20
"¿Te gustaría una copa?" Preguntó con la vista en la bandeja que uno de los meseros balanceaba sobre el hombro, muy cerca de ellos. Su boca se sentía seca y había pasado un tiempo desde que probó un poco de alcohol, así que sonaba como una maravillosa idea. Un poco no haría daño. Apretó los dedos alrededor de la cintura de Charlie antes de voltear a verlo. "¿Charlie?"
"¿Sí?"
Frunció el ceño, mirando al otro lado de la habitación donde el chico tenía su vista, pero no pudo ver nada peculiar. Muchas personas, la mayoría de media edad con sus acompañantes colgando de sus brazos. "¿Viste algo?" Su mano libre se metió en el bolsillo de su pantalón, tomando entre sus dedos el pequeño dispositivo que Tyler le había suministrado antes de entrar al lugar. Solo tendría que presionar el botón y ellos entrarían.
"No, es solo... estoy distraído." Exhaló entre dientes, girándose hacia él, más o menos apoyándose contra su pecho. "Esto es aburrido. ¿No estás aburrido?" Una de sus manos se deslizó sobre su estómago, agarrándose del borde de la correa. Ryan estaba endemoniadamente enternecido con el repentino comportamiento pegajoso de Charlie, incluso una sonrisa tiró de su labios. Solo podía ver la cima de su cabeza mientras él hablaba. "Todavía habrá una especie de presentación de música clásica, podremos dormir un poco si nos sentamos hasta atrás."
Se rió con suavidad, frotándole la espalda lentamente. "¿Estás cansado? Despertarte muchas veces la noche pasada."
"Sí, bueno, hay cosas en mi mente."
Una chica con una bandeja pasó a su lado y Ryan tomó dos copas, murmurando una gracias suave. Le tendió una a Charlie y se quedó con la otra. Los ojos azules estaban un poco apagados, pero comenzaron a brillar al ver la copa. "Ahora, esto sí me hará sentir mejor. Salud." Inclinó la copa hacia él son una sonrisa. Ryan golpeó las copas juntas antes de tragarlo todo, exhalando cuando el calor se acumuló en su pecho. Charlie hizo una mueca divertida. "Necesario, y si vamos a entrar al salón para ver la presentación necesitaremos un par más de estos."
Como si lo hubiera invocado, una voz a través del altoparlante comenzó a avisar que el show estaba a punto de iniciar y que los presentes debían entrar antes de que las puertas se cerraran. Ryan tenía bastante curiosidad. En el paso había estado en algunas presentaciones de bandas locales que tocaban en los clubs cercanos a donde ocurrían las peleas, así que hubo veces donde se quedó a pasar el rato con Drake y alguna cita barata. Esto no era ni siquiera parecido a los oscuros y malolientes bares con sus bulliciosas multitudes, todos aquí tenían clase y dinero brotando de sus poros.
Trastabilló un poco cuando Charlie tiró de él luego de pasar las grandes puertas de madera. Estaba confundido por un segundo antes de darse cuenta de el estaba siendo llevado hacia la última fila de asientos acolchonados, justo en la esquina derecha del lugar. "Realmente debimos tomar un par de tragos extra," dijo.
Charlie chasqueó la lengua antes de hacerle una seña a un mesero, ordenándole más tragos. Luego sonrió, reclinándose en el asiento y cruzando las piernas con un movimiento con gracia. "Tus órdenes son mis deseos. Ven, siéntate aquí." Ryan lo hizo y miró como Charlie buscaba algo debajo de su asiento hasta que sus ojos se iluminaron. "Aquí está. Bien entonces serán tres presentaciones."
"¿Tres?" Charlie asintió, inclinándose hacia él para apoyar su cabeza sobre su brazo. "No está tan mal."
"Cada presentación tiene una duración de cuarenta y cinco minutos."
Ryan jadeó. "¿Qué?"
Charlie se sacudió, riéndose en voz baja. "Está bien. Podremos sobrevivir, quizás tomar una siesta incluso." Se giró hacia él y levantó la barbilla con una mirada suave y una pequeña sonrisa. "Podemos encontrar una manera de entretenernos."
