresado al lugar donde nos patearon el trasero hace más de un año, ¿no crees?" Ryan pasó los brazos sobre sus hombros y sonrió, recordándolo. Había sido tan vergonzoso en ese momento. "Y regresamos a terminar con todo."

"Suenas emocionado."

"Por supuesto." Exhaló con fuerza. "¿No lo estás tú? Es el fin, después de hoy... bueno, tendremos que lidiar mucho con los medios y la prensa, pero seremos libres. De todo."

Ryan asintió, apretándolo más cerca y pensando en el plan. Claro que lo recordaba, es solo... que estaba nervioso. Por muchas razones. El plan podía salir mal, podrían ser pateados fuera de la fiesta o el lugar podría estar lleno de cómplices. En realidad estaba casi seguro de lo último, porque todo indicaba que la madre de Charlie también estaba aquí con su esposo. Y eso solo significaba problemas.

"¿Qué pasará cuando la veas?"

Charlie se quedó quieto. "¿A mi madre?"

"Mhm."

"¿Asustado de que vaya a congelarme y echar a perder el plan?" Ryan no quería decir que sí, pero tampoco podía decir que no lo había pensado. "Es mi mamá. Pero no tengo sentimientos hacia ella." Enterró el rostro en su pecho y suspiró. "Se escucha mal y me hace sentir terrible, pero jamás supe lo que se sentiría ser amado por ella, nunca me abrazó, jamás me dijo que era un buen niño. Ella no quería estar relacionada conmigo. Y está bien. Es su vida y sus problemas. Tal vez haya algo feo y oscuro dentro mi hacia ella, pero no es algo que me haga replantearme mis decisiones. Especialmente cuando sé que ella también estuvo involucrada con la muerte de tus padres. Ellos probablemente era buenas personas antes de ser corrompidos por mi madre. Lo siento."

Ryan le levantó el rostro. "Ya deja de disculparte por eso, cariño. No es tu culpa."

Y era muy probable que sus padres hubieran tenido el mismo destino de cualquier forma si su manera de vivir era un indicativo. Aún así, apreciaba que Charlie intentara consolarlo en un momento como este. Debería ser todo lo contrario, pero todavía estaba agradecido.

"De acuerdo, avecillas, es hora del show." Tyler salió de los arbustos y los miró con las manos en las caderas. Sus ojos fueron hacia Charlie. "Todos están aquí."

Charlie dio un paso atrás y asintió, girando el rostro para ver a Ryan. "Estoy listo."

"Si tú lo estás, entonces yo también." Le dio una suave sonrisa antes de ver a Tyler. "¿Dean no se unirá?"

"Ya está dentro, vigilando el área." Él se acomodó el corbatín y el cabello antes de asentir. "Yo seré su sombra por la noche hasta el gran momento. No quiero sonar repetitivo, pero prepárense para cualquier cosa." Señaló las escaleras y comenzaron a subir mientras Tyler seguía hablando. "No coman nada, no toquen las bebidas, si pueden crear un buen juicio, eviten estar cerca de personas que se vean sospechosas. Charlie, no hables con la prensa por ningún motivo, inventa una excusa. Ryan, es el momento de ser el novio posesivo y obsesivo que eres, no dejes que nadie lo toque y a quién insista, intimídalo. No es la noche para convivir." 

Ryan lo miró con una mueca, pero él tenía razón. "Con solo ver el miserable rostro de Shawn tendré suficiente para ser un matón."

Charlie lo golpeó con el hombro.

"Me gusta esa actitud, consérvala para más tarde."

"No podría ser así contigo ni aunque lo intentara."

"Aw. ¿No eres adorable?"

"Qué asco." Tyler rodó los ojos y se detuvo frente a la puerta trasera del Museo. 

Podían ver las luces y las personas caminando adentro, todos bien vestidos y charlando con sus acompañantes. Ryan tomó una profunda respiración y miró a Charlie mientras él mantenía la vista dentro, como un halcón. Ryan solo podía pedirse a sí mismo ser útil y no estorbar. Mantener a Charlie a salvo y con un poco de suerte, moler a golpes a Shawn hasta la muerte. Sería una noche muy pacífica después de eso.

Tomó su muñeca y esperó hasta que sus ojos se encontraron. "Te amo," susurró. "Pase lo que pase esta noche..."

