24
El murmullo de voces, mal disimulado, a su lado fue lo que lo sacó de su ensoñación. Era como si intentaran despertarlo a propósito, y su cabeza... se sentía ligera. Tosió cuando intentó formular palabras y sus ojos no parecían poder abrirse, y si lo hicieron, no podía ver nada. Y por alguna razón no le preocupó porque las voces se callaron por un momento y luego una cálida mano se envolvió en su brazo.
"¿Tienes dolor? Puedo llamar al doctor."
Meció la cabeza tan bien como pudo antes de volver a toser cuando abrió la boca. "Agua."
"La están consiguiendo para ti. ¿Quieres sentarte?"
Parpadeó lentamente, tomándose un momento para poder abrir los ojos correctamente. Estaba agradecido de que no hubiera ningún tipo de luz fuerte, sino que la habitación parecía estar a oscuras. En realidad... miró hacia su izquierda a las ventanas abiertas, era de noche. Volteó la cabeza hacia el otro lado, curioso de saber quién era la persona junto a él, solo para sorprenderse al ver a Tyler sentando en la silla al lado de la camilla con un libro en sus manos.
"Bienvenido de vuelta," él dijo con una sonrisa antes de poner el libro en un espacio vacío de la camilla e inclinarse para él. "¿Te sientes bien? Podría llamar al doctor, en serio. En realidad debería hacerlo."
La puerta se abrió rápidamente y Ryan, por alguna razón, se imaginó a Charlie atravesando la puerta para verlo, pero era uno de los hombres de Tyler con varias botellas de agua. Tyler frunció el ceño, mirándolo, pero aceptando las botellas. "Dile que una botella."
El chico no mostró ninguna expresión, solo se retiró hasta estar al lado de la puerta, cruzando las manos al frente. "Lo siento, señor."
"Como sea, ten."
El agua se sintió tanto bien como mal. Su garganta estaba rasposa, como si no hubiera sido usada en días, pero también sintió un gran alivio al mismo tiempo. "Mierda..."
"¿Vas a vomitar?"
"No." Levantó una mano para frotarse la garganta, pero la mano que no sostenía la botella, estaba atada a algo. Una aguja, una intravenosa que colgaba muy cerca de su cabeza. Suspiró y dejó la botella a un lado antes de quitarse la sábana de encima. Tenía una bata de hospital, blanca y aburrida, así que no podía ver nada debajo y no podía decir si tenía algo en el estómago. Pero por la manera en que se sentía cuando se frotó el abdomen, podía decir que era así. Solo por curiosidad, se miró ambos pies antes de moverlos lentamente. Funcionaban bien. De acuerdo. Gruñó cuando intentó sentarse y su abdomen palpitó con fuerza ardiente. "Carajo."
"Solo pide ayuda, te aseguro que no es tan difícil." Tyler le hizo un movimiento al chico en la puerta y se movió hacia el otro lado. Juntos lo ayudaron a moverse a una posición sentada con las almohadas como respaldo. Aun así su abdomen dolió como una perra, pero no se quejó. "¿Mejor?"
Asintió.
"¿Charlie?"
"No lo sé. Con Dean en alguna parte."
Lo miró de reojo mientras se frotaba los dedos en el regazo. "¿Está bien?"
Tyler hizo una pausa antes de contestar con un suspiro. "Está bien. Tuvo una operación menor en la nariz, pero no es nada que no vaya a sanar en algunos días. Deberías estar más preocupado por ti mismo. ¿Recuerdas lo que pasó? Pusieron una bala ahí." Señaló con un dedos el lugar donde le dolía. "Increíblemente cerca de perforarte los intestinos, creo que deberías preocuparte más por ti. ¿Sabes cuántos días has estado en cama? Tres. Estuviste malditamente cerca de caer en un paro cardiorrespiratorio en medio de la operación y lo primero que quieres saber al despertar es dónde está tu jefe."
