Se despertó cuando su teléfono sonó.

Parpadeó lentamente mirando a su mesita de noche antes de estirar el brazo y agarrarlo. "¿Sí?"

"Buenos días. ¿Te desperté? Lo siento."

Ryan apretó los labios y presionó la cara sobre la almohada. "¿Qué hora es?"

"Mm... cerca de las nueve de la mañana."

"¿Por qué me llamas a esta hora, no duermes?"

Charlie se rió. "Prefiero comenzar mi día antes que salga el sol."

Suspiró.

"¿Quieres que nos veamos ahora?"

"Sí. Tengo algunas cosas que quiero mostrarte y si aceptas el trabajo, tenemos un largo día por delante." Charlie hizo una pausa. "Creo que la información que conseguí será importante para ti."

Abrió los ojos. "¿Qué clase de información?"

"Hablaremos de eso cuando estés aquí. Te enviaré la dirección del lugar en el que nos encontraremos."

"Uh, de acuerdo."

Dejó su teléfono sobre la mesita antes de salir de la cama. Tomó una ducha y se cepilló los dientes, mirando su reflejo en el espejo. Sus golpes se veían mucho mejor que la noche anterior, nada grave que necesitara una visita al hospital. Algo de pomada sería más que suficiente. Tomó unos vaqueros, una camiseta negra y su chaqueta de cuero antes de ponerse sus botas. 

Revisó a Dee antes de salir, pensando que estaría dormido, pero él estaba despierto, revisando su computadora. Se cruzó de brazos y lo miró. "¿No dormiste?"

Dee asintió, llevándose una galleta de sal a la boca, sin apartar la mirada de la pantalla. "Me desperté temprano. ¿Vas de salida?"

"Sí. Creo que tardaré un poco."

"Está bien. También saldré."

Asintió. "De acuerdo. Ten cuidado por ahí."

Dee solo asintió, sin mirarlo, tacleando rápidamente en su computadora. 

Tomó su juego de llaves y su teléfono. Un número desconocido le envió un mensaje, y supuso que ese sería Charlie, así que tomó un taxi y salió hacia la dirección. Era un restaurante pequeño en frente del Museo de Arte de la ciudad. 

No habían muchas personas adentro del restaurante. Solo algunos señores de edad avanzada sentados frente a la barra, tomando el desayuno. Miró alrededor, confundido porque no podía ver a nadie más. Pero él estaba al fondo del restaurante, usando un chaleco negro por encima de la camisa y corbata. Se veía demasiado elegante para estar en un lugar tan casual. Casi se sentía mal por venir vestido como un motociclista.

Caminó hacia él y se quedó de pie, mirándolo hasta que Charlie levantó la cabeza del menú.

Sonrió hacia él. Sus ojos azules brillando con algo de emoción. "Toma asiento, por favor. ¿Supongo que todavía no has desayunado? Puedo ordenar algo. Estoy hambriento."

Asintió y miró alrededor mientras Charlie ordenaba la comida. Ahora notaba al tipo grande en una de las mesas, lejos de ellos, pero sus ojos estaban puestos en ambos con profunda atención. Frunció el ceño hacia él. Pero el hombre no apartó la mirada ni se inmutó en lo más mínimo.

"¿Uh? Oh. Dean, deja eso ya." Charlie se giró en su asiento y miró al hombre. "Déjalo en paz."

"Es un tipo agradable," dijo cuando Charlie volvió a girarse. "¿Siempre está contigo?"

"Sí. Es la persona en la que más confío." Apretó los labios en una tensa sonrisa, cruzando las manos por encima de la mesa. "Estos días parece que me quedo sin opciones."

"¿Por qué?"

Charlie lo miró a los ojos, todo rastro de diversión borrado. "Digamos que hay alguien que quiere matarme."

Ryan se quedó en silencio, mirándolo fijamente. "¿Qué?"

