Camisa azul oscuro con magas dobladas mostrando unos gruesos antebrazos y bíceps que estiraban la tela deliciosamente para su vista. Ojos avellana duros y fijos en su objetivo, sexy. Pecho grande sacado al frente con la espalda recta y una postura tensa al igual que su mandíbula, haciendo que ese músculo al final de su mandíbula palpitara cada ciertos minutos.

Y frente a ellos, Ezra cortaba con cuidado su trozo de carne término medio, sin notar que estaba recibiendo una mirada de águila listo para atacar, de Ryan.

Charlie no iba a esconder lo encendido que estaba con la actitud primitiva y sinceramente posesiva de Ryan. Era encantador verlo así porque veía a Ezra como una amenaza de alguna clase. Era un gran novio falso.

"Debí mantenerme en contacto, lo siento." Ezra se limpió la boca con elegancia, dejando los cubiertos en el plato mientras lo miraba. "Pero fue una linda sorpresa."

"Pienso lo mismo." Sonrió y tomó su copa de vino, lanzándole una mirada rápida a Ryan quien intentaba asesinar su pobre trozo de carne con un cuchillo. " Entonces, ¿qué pasó con ese chico? ¿Siguen juntos?"

Ezra apretó los labios y suspiró entre dientes. "Rompió conmigo. O tal vez algo menos decente que eso. Simplemente se fue un día y jamás volví a verlo de nuevo." Enterró el tenedor en su carne y entrecerró los ojos. "En realidad nunca hablo de él, me pone de mal humor."

"Lo siento." Había asumido que ellos seguirían juntos hasta ahora porque el chico era el ancla de Ezra, lo único que lo había mantenido fuera de problemas en la universidad. Y se amaban tanto que era asqueroso estar alrededor de ellos cuando entraban a su modo de pareja melosa. Y no solo Charlie lo había pensado, todos apostaron a que se casarían justo después de la graduación. Pero como dijo, ambos perdieron contacto y no volvió a verlos. Tragó con fuerza y apretó los labios. "Entonces, ¿estás saliendo con alguien por el momento? Te ves honestamente, muy bien. Ya no te ves como el chico de entonces. Los años han ido a tu favor."

"Nah, no creo que las citas y relaciones sean para mi." Tomó un trago de su copa y sacudió la cabeza. "El trabajo toma la mayor parte de mi tiempo e incluso ahora mismo no puedo evitar pensar en el papeleo que tendré para mañana, pero está bien. Ha pasado un tiempo desde que salí a simplemente tomar una comida." Se pasó una mano por la gruesa barba de sus mejillas y suspiró con la mirada brillante. "Como sabrás, con esta vida no es sencillo estar en una relación estable. Pero por otro lado, parece que tú lo has estado haciendo muy bien." Le regaló una suave sonrisa y luego bajó la mirada. "Siento mucho lo que pasó con tu padre. Me dieron la noticia de inmediato, pero no tenía idea de cómo llegar a ti."

Charlie sonrió también. "Gracias," dijo y se regañó por lo baja de sonó su voz. "Y sí, creo que Ryan y yo estamos bien. ¿No es así, amor?"

"Sí." Ryan sonrió apretadamente antes de tomar la mano de Charlie y llevársela a los labios con los ojos fijos en él, encantador. "Hemos podido encontrar el tiempo adecuado."

Ezra asintió con una sonrisa, los ojos en Ryan llenos de curiosidad. "¿Cómo se conocieron? No me resultas familiar, tampoco tu apellido."

"Oh, Ryan no es de por aquí," se apresuró en decir. "Nos conocimos mientras estuve en Europa. Su familia es de Grecia."

"Ya veo. Puedo decir que tienes rasgos griegos." Ezra lo miró con sorpresa. "¿De qué parte eres? Mi madre también es de Grecia, Atenas, más exactamente."

Charlie no conocía mucho de Grecia y su cerebro se quedó en silencio por un segundo mientras Ezra esperaba. Pero Ryan habló, con firmeza y seguridad. "La Canea."

"Agradable."

Sonrió al ver a Ryan relajarse después de eso, su postura cambiando a más confiada y pacífica.