Inclinándose sobre él, Ryan atrapó su bonita boca en la suya sin un solo pensamiento cruzado su cabeza. Es solo... se veía tan bonito, incluso el color amarillento del moretón no podía quitarle un poco de belleza. Los gruesos labios rojos haciendo un puchero hacia él, solo podían ser besados y abusados. Ni hablar de los ensoñandores ojos azules que lo veían, pidiéndole silenciosamente que lo hiciera. Suspiró en medio del beso, subiendo una mano para acariciándole la parte trasera de la cabeza lentamente, guiándolo a través del beso. No quería ser demasiado intenso dado que estaban en un lugar público y todavía había gente de la prensa alrededor, así que se limitó a darle un dulce beso que solo lo hizo desear más. Por la expresión de Charlie cuando se separaron, él también estaba insatisfecho solo con eso.
El mesero regresó con ellos un momento después con dos copas llenas y una sonrisa amable.
Ryan lo miró fijamente después de tomar la copa. "Que sigan viniendo cada media hora, ¿entendido?"
El chico asintió luciendo divertido.
"Sí, señor."
Las luces se apagaron y los reflectores apuntaron hacia el escenario cuando los instrumentos comenzaron a construir una baja melodía que un anciano guiaba. Ryan no estaba seguro de qué le llamó la atención, pero se encontró bastante entretenido mirando y escuchando por un largo rato. Tanto que se sorprendió al escuchar que el segundo acto comenzaría en unos pocos minutos. Se giró para verlo, pero Charlie tenía los ojos cerrados, cabeza apoyada en su hombro y sus brazos estaban enredados con el del otro.
"¿Estás tomando una siesta?"
"Realmente desearía poder hacerlo, pero cada vez que la flauta se levanta siento que mi corazón de dispara." Parpadeó lentamente antes de mirarlo, luciendo profundamente aburrido. "Pero te gustó, ¿no es así? No dijiste una sola palabra durante el primer acto, de hecho no apartaste la mirada en ningún momento. Era eso o estaban mirando a la señora de la falda roja que te hacía ojitos."
Sonrió mientras sacudía la cabeza. La mujer estaba tan lejos y usaba gafas, que probablemente ni siquiera podía ver más allá de la tercera fila de asientos. "Lo siento, olvidé cuánto amas mi atención en ti." Dejó un beso sobre su frente antes de enredar sus dedos juntos. "Y es una señora muy bonita, la dejaría tejerme un suéter cuando quiera."
"Lo sabía, quieres meterte bajo su falda."
Los dos se rieron en voz baja porque el cuarto estaba en un plano silencio mientras esperaban. Ryan suspiró, relajado y cómodo. "Pero tienes razón, fue interesante. Creo que no me importará realmente esperar dos horas más." Levantó la cabeza hacia las escaleras para buscar al chico de las bebidas, pero estaba demasiado lejos de ellos sirviéndole a otras personas. Charlie apretó su mano haciendo que lo mirara. "¿Alguna vez tocaste algún instrumento?"
"¿Qué crees? Soy un niño rico, Ryan, por supuesto que lo único que sé tocar es un piano. Pero mi maestra privada te diría lo contrario." Sonrió con ojos brillantes. "¿Qué tal tú?"
"Ni una sola cosa. Creo que en algún momento quise aprender a tocar una guitarra, pero realmente nunca lo intenté." Solo tuvo interés en ello porque todos los chicos cool de la escuela lo hacían. "Solo fue por esta chica que quería impresionar, pero ella encontró a alguien que tocaba la batería, así que solo lo dejé ir." Se giró hacia él y lo miró a los ojos. "Creo que me gustaría verte tocar el algún momento."
"¿En serio? No soy bueno, de verdad."
"Aun así, quiero escucharte. Siento que te verás sexy todo concentrado." Se inclinó sobre él, rozando los labios encima del borde de su oreja. "Probablemente termine tan excitado que querré hacértelo encima del piano a la mitad."
Charlie tenía un bonito color rojo en las mejillas mientras sonreía mirando al frente antes de que las luces volvieran a apagarse. "Señor Hale, compórtate. Estamos en un lugar público."
Se acomodó en su asiento, una satisfecha sensación en el pecho y luego un violín comenzó a escucharse entre el silencio. Era realmente impresionante el control que el joven muchacho tenía en sus manos, haciendo que la melodía resonara en las paredes. Con eso, dos horas se sintieron como unos breves minutos y la noche terminó tranquilamente.
Uno de los hombres de Tyler era quien conducía. Tyler y Dean los seguirían de cerca en una camioneta detrás de ellos.