"Lo sé. Eso suena... mal, en el mejor de los casos. Pero es así." Se aclaró la garganta y sacudió la cabeza. "Así que necesito a alguien a mi lado que pueda protegerme. Dean es bueno, muy bueno, de hecho, pero llama demasiado la atención."

"¿Y qué esperas de mi?" Frunció el ceño y miró alrededor. "Dijiste que esto no tenía que ver con pandillas."

"No tiene nada que ver con pandillas. Lo juro." Charlie hizo una mueca. "Mi hermano quiere deshacerse de mi. Quiere quedarse con la herencia de nuestros padres para sí mismo."

"Esto parecer ser un asunto familiar." Puso las manos sobre la mesa y se levantó. "No quiero estar metido en ello. Así que buena suerte..."

"¿No tienes curiosidad por la información que encontré?" Charlie se recostó contra el asiento, mirándolo a los ojos sin ninguna emoción. "¿No te interesa saber qué sucedió con tus padres?"

Su cuerpo se tensó mientras lo miraba. "¿Qué acabas de decir?"

Charlie tomó un sobre marrón que estaba a un lado de su asiento y lo dejó sobre la mesa. "Estuve investigando sobre ti y encontré algunas cosas. Fue una tragedia. Lo siento mucho."

"Fue un accidente." Tragó con fuerza, sintiéndose débil de pronto, sus piernas estaban perdiendo la fuerza para sostenerlo. Cerró los ojos con fuerza y exhaló. "Murieron en un accidente de auto."

"El auto terminó incendiado, ¿cierto?" Charlie señaló el asiento y esperó hasta que Ryan se sentara para continuar, empujando el sobre hacia él "Tu padre, oficial de policía. Tu madre tenía un puesto en el gobierno. Parecían tener una buena vida."

Ryan miró el sobre fijamente, sus dedos picando por tomarlo, pero... no quería. Ya había pasado mucho tiempo y el vacío de la pérdida de sus padres tomó una parte de sí mismo y de Dee, pero esto... 

"Algo así," murmuró y apartó la mirada del sobre para verlo. "¿Por qué quieres hablar de mis padres?"

"Porque puedo ayudarte a descubrir lo que realmente sucedió."

Cerró los ojos y sacudió la cabeza. "Fue un accidente."

"¿Estás seguro?"

Abrió los ojos. "Fue un accidente."

Charlie apretó los labios y miró al sobre antes de verlo a él. "¿Entonces por qué no quieres revisar los registros?" Chasqueó los labios y se inclinó sobre la mesa, apoyando los codos sobre la madera. "¿No quieres saber quién los mató?"

Antes de que pudiera contenerse, estaba sosteniéndolo por el cuello de la camisa, casi lanzándolo por encima de la mesa. "Escúchame muy bien. Estás sobrepasando los límites. No quiero saber una mierda sobre esto." 

Ryan fue tomado por el cuello, un pesado y grueso brazo presionándolo. "Suéltalo ahora," Dean gruñó contra su oído. "Déjalo ir antes de que ponga una bala en tu cabeza." La fría sensación del metal presionado contra el costado de su cabeza lo hizo volver a sus sentidos. Charlie estaba frotándose el cuello con una mano, sus ojos fijos en él, mirándolo con sorpresa. 

"Suéltalo," dijo. "Dean, déjalo ir."

"Pero, Charlie, él es..."

"Está bien. Creo que ya está bajo control." Con un largo suspiro, Charlie lo miró. "Lo siento si fue demasiado lejos. No era mi intención. Yo estoy... desesperado."

Ryan se sacudió, quitándose a Dean de encima con brusquedad y miró a Charlie. "¿Por qué?"

"Porque no quiero morir." Charlie sonrió débilmente. Dean lo miró fijamente por un momento antes de suspirar y caminar nuevamente a su mesa. "Ya no sé en quién puedo confiar, o en quién contratar. Dean es el único que no me ha apuñalado por la espalda." Se encogió de hombros con una nerviosa mano en su cabello. "Ni siquiera estoy seguro de si puedo confiar en ti, pero necesito a alguien tan fuerte y capaz como tú para mantenerme con vida."