"Nunca pensé que tomarías el puesto de CEO, ¿tu papá decidió retirarse?" Preguntó Charlie con pura curiosidad.

"Algo así." Ezra se apoyó contra la silla y suspiró. "Mi padre era un adicto al trabajo, y mi madre siempre se lo reprochó. Entonces, cuando ya tuve la suficiente edad y conocimiento, ella hizo que mi padre simplemente me cediera la empresa para irse de vacaciones." Charlie sonrió cuando Ezra se rió. Al menos lo tomaba con buen humor. "No es sencillo, ¿verdad? Mi padre también fue una figura pública del gobierno por años donde también fue un blanco para algunas personas que querían algo de todo ese poder." Miró a Charlie con compasión. "Los guardaespaldas, mirar por encima de tu hombro todo el tiempo, investigar a las personas antes de conocerlas... nunca termina."

Su pecho se comprimió en una incómoda sensación. Por supuesto que los rumores habían comenzado a extenderse a tal punto y todos habían notado que él tenía un equipo de seguridad con él. Tragó con fuerza y sintió un suave apretón en su mano de Ryan, luego asintió. "Lo sé."

Como si sintiera que necesitara una salida, Ryan entabló una firme conversación con Ezra sobre deportes, lucha y boxeo específicamente, y su amigo era sorprendentemente un fanático de ambos. Ryan era un gran conocedor porque habló de ello con una brillo especial en sus ojos y pasión acerca de las técnicas y movimientos. Le hizo preguntarse si él extrañaba las peleas, después de todo estuvo metido en ello por años. Más tarde le preguntaría.

Después estaba un poco confundido con el hecho de que ambos hombres comenzaron a  entablar una profunda conversación sobre Grecia y su cultura, Charlie solo se quedó ahí escuchando con atención, específicamente la manera en que Ryan hablaba tan amenamente sobre los mejores lugares para visitar y la comida, como si hubiera vivido ahí y hubiera experimentado todo eso por mano propia, no como alguien que leyó un artículo en línea. Solo fue distraído cuando recibió un mensaje de Dean. 

Será mejor que sonrían, vi a un camarógrafo entrar hace un momento. 

Ah.

Ezra se excusó para ir al baño, dejándolos solos por un momento. Charlie le mostró el mensaje a Ryan. Él suspiró y se llevó su mano nuevamente a los labios. "Pero, ¿no estamos actuando como una pareja, cariño?" Su voz era melosa, pero burlesca al mismo tiempo. Sonrió con suavidad y se inclinó hacia Charlie para dejar un beso sobre su mejilla caliente. "Me agrada Ezra."

"¿Ah, sí?" Se rió entre mientras mientras frotaba su mejilla contra la barba de Ryan. "Pensé que querías arrancarle la cabeza. Uh, los celos se ven bien en ti."

Ryan le mordió la mejilla con suavidad. "No estaba celoso. Me sorprendió, es todo. Tus amigos son bastante... tu tipo."

"¿Hay algo mejor que rodearse de hombres grandes y hermosos? Es todo un manjar a la vista."

"Pervertido."

"No. Solo sé lo que me gusta." Giró el rostro para mirarlo, lamiéndose los labios cuando vio el deseo crepitar en la mirada de Ryan. Dios, lo que haría para tener a este hombre desnudo en su cama justo ahora. Como un pequeño avance, le dio un beso profundo, lo suficientemente decente para el restaurante y sus luces tenues. "Iremos a casa pronto." Su mano se deslizó sobre el duro muslo de Ryan, muy cerca del cierre, pero solo lo suficiente para provocarlo un poco. "Desnudo en el momento en que entremos a la habitación, ¿entendido?"

Ryan sonrió con una hermosa sonrisa y asintió, acariciando la mejilla de Charlie con el pulgar. "Sí, señor." Miró alrededor y luego frunció el ceño. "¿Por qué hay tantos reporteros detrás de ti? Es un poco raro."

"Lo he pensado también. Pero ellos seguían a mi padre todo el tiempo." Tomó su copa y terminó el vino antes de presionar los labios por la sensación en su boca del alcohol. "No es como si fuéramos la realeza, pero mi padre fue un gran político y siempre fue un foco para los periodistas, buscando encontrar sus sucios secretos. Tal vez piensan que quiero seguir sus pasos y lanzarme para algún cargo."