"Todo saldrá bien." Charlie se estrelló contra él y lo abrazó con tanta fuerza que sus costillas se apretaron, pero fue solo tan reconfortante que lo dejó ser y presionó su rostro en el cabello de Charlie. "También te amo. Demos nuestro mejor esfuerzo, ¿de acuerdo?"

Asintiendo, Ryan le levantó el mentón y presionó sus bocas juntas. No le podía importar menos que Tyler estuviera al lado de ellos, lo necesitaba. Tan físicamente que dolía y tanto emocionalmente que se sentía como si de repente pudiera acabar con todos dentro de esa sala con sus propias manos. Presionó las manos en su espalda baja y lo devoró, dejando que el beso se llevara lo último de su inseguridad y llenándolo de valor. Cuando finalmente se separaron para respirar, Charlie estaba sonriendo y Ryan también.

"Hagámoslo."

Tyler abrió las puertas para ellos con la cabeza en alto. Ryan dejó a Charlie caminar ligeramente por delante mientras él tenía su brazo envuelto alrededor de su cintura, protector. No tenía que mirar a los ojos de cada persona dentro del Museo para saber que los estaban mirando fijamente. Ryan no sabía bien qué tipo de personas estaban aquí esta noche, pero de lo que estaba seguro era que muchos de ellos eran aliados de Shawn, lo que significaba que sabían que Charlie presente en el evento no podía ser nada bueno para Shawn.

Fueron escoltados hasta una mesa en el salón principal en medio de estatuas. Frente a ellos varias mesas más que daban espacio a un podio al fondo donde Shawn se pararía en cualquier momento. Grandes pantallas, bocinas, mesas llenas de copas de champaña y comida. Parecía una celebración de ganadores.

Ryan sonrió para sí mismo.

El bastardo estaba tan seguro de que iba a ganar. Casi sentía pena por él, pero el placer de saber que su diversión acabaría esta noche era increíblemente excitante.

Charlie deslizó una mano a lo largo de su pierna, descansando muy cerca de su entrepierna, y se inclinó hacia él. Ryan hizo lo mismo. "¿En qué estás pensando?" Los dedos acariciaron ligeramente por encima de su pene y él frunció el ceño. "¿Enloqueciste?"

"Quizás," murmuró, rozando los labios encima de su oreja. "Solo estoy emocionado."

"Pervertido."

"Como dijiste, lidiaremos con eso más tarde."

Charlie se enderezó y lo miró con interés. "Entonces necesitamos salir de aquí sanos y salvos." Sonrió dulcemente, apoyando la cabeza en su hombro, hablando tan bajo que Ryan apenas podía escucharlo por encima de la música clásica que tocaba una banda en vivo en alguna parte del salón. "¿Ves a alguien sospechoso?"

"Todos," dijo. No era mentira. Para él todas las personas aquí eran sospechosas y difíciles de confiar. Pasó un brazo alrededor de la silla para tocarle el hombro y frotarlo lentamente mientras miraba alrededor de la sala, ignorando las malas miradas que estaban recibiendo. "Pero creo que no nos quieren aquí."

"Es probable. Me pregunto qué está haciendo Dean."

Tyler se inclinó un poco sobre la mesa. Había estado sentado ahí en silencio mirando a los invitados con ojos de asesino mal disimulado. Cualquiera podría pensar que llevaba una mina de armas bajo el saco y así era. El hombre estaba cargado hasta los dientes. 

"Mis chicos confirmaron que la prensa en legítima, sus credenciales son reales, así que ellos pueden ser descartados, lo que es una buena cosa." Inhaló profundamente. "Pero tu madre está en alguna parte con Shawn, probablemente también con su esposo. Ese malnacido tiene un séquito detrás de él y están distribuidos por el salón. Eso es un poco difícil, pero Dean está trabajando en ello ahora mismo." Tyler les sonrió apretadamente. "La noche es joven. No se desesperen demasiado." Luego sus ojos se fueron a un costado y él se levantó de golpe. Ryan se tensó, apretando su brazo alrededor de Charlie. "No está dando entrevistas esta noche. Gracias."

"Pero-"

"No."

"Charles, ¿dónde estuviste todo este tiempo?" Tyler gruñó y fue hacia el periodista que no parecía querer callarse, atrayendo toda la atención hacia ellos como si no fuera suficiente. "¿Por qué vienes ahora, una noche antes de las elecciones? ¿Qué tienes que decir sobre el incidente en la oficina-? Ouch, hombre, maldición. ¡Suelta mi mano!"

Ryan miró rápidamente hacia donde el hombre estaba con un brazo doblado por la espalda y Tyler empujándolo lejos con fuerza. 

"Vete antes de que tengas una mano inútil por el resto de tu vida."

Apartó la mirada y suspiró entre dientes. "No esperaba pasar desapercibidos, pero esto apesta."

"De todas formas, todos nos están mirando."

Después de media hora, Ryan estaba comenzando a irritarse. ¿Dónde demonios estaba Shawn? El Museo estaba lleno a reventar. Celebridades, políticos, empresarios, modelos... pero el personaje principal no había hecho presencia. Le estaba poniendo nervioso. ¿Qué si ya sabía lo que estaban planeando? Era obvio que para ahora sabría que ellos estaban aquí, así que, ¿qué estaba planeando?

Estaba comenzando a llenarse la cabeza con pensamientos absurdos cuando la sala se volvió más ruidosa con aplausos y murmullos.  

Como si estuviera en una película, Shawn apareció por el pasillo. Sonriendo y saludando a todos, tan contento que cualquiera pensaría que lo logró, que sería el alcalde. Un hipócrita que no dudaría en acabar la vida de cada una de las personas en la sala para llegar a su objetivo. Despiadado y malévolo detrás de esos brillantes ojos azules. Ryan ya había conocido suficiente de él como para saberlo mejor, que era una sonrisa forzada.

Nada de este hombre era agradable, su naturaleza lo hizo ser un ser asqueroso y detestable.

A su lado, Charlie se enderezó y cuadró los hombros, con la vista al frente.

Ni siquiera cuando Shawn pasó a su lado, Charlie lo miró. Ryan, en cambio, lo hizo. Y el bastardo sonrió, abiertamente con un tinte oscuro de amenaza en sus ojos que solo hizo que Ryan deseara levantarse y borrarle la sonrisa con uno de sus puños. Lo vio acariciarle el hombro a Charlie y luego continuar con su camino hacia el podio.

Y justo detrás de él, la figura de una persona que Ryan no había visto en años. Los mismos ojos oscuros y vacíos que recordaba. Ella lo miró fijamente sin mostrar una falsa emoción, eran ojos que describían su desagrado y que decían que no era bienvenido. Pero eso no fue nada en comparación a la mirada que ella le dio a Charlie, de disgusto y decepción. 

Como si tuviera el derecho de hacer eso.

Ella no era nadie.

No valía un centavo para Charlie.

Después de que ellos se alejaran, Ryan notó al hombre del que la madre Charlie estaba colgada. Un gran hombre con sobrepeso y corto cabello oscuro, gafas igual de oscuras y lleno de joyería por todas partes en su traje oscuro. Si el hombre los notó, no lo demostró. Simplemente siguió a la mujer a su lado hasta una mesa frente al podio y se sentó, mirando a Shawn.

Tyler los miró y asintió con suavidad.

Era el líder de la mafia. 

Ryan revisó la hora en su reloj, diez minutos antes de las once. 

"¡Es un placer tenerlos a todos ustedes reunidos esta noche en este lugar!" Shawn habló a través de un micrófono, sonriente el bastardo. "A la prensa, a mis amigos y familiares, tengo que agradecerles porque sin mucho de su apoyo no podría estar en el lugar en donde estoy. Sé que este año muchos asuntos personales han surgido a la luz y el nombre de mi familia, una vez más, se ve envuelto en noticias falsas que no hacen más que manchar nuestra reputación. Mi madre," Shawn señaló a la mujer y ella se puso de pie, subiendo al podio para pararse a su lado. "Y a su esposo, que me acogieron todos estos años y me inculcaron la mejor educación que habría podido recibir en la vida. Ellos son un gran pilar del que me enorgullezco en nombrar. Pero, por supuesto, no podría olvidar a alguien muy especial." Ryan se tensó cuando la mirada de Shawn se posó en Charlie fijamente. "Mi querido hermano menor. Charles, por favor, ven aquí."

Instintivamente, su mano intentó tomar la de Charlie para detenerlo, pero él se movió primero. Tyler se veía tenso, siguiendo los movimientos de Charlie cuando se puso de pie. Ryan estaba listo para levantarse también cuando una mano pesada le tocó el hombro. Dean asintió hacia él y caminó detrás de Charlie cuando él se dirigió al podio con una sonrisa pequeña y tensa. 