"Si vuelves a mencionar a mis padres..."

Charlie asintió. "Lo siento, lo siento. Pero lo que dije era en serio. En ese sobre hay información sobre lo que sucedió. Tengo contactos, conozco a mucha gente que está envuelta en la política y en la policía. Y por lo que encontré, muchas partes de la investigación fueron omitidas. Puedo ayudarte a descubrir lo que realmente pasó." Charlie lo miró fijamente, sus ojos suaves, un poco inseguro. "También perdí a mi padre, y estoy seguro de que mi hermano está involucrado en ello. Solo pensé que querrías saber lo que realmente pasó."

Ryan suspiró antes de cubrirse el rostro con las manos. ¿Qué demonios era todo esto? Pensó que trabajaría como conductor o algo parecido. Ahora sus padres... ni mencionar que tendría que cuidar la vida de alguien a quien no conocía. Era demasiado en su cabeza.

"Entonces quieres que sea tu guardaespaldas," murmuró sobre sus manos.

"No. Dean es mi guardaespaldas. Necesito que te mantengas a mi lado sin que llames la atención. Las personas con las que me rodeo comienzan a sospechar que hay algo sucediendo y algunas de ellas podrían salir heridas si eso pasa." 

Bajó las manos y lo miró. "Entonces solo voy contigo a lugares."

Charlie se encogió de hombros.

"Algo así. Pero también debes protegerme."

Asintió.

"¿Y tu mejor opción fue alguien que está metido en peleas ilegales?"

Él sonrió. "Me dijeron que eres el mejor."

"No creo que sea una buena idea. No tengo ningún tipo de entrenamiento o algo como él." Señaló a Dean al otro lado del restaurante. "Solo soy un tipo normal que sabe usar sus puños."

"Y eso es lo que quiero. No alguien que luce como un mercenario. Solo un tipo normal." Charlie se aclaró la garganta y miró el sobre. "Cuando quieras hablar sobre esto, solo déjamelo saber. ¿De acuerdo? Te prometo que haré lo posible para ayudarte."

Ryan miró el sobre por un momento antes de empujarlo hacia Charlie. "Te lo haré saber." Un momento después un joven se acercó a ellos con varios platos con comida. No podía negar que los waffles se veían deliciosos con toda esa crema y el tocino y huevos. El aroma del café por sí mismo hizo que su estómago gruñera. Estaba hambriento. "Entonces," dijo mientras hundía el tenedor en los waffles. "¿Qué es lo que pasa ahora?"

Charlie lo miró con los ojos abiertos. "¿Estás aceptando?"

Suspiró, apretando los labios antes de meter los waffles en su boca y se encogió de hombros. Después de tragar, asintió. "Eso creo."

"Te mudarás conmigo."

Casi se atoró con el tocino. Lo miró fijamente. "No puedo dejar a mi hermano solo. Mucho menos en el lugar donde vivimos."

"Dylan, sí. Por lo que sé aplicó a varias universidades, pero es un chico inteligente. Sus calificaciones están por encima del promedio." Ryan apretó los dientes y lo vio a los ojos. Charlie asintió y tragó con fuerza. "Tuve que investigar, ¿de acuerdo? No necesito a alguien más intentando ir por mi cabeza." Se limpió la garganta y comenzó a cortar su comida. "Puede ir a un buena universidad. Puedo conseguir un lindo dormitorio en un lugar muy seguro."

Tomó un trago de su café, frunciendo el ceño. "¿Por qué harías eso? Estoy confundido."

"Bueno, creo que me habría gustado que mi hermano mayor hiciera cosas agradables por mi. Tú pareces ser un hermano mayor cariñoso y atento." Se encogió de hombros. "Y estás aceptando trabajar conmigo. No será sencillo, y creo que la única manera de pagar por lo que me das es dándote cosas que necesitas. Si la seguridad de tu hermano es lo primero para ti, entonces te ayudaré. Solo déjame saber a qué universidad entrará. O si necesita ayuda. Conozco gente en alguna de las universidades élites."

