Raymond...

-Bien, te diré lo que realmente importa, no abundare en detalles sin sentido, la verdad Josh, ¿Listo?- Dijo el gorila mayor mirando a su Hijo.

Joshua asintió de inmediato, con toda su atención en su padre.

Ray sonrió, aunque no es lo que quisiera o sintiera en estos momentos, sonreír es una muestra de que todo estará bien al chico, pero en su interior el miedo estaba empezando a atacar.

-Bien... Josh, a partir de esta edad ya vas a comenzar a aprender muchas cosas y comenzaras a sentir algunas nuevas que al principio se te harán demasiado extrañas...- Ray hizo una pequeña pausa organizando más sus ideas y palabras en su mente antes de soltarlas.

-¿Qué clase de cosas?- La pregunta no se hizo esperar de parte de Joshua viendo la repentina pausa del gorila mayor.

Ray desvío la mirada de nuevo hacia el balcón, viendo esa bella noche.

-Cosas de adulto... Jeje, es raro llamarlo así pero se puede decir que son cosas que vienen con el crecer, con el experimentar e ir madurando.- Ray miro a su hijo que aún le tenía los ojos encima, según la expresión, el chico no estaba entendiendo muy bien.

Al parecer el gorila mayor le estaba dando mucha vuelta que estaba confundiendo a su hijo.

-Creo entender en parte de lo que me quieres decir pa, pero no entiendo a donde va.- Efectivamente lo que pensó el gorila mayor.

Ray soltó un suspiro, bueno... Directo al punto por que no está logrando nada así, solo alargar lo inevitable.

-Hmmmmmm perdón, le estoy dando mucha alargue... Josh, me refiero a cuando te enamoras de alguien, cuando amas a esa persona...- Ray miró con algo de tristeza esta vez a su hijo, el cual asintió indicándole al padre que siguiera hablando. -Bueno, por ahí va el asunto, del por qué ya tu madre y yo no estamos juntos.-

Finalmente lo dijo, aunque no toda la historia, ya vamos para allá.

-Ósea que... No lo están porque ya no se quieren.- Joshua dijo con tono bajo, pero audible para el gorila mayor.

-Nos queremos, pero no de la manera romántica, amorosa como lo era hace ya bastante, déjame te explico el por que.- Respondió Ray.

Nuevamente Raymond tomó una profunda respiración para dejar salir un suspiro, listo para comenzar a contar dicha historia.

Veamos...

-Hace 6 Años-

Como dijo Raymond, seria conciso contando lo que pasó, aunque la verdad no es que haya mucho realmente relevante ni giros inesperados...

Estando en dicha época mucho antes de que si quiera nuestro gorilon conociera a Dylan, viviendo en el continente americano con una bella familia, una mujer realmente cariñosa y amable de carácter fuerte también, un amoroso y "estricto" padre dándolo todo para darles la mejor vida a su esposa y a su querido pequeño Joshua de en ese entonces de 10 años.

Era una época realmente hermosa, un cuadro perfecto de la familia perfecta, como dirían, cumpliendo el sueño americano.

En ese entonces los dos trabajaban, aunque Carol hacia solamente media jornada para la otra estar con el pequeño Josh y darle la compañía parental que este requería, no le gustaba la idea que creciera con niñeras y perderse la mayor parte de esa linda etapa, cosa que apoyaba Raymond, solo que el si debía laborar el tiempo completo para que no hubiera un desbalance económico, eso sí, cada momento libre que podía lo usaba para estar con su pequeño sin dudar...

Hasta ahí todo bien, todo feliz...

Hay momentos donde tomamos unas decisiones que... Vaya... Uno repasa mucho tiempo después y se cae en cuenta que fue una completa idiotez, boludez, muchas maneras más de describirlo.

Como las hay buenas, pero en este caso no, en este caso fue completamente una idiotez de las grandes.

[...]

-Contesta Ray.- Decía para sí misma Carol escuchando como marcaba y marcaba pero nada que se respondía del otro lado de la llamada.

Se estaba preocupando, era primera vez que esto estaba pasando, hace ya tiempo que Raymond fue a recoger a Josh a la escuela, no se demoraba tanto y si algo pasara el avisaría... No todas las veces, pero siempre había algún tipo de aviso.

Seguía y seguía insistiendo, pero nada, esto ya le estaba causando miedo.

De manera inconsciente ya estaba caminando por toda la casa, tratando de que cada paso mientras estaba pegada al teléfono hiciera el intento de hacer que se tranquilizara, pero nada, no lo conseguía.

Fue entrando en su habitación en su larga caminata, que pudo divisar la razón por la cual es que este no tomaba la llamada...

"a" Dijo a sus adentros.

Alejó su teléfono de su oreja y colgó de inmediato con resignación, enojo y hasta con ganas de reír.

-Idiota...- Dijo sentándose en su cama.

Como no lo iba a contestar, si el teléfono del gorila mayor ya hacia acostadito en todo el centro de la cama y por lo que dedujo Carol, se encontraba en modo silencio...

Sintió como el alma volvía a su cuerpo porque ya estaba pensando en lo peor de que les hubiera pasado algo a sus dos chicos.

Se calmó, tomo una larga bocanada de aire y fue ahí cuando escuchó la puerta y rápidamente salió hacia la entrada de su hogar, viendo a los dos susodichos entrando con sonrisas en sus rostros.

Cuando Ray y Carol se vieron, se quedaron inmóviles, Carol fue la primera en empezar a acercarse con paso firme y ya estando de frente al papá gorila le dio un buen coscorrón haciendo que Josh se asustara y Ray comenzara a sobarse el golpe.

-Aaauu!! Heeey!! ¡Que diablos Chari!! ¿¡¿Por que el golpe?!?- Exclamó el gorila mayor viéndola aun sobándose el futuro chichón que le saldría en su cabeza.

Carol vio a Josh el cual se había quedado en modo estatua, como si esperara que le llegara su reprenda, pero a él se le pasa, el responsable aquí debe de ser Raymond.

-¡Porque me tenían realmente preocupada! ¡Se estaban demorando bastante y no me contestabas el teléfono y creí lo peor¡- Dijo cruzando los brazos y evitando que la voz se le quebrara recordando ese sentimiento de miedo profundo que sintió momentos antes.

Al escuchar eso, padre e hijo rieron en la cara de Carol, ellos sabían el por qué el gorila mayor no había contestado para nada el teléfono... El hijo le hizo un poco de Bull ying a su padre.

-Lo siento linda, no me di cuenta y dejé el teléfono en la habitación, por eso fue que no pude avisarte, fue cuando te iba avisar que paramos en un parque, que me di cuenta que no llevaba mi teléfono...- Dijo el padre gorilon sobándose su cabeza donde recibió el golpe.

-Sí, papá estaba asustado jeje.- Dijo el pequeño complementando la historia.

Carol soltó un suspiro, bueno al final no había pasado nada a mayores por lo que estaba calmada y feliz de ello.

-Bueno, no pasó nada malo, por favor ten más cuidado la próximo cariño. - Dijo a lo que el gorila mayor asintió sonriendo y abrazándola. -Bien, los dos a cambio de ropa que la cena ya está lista.-

Los dos chicos asintieron, tomando camino cada uno a su habitación para preparase mientras que Carol comenzaba a servir todo, sonriendo y tranquila que el susto había pasado y que nada malo o raro estaba sucediendo...

Bueno, si sucedía algo.

"La verdad si estaba ocurriendo algo, algo que hice que pasara fuera de las paredes de nuestro hogar... Algo que sabía que podía derrumbar todo y aun sabiéndolo, corrí el riesgo y amé ese sentimiento de adrenalina y aventura... Aun sabiendo que apuñalaba a alguien que me amaba demasiado y que confiaba ciegamente en mí en la espalda."

"Eso pasa cuando piensas con la cabeza de abajo y te dices a ti mismo... ¿Qué malo puede pasar?... Muchas... Muchas cosas."

[...]

Una noche de viernes, luego de la jornada laboral, Raymond acostumbraba a jugar aficionadamente partidos de Rugby con sus compañeros del trabajo, siempre para liberar estrés y divertirse también...

Claro que hay otras formas en las que liberar el estrés de una manera física.

Si... Esa...

La lujuriosa...

"Ese viernes si me desquite en todo sentido, esa noche no me importó el tiempo que me tomara, lo que sucediera, deje que todo saliera simplemente, era tanto que habíamos planeado con ella un trío con otro chico que ella conocía..."