El énfasis en jefe y el tono que usó le hizo saber lo mucho que desaprobaba el tipo de relación que tenían. "No es tu asunto por lo que me preocupo. Se supone que debía cuidarlo, es mi trabajo, ¿no es así? Y fallé otra vez."
"¿Y adivina qué? El chico sigue vivo y su hermano probablemente en algún hospital en coma por la paliza que le diste." Se encogió de hombros y se cruzó de brazos. "Yo creo que lo hiciste bien, a menos que pensaras enfrentarte a tres hombres armados tú solo y salir con vida. Esto es lo mejor que podía suceder, y sucedió."
Frunció el ceño antes de verse las manos con cuidado, notando una sombra púrpura en sus nudillos y dolían un poco. Sí... había estado tan cegado por la rabia en ese momento que solo pudo saltar encima de él y comenzar a repartir golpes hasta el punto que no podía recordar mucho después de apartarlo de Charlie.
"¿Lo atraparon?"
"Nah. Creo que no hace falta decir que todo se volvió un desastre rápidamente. Teníamos que llevarte al hospital y al chico también, además de limpiar tanto como pudiéramos antes de que la policía llegara." Se pasó una mano por el rostro. "El piso estaba limpio además de la sexy secretaria, así que nadie resultó herido además de ustedes. Uno de los hombres de Shawn murió, pero los otros se apresuraron en llevarse a su jefe cubierto de su propia sangre sin importarles que uno se quedara atrás. Pero esta situación... no se ve bien."
Podía imaginárselo. Charlie debía estar demasiado estresado.
Quería verlo.
"¿Podrías..."
Tyler lo interrumpió. "Llamé a tu hermano." Los ojos de Tyler no se veían particularmente emocionados. Ryan lo miró sin poder creer lo que había dicho. "Lo sé, lo sé. Pero... no es la primera vez que he tenido que hacer una llamada así, y sé lo mucho que este hermano simboliza para ti, y también que eres su último familiar con vida. Escucha..." Tyler se pasó una mano por la nuca, incómodo. "Sé que es amas a este chico Baldwin, ¿de acuerdo? Pero todavía tienes familiar, a tu hermano. Piensa un poco en él también. Recuerda tus prioridades."
Ni siquiera pudo enojarse tanto como quería. Tyler tenía razón... en parte. ¿Qué habría sido de Dee si lo hubieran llamado para decirle que su hermano había sido asesinado? Drake se quedaría a su lado, pero nada era tan especial como el lazo de la familia de sangre, y aun muerto cargaría con el peso de dejar a su hermano menor solo.
Exhalando, lo miró. "¿Cuándo lo llamaste?"
"Hace unas horas. Dijo que vendría de inmediato. No te preocupes por su seguridad, mis hombres lo están escoltando."
"¿Él lo sabe?"
"Probablemente. Debe estar aquí en cualquier momento." Su rostro debió mostrar algún tipo de molestia porque Tyler pareció suavizarse. "Este lugar es muy seguro, va a estar bien."
Asintiendo suavemente, Ryan le dio una mirada. "Gracias."
Dee tardó un poco en llegar, mientras eso, el doctor lo miró y revisó su herida, cambiando las bandas que la cubrían por unas nuevas. Su vejiga lo estaba matando y cuando intentó ir al baño solo, tirando del portavenoclisis consigo torpemente, casi se cayó de rodillas. Fue sermoneado por el doctor y luego por Tyler, de que tenía que pedir ayuda. Fue más vergonzoso de lo que debió ser, pero también aprovechó el momento para tomar una ducha y cepillarse los dientes. Era bueno que en el baño no tuvieran un espejo, porque estaba seguro de que se veía justo como se sentía.
"No es como si fuera la primera vez que veo un par de bolas colgando."
"Cállate."
Tyler se carcajeó mientras lo ayudaba a volver a la camilla. "Las tuyas son... ¿cómo ese chico puede tomarlo? Lo partes a la mitad con esa cosa, hombre."
"Por Dios, vete o cállate."