Ryan miró su plato y exhaló una pequeña risa. "Debe ser agradable tener tanto dinero. Puedes comprar lo que sea." Sonrió, mirando la expresión confundida de Charlie. "Pero mi hermano no necesita ayuda para ingresar a una universidad. Es un genio."

"Está bien." Charlie masticó lentamente con una cara pensativa. "Pero todavía, encontraré un apartamento lindo para él, si eso te hace sentir mejor. Estará seguro."

No había forma en que pudiera negar eso. "También comida," dijo antes de que poder pensarlo. Se aclaró la garganta. "Necesitará comida."

"Sí." Charlie sonrió con suavidad. "Tendrá comida fresca todas las semanas."

Asintió y continuó comiendo mientras pensaba. Era una oportunidad única. Dee tendría todas las facilidades para que solo tuviera que preocuparse por sus clases y su vida. Nada de preguntarse si tendrían agua caliente o si había un agujero en el techo, tampoco ratas ni drogadictos en los callejones. Sonrió sin poder procesarlo todo por completo.

Finalmente podría darle a Dee la vida que merecía. 

Solo tendría que pegarse a este sujeto como una sanguijuela, siguiéndolo a todos lados. No parecía ser tan malo. Dean estaría ahí para proteger a Charlie si algo grande sucedía. Dee conseguía seguridad y asistiría a la universidad mientras él ganaba dinero.

Casi parecía demasiado bueno para ser real.

"Entonces, ¿podemos irnos ahora?" Levantó la cabeza de su plato para mirar a Charlie cuando él interrumpió sus pensamientos. "Tenemos cosas que hacer. Y hay una fiesta a la que debo asistir esta noche. ¿Debería decir debemos?"

"¿Qué tienes que hacer?"

"Tú." Charlie entrelazó los dedos y sonrió con suavidad. "Te haremos un examen completo, solo para asegurarnos de que estás completamente saludable. Después de eso, ya veremos. Por mientras, tenemos que salir."

Dean le dio una fuerte mirada fija que decía que no le agradaba al grandulón. Pero no estaba aquí para hacer amigos. Era trabajo y nada más. Así que siguió a Charlie en silencio hasta una camioneta negra y grande. El hombre se sentó y luego comenzó a hablar por teléfono con alguien mientras Dean conducía. 

Ryan se le quedó mirando fijamente mientras Charlie conversaba por teléfono. No le importaba lo que bonita que fuera su cara, todavía iría contra él si se aprovechaba de la muerte de sus padres o de Dee. No le importaba si eso le quitaba la vida. Su familia lo era todo para él, incluso aunque parte de ella fuera solo un recuerdo. Todavía Dee era lo único bueno que todavía le quedaba en este mundo.

Se estremeció un poco cuando Charlie giró la cabeza, haciendo que sus ojos se encontraran. El hombre sonrió y terminó su llamada, mirándolo. "¿Qué sucede?"

"Solo estoy pensando," dijo mientras se frotaba las muñecas. Se humedeció los labios y miró por la ventana. "¿Por qué no contratar a un profesional? Estoy seguro de que puedes contratar a un espía o algo así. Podría ser inútil para esto."

"Soy un hombre de fe, Ryan." Giró la cabeza cuando sintió una mano sobre su hombro. Charlie levantó una ceja. "Por eso sé que funcionará. Creo en ti."

"Bien podría estar trabajando para tu hermano en secreto."

Charlie sonrió y tiró la cabeza hacia atrás antes de tomar un juego de gafas de sol oscuras y ponérselo. "Hice mi tarea. Probablemente sé de cualquier persona que hayas contactado en los últimos seis meses. Y lo único que realmente llamó mi atención, es el hecho de que eres un tipo bastante solitario. ¿No te gusta salir? ¿No te gustaría tener una relación? Pareces llevarte bien con hombres y mujeres, por lo que eso no debería ser un problema. Además, por supuesto, de ser atractivo. Así que, me preguntó, ¿por qué?"