"Si, yo solo quería hacerle en todo sentido y me pareció una experiencia digna de probar, estaba realmente intrigado y excitado con esa idea..."

"En el calor de esa noche experimenté mi primera vez con un chico mi vida, fue raro, pero con ayuda del momento y todas las ganas que tenía acumuladas me deje llevar y fue una experiencia fantástica, que realmente me gustó, yo siendo el centro de atención atendiendo tanto a mi chica y a su amigo bien experimentado puedo decir... Inolvidable."

"Primera y única vez, pero suficiente también."

...

"Y si, luego de esa noche fue cuando ya todo cobró factura."

-Hmmmmmmmm vaya Raaaay... Hoy estabas... Ufff.- Decía Nicole, digamos que la otra, solo que tenía otro título interesante.

Profesora Nicole...

"Ya sé lo que piensan pero no, al menos no es la maestra de mi hijo, pero si de donde el va... Ya sé, no tienen que decir nada, ya sé."

-Hmmmmmmmmmmmmmm tenías razón Nic... Es una bestia jejej.- Decía su amigo canino boca abajo con respiración pesada.

En el borde de la cama ya hacía el gorila respirando un poco agitado también, escuchando la charla entre los dos amigos, mirando al suelo... Como si se tratara de un momento de recapacitación luego de la mala decisión tomada y realizada, solo que ya era tarde, ya pasó.

Volteó a mirarlos y antes de si quiera decir algo, sus ojos vieron la hora que era en el reloj digital de la habitación, dándole un vuelco en el corazón.

-Mierda... Tengo que irme.- Rápidamente comenzó a tomar sus prendas, a medio ponérselas pero no sin antes un pequeño detalle.

Su olor era más que "un partido de rugby " en estos momentos.

Bueno ya resolvería en el camino.

-Ah, Ray, ya te...- Antes de que la profe dijera algo mas, la puerta se cerró dejando a los dos en silencio mirándose.

-Déjalo, se lo gano después de tan magnífico round jej.- Dijo el canino volviendo a dejarse caer en la cama.

Los dos rieron y prosiguieron a descansar.

Mientras tanto un gorila en posibles problemas y sin explicación alguna iba en camino a su casa, se había puesto su vestimenta de Rugby... Si, antes de ese evento lujurioso si había jugado con sus compañeros, para su suerte eso lograba cubrir el hedor a sexo que llevaba encima, era solo llegar a casa y encerrase a darse un buen baño a eliminar evidencias.

"Que noche, cuando llegué, Carol y Joshua estaban ya dormidos, bueno eso pensé, cuando llegaba al baño Carol salió de este y de frente nos encontramos, ella con una cara no tan amable, obviamente en ese momento le di mis excusas del por qué la hora... Y en mi misio de entrar rápidamente al baño me dijo las palabras que menos quería escuchar antes de cerrar la puerta."

-Hueles diferente...- Después de eso el clic de la puerta se escuchó en toda la habitación.

"Claro que escuché eso, solamente pude responderle que debido a lo que había jugado, sudor y demás cosas... Ya sé por qué caemos tan fácil..."

"Fue un baño largo en mi mente, cuando fueron solamente un par de minutos, solo sé que luego de acostarme y desearle buenas noches a Carol, de cerrar los ojos..."

"Todo cambió como pensaba... Todo mal."

"Que más podía suceder, Carol comenzó a comportarse más seca conmigo, aunque en su hablar fuera igual de cariñosa que siempre y claro que obviamente no me atrevía a preguntar que le sucedía... Ya que sabía que eso marcaría el jaque para mí de manera inmediata, así que por mucho que me doliera, aunque no tuviera derecho ni si quiera de ello, viví con eso, mis aventuras disminuyeron bastante ya que era obvio que ella sospechaba, ya estaba hasta el cuello, pero no iba a dejar hundirme por completo."

"Fue una aventura salvaje, que como siempre al final pasa factura."

"Hmmmm... Y siempre llega en el momento menos esperado."

-Carol...- Dijo Ray viendo el papel que tenía entre las manos, leyéndolo repetidas veces y viendo ciertas fotos adjuntas.