"¿Te interesa la política?"

"No me lo tomes a mal, no la odio, pero no es para mi." Se encogió de hombros mientras veía a Ezra hacer su camino hacia ellos. "Y ser un político es riesgoso en muchos aspectos. Mi vida ya tiene suficiente acción como para ocuparme de algo más."

Ryan se quedó en silencio después de eso. Charlie tenía curiosidad de saber qué pasaba por su mente, pero cuando Ezra se sentó, comenzó a hablar de negocios y sus planes para la empresa, lo que lo distrajo un poco. Hasta que él dijo que tenía que irse.

"Mis padres quieren verme esta noche," dijo mientras pagaba la cuenta que Charlie se ofreció a pagar, pero recibió un no rotundo. Ezra les señaló el camino hacia la puerta antes de seguirlos. "¿Estarás bien? Los rumores sobre tu hermano..."

"Ah, eso... estamos bien. Tengo buen equipo de seguridad y confío en ellos." 

Ezra asintió con una sonrisa pequeña, manos en los bolsillos del pantalón. Esperaron afuera mientras traían sus autos. "Si necesitas cualquier cosa, déjame saberlo, ¿de acuerdo?" Miró a Ryan y asintió. "Tú también, me agradas. Si un día quieren pasar el rato solo díganme y planearemos algo." El brillante auto del hombre se detuvo frente a ellos y él se despidió, tomando las llaves del valet. "Si tienes interés en asistir a la final del torneo el próximo mes, envíame un mensaje. Puedo conseguir algunas entradas."

Ryan asintió con una sonrisa. "Seguro."

Dean trajo su auto personalmente con una mirada cansada. Le entregó la llave a Ryan y puso las manos detrás de la espalda. "¿Todo bien?"

"Sip," dijo con una sonrisa. En realidad sí se sentía de maravilla. Tuvo una agradable cena con un viejo amigo, la comida estuvo deliciosa, era una hermosa noche, y estaba a menos de treinta minutos de tener sexo maravilloso. "Tómate el resto de la noche libre."

Dean se rió y los acompañó hasta el auto, una camioneta grande justo detrás de ellos que era de sus guardaespaldas. "Podría tomarte la palabra en serio. Hay un libro de Chbosky esperando por mi." Abrió la puerta para Charlie y lo dejó entrar. "Nos vemos en casa, iremos justo detrás de ustedes."

Ryan encendió el auto y salió rápidamente lo que hizo a Charlie reír. "¿Tienes prisa?" Solo obtuvo una sonrisa traviesa de respuesta. Dios, ¿por qué tenía que verse también solo conduciendo? El botón encima de su pecho parecía estar a punto de reventarse en cualquier momento, la barba en las mejillas, las manos grandes alrededor del volante. Se mordió el labio con fuerza para evitar gemir vergonzosamente, no quería parecer tan necesitado, pero, mierda... lo estaba. "¿Te han dado una mamada mientras conduces?"

"Dean viene detrás de nosotros," respondió.

"Eso no es un no. ¿Lo has hecho?"

Él se encogió de hombros. "Mas como encima de una moto en un callejón."

Su piel se erizó y sus piernas se tensaron cuando su estómago se calentó. Se giró hacia él y miró el bulto que levantaba un poco el pantalón. "¿Quieres contarme?" Estiró la mano y la puso suavemente encima del bulto, masajeando lentamente, observando la reacción de Ryan. El suave suspiro que soltó mientras abría las piernas más amplio. Levantó una ceja y sonrió, lamiéndose los labios. "Vamos, estoy a favor de las historias sucias.

"¿Quieres que choquemos?" Se rió nerviosamente, dándole una mirada rápida y otra al retrovisor. "Estamos a pocos minutos de llegar."

"Dime, quiero saber qué pasó. Soy curioso por naturaleza." 