Tyler no se veía más tranquilo, pero Dean estaba con Charlie, eso ya era de gran ayuda. Aunque Ryan no podía estar tranquilo mientras él no estuviera a su lado. Esto no era parte del plan.

"Ven aquí, amigo." Shawn tiró de Charlie a su lado, riendo mientras el sonido de las cámaras detonaba en el lugar con sus flashes. Claro, los hermanos unidos. "¿Qué sería de mi sin mi hermano? Charlie representa una gran parte de mi vida, una que me ha enseñado muchas cosas, como mejorarme a mi mismo y pensar con anticipación. Me abrió los ojos." La mano que tenía en el hombro de Charlie estaba claramente apretándolo con fuerza. Charlie tenía los labios apretados, ni siquiera intentando sonreír. "Pero también me hizo más... humano. Sin él, yo jamás podría haber llegado tan lejos."

La sala se llenó de sonidos enternecidos y aplausos. La madre estaba sonriendo tensamente, parada al otro lado de Shawn sin mirar a sus hijos.

"Esta noche tan especial, los he convocado a todos para recalcar mis deberes como su futuro alcalde. Porque, como todos sabemos, estoy liderando los índices. Y las estadísticas no mienten." Su sonrisa engreída era tan molesta. Shawn soltó a Charlie y se adelantó un poco. "Así que mi deber esta noche será de asegurarme de que todos nuestros convenios continúen, que nuestros lazos se mantengan unidos en esta nueva era que comenzará muy pronto." El público aplaudió complacido. No tenían idea de lo que ocurriría con la ciudad si Shawn lo lograba. Todo se iría al carajo. "Me estaré reuniendo con los miembros de la prensa en unos momentos, mientras tanto, disfruten de la velada."

Cuando las personas comenzaron a levantarse, Ryan también lo hizo, ignorando la mirada de Tyler. Se abrió paso entre la multitud, sus ojos fijos en Charlie cuando Shawn tiró de su brazo bruscamente y lo arrastró hasta el fondo del podio. Pudo ver a Dean mirando la escena con ojos duros, casi sin parpadear, pero Ryan no tenía tanta confianza en Shawn. Pasó al lado de Dean y subió al podio, sus ojos en la mano de Shawn envuelta en el brazo de Charlie mientras le hablaba de cerca. 

Ignorando la prudencia, Ryan dio su espalda al público, y arrancó la mano de Shawn del brazo de Charlie, metiéndose en medio para separarlos.

"También tú, malnacido inútil, será mejor que no me causen problemas o me encargaré de terminar con sus vidas de una buena vez." Ryan lo miró fijamente, odiando tener que contenerse y no poder empujarle el rostro contra la pared y romperle la nariz otra vez. "Tienen cinco minutos para irse. Si no lo hacen, saldrán a la fuerza."

"Vete a la mierda," dijo entre dientes.

Shawn sonrió, mirándolo. "Vamos. Ponme una mano encima y tendrás una bala en el pequeño cerebro que tienes antes de que esta perra lo note." Él se acercó, sus pechos rozándose, pero Ryan se negó a moverse, apretando los dientes tan fuerte que pensó que se romperían. "Y luego será él, y después el perro de Dean junto con tu hermano. Solo prepárate."

Ryan estaba listo para golpearlo, pero una mano dura lo sostuvo y comenzó a empujarlo lejos junto con Charlie. "¿Qué demonios crees que estás haciendo? Dejando que se meta en tu cabeza." Dean lo regañó, casi empujándolos fuera del podio. "Es casi el momento para que ejecutemos el plan. Solo tomen asiento y esperen mis órdenes."

Con un gruñido, Ryan se soltó de su agarre y tomó la mano de Charlie para volver a sus asientos. Tyler solo sacudió la cabeza mientras Dean se dejaba caer en la silla a su lado. 

"¿Estás bien?"

Charlie parpadeó rápidamente antes de asentir, luego lo miró. "No fue nada," dijo. "Solo estaba siendo típico desalmado de siempre."

Suspiró, no muy seguro de si él estaba realmente tranquilo o si estaba afectado por ello. Miró el brazo de Charlie antes de colocar su mano encima y frotarlo con suavidad. "Te daré un masaje después, de pies a cabeza sin ignorar ningún espacio."

"Oh." Charlie sonrió, riendo un poco. "Eso... eso suena interesante."

Unos minutos después, cuando el foco estaba en Shawn y los medios, Dean y Tyler comenzaron el plan. Los movieron hacia los baños del personal que tenían una puerta trasera que los dejaría a un costado del museo por cualquier emergencia. Aún así, Dean tenía pantallas de la vista de las cámaras de vigilancia, por lo que podían ver exactamente lo que sucedía aunque no estuvieran en el salón.

Tyler miró su reloj por un momento, sacando una pistola. "En cinco... cuatro... tres... dos... uno..."

Las luces del museo se apagaron de golpe y las pantallas comenzaron a parpadear antes de que un documento claro se mostrara en ellas. Una voz alterada leyó el contenido del documento.

"Madelein Loukas, antes de que huyera del país se culpó por la muerte de al menos cinco candidatos a la alcaldía, fue obligada a ir a juicio, pero los dos testigos principales de la investigación jamás llegaron. Estos testigos trabajaban estrechamente con Madeleine Loukas, haciendo el trabajo sucio por ella. Estos testigos, una pareja casada, fueron encontrados muertos en una supuesta explosión en su auto, pero la autopsia demostró que murieron antes del incendio por disparos en sus cabezas." Podían ver los rostros de las personas, las bocas cubiertas por sus manos mientras hablaban entre sí mirando a Madeleine. Ryan sonrió cuando la voz continuó. "La policía dijo que no tenían suficientes pruebas, así que la dejaron ir. Sin embargo, hay videos de vigilancia de ella hablando y amenazando a los testigos asesinados, diciendo que los asesinaría si se atrevían a asistir al juicio. También hay videos y audios comprometedores de los asesinos de Madeleine donde hablan sobre el plan de asesinato y sobre qué hacer con los cuerpos. Como si eso fuera poco, también está el correo antiguo de Madeleine, donde se comunicaba con su amante de entonces, un conocido mafioso y billonario, quien ahora es su esposo." El hombre se tensó, moviéndose lejos de la multitud mientras Madeleine no parecía estar segura de qué hacer cuando los audios comenzaron a escucharse por la sala y sus correos aparecieron en las pantallas. La voz continuó. "Shawn Baldwin y Madeleine Loukas estuvieron envueltos en el asesinato del sr. Baldwin. La evidencia intentó ser ocultada, pero no completamente. Los videos de vigilancia y mensajes de texto encontrados, muestras cómo ambos planearon y amenazaron al sr. Baldwin de poner a sus nombres todas las propiedades, incluyendo la empresa mayor y quitar a Charles Baldwin de la herencia. Cuando el sr. Baldwin se negó, el amante de Madeleine se hizo cargo. De igual manera, Shawn Baldwin acosó a su hermano menor y estuvo cerca de asesinarlo en varias ocasiones."

Su corazón estaba latiendo tan rápido que parecía que estuviera corriendo sin detenerse. Charlie se veía pálido, pero firme, sin apartar la mirada de la pantalla. 

"Toda esta información, incluyendo videos, audios, mensajes y correos, han sido enviados a la policía y se encuentran en camino para realizar el arresto. Si han comprendido algo de lo que se acaba de anunciar, entonces entienden que si Shawn Baldwin gana las elecciones, la mafia tomará el mando de la ciudad. Buenas noches."

Las luces volvieron a encenderse y Shawn se veía como un fantasma, ojos grandes y perdidos mientras su madre se aferraba a su brazo. Luego él se movió y comenzó a buscar alrededor de la habitación con desesperación e ira, pero no encontró nada. Sus labios se movieron y no tenía que ser un experto en leer labios, pero era claro lo que había gritado.

Busquen a Charlie.

"Es hora de movernos." Tyler se adelantó para abrir la puerta trasera. "Ya, ya, ya."

Tyler estrelló algo contra su pecho antes de que saliera. Era una navaja. "Necesitas al menos un arma para esto." Ryan asintió y la guardó en su bolsillo trasero.

Corrieron por las escaleras. Ryan tomó la mano de Charlie, sin mirar atrás mientras seguían a Dean y otro grupo de hombres hacia un lado del museo donde tenían las camionetas listas para escapar. Podía escuchar la respiración agitada de Tyler cerca de ellos, los pasos y las voces altas en alguna parte. Y podía sentir que estaban dirigidas hacia ellos, sabía que estaban siendo perseguidos, pero a menos que salieran del museo, ellos no estarían a salvo.

Estaban cerca de llegar a la pequeña puerta de salida improvisada, cuando un sonido fuerte y vibrante golpeó cerca de su oreja. Apenas pudo escuchar un grito de alguien diciéndoles que se lanzaran al suelo cuando fueron empujados bruscamente. Ryan se las arregló para no golpear su rostro mientras que Charlie cayó de costado, maldiciendo. 

"No te muevas," dijo cuando lo vio sacar el arma de su espalda. Charlie tenía una decidida mirada en el rostro, ni siquiera lo miró y Ryan sintió una extraña sensación recorrerlo. Aspirando una respiración miró hacia atrás. Un grupo de hombres estaban buscándolos, pero la figura en la cima de las escaleras, era claramente Shawn. "Tenemos que irnos. Tu hermano está como loco."

"Con razón." Charlie bufó y se levantó lentamente, Ryan también. Tyler y Dean estaban escondidos en los arbustos, silenciosos y esperando a que los matones de Shawn se acercaran. "Estaba seguro de que querría matarme, pero..."

Dean gruñó en voz baja. "No es momento de conversar. Lárguense de aquí ahora. Las camionetas están esperando afuera." 

"¿Piensan quedarse? ¿Estás loco?" Ryan ayudó a Charlie a levantarse, mirando a Dean fijamente. "Son demasiados."

"Tenemos suficientes refuerzos. Ryan." Dean bajó su arma, mirándolo a los ojos. "Sácalo de aquí. Sabes qué es lo importante en esta misión. Confío en ti para que lo logres." Su mirada fue hacia Charlie y él sonrió con suavidad y afecto. "La policía viene en camino. Asegúrate de darle toda la información a John y que los medios lo vean. Nos vemos pronto."

Charlie se veía tenso, mandíbula apretada pero sus ojos estaban llenos de decisión. Asintió firmemente, tomó la mano de Ryan y tiró de él hacia la puerta. No sabía lo que estaba en la mente de Charlie, y probablemente si esta situación se salía de control, jamás lo haría. Era lo que más temía, que Charlie se cerrara por siempre si alguna cosa llegase a suceder. Jamás podría vivir con ello, y si moría, incluso en ese estado, su alma dolería por él. 

La puerta estaba escondida entre más arbustos fuera del muro del museo, lo que hacía que la salida algo complicada por las puyas y ramas duras, pero lo hicieron. Solo que no había nadie. La calle estaba vacía, ninguna camioneta a la vista y ellos estaban solos.

"No podemos irnos," Charlie dijo, apretando su mano con fuerza. "Tenemos que darle el USB a John."

"Entonces nos esconderemos." 

Miró al otro lado de la calle, había un callejón oscuro y tiendas cerradas con luces apagadas. No era lo mejor, pero era su única opción. No parecía haber nadie más cerca, además del sonido de la multitud a lo lejos y algunos disparos acompañados de gritos desgarradores, ellos estaban en una parte escondida del museo. Su cuerpo se tensó con ansiedad, sintiendo que algo estaba mal. 

Se sentía el aire denso. Y tal vez solo eran los nervios, pero...

"¿Huyendo?"

Los dos se giraron cuando la voz de Shawn se escuchó detrás de ellos. Ryan lo observó con cuidado, las manchas de sangre en su traje de diseñador y en su rostro. Tenía una pistola en la mano que también estaba manchada de sangre y sus ojos estaban tan fuera de foco que parecía demente.

"¿Después de lo que hicieron?" Estaba saliendo de los arbustos, por la misma puerta que usaron. ¿Dónde estaban Tyler y Dean? Ryan quería ir y revisar, pero no había nada en el mundo que lo hiciera separarse de Charlie, no cuando él le estaba sosteniendo la mano tan fuerte que podía sentir sus huesos chocar. Shawn se rió, pero no era un sonido feliz, era desquiciado. "Pensé que... no, sabía que intentarías hacer algo. De hecho tenía una idea de que estabas de regreso, pero estuve tan ocupado asegurándome que sería elegido mañana que decidí ignorarlo hasta que la campaña terminara. Entonces me haría cargo de ti." Se pasó la mano libre por el rostro, limpiándose la sangre antes de sacudir la cabeza y reírse. "Solo por una vez en tu vida... no pudiste dejarme ser el foco. Siempre necesitas toda la atención, necesitas ser el puto niño bonito que nunca avergonzó a su padre. ¿Quieres tú el puesto?" los ojos de Shawn se estrecharon con odio puro, meciendo el arma mientras hablaba y su voz se volvía más alta. "¿Piensas que de esa manera nuestra madre finalmente te aceptará? ¡Nos arrebataste todo! Tu y tu estúpida personalidad de perro callejero. ¿Nuestra madre? Ella te odia más de lo que yo alguna vez podré hacerlo."