-No hay necesidad Raymond... Déjalo así, ahora no quiero saber nada más, solo que lo revises y lo espero firmado, es el último favor que te pediré.- Dijo Carol de manera calmada y directa, aunque por dentro quisiera aventarlo contra todo, toda una dama.

Luego de eso un silencio donde los dos se desconocían completamente, en ambos un dolor profundo y una grieta que se hizo demasiado grande y profunda.

-Lo siento, aunque no sea lo mejor ahora.- Dijo el gorila mayor mirando de frente a Carol.

Ella solo asintió sin decir una palabra.

-Estarás de acuerdo que esto se manejara entre los dos, al niño no se le pondrá en medio, no quiero que lo llegue a afectar.- Dijo Carol parándose del sofá para retirarse.

-En algún momento lo tendrá que saber...- Respondió Ray.

-Si... Y tú se lo dirás...- La sorpresa y el terror se vieron en la cara de Ray luego de escuchar esas palabras. -Es lo mínimo que puedes hacer, por respeto.- Dicho eso finalmente, se retiró a su ahora, habitación propia.

"Por respeto... Y esas palabras se me quedaron grabadas hasta el día de hoy, una deuda que adquirí y bien merecida."

"Y qué más puedo decir, luego de esa noche y de un proceso que para mi sorpresa fue corto y rápido, el anillo que nos unía se rompió, creo que quedaron en una casa de empeño... Jum, irónico que al final su valor se fue al piso como lo que había entre nosotros..."

"Pero siempre la promesa de que esto no iba a afectar a Joshua ni a su crianza se mantuvo firme y la promesa de decirle lo que pasaba como pueden ver, la acabo de cumplir, tarde o temprano, lo escuchó de mi boca."

"El resto ya es historia, conseguí el empleo, transferido, nueva vida, aunque un poco solitaria... Pero tomando mejores decisiones, creo."

-Presente-

La cara de sorpresa de Josh no se hizo esperar luego de que su padre le contara la verdad tras de todo.

Tristeza también lo inundó y enojo...

Claro que Raymond omitió ciertos detalles como el trio, solamente le conto por encima que era con otra persona, ya esos detalles eran demasiado para el pequeño.

Pero la verdad ya estaba dicha, la verdad al final le fue revelada y ahora las dos promesas que sostenían Carol y Raymond fueron cumplidas.

-Y esa es la verdad Josh, de por qué todo es como lo es ahora, excepto lo de mi trasferencia, eso desde antes ya estaba planeado solo que se dio luego de todo eso.- Dijo el gorila mayor mirando al suelo.

Joshua no decía nada, estaba igual que su padre, solo viendo al suelo mientras sobaba sus manos lentamente.

Al notar que su hijo no decía nada, Ray tomo nuevamente la palabra, tratar de hacer que le opine algo, o saber que siente.

-Quiero que sepas que precisamente prometí y cumplí con decírtelo, porque mereces saber todo... Pero por que también quiero pedirte perdón de mi parte y de tu madre, por haberlo ocultado hasta ahora.- Dijo esta vez volteando a mirar a su hijo quien seguía cabizbajo

En eso el chico finalmente dejo salir unas palabras.

-Básicamente... Mama te castigó con decirme todo.- Y es que realmente fue así.

-Ella quiso en un momento decirte todo, pero eras demasiado pequeño aún, además yo apoyé en ser yo quien te lo dijera, era lo correcto ya que yo fui quien cometió los errores.- Dijo el gorila mayor con su vista aun en su hijo.

Seguido de esto Joshua soltó un suspiro pasando sus manos por su rostro, para luego pararse del sofá y a paso lento comenzar a caminar hacia el pasillo, hacia su cuarto.

-Gracias por decirme...- Dijo Josh antes de desaparecer de la vista de su padre.

Y ese gesto de agradecimiento a pesar de todo el torbellino que Ray le había soltado a su pequeño, dejaron al gorilon no solo derrotado, derrumbado también viendo que fue una reacción no tan caótica como la estaba esperando, una reacción madura para su edad.

Fue cuando sintió que sus mejillas se estaban mojando, que inevitablemente comenzó a llorar, a dejar ir peso de encima demasiado gigantesco que hace ya bastante tiempo tenia consigo, ahora se sentía liviano, orgulloso de al fin de cumplir honradamente su promesa, pero culpable y molesto consigo mismo por herir una vez más a alguien importante en su vida...

Como que ya se está volviendo un hábito...

-Ya le dije... Todo.- Dijo el gorila mayor sentado en la silla en su balcón de su cuarto.

No había perdido el tiempo en llamar a Carol, todo se alineo para que justamente ese día la madre de su hijo no se había ido a dormir temprano y pudiera hablar con ella.

-Obviamente omitiendo ciertos detalles espero.- contestó Carol a través del teléfono.

Ray solo hizo un sonido de confirmación audible para Carol.

-Gracias... Sé que tuvo que haber sido difícil... Mañana lo llamaré para pedirle disculpas, en esto estábamos los dos.- Ray sonrió al escucharla en ese tono culpable cuando ella no tiene ni por qué tener velas en este entierro.

-Nada de eso, le dejé en claro que fui yo quien insistió, pero si quieres llamarlo a aclararle adelante, antes ayudaría a que se calme.- Dijo en tono suave.

-¿Se molestó demasiado?- Preguntó Carol realmente preocupada.

-No diría que demostró mucho lo que sentía, pero sé que debe de tener un remolino de emociones que ni sabrá como manejarlas.-

-Ok, entonces mañana lo llamaré... Tranquilo, me encargaré de aquí en adelante, tu también intenta tranquilizarte y despejar esa cabezota tuya... No te odia como piensas...-

En parte eso si tenía razón Carol, ya Raymond se estaba pensando lo peor y el gorila sonrió el cómo leyó su mente a la perfección, ¿qué más de la mujer que se unió a el?

Lo conoce en cierta parte como a la palma de su mano.

-Gracias y sí, me calmaré... Te dejo, me iré a dormir y tratar de descansar.- Dijo para recostarse en su cama listo para cerrar los ojos.

-Dale, descansa y ten buena noche.-

Ray sonrió.

-Tu también, sueña bonito.- Dijo el gorila mayor con una leve sonrisa.

Carol rio y si más cortó la llamada.

Ray dejo su teléfono en su mesita de noche, por mañana no se preocuparía, sería su día libre de descanso, así que tenía tiempo de sobra para tratar de desconectarse y descansar como es debido.

Solo esperaría la charla entre Carol y su hijo y esperar que Joshua organice sus pensamientos.

"Sueña bonito Josh"

Dylan...

-Días después, miércoles-

-Así que le contaste todo...- Dijo Dylan con tono suave.

El gorila a su lado asintió un poco cabizbajo, ya que al parecer la charla no había ido del todo bien para Ray, llevando a que Carol interviniera en hablar con Josh de igual forma, sobre todo.

la respuesta y reacción de su hijo a la historia de por qué ya no estaba junto a Carol le había impactado al chico según contó el gorila, cosa completamente entendible, hasta en su momento Dylan le molestó también pero ya con el tiempo decidió dejarlo de lado.

-Fue una reacción no muy mala a como estaba esperando sinceramente... Pero si vi mucha tristeza en su mirada a medida que le iba contando.- Ray solo miraba al frente, con tristeza en su rostro.

Tristeza que pocas veces en el felino ha visto en el desde que le conoce, si ya el gorila está demostrando esa faceta es porque le ha afectado en gran medida.

-Lo... Lo siento, escuchar eso.- El felino no sabía de verdad que más decir, solo podía escuchar atentamente, ser su hombro donde se desahogue.

Raymond le dio una media sonrisa al felino, tratando de restarle un poco de importancia.

-Tranquilo, con escuchar me ayudas...- Dijo el gorila agachando la cabeza nuevamente.

Después de eso hubo un silencio entre los dos, Dylan no tenía mucho que decir, Raymond ya lo había dicho todo... El felino sentía que debía decir algo, pero no sabía qué y cómo, este escenario de un padre decepcionando a su hijo le era completamente nuevo para él, lidiar con eso, le daba nervios... ¿Miedo? También.

-Lamento no poder decirte algo... U opinar...- Se disculpó nuevamente el felino.