Con un suspiro, Ryan comenzó: "Yo tendría unos veinte años tal vez. Estaba en un bar con unos amigos y estábamos bastante ebrios a ese punto cuando un sujeto con traje y corbata se me acercó." Charlie asintió con atención al tiempo que soltaba el botón de los pantalones de Ryan y metía la mano en su ropa interior. Caliente, pesado y grueso, su boca se hizo agua solo por probarlo un poco, pero no quería morir si Ryan perdía el sentido en medio de la mamada. Sería una vergonzosa situación que explicar. "Me dijo que había estado viendo por un rato y que le gustaba, quería chupármela." Se limpió la garganta, mirando su pene en la mano de Charlie antes de ver a la carretera otra vez. "Yo estaba lo suficientemente borracho para decir que sí, no vi una razón para negar una mamada en ese momento. Así que fuimos al callejón donde estaba mi motocicleta y simplemente lo dejé hacerlo mientras yo fumaba un cigarrillo."

"¿Era bueno?" preguntó mirándolo a la cara cuando presionó el pulgar bajo la gorda cabeza de su pene, amando la forma en que Ryan jadeó y sus músculos se tensaron. Charlie escupió en su mano y volvió a envolver la caliente erección en su mano, meciendo la muñeca con lentos movimientos  y un firme agarre. "¿Te gustó como te la chupó?"

"Era... mierda, era bueno. No tenía reflejos nauseosos," dijo con dientes apretados. "Me podía tomar entero."

Charlie se movió en el asiento incapaz de contenerse. No iban a chocar, confiaba en Ryan. Lamió la punta suavemente, borrando la pequeña gota de pre semen de ahí. "¿Terminaste rápido?"

"No. Jodí su boca por un rato porque se sentía muy bien." Una mano cayó sobre su nuca, acariciando los suaves cabellos de ahí. "Húmedo y apretado, tan jodidamente bueno." Charlie gimió antes de envolver la punta con los labios y chupar duramente mientras su mano masturbaba el resto del pene. Ryan era grande, ese sujeto debió tener una malditamente grande boca si pudo tomarlo todo, pero él no se daba por vencido tan fácil. "No me puedo concentrar."

Lo sacó de su boca solo para decir: "No choques." 

Abrió su boca y lo tomó, chupando y lamiendo alrededor. Retrocedió un poco y volvió a hacerlo, tratando de llegar tan profundo como pudo antes de tener arcadas. "No tienes que hacerlo," él dijo frotando su cabello. "Estamos llegando."

No le prestó atención, solo volvió a hacerlo, usando sus manos para masturbarlo y frotar el suave saco mientras chupaba húmedamente, usando su lengua para acariciar las gruesas venas a los lados. Siempre era tan auto complaciente hacerlo, su boca se sentía sensible y su cuerpo liviano. Lo disfrutaba, pero disfrutaba aun más sentir a este gran hombre temblar por su culpa. Era una sensación poderosa.

"Mierda, detente. Entremos." Ryan tomó su rostro y lo levantó, limpiando la baba de su mentón antes de besarlo profundamente, lengua dentro de su boca en un rápido y arrasador beso que lo dejó confundido y sin aliento. "Estamos aquí. Dios, mírate. Te ves... te ves como si me hubieras dado una mamada." 

Podía decir que su boca estaba hinchada, pero era lo único. Ryan se guardó a sí mismo y se acomodó antes de arreglar a Charlie y salir del auto rápidamente para abrirle la puerta. Miró hacia la camioneta que estaba estacionando detrás de ellos y le dio una mirada. "Será mejor que subas antes de que Dean te vea así."

"Vamos juntos," murmuró, mirando el rostro sonrojado de Ryan. Aflojó su corbata y se mordió el labio. "Te dije que te quería desn-"

Ryan le dio una mirada mientras cubría su boca con su mano. "Ve primero, iré detrás de ti."

"No tardes."

***

Nunca en su vida se movió tan rápido para estacionar el auto correctamente y luego limpiarlo un poco porque había algún líquido en el sillón que no quería pensar qué era antes de entrar y tomar las escaleras, solo para ser detenido por la voz de Dean.

"Hey, Ryan, ¿podemos hablar?"

No, mierda. No. No iban a ser interrumpidos otra vez. Su pene iba a explotar. 