El doctor se aclaró la garganta, interrumpiendo su pequeña riña. "Dejaré que traigan su comida, señor Hale."
Asintió lentamente, recostando la cabeza en la almohada. "Gracias."
"Volveré a revisarlo en un par de horas, por mientras descanse."
No estaba seguro de qué esperaba, pero no era un plato de avena blanda junto, un poco de gelatina y unas galletas de soda, y más agua. Pero estaba sorprendentemente hambriento, y si Tyler tenía la razón, era por los tres días que había pasado dormido. Estaba todavía con hambre cuando todo se terminó, pero la puerta se abrió y Dee entró con Drake detrás de él, uno más pálido que el otro. Su hermano le dio una mirada desconfiada a los otros dos hombres en la habitación antes de acercase y tomar la silla que Tyler había desocupado para él.
"¿Qué...? ¿Cómo si quiera...?" Dee respiraba con bocanas de aire, luciendo agitado, confundido y molesto. Ryan sonrió suavemente al verlo así, era tan raro verlo mostrar tantas emociones. Pero Dee no estaba divertido, le dio un golpe en el brazo antes de gruñir. "Explícate ahora mismo y deja de reír, con una mierda."
Drake apretó los labios y puso las manos en los hombros de Dee. "El hombre está en cama, ten un poco de compasión por él." El hombre le sonrió como siempre, pero podía ver la preocupación en sus ojos y la forma en que su sonrisa temblaba. "Me alegre que estés bien."
Sus heridas habían sanado ya, para su alivio y se veía como nuevo para ahora. Dee tenía el cabello más largo, liso cayendo casi encima de la nuca y detrás de sus orejas. Se veía muy bien, brillante. Ryan suspiró antes de mirar a Tyler dándole una señal silenciosa. El hombre asintió antes de empujar al otro fuera de la habitación.
Dee levantó una ceja. "¿Son policías? ¿Todavía sigues en peligro?"
"No... tal vez, por un tiempo al menos no." Tragó con fuerza, sintiendo la garganta apretada, y no era por la falta de habla, sino porque realmente no quería hablar de esto con Dylan. Pero también estaba cansado de mentirle todo el tiempo. "Ellos son parte de la seguridad, solo se estaban asegurando de que todo estuviera bien."
"¿Qué fue lo que pasó?" Dee estiró la mano hasta alcanzar su muñeca, dándole un suave apretón. "Y por favor, dime la verdad. Puedo entender lo que sea que tengas que explicar, pero sé honesto conmigo." Suspiró pesadamente, el labio inferior temblando un poco. "Apenas te veo lo suficiente y no sé nada sobre tu trabajo, y a pesar de que sé que es tu vida y estas en un punto donde puedes simplemente alejarte y comenzar una familia por tu cuenta, todavía... todavía eres mi hermano. Y necesito. Conmigo. No quiero sonar... llámame como quieras, egoísta o malcriado, pero todavía quiero poder tener a mi hermano conmigo." Aspiró una profunda respiración y sus ojos se pusieron húmedos. "¿Sabes cuán asustado estaba cuando recibí esa llamada? Pensé que también te estaba perdiendo. No quiero volver a escuchar esas palabras otra vez."
Tyler... ese imbécil, ¿qué le había dicho?
"Estoy bien ahora. ¿No es eso lo que importa?" Le dio una pequeña sonrisa para tranquilizarlo un poco. "Y te iré a visitar mucho más seguido de ahora en adelante. Te llamaré tan seguido que tendrás que bloquear mi número y te hartarás de mi, ¿está bien?" Le revolvió el cabello como siempre solía hacerlo, y esta vez, por primera vez en la vida, Dee no que quejó, solo lo dejó hacerlo. "Tu cabello es muy bonito así, sin un gorro."
"Gracioso." Con las mejillas sonrojadas, Dee se apartó de su mano se reclinó en la silla. "¿Realmente no vas a decirme?"