-Sé que tú siempre me das tu punto de vista así no te lo pida, porque siempre quieres ayudarme... Jeje, a veces es molesto lo admito. - Ray levanto la cabeza para mirar a Dylan fijamente, sus ojos aun reflejando tristeza, un poco húmedos. -Pero en serio, ahora necesito que me digas que piensas... Necesito tu opinión, dime por favor.- Lo último lo dijo con tono decaído, rogando por las palabras del felino.

Y su rostro le estaba gritando a Dylan que por favor, fuera el pensamiento que fuera, que por favor lo soltara para que el gorila pudiera oírlo.

Dylan no quería, decir algo que no fuera correcto y que llegara afectarlo más... No quería.

-Ray... Hmmmmmm sé que puede sonar obvio y sé que no puede ayudar como tu deseas, lo único que puedo pensar y decir ahora es que... Hables con él, acércate y trata de entablar otra vez una conversación... No creo que dejarlo así, a medias y tomar distancia ayude mucho, aun tienes cosas que explicarle a él y que él pueda escuchar y llegar a, entender.- El felino dijo todo de manera lenta y poniendo su mano en la mano de Raymond.

El gorila puso su mirada en Dylan sintiendo el tacto de la mano del felino en la suya suavemente.

-No te alejes, no cometas ese error.-

Con eso Dylan le dio una leve y cálida sonrisa a Raymond y una mirada que le rogaba al gorila que por favor tomara dicho consejo en serio y que lo recordara de ahora en adelante.

Escuchando esto, Raymond se quedó callado sin dejar de mirar fijamente a su amigo felino con esa expresión cálida.

"No te alejes..."

"No cometer ese error..."

Repasando esas frases en su cabeza el gorila bajó su mirada, viendo como su mano aún estaba cubierta por la de Dylan y en un suave movimiento tomó la mano del felino y le dio un suave apretón, un gesto de gratitud silenciosa que la pantera recibió, un gesto a manera de contacto físico que Dylan no esperaba ni lo mas mínimo.

Así que activando el modo planta, Dylan no se movió y simplemente observó como el gorila seguía atento a sus manos, aun con su suave pero firme agarre aprisionando su mano.

"De nada..." Pensó el felino respondiéndole mentalmente a Raymond, con una sonrisa que comenzaba a adueñarse de su rostro y de igual manera devolvió el suave apretón a la mano del gorila mayor.

-De verdad necesitaba esto.- Dijo Ray rompiendo el silencio.

Dylan asintió en silencio aun sonriéndole, aunque el gorila no haya levantado su cabeza para verle.

-A diferencia de mí, parece ser que el experto en crianza eres tu...- El gorila soltó una pequeña carcajada ante esa comparación.

-Digamos que tuve poco más de 50 hijos de los que hacerme cargo... Suena mal lo sé pero es una manera de verlo jajaja.- Dylan le siguió con la risa al fin rompiendo su silencio.

Ambos terminaron por reír a carcajadas alivianando un poco el aura de tristeza que hace unos pocos minutos estaba presente, al menos el felino estaba contento de ver que el gorila se estaba tranquilizando ante la situación, además de haberle podido dar un buen consejo basado en experiencia propia que le servirá bastante.

Solo que faltaba una parte de la historia de lo que paso luego de esa noche.

-¿Y qué dijo Carol de todo esto? ¿Pudo hablar con Joshua sobre la situación? - Preguntó Dylan, haciendo que Ray nuevamente se tensara un poco.

Dylan notó la reacción por parte del gorila, sabiendo que había tocado un punto sensible de la situación.

-Uffff, bueno esa es la otra parte de esa historia, para resumirte... Ahora Carol también sabe de las cartas.- Dijo Ray mirando a Dylan. -Y también ya sabe de la carta donde respondo y pidiendo conocerla.

"Conocerla..." Pensó de inmediato Dylan aguantando una mueca al escuchar eso.

-Oh... ¿Entonces qué piensa ella?-

-Déjame te cuento.- Dijo Ray recostándose en el espaldar de la banca poniéndose cómodo.

Dylan no le quito sus ojos de encima en ningún momento expectante de seguir escuchando esta entretenida historia.

Y sí que fue interesante...

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Uuuuuuufffff dios capitulazo jajajajaja lleno de info del pasado que explican cosas y espero que ustedes se den cuenta porque ni yo se jajajajaja, no en serio espero les guste y gracias por seguir aquí conmigo, los amooooo!!!