Se dio la vuelta para mirarlo. "Lo siento, hombre. Tengo un gran dolor de cabeza y mi estómago no está en condiciones. ¿Podría ser mañana temprano?" Comenzó a subir sin esperar su respuesta. "Lo siento, lo siento."

"Solo tomará un minuto."

Ryan apretó los dientes y suspiró. "Tengo diarrea."

"Oh. Hombre, no me digas eso. Qué asco..."

De camino a la habitación de Charlie, supo que se iba a arrepentir de haber dicho eso más tarde, pero al menos lo dejó ir. No iban a ser interrumpidos otra vez, así que apenas entró le puso el seguro a la puerta antes de mirarlo.

"Pensé que tendría que usar mis dedos otra vez," dijo con una sonrisa de medio lado. Estaba acostado en la cama de costado, todavía usando su ropa, pero sus pantalones estaban abiertos y un poco abajo. Había una botella de lubricante a su lado y una caja de condones nuevos. "Pensé que te gustaría intentarlo con el traje."

"Maldición, sí." Comenzó a quitarse la camisa, pero Charlie sacudió la cabeza y le dijo que se acercara.

"No eres el único que fantasea con este tipo de cosas." Envolvió los brazos a su alrededor y tiró de él hasta que estuvo encima de su cuerpo con las manos a los lados de su cabeza. "Ahora, bésame."

Con la desesperación que sentía en todo su cuerpo desde la mamada en el auto, se sentía no mucho mejor que un animal en celo. Lo besó profundamente, empujando sus lenguas juntas, chupando, mordiendo y tomando todo lo posible hasta que ambos estuvieron sin aliento, frotándose contra sus pantalones. Charlie estaba sonrojado y jadeando con fuerza cuando Ryan tiró de sus pantalones abajo, lo suficiente como para tener acceso a su trasero y palpar su agujero, húmedo y listo para él. 

"Pensé que sería mejor estar preparado." Charlie tomó su rostro para besarlo otra vez, jadeando pesadamente contra su boca mientras envolvía las piernas en su cadera. "No sé qué estés pensando, pero-"

"Shh." Tomó un condón y algo de lubricante y se lo puso mientras lo veía al rostro, mejillas sonrojadas y ligeramente sudoroso. Ryan jamás pensó que consideraría a alguien en este estado sexy, pero ahí estaba, luciendo hambriento por él, mirándolo como si deseara a Ryan dentro de su cuerpo como si fuera lo más importante en el mundo. Su pecho se agitó mientras se presionaba contra su entrada, aspirando la sensación apretada y caliente alrededor de su pene. Los ojos se Charlie se abrieron y sus labios se separaron soltando un bajo gemido, sin apartar la vista de Ryan. "Te ves tan hermoso justo ahora, cariño." Se inclinó sobre él, acariciando su rostro con suavidad, apreciando cada expresión que mostró mientras él se deslizaba más profundo. Frotó el pulgar sobre sus labios y se acercó solo lo suficiente como para que sus bocas se rozaran mientras hablaba. "Estás apretándome con fuerza."

"Jódeme ahora." Charlie gimió con ojos decididos y llenos de lujuria. Lamió la punta de su pulgar y meció las caderas, jodiéndose a sí mismo en el pene de Ryan. "Suficiente charla."

Ninguno tenía la suficiente paciencia como para hacerlo lindo y limpio. Sus dientes chocaron, labios mordidos y agradablemente hinchados mientras se movían contra el otro sin control. Ryan ni siquiera podía pensar correctamente mientras entraba y salía del caliente agujero, ni siquiera le importó lo ruidosos que estaban siendo. El sonido que hacían sus pieles al conectar resonaba en toda la habitación haciendo que sus oídos zumbaran y gemidos salieran de su propia boca.

Era caliente, la habitación estaba demasiado caliente y él se estaba ahogando.

Charlie lanzó la cabeza hacia atrás mostrando su cuello y Ryan no pudo contener las ganas de morder, chupar y besar a lo largo de toda esa piel pálida mientras seguía penetrándolo con profundas embestidas lentas mientras buscaba su boca para besarlo.

"Necesito quitarme esto," se quejó Charlie mientras tiraba de su corbata. Ryan le ayudó a quitarse la camisa y el saco también. Con un suspiro de alivio, Charlie lo miró todavía con los pantalones en las rodillas y con una mirada ligeramente húmeda. "Ven, aquí, déjame quitarte la camisa también."