Charlie dio un paso adelante. "Lo único que quiero de ustedes es que paguen por todo el daño que han hecho." Sus labios temblaban, Ryan lo notó, pero él estaba siendo tan valiente. "Por un momento, solo por un segundo, amaría que pudieras notar todo lo que haces, porque piensas que mamá está en lo correcto. Shawn, ella solo te ha estado usando para poder cumplir su sueño roto. ¿No te diste cuenta?"

Ryan vio algo moverse detrás de los ojos de Shawn cuando él se encogió de hombros.

"¿Y eso qué? Ella fue la única que me trató como un ser humano mientras creía mientras que papá ignoró mi existencia por tanto tiempo como vivió." 

"Eras un psicópata." Charlie apretó el rostro, casi pareciendo que iba a llorar. "Antes de los dieciocho, casi mataste a un chico solo porque él te miró mal. Desde niño solo supiste lastimar, a otras personas, matabas animales por diversión y solo te reías. No intento decir que estuvo bien que papá fuera de esa manera contigo, pero..."

"¿Lo merecía? ¿Eso es lo que intentas decir? Tal vez." Shawn se encogió de hombros. "Pero mamá me amaba de cualquier manera. A ella no le importó nada de lo que hice, porque sabía que yo tenía potencial de llegar lejos. Y solo por eso haría lo que ella jamás pudo hacer y la haría orgullosa por siempre." Sus ojos pasaron hacia Ryan lentamente. "Pero tu sangre es como una plaga. Siempre en el camino para arruinar todo."

Ryan apretó los labios. "Supongo que estoy aquí para evitar que idiotas como tú lleguen lejos."

"Mi madre debió buscar por ti y tu hermano en ese entonces. ¿Por qué dejar tal basura sola en el mundo?" Shawn se rió, levantando el arma hacia él. "Apuesto que fue difícil crecer mientras buscabas comidas de los basureros."

"Sí, fue bastante difícil," murmuró, mirándolo con cuidado. El idiota era capaz de disparar en cualquier instante y Charlie estaba demasiado de él. "Sabes qué, hagámoslo como hombres. ¿Por qué no sueltas el arma y usamos los puños?"

"Nah. Esto es más sencillo, ya jugué con ustedes lo suficiente."

Ryan lo miró con una mueca. "¿En se-?"

Los dos se encogieron cuando una arma disparó. Le tomó unos segundos darse cuenta de que había sido Charlie quien disparó, muy cerca de los pies de su hermano. Shawn se había caído sobre su trasero mirando a Charlie como si no pudiera creerlo. 

Ryan no lo pensó demasiado. Antes de que Shawn se levantara, él corrió hacia donde estaba, pateando su arma lejos de su mano. Soltando un gruñido, Shawn se aferró a su pierna hasta hacerlo caer y golpear el rostro contra el frío y húmedo pavimento. Una rodilla se presionó contra su nuca haciéndolo jadear, pero colocando las manos sobre el suelo, se empujó con fuerza, quitándoselo de encima.

Cuando Shawn trastabilló, Ryan se levantó y lo tacleó contra el piso. Podía escuchar sonido a su alrededor, voces y lo que parecían ser patrullas, pero estaba lejos de todo eso.

Toda su ira contenida a lo largo de los años, todo el rencor que sentía por Shawn al abusar de Charlie por tanto tiempo... Apenas él golpeó el piso, Ryan soltó sus puños contra él, gruñendo con la visión borrosa mientras su pecho se sentía en llamas y lo único que podía sentir era el dolor en sus nudillos y los golpes que Shawn conectaba en sus costados. Nada más, no había nada más en el mundo que la sensación de violencia recorriéndolo.

Y era increíble.