"Puedo decirte que esto no va a volver a suceder. Pero la situación... es delicada e involucra a muchas personas importantes." Miró a Drake a los ojos y asintió. "Los dos están siendo vigilados y protegidos, así que estarán bien."
Drake hizo una mueca antes de tocarle el hombro a Dee. "Te dije que no estaba alucinando, sabía que nos estaban siguiendo. Pero pensé que sería Big Dog otra vez." El rubio entrecerró los ojos. "¿Tuviste algo que ver con que enviara una disculpa por correo, diciendo que no volviera a aparecer frente a él?"
Ryan se rió, siseando cuando su abdomen se apretó. "¿Lo hizo? Entonces creo que realmente nos dejará. ¿Ya no estás en contacto con él, verdad?"
"No." Dee sacudió la cabeza, cruzándose de brazos. "Cortamos toda comunicación con él desde ese día, a pesar de que alguien no quería hacerlo."
Drake puso los ojos en blanco.
"Solo pensé que podría darle lo que quería y finalmente nos dejaría en paz."
Ryan se frotó el abdomen. "Entonces está bien. Eso está solucionado." Cerró los ojos y suspiró, sintiéndose un poco más ligero. Era agradable escuchar una buena noticia.
"Uh... entonces, ¿Charlie está bien?"
Parpadeó antes de mirar al techo de la habitación, luego se aclaró la garganta para responder y mirarlo. "También resultó herido. Tuvo una operación en la nariz y está bien ahora, creo."
"¿Creo?"
"No he podido verlo ni comunicarme con él todavía." Se rascó la cabeza antes de apretar los labios.
Dee lo miró con grandes ojos. "¿Terminaron?"
"No." Ryan apretó los dientes y exhaló antes de sacudir la cabeza. "No. Solo necesitaba un poco de tiempo antes de verlo. Estoy... ah... bueno... acabo de despertar."
"¿Quieres que lo llame ahora? Tengo su número. Y creo que me gustaría verlo para asegurarme de que está bien."
No tenía idea de qué decirle. Se sentía culpable y avergonzado, con demasiadas cosas en la cabeza justo ahora como para poder encararlo. Pero terminó encogiéndose de hombros y volviendo a cerrar los ojos, escuchando a su hermano hablar por teléfono. Deseó que el doctor le hubiera colocado un sedante así no tendría que enfrentar lo que estaba a punto de suceder, pero como las cosas no funcionaban así, unos minutos después la puerta se abrió y la voz de Charlie inundó la habitación. Sonaba un poco nasal y comprimido. Dios... Ryan no podía mirar.
"Es mucho mejor de lo que esperaba, pero esto sanará muy pronto. No es nada." Se rió.
"Es injusto que sigas viéndote tan bien aun así. Estoy celoso."
"Ah, vamos, tú eres más encantador que yo. ¿No es así, Drake?"
"Uh..."
Dee los interrumpió. "De todas formas, me alegra que te encuentres bien. Al menos estás caminando por tu cuenta."
"Sí, lo sé. También estoy agradecido. Ryan me ayudó con eso, solo por él estoy en buenas condiciones." Una suave mano se envolvió alrededor de su muñeca izquierda, dedos rozándole la piel. "Me gustaría decir lo mismo sobre él. No puedo agradecerle lo suficiente."
"Siempre puedes darme un beso." Parpadeó lentamente, incapaz de mantenerse indiferente hacia él. Tenía una gruesa venda sobre la nariz, con algunas marcas oscuras alrededor de ella y bajo sus ojos, además de una bandita en la mejilla izquierda. Pero estaba entero y bien, sin yesos ni nada más. Le dio una pequeña sonrisa. "Ya me cepillé los dientes."
Charlie le sonrió, ojos un poco rojos y húmedos, mientras se inclinaba hacia él.
"Eso no me habría detenido." Sostuvo su mandíbula con los dedos, suavemente antes de presionar sus frentes juntas. "Te a... gracias por todo," exhaló antes de presionar sus labios juntos con suavidad, muy inocente, perfecto en sus condiciones. Fue un alivio, que no estaba seguro si debía sentir. Charlie lo miró con tanta dulzura y adoración que su pecho se comprimió. Tragó con fuerza y buscó su mano libre para sostenerla, enredando sus dedos juntos mientras Charlie le acariciaba el mentón con la otra. "¿Necesitas algo? Cada vez que veía a verte, seguías dormido y era un poco decepcionante, pero ahora me siento feliz. Como si pudiera reír igual que un idiota. Te conseguiré lo que quiera."
"Puedes reír todo lo que necesites, cariño." Tiró de él para otra beso, rozándole los labios con la lengua. Charlie suspiró antes de abrir la boca y dejarlo besarlo profundamente, poniendo una de sus manos detrás de su cabeza con gentileza mientras conducía el beso. "Sube aquí," dijo en medio del beso, jadeando antes de besarle las mejillas y mandíbula, teniendo cuidado con las vendas. "Quiero sostenerte un poco."
"Estás herido."
"No es nada. Por favor." Tiró del borde de su chaqueta de mezclilla e hizo un puchero, no le importaba lo necesitado que se veía ahora mismo. Tenía que sentir en sus brazos, necesitaba asegurarse de que estaba completamente vivo. Con una mueca y una mirada de regaño, él accedió, quitándose los zapatos mientras Ryan se movía más al borde para darle espacio de que se metiera bajo su brazo, cabeza sobre su pecho. "Ahora, esto es perfecto."
El movimiento a su lado lo hizo mirar. Dee tenía una sonrisa avergonzada mientras se ponía de pie y Drake se veía como si quisiera explotar en una risa. "Creo que ya comprobé lo que tenía que comprobar. Uh, ¿tienen hambre? Vamos a buscar un lugar donde comer, podemos traerles algo."
"Quizás una hamburguesa o..."
"O una ensalada." Charlie le dio una mirada seria. "Mejor avena, todavía necesita sanar su herida." Como si necesitara probar el punto, Charlie pasó la mano encima de ella sobre la sábana que lo cubría con delicadeza. "Creo que sopa te hará bien."
Hizo una mueca. "Preferiría comida real."
"Sí, y por eso querías una hamburguesa."
Dee se rió. "Entiendo. Volveremos más tarde."
Drake abrió la puerta para él, dándoles una sonrisa antes de salir. "Descansen."
Después de que la habitación quedara en silencio, con solo el sonido de sus respiraciones y corazones agitados, Ryan sintió que podía respirar. Sus brazos se envolvieron alrededor de Charlie con fuerza, aspirando profundamente su aroma dentro de él, el champú de su cabello olía a menta, probablemente el mismo que había en el baño de su habitación y de todo el hospital. La mano de Charlie seguía tocando el área de su venda con movimientos circulares.
"¿De verdad estás bien?" preguntó, metiendo la nariz en su cabello. "Puedes ser honesto conmigo."
"Me duele," dijo en voz baja. "Pero es mucho menos doloroso que esto. ¿Puedo mirar?" Ryan solo asintió y lo dejó apartar la sábana y abrir la bata. No había nada de lo que sentirse avergonzando y la mirada de Charlie estaba solo sobre su herida. Al menos había visto esta que estaba limpia y no la otra que estaba manchada de sangre. "El doctor dice que vas a sanar bien porque tu cuerpo es fuerte y porque no tocó ningún órgano vital. Dios..." tragó con fuerza sin apartar la mirada de su herida. "Solo intentaba convencerme de que ibas a estar bien, pero estaba aterrado, Ryan. Tuvieron que colocarme anestesia dos veces porque estaba demasiado alterado como para que hiciera efecto." Volvió a cubrirlo y regresó a su costado, casi escondido bajo su brazo. "Vine aquí apenas me dieron permiso de dejar la camilla y estabas dormido. No me preocupé hasta el segundo día que seguías dormido, y luego esta mañana llegué con la esperanza de que estuvieras despierto... pero todavía no lo hacías. Creo que pensé..."
"Shh." Podía sentirlo temblar, maldición. Apretó los dientes y usó su mano para frotarle la espalda. "Tenías razón, estoy bien." Dejando un beso sobre su frente, movió su mano para frotarle la mejilla herida. "Lo mejor de todo es que ya pasó. ¿Tienes alguna noticia sobre Shawn?"
"No tenemos nada todavía. Pero las cosas en la empresa están un poco locas. La prensa me ha estado buscando para hablar sobre lo que sucedió, pero no estoy seguro de querer hacerlo. Tuve que darle una declaración a la policía y me sentí enfermo después, peor aun, cuando John no pudo encargarse, sino sus compañeros." Pasó la mano sobre su pecho mientras suspiraba. "Vendrán a hablar contigo también. Dean tiene toda la historia de lo que vamos a contar, así que estará aquí en cualquier momento después de que termine de hacer lo que sea que esté haciendo."
"¿En serio van a encubrir a Shawn? ¿No es el mejor momento para poner una denuncia en su contra de una buena vez?"
Charlie suspiró.
"Todavía no. Hay más cosas por las que quieren acusarlo, John se está encargando de la investigación personalmente junto con Tyler y Dean. Por mientras, lo que sucedió, fue un intento de secuestro por parte de un grupo organizado del que no conocemos mucho. Esa es la historia oficial. Es bueno, sabes." Charlie levantó la cabeza para mirarlo. "Cuando consigan pruebas para añadir más cargos en su contra, podremos decir que él lideró el intento de secuestro y añadir más años a su sentencia. Nick está trabajando en ello también."
Ryan asintió, mirándolo a los ojos. "¿Y esto es lo que quieres? Seguir viviendo de esta forma por más tiempo hasta que puedan encerrarlo."
"Creo que es lo mejor." Hizo una pausa, el grueso labio inferior entre los dientes, masticándolo lentamente mientras pensaba. "No quiero que vaya a prisión por un tiempo y luego salga meses después buscando vengarse. Quiero que sea definitivo. Para que no pueda seguir lastimando a nadie más. A Dean, a mi, a ti... Si eso significa tener que hacer algunos sacrificios por un tiempo antes de que suceda, creo que puedo soportarlo."
"Si es lo que quieres, entonces está bien. Estaré a tu lado."
Charlie le dio una extraña sonrisa antes de asentir y volver a acostarse sobre su pecho. ¿Por qué no se sentía en calma después de su conversación? No lo sabía todavía. Pero podía estar seguro de que algo más estaba sucediendo, o a punto de suceder.
La respiración de Charlie un rato después se volvió calmada y estable, profunda, soltando pequeños ronquidos mientras su peso estaba completamente apoyado en Ryan. Parecía estar en un pesado sueño, que ni siquiera pudo despertarse cuando el doctor regresó a revisarlo. Con una mirada curiosa y un tono que decía que quería que Charlie saliera, Ryan se negó y se quedó ahí en silencio hasta que el hombre comenzó a hacer su revisión y luego salió, murmurando algo para sí mismo que Ryan ignoró.
Cuando volvieron a estar solos, Ryan se giró para ver al hombre dormido en su pecho. Trazó los suaves mechones de cabello negro entre sus dedos, frotando la concha de su oreja antes de llegar a su mandíbula. Sus labios se estiraron cuando Charlie se movió, murmurando algo inentendible antes de volver a roncar. Sus labios estaban estirados como un patito, ceño fruncido y su mano se envolvió alrededor del cuello de Ryan.
Su corazón se apretó y se humedeció los labios antes de besarle la cima de la cabeza, susurrando: "¿Ibas a decirme que me amas? Tal vez debiste hacerlo, porque yo no tengo el coraje de decirlo primero."
***
Holaaaa
:(
Creo que debería estar feliz, pero no... ellos me van a lastimar, lo sé.
Ni modo, así son las cosas :v
Gracias por todo, nos leemos pronto xx
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