Ryan sonrió y salió momentáneamente de él para quitarse los pantalones y la ropa interior junto con sus zapatos antes de ir con él en la cama, ahora sí sus pieles se tocaban y era la mejor sensación del mundo, poder frotar sus manos sobre su hermosa piel, trazando sus tatuajes con la punta de los dedos. Mordió y chupó sus pezones solo porque se veían simplemente bonitos ahí, rosados y puntiagudos. Charlie se erizó y jadeó con labios apretados, empujando su boca más cerca de su pecho con las manos metidas en su cabello. 

"Quiero montarte," dijo un momento después con voz baja y ronca. Su pene pulsó sobre su abdomen dejando un hilo de pre semen sobre su sudorosa piel. Ryan simplemente asintió, apretando los dientes cuando su pene se agitó con la idea al tiempo que se sentaba en el medio de la cama y lo veía moverse hasta que estuvo sobre él, colocándose a sí mismo encima de su pene. "Tan bueno," jadeó contra su boca antes de besarlo profundamente mientras se dejaba caer sobre su pene con un suave movimiento que los hizo gemir a ambos. Charlie se aferró a su cuello con los brazos y comenzó a moverse. 

Ryan tomó su trasero en las manos y lo ayudó a moverse mientras él embestía con fuerza, tragándose todos los gemidos rotos y maldiciones, todas las palabras sin sentido. Él las quería todas, quería tragarse a Charlie, joderlo hasta que ambos ardieran y esta sensación de placer fuera lo único en sus cabezas por siempre. Y tan aterrador como el pensamiento era, fue tan agradable y estimulante que casi se corrió en ese momento.

Charlie lo miró a los ojos. "¿Se siente bien?" preguntó en ese tono bajo y seductor.

Asintió rápidamente sin apartar los ojos de los suyos. "Se siente increíble."

"¿Sí, lo amas?"

"Lo amo."

Con un fuerte tirón de su cabello, Ryan gimió y lo miró a los ojos cuando Charlie gruñó y se movió más rápido haciéndolo jadear con fuerza mientras sentía que su orgasmo comenzaba a construirse con fuerza. "Jódeme como si lo necesitaras, Ryan. Quiero sentir cómo te corres dentro de mi," susurró sobra su boca antes de besarlo suciamente.

Ryan gimió contra su boca. Tomó sus caderas y les dio la vuelta, poniendo ambas piernas sobre sus hombros mientras se inclinaba sobre él para hacerlo duro y rápido, con el corazón latiendo rápido y sus sentidos nublados con una sola intención de complacer a Charlie y demostrarle cuánto amaba joderlo, estar dentro de él, de sentir su piel sudorosa y caliente contra la suya mientras él gemía y maldecía mientras Ryan iba profundo y rápido. 

"Me voy a correr," dijo, abriendo los ojos para mirarlo mientras sus pulmones ardían. Charlie asintió con ojos húmedos y entrecerrados, los labios hinchados y rojos soltando altos gemidos que solo hacían a Ryan más necesitado. "Mierda... Charlie..."

"Sí, yo también."

Envolvió su pene en su mano y lo masturbó al ritmo de sus embestidas hasta que el líquido caliente quedó en su mano. Charlie exhaló y apretó los brazos a su alrededor con fuerza mientras Ryan se acercaba a su clímax. Un mordida en su hombro y unas suaves palabras en su oído lo llevaron al borde y terminó con una profunda embestida, jadeando como si hubiera corrido una maratón. Una dulce mano frotó sus hombros y espalda lentamente, como si estuviera tranquilizando a una bestia. Ryan sonrió con un suspiro, presionando su rostro contra el cuello de Charlie, dejándose ser acariciado como un cachorro cuando otra mano se metió en su cabello y comenzó a masajearlo.