Podía ver la sangre comenzar a escurrir y también el dolor en sus costillas, pero era más increíble ver la luz lentamente desaparecer de los ojos de Shawn. Si tan solo pudiera. Ryan envolvió las manos alrededor de su garganta, apretando con fuerza, esperando ver esa línea entre la vida y la muerte pasarle por los ojos. Lo necesitaba...

Un ardor profundo le tomó por sorpresa. Soltando sus manos de la garganta de Shawn, Ryan miró su costado. Era la navaja que Tyler le dio. La había olvidado por completo, pero Shawn debió encontrarla. Ryan intentó apartarle la mano del mango de la navaja, pero él solo la movió más arriba, robándole el aliento.

Eso dolía como el infierno.

Se quitó de encima de él y gruñó cuando Shawn finalmente lo dejó. Pero sabía que no debía sacar la navaja, sería mucho peor para sí mismo si se desangraba antes de que pudiera conseguir ayuda. Un brillo en su costado le llamó la atención. 

Shawn con el rostro cubierto de sangre y cortes en las cejas y boca lo estaba apuntando con el arma. Ryan se sobresaltó y se movió rápidamente cuando vio la determinación en sus ojos. Una mirada rápida alrededor le dijo que Charlie no estaba. Gracias a Dios. No necesitaba...

"¿Crees que terminé contigo?"

Ryan se levantó, sosteniendo su costado con cuidado. El arma brillaba en las manos de Shawn con sangre y en el pavimento había una marca de su disparo fallido. 

"Sabes que mereces lo peor," se las arregló para decir. "Tú y tu madre, los dos son lo más bajo de lo bajo. Asesinos y psicópatas. La cárcel no es un lugar para ustedes, no." Ryan sacudió la cabeza, tomando una profunda respiración. Su cuerpo se sentía caliente por todas partes equivalentemente. "Personas como ustedes solo merecen morir."

"¿Sí?" 

Esta vez no pudo moverse. Shawn disparó directamente en su muslo derecho haciéndolo perder el equilibrio. Mierda. Cerró los ojos con fuerza, y por primera vez en mucho tiempo consideró rezar. Y agradecer de que todo terminaría con él. Su hermano y su mejor amigo estaban seguros, fuera del país y donde no podían ser rastreados. Charlie había logrado escapar. 

Sonrió, presionando la frente contra el pavimento.

Finalmente.

Lo salvó.

Fue útil.

Sus ojos se sentían pesados. ¿Era porque estaba perdiendo demasiada sangre?

De todas formas, todavía se sentía bien consigo mismo. Charlie iba a estar bien. Era lo que importaba.

Un golpe en su brazo izquierdo lo hizo estremecerse. Podía escuchar a Shawn gritar mientras continuaba pateándolo, pero no podía concentrarse en su voz, solo podía sentir la suave brisa de la noche en su rostro caliente y una sensación de alivio que nunca había experimentado.

¡Bam! ¡Bam!

Sus padres... ¿ellos se sintieron igual antes de morir?

Era una extraña sensación dividida, difícil de explicar. Pero no era mala. No. Era reconfortante.

Su cuerpo se girado, pero él no podía abrir los ojos. Todo dolía y no podía pretender que no era así, pero tampoco tenía la energía para quejarse. Así que solo lo dejó ser y no luchó cuando el sueño comenzó a arrastrarlo.

Era el fin todo.

***

Holaaaa. Llegamos hasta aquí, ¿huh? Ha sido toda una aventura. ¿Casi dos años? Bastante cerca me parece, quizás menos. En realidad mi sentido del tiempo está un poco dañado, así que no me puedo confiar de mi para asegurarlo. 

De cualquier manera, gracias. Gracias por todo, por ser tan pacientes y por ser tan amables conmigo a lo largo de la historia. Creo que logré con la historia la mayor parte de lo que quería desde el inicio y bueno, las historias largas son complicadas jeje. Aun así, fue divertido. Siempre lo es. Escribir siempre será para mi la forma más compacta de acumular mi energía en algo provechoso de lo que puedo mirar atrás y ver dónde puedo mejorar en varios aspectos.

Creo que me estoy extendiendo un poco considerando que este es penúltimo capítulo de la historia.

Entonces nos vemos en la final.

Cruzando los dedos, lo terminaré pronto.

Y luego sabrán en qué otras historias he estado trabajando a la vez, mediamente decente. 

Nos leemos pronto xx