"Tengo cosas más importantes de las que preocuparme," respondió y apartó la mirada de él. Pero su mirada de encontró con la de Dean en el retrovisor antes de que el hombre volviera a mirar al camino. "Las relaciones toman demasiado tiempo. Tiempo que no tengo. Además, es molesto." Suspiró y cerró los ojos, apoyando la cabeza contra el asiento. "¿Qué hay de ti? ¿Estás saliendo con alguien?"

"Me temo que no. También estoy solo. Pero he tenido plena cantidad de relaciones a través de los años." Charlie suspiró pesadamente. "Pero siempre se van. No los culpo. Mi familia no tiene la mejor reputación. Eran políticos importantes. Los medios se encargaron de acabar con sus carreras. Cuando los veía, siempre estaban ocultando que tenían problemas o trataban de ocultar cuán estresados estaban."

"Lo dices como si no los hubieras visto seguido."

"Viví en el extranjero hasta hace unos meses."

"Ya veo."

Su teléfono vibró con un mensaje de Dee. Estaba pasando el rato con sus amigos y llegaría tarde. Le respondió que tuviera cuidado con lo que Dee respondió con un pulgar levantado. Cuando levantó la mirada, Charlie lo estaba viendo fijamente. 

"¿Todo está bien?"

Frunció el ceño antes de suavizar su expresión y asentir. "Solo hablaba con mi hermano." Levantó una ceja hacia él. "En realidad no conozco a tu hermano. No tienes que mirarme así."

"Es la costumbre." Charlie sonrió con los labios apretados. "Algo me dice que puedo confiar en ti, y me gusta seguir lo que mis tripas dicen, pero todavía... ¿realmente puedo confiar en ti?"

Sonrió sin poder evitarlo. "¿No dijiste que eras un hombre de fe?"

"Todavía tengo un buen nivel de razonamiento. Me pregunto si habrá algo que mi hermano pueda darte para que me des la espalda." Charlie lo miró por encima de sus gafas. "¿Hay algo que pueda hacerte cambiar de mente?"

Ryan lo miró fijamente antes de levantar la mano y tomar el borde de sus gafas oscuras para poder ver sus ojos azules. Había un ligero toque de desconfianza en su mirada que lo puso incómodo por alguna razón. Charlie no dijo nada, solo lo dejó tomar sus gafas. Las puso sobre el regazo del hombre, encima de los costosos pantalones de tela, con suavidad.

"No creo que haya nada más importante para mi que mi hermano y todos los aspectos que tengan que ver con él." Miró las manos de Charlie, largos y delgado dedos, un par de anillos oscuros y uñas completamente limpias y algo brillantes, como si colocara algún producto en ellas. Incluso la línea de su muñeca era delicada y elegante. "Estás proveyendo todo eso con la condición de ayudarte y protegerte. No hay nada más importante para mi. Y soy un hombre de palabra."

Charlie sonrió con diversión. Se veía joven así, con ligeros hoyuelos en las mejillas y una brillante sonrisa. "¿Me estás jurando lealtad? Eso sonó... bien. Creo que me gustaría escucharlo otra vez."

Se rió junto a él y asintió. "Míralo como prefieras. Mientras protejas a mi hermano como dijiste, me quedaré a tu lado y te protegeré. Es una promesa, pero tú también tienes que prometer que cumplirás todo lo que dijiste."

Charlie lo miró fijamente antes de asentir suavemente. "Haré que mis abogados redacten un contrato. Podrás demandarme por millones si rompo nuestro acuerdo." Estiró su mano hacia Ryan. "Siempre y cuando ambos cumplamos con nuestras partes."

Estrechó su mano con un firme apretón y sonrió.

"Entonces creo que tenemos un trato."

***

Parte 2 lista!!! Gracias por todo el apoyo, como siempre. Son los mejores 😚😚 Nos leemos pronto xx