"Me dormiré si sigues haciendo eso," dijo después de un rato mientras estuvieron en silencio, absorbiendo el momento. Frotó los labios contra su cuello y sus brazos lo envolvieron, presionándolos increíblemente más cerca. Una risa nasal fue su única respuesta, y las manos nunca se detuvieron. Entonces dejó que su cerebro todavía inducido de placer lo controlara por un momento y repartió besos perezosos a lo largo de la piel pálida. "¿Estás bien? ¿No te lastimé?"

"Me siento increíble." Ryan levantó la cabeza para mirarlo. Charlie estaba sonriendo con una cara llena de satisfacción, como un gatito feliz, con el cabello desordenado y mejillas todavía sonrojadas. También notó por primera vez todos los moretones alrededor del cuello de Charlie al igual que sus hombros, pecho y probablemente también tendría en sus caderas. "¿Tomamos un baño juntos? Todavía tengo que mostrarte la sorpresa."

"Por supuesto." No lo dejó levantarse, se quitó el condón y lo lanzó al cesto de basura, haciéndose una nota mental de tirarlo más tarde, después lo tomó en sus brazos y lo cargó en estilo nupcial hacia el baño. Charlie ni siquiera protestó, solo se rió contra su cuello mientras Ryan lo llevaba y envolvió los brazos felizmente alrededor de sus hombros. "Oh," dijo mirando la gran y brillante bañera al fondo del cuarto, también había un montón de bombas de baño y un montón de botellas, incluso copas vacías y lo que parecía ser vino. "Comenzaba a preguntarme por qué no tenías una."

"Es aburrido si solo soy yo," dijo mientras Ryan lo dejaba sobre sus pies. Encendió la llave y tomó dos copas antes de girarse hacia él con una sonrisa. Ryan tomó el vino y sirvió las copas llenas, también se sentía de humor de algo de alcohol ahora mismo. Un cigarrillo también habría sido excelente, pero el vino era su mejor opción justo ahora. Charlie lanzó algunas bombas al agua cuando la bañera se llenó lo suficiente y luego lo hizo entrar primero antes que él, y cuando lo hizo simplemente se metió en el espacio de sus piernas, acostándose contra Ryan con un suspiro feliz. "Ahora, de esto es de lo que estaba hablando. Es lindo, ¿verdad? Hice que la instalaran hoy mismo."

"Lo es," dijo después de tomar un sorbo del vino, mirando a Charlie con atención. Había algo en él que parecía sereno y complemente relajado que hizo imposible apartar la mirada de él. Tal vez era la forma en que el cabello caía sobre su frente suelto, eso siempre lo hacía ver increíblemente distinto y común, alcanzable. "¿Qué dices?"

Ryan parpadeó rápidamente antes de fruncir el ceño. "Disculpa, no escuché lo que dijiste."

"Podría instalar una en tu habitación. Parece ser que te gustan las bañeras," dijo sin ningún tipo de molestia. "Así cuando quieras, puedes tomar un relajante baño después de un largo día."

Ryan tomó la mitad de su copa antes de ponerla en la repisa junto a la pared. 

"¿Por qué necesitaría otra? Puedo simplemente venir aquí," dijo mientras presionaba el rostro contra la nuca de Charlie y pasaba los brazos a su alrededor, tocando su pecho suavemente. Lamió una gotita de agua de su piel antes de pasar los labios encima lentamente. "Como dijiste, es más agradable en compañía."

"Eso hace cosquillas," se rió pero movió el cuello hacia un lado, dándole más espacio a Ryan para seguir haciendo lo que sea que estuviera haciendo. Se sentía como si su cuerpo estuviera a cargo sin pensamientos de por medio. "Sí, supongo que es cierto. Solo déjame saber cuando quieras hacerlo."

"Quiero hacerlo ahora," murmuró contra su mejilla.

Lo sintió erizarse. Charlie se llevó la copa a los labios, pero Ryan vio su sonrisa. "¿Tienes pensado hablar con tu hermano en algún momento? Los problemas solo parecen estar alargándose entre ustedes."

"Lo he pensado varias veces," respondió. En serio lo había hecho, pero de alguna manera estaba acobardado de que Dee le diera la espalda otra vez. "Podría hacerle una visita en algún momento, también hablar con Drake." 

"No dejes que empeore, son buenos hermanos que se preocupan por el otro."

Viniendo de alguien que tenía muchos problemas a causa de su hermano mayor, Charlie probablemente lo decía porque no quería que las cosas entre Dee y él terminaran de una manera similar. Así que asintió suavemente. "Lo contactaré el fin de semana."

Hubo un cómodo silencio después de eso, Charlie jugando con el agua mientras terminaba el vino y Ryan cerró los ojos, apoyando la cabeza contra el borde de la bañera, tan relajado que pensó que se quedaría dormido hasta que Charlie volvió a hablar.

"¿Alguna vez has llorado?"

Parpadeó hacia el techo con los labios apretados y exhaló antes de responder. "Lo hice, varias veces después del funeral de mis padres. Simplemente no podía llegar a comprender que ya no estaban... que ahora tendría que cuidar no solo de mi, sino de Dee también." Suspiró cuando esa sensación apretada se formó en su garganta. "Estaba muy asustado por todo."

"¿Estuviste solo en todo momento?"

"Por algunos años, sí. Solo fuimos Dee y yo cambiando de un lugar a otro hasta que pudimos encontrar un lugar semi estable donde podía trabajar y enviarlo a la escuela." Apretó sus brazos alrededor de Charlie y presionó el rostro contra su cabello. "Después conocí a Drake y todo fue mejorando lentamente."

"Fuiste tan fuerte. Creo que yo nunca habría llegado tan lejos."

"Creo que lo habrías hecho bien." Besó su mejilla y recogió algo de agua en su mano para echarla sobre su cabello. "Eres inteligente. Y tienes a Dean a tu lado. Dee también estuvo conmigo todo el tiempo, así que no me sentía completamente solo. A pesar de que era solo un niño, su presencia sola fue de mucha ayuda." Charlie murmuró en voz baja y dejó su copa vacía a un lado antes de tomar sus brazos entre los suyos. Su perfil era muy bonito, con la nariz respingada y las mejillas firmes y libres de barba, pestañas largas y ojos de un azul brillante, no podía evitar sentir curiosidad de dónde sacó sus rasgos más bonitos. "¿Puedo hacerte una pregunta? No tienes que responder si es incómodo."

Charlie se rió. "¿Qué es?"

"Siempre hablas sobre tu padre y su esposa, pero me preguntaba si tu madre... ¿ella está...?"

"¿Mi madre? Ella está viva," respondió con un suave tono de voz. "Digamos que mis padres no tenían una buena relación. Se divorciaron cuando yo tenía quince, ella se fue y Shawn y yo nos quedamos con nuestro padre. Ha pasado un tiempo desde que hablé con ella, pero está feliz y volvió a casarse, tiene una familia y vive en algún lugar del mundo con ellos." Se encogió de hombros. "Supongo que también me hace feliz saber que ella está bien y que tiene una buena vida."

"Eso es lindo. ¿Entonces tienes otros hermanos?"

Charlie hizo una mueca. "Dos hermanas, ellas... son bastante duras. A veces creo que Shawn sacó el carácter de mi padre, pero en realidad fue de mi madre. Ella es una mujer a la que no quieres enojar, y sus hijas son igual." Se rió. "Pero son agradables en su mayor parte."

¿Por qué se sentía bien al saber que Charlie tenía todas estas personas ahí para él?  Pensó que podría llegar a sentir algo de celos, pero era todo lo contrario. Sentía alivio.

"Entonces..." Charlie se movió en la bañera para tomar una botella. Y solo le tomó un segundo ver qué contenía. Se levantó y se sentó en el borde, moviendo una pierna encima del hombro de Ryan, dándole todo un espectáculo mientras se metía dos dedos y su piel se volvía de un suave color rosa. Ojos oscuros y pupilas dilatadas. "Démosle un buen uso a esta cosa."

Ryan había estado medio duro por la pasada media hora, y ahora estaba completamente listo y preparado para el segundo round. 

Pero en su mente sentía que esta conversación no había terminado y que habían más cosas que debían contarse, solo que ahora su atención había sido desviada y su único objetivo comprendía a él y Charlie y sexo en la bañera.

Continuarían con su plática más tarde.

***

Holaaaa!! Parte 16 lista. Bien, sin más que decir, espero que hayan disfrutado. Nos leemos pronto xx