Charlie presionó un botón que levantó una pantalla entre el asiento delantero y el de ellos cuando el auto avanzó. Ryan lo miró cuando sintió la mirada de Charlie en él.
"¿Qué pasa?"
"Ryan..." Charlie se detuvo y tragó con fuerza, retorciendo las manos en su regazo antes de apartar la mirada de él. "¿Por qué me has estado ocultando lo que está pasando?"
Frunció el ceño. "¿De qué estás hablando?"
"Lo que está pasando con Shevon Homes."
Lo miró fijamente, parpadeando rápidamente. "¿Quién es Shevon?"
"Tu antiguo empleador. Big Dog."
Su boca se abrió y luego se cerró, frunciendo el ceño. "¿Cómo lo sabes?"
"Entonces es cierto y lo has estado ocultando de mi."
"Espera un momento." Se aclaró la garganta, girándose hacia él. "Esto... no es..." Se detuvo a sí mismo antes de continuar para tomar una profunda respiración, sintiéndose agitado e incómodo. Que Charlie estuviese evitando mirarlo solo lo puso más ansioso. "Escucha, lo que está pasando con Big Dog es solo una confusión. El hombre quiere que regrese a las peleas porque fue su gallina de huevos dorados, pero terminé con eso. Drake y yo nos estamos encargando de darle lo que quiere, un peleador, pero no seré yo."
"¿Realmente dices que es inofensivo? ¿Incluso después de que le haya dado una golpiza a tu amigo?" Los ojos eran fríos y duros, oscuros por la falta de luz dentro del auto. "Estuve esperando todos estos días a que dijeras una sola palabra, Ryan. Algo. Pero no lo hiciste, como si confiaras en mi lo suficiente como para decirme lo que está pasando. ¿Qué harás si la siguiente persona a la que lastima sea Dylan si esa es su manera de llegar a ti? Tengo los recursos y tengo el poder para detenerlo, en todos los medios posibles. Pero prefieres tomarlo por tu cuenta como si pudieras estar a su lado para defenderlo."
Su mirada bajó, sintiendo un dolor en el pecho. "Puedo hacerlo, he cuidado de mi hermano por años perfectamente bien. El mundo de las peleas y de donde venimos nosotros no es uno que conozcas, las cosas son distintas a como se tratan en tu mundo. Y a veces las cosas van a salir mal por un tiempo antes de que mejoren." Aspiró una respiración antes de mirarlo. "No te lo dije porque puedo lidiar con ello por mi cuenta."
"Si quieres irte porque necesitas proteger a tu hermano, no te lo impediré, pero tampoco te dejaré regresar a mi lado." Sus labios eran una fina linea sin emoción. "La vida de tu hermano es más importante que cualquier otra cosa y yo solo te distraeré."
Su mandíbula se apretó y su cuerpo se tensó cuando se dio cuenta de que Charlie estaba hablando en serio. "No me puedes hacer tomar una decisión en serio."
"No te estoy pidiendo que tomes una decisión. Te estoy diciendo que vayas con tu hermano."
El auto se detuvo, sorprendiéndolo y Charlie abrió la puerta antes de que él pudiera detenerlo. Se apresuró, pasando al conductor para alcanzarlo, sintiendo que su corazón estaba latiendo con fuerza. Estaba lleno de ansiedad que nunca había sentido antes, ni siquiera se detuvo cuando escuchó las voces llamarlo detrás de él. Necesitaba llegar con Charlie rápido. Lo alcanzó frente a la biblioteca agarrándole el brazo. "¿A dónde vas?"
Él sacudió la cabeza. "No quiero discutir."
"No puedes solo decir eso y esperar que esté bien para mi." Suspiró con fuerza antes de abrir la puerta de biblioteca y jalarlo dentro, poniéndole el seguro. "¿Por qué me dices eso?"
"Es tu hermano, Ryan, yo solo soy tu jefe." Todavía no levantaba la mirada, pero tampoco intentó deshacerse de su agarre, solo estaban parados en medio de la biblioteca. "Ni siquiera deberíamos tener que hablar sobre esto."
"Claramente tenemos que hacerlo por a mi me importa. Y a ti también."
"Estoy seguro de que Dylan preferiría que estuvieras con él y con Drake. No puedo imaginar lo mucho que debe haberse asustado al verlo lleno de golpes." Apretó los labios con fuerza. "Vi lo que ocurrió. Y lograron entrar tan fácilmente para atacarlo por la espalda. ¿Qué pasa si es Shawn el siguiente? Si les hace algo..." Tiró de su mano libre, cruzándose de brazos sin mirarlo. "Nunca me lo perdonaré si eso sucede y tú tampoco lo harás. Envié hombres ahí porque no confío en que no pase otra vez."
Era cierto. La seguridad del lugar era un mierda si habían podido entrar dos veces en circunstancias diferentes y causar daño aun cuando se les había dicho que aumentaran la seguridad. "Y te lo agradezco, en serio." Era tan difícil encontrar las palabras que decir porque Charlie tenía mucha razón en muchos aspectos. Pero tampoco era fácil tomar una decisión cuando él no... "Se humedeció los labios con la vista en él. "Pero aun si me voy con Dylan para cuidarlo de cerca, no podré sacarte de mi cabeza. Seguiré pensando en ti día y noche, preguntándome si estás bien. Si te estás alimentando adecuadamente si no estoy ahí para ti, si estás durmiendo bien, si alguien está a tu lado cuando te sientas deprimido por culpa de tu estúpido hermano." Se acercó a él a pasos lentos, inhalando cuando Charlie levantó la cabeza hacia él. "Drake y Dee pueden defenderse por sí mismos, pero nadie va a protegerte y estar ahí para ti como yo." Era una declaración atrevida de hacer cuando él mismo había fallado en protegerlo en múltiples ocasiones, pero todavía lo sentía dentro de él que era así. Levantó las manos y las puso sobre sus hombros con suavidad mientras presionaba el rostro sobre su cabello, tomando una respiración del suave aroma de su cabello. "Lo sabes, cariño. Nadie va a cuidar tan bien de ti. Nadie te sostendrá de la misma manera. Nadie sabrá los lugares correctos donde tocarte para complacerte. Solo yo," susurró. Sus manos se movieron sobres sus brazos lentamente, yendo hacia su cintura y cadera, sintiendo un estremecimiento venir de él. Ryan jadeó antes de tomarlo en sus brazos con fuerza. Charlie inhaló, pero no dijo nada. "Déjame estar a tu lado. Te cuidaré y también me encargaré de vigilar a mi hermano. Terminaré con el problema de raíz, pero no empujes lejos de ti." Sus manos se aferraron a su cadera, parpadeando con la vista en la puerta. "Charlie."
Él gruñó. "Maldición, Ryan, si no te deshaces de esa escoria humana..."
"Lo haré, lo haré."
Charlie le dio un golpe en el pecho. "Quiero que cortes cualquier lazo con él, todos ustedes. Y si vuelve a acercarse a alguno enviaré a Dean y su equipo."
Asintiendo, Ryan cerró los ojos, sintiéndose aliviado. "Me encargaré de ello." No tenía idea de ello, pero supuso que podría hablar con Tyler para que le diera una mano. Realmente no era de tipo de intimidar, pero podría hacerlo si eso ahuyentaba a Big Dog de Drake y Dee. "Entonces, estamos bien, ¿verdad?" Cuando Charlie no dijo nada, Ryan puso una mano bajo su mentón y levantó su cabeza. Los ojos azules seguían viéndose un poco atormentados y molestos, pero él asintió de malas ganas. "Bien. Mañana mismo iré con él y dejaré todo en claro."
"Quiero ir contigo... uh, tengo una reunión con Nick y Piper." Frunció el ceño. "Puedo correrla."
"No." Le dio un beso en la frente. "Prefiero que esperes aquí, seguro donde estás vigilado y salvo mientras yo voy a arreglar las cosas. Voy a estar bien, ¿sí? Le diré a Tyler que me acompañe, así que no tienes que preocuparte por mi."
Con un puchero molesto, él asintió y apoyó la cabeza contra su pecho, colgó los brazos flojamente a su alrededor. "Estoy cansado. ¿Podemos dejar de hablar ahora e ir a la cama?"
"Sí. Haremos lo que quieras."
"Y no te irás sin antes despertarme."
"Te despertaré."
"Bien."
Su voz seria era adorable, pero fondo de tensión y preocupación debajo de ella le hizo doler el pecho. Sería cuidadoso y terminaría con los problemas, si eso significaba que podría permanecer un poco más a su lado.
Porque no tenía idea de cuánto esto iba a durar.
***
Holaaa 20 listo. No hay mucho que decir. Gracias por todo y nos leemos pronto xx
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro