Dylan...

Es algo normal en estos momentos, cuando no quieres o tienes dudas que el camino hacia el destino que te genera eso se te hace realmente corto, ¿o es al revés? que se te hace más largo... Bueno el punto es que para la pantera el camino realmente fue muy corto, como si de un parpadeo ya hubiera aparecido frente a la puerta del hogar del gorila.

-Hmm bueno, mejor de una buena vez. - dijo listo para finalmente tocar la puerta con 3 toques coordinados uno tras otro.

Espero un momento hasta que pudo sentir unos pasos del otro lado de la puerta que se acercaban más y más, hasta que esta lentamente se abrió dejando ver a Raymond.

En dicho momento ambos se vieron directo a los ojos como si uno esperara la reacción o el primer movimiento del otro y así responder, pero nada de nada, los dos estaban estáticos, no sabían cómo actuar, raro, pues muy pocas veces se encontraban en una situación de estas.

Dylan sonrió ante la atenta mirada de Ray dispuesto a romper este enorme bloque de hielo que se puso sobre ellos.

-Hola tu.- Dijo con dicha leve sonrisa en su rostro, haciendo que el gorila parpadease unas cuantas veces y dejara que una leve sonrisa adornara su masculino rostro.

Ray le da gracia cuando lo saluda así, tratar de mantenerse firme ante dicho saludo un poco serio es difícil para él, siempre le hace gracia a pesar de que lo ha escuchado incontables veces y que ya llevan años con eso.

-Heh... Hola tu... Gracias por venir.- Dijo suavemente aun parado debajo del marco de la puerta.

Dylan asintió.

-Es bueno verte también y aparte de eso... Sé que es para cierto tema.- Dijo de inmediato Dylan, Ray hizo una leve mueca combinada con la leve sonrisa y asintió ante dicha afirmación.

-Sí, pero antes de eso, ven entra por que quiero que conozcas a alguien.- Dijo haciéndose a un lado para que la pantera entrara finalmente, cosa que no dudo Dylan, caminando de manera lenta hasta pasar.

Escuchó como Ray cerró la puerta tras él y como se adelantó por el pasillo, siguiéndole el paso hasta que llegaron a la sala de estar, donde vio la tele prendido con un juego de carreras en él, claro que alguien debe de estar controlando dicho deportivo en la pantalla y cuando llevo su mirada hacia el sofá lo vio, vio el pequeño gorila sentado concentrado completamente en la pantalla moviendo ágilmente sus dedos sobre el control.

Vió como Raymond se paró al lado de él, notando como el chico ni nota su presencia que hasta cualquiera diría que lo está ignorando a propósito para no perder dicha concentración en el trazado de la pista y sí que maneja bien para ser un video juego debe de admitir la pantera viendo dicha escena cómica.

Raymond esta vez dio un carraspeo más fuerte tratando de llamar la atención del chico, pero nada porque el chico ya entro en una etapa de concentración mucho más alta porque ya se nota como al momento de que toma la curva en el juego este se inclina, como si eso le ayudara a girar mejor o con más precisión, Dylan por su parte soltó un sonido como si estuviera conteniendo una carcajada, viendo el comportamiento del chico y su ya irritado padre tratando de despegarlo un momento, así que como última medida, Raymond tomó el control de las manos del chico, pausando el juego ante la sorprendida e indignada mirada del adolescente.

El reclamo no se hizo esperar tampoco.

-¡PAPÁ!- En un grito y parándose del sofá y quedando de frente al gorila, reclamando la acción de Raymond, el cual no se inmuto, solo dejo el control en la mesa de centro y volvió a encarar al chico.

Raymond se paró en frente al chico y se le quedó mirando con expresión seria, por la diferencia de estatura el chico se ve que tiene que inclinar su cabeza hacia arriba bastante, esta acción le llevó al chico una señal de alerta y de advertencia, pues el grito que le acababa de dar hace unos pocos segundos a quien es su padre, sabe por experiencia que no traen nada bueno en consecuencias... Eso cuando sucedía y cuando era más pequeño y de los recuerdos marcados por allá en sus 8 o 9 años o más bien de esa edad para atrás le dio a entender que hacer ante la mirada penetrante y silenciosa de Raymond.

El chico rascó su nuca de manera nerviosa ante la atenta mirada de tanto el gorila como el felino que espera un poco alejado de dicha escena, pero analizando dicho momento entre padre e hijo.

-Lo siento, es que estaba en una carrera importante.- Dijo el chico de 16 años de manera apenada dando su justificación sobre su comportamiento mientras desvía la mirada hacia cualquier lado menos a su padre y fue ahí cuando se dio cuenta de la presencia del felino el cual sigue atento a la escena con una leve sonrisa en el rostro y mirada curiosa.

Raymond habló de nuevo llamando la atención del chico, haciendo que lo mirara al rostro nuevamente.

-Sabes que acepto tus jugarretas, tus juegos, bromas, porque me gusta ser parte de ellas...- hizo una pequeña pausa tomando una lenta respiración y cerrando los ojos un momento para luego volver a abrirlos y mirar a Joshua. -Pero no hay lugar para las faltas de respeto, te lo he dejado claro. - Dijo en tono calmado, que para Dylan no parecía un regaño, más bien una leve advertencia.

En cambio, para Joshua fue suficiente y entiende con eso... Que se había pasado un poco de la raya.

Raymond con Joshua tienen una buena dinámica, Cuando Ray vivía con Joshua y Carol, se mantenían jugándole bromas a Carol, o el uno al otro, se mantenían fastidiando como le decía Carol en cada momento que tenía la oportunidad, prácticamente Carol tenía dos niños en casa 24/7 con esos dos... Claro que cuando Joshua se sobrepasaba y tenía unos de esos momentos de irreverencia más que todo frente a Raymond, al gorila mayor no le flaqueaba la mano para reprender al chico, siempre Ray fue muy claro, más claro que el agua... "No hay lugar para las faltas de respeto" Con dicha frase Joshua sabia, o bueno, sigue sabiendo que es la advertencia que está cruzando dicha delgada línea.

Joshua asintió levemente y de manera lenta...

-Lo siento papá.- Dijo ya viendo a los ojos a Raymond el cual asintió y sonrió levemente para terminar acariciando su cabeza.

-Disculpa aceptada. - Suspiró antes de seguir. -La razón por la cual detuve tu juego, es porque quiero que conozcas a alguien...- dijo en ese momento volteando hacia donde aún seguía parado Dylan, quien los mira atentamente después de dicha escena paternal.

Dylan sonrió y saludo con su mano cosa que el chico Joshua imitó el gesto aun con la curiosa mirada en su rostro.

-Un gusto conocerte al fin Joshua.- El felino dijo sonriéndole-

-¿Al fin?- Eso sí que plantó aún más duda en el chico, el cual no dudó en mostrar más intriga y curiosidad en su rostro en modo de respuesta

Raymond sonrió y soltó otro suspiro.

-Si, al fin, dice eso porque le he hablado bastante de ti, desde que llegué, y le prometí que te presentaría y yo también quería que lo conocieras... Él es quien me ha acompañado desde mi llegada y ayudándome a adaptarme... Es un muy buen amigo...-Dijo el gorila mayor mirando a su hijo, poniendo su mano en su espalda, dándole un suave empujón para que se acercara a Dylan.

"Auch" dijo en su mente la pantera, evitando que una pequeña mueca invadiera su rostro ante dicha palabra friendzoneadora.

Dylan extendió su mano cuando Joshua ya parado frente a el simplemente se le quedó viendo.

-Un gusto Joshua, me llamo Dylan, un placer conocerte al fin heh.- Dylan sonrió dejando salir una pequeña risita.

Joshua miró un momento la mano de la pantera y la tomo finalmente dándole un amigable apretón.

-Igualmente, me llamo Joshua Carter.- Dijo su nombre con orgullo con su vista fijada en la de Dylan.

Dylan asintió sonriendo y finalmente sus manos se soltaron.

-En esta parte es donde diría la misma frase de siempre que tu papá me habló mucho de ti, pero el mismo me ahorró esa frase.- Guiñó riendo ante los dos gorilas.

Raymond negó con la cabeza acercándose a Dylan parándose al lado de este.

-Bueno, más adelante podemos cenar para que se conozcan más, por ahora puedes seguir jugando Josh, tengo que hablar algo importante con Dylan, ¿Entendido?.- Dijo mirando a Joshua y viendo como este asintió simplemente sin palabras de por medio dirigiéndose al sofá y quitar la pausa del juego para seguir con su carrera bajo la atenta mirada de los dos adultos.

-Bien...- Soltó Raymond en tono suave suficiente para llamar la atención del felino el cual lo miró expectante. -Vamos, es más tranquilo en mi estudio.- Dijo caminando guiando el camino hacia la mencionada habitación con el felino siguiéndole el paso de cerca.

El felino solamente tiene su vista en la corpulenta espalda de Raymond mientras lo sigue a una corta distancia, atento a cada paso hacia su destino mientras que de fondo se comienza a escuchar el ruido proveniente de la sala que claro estaba indicaba que el chico inicio de nuevo la partida...

Segundo piso de la casa, finalmente el felino vio como el gorila abría una puerta y le hacía señas para que ingresara con él, cosa que Dylan no dudo en aceptar, una vez ya dentro de la habitación Dylan camino hacia la silla frente al escritorio donde sabe que Ray hace todo tipo de sus diligencias que tenga que ver con documentación, como todo un adulto tiene su espacio e específico para ello, así que tomo una lenta y profunda respiración y decidió por relajarse en la silla ya que estar tenso en estos momentos no viene bien al cuento como se dice.

Ya recostado completamente en el espaldar de la silla y viendo como Raymond tomaba asiento en su silla ejecutiva, ya sabe que se viene el momento de iniciar la susodicha e incómoda conversación, que tampoco no se debe de restarle la importancia que tiene en estos momentos parra ellos dos.

Y el primero en tomar la palabra esta vez fue el felino.

-Antes de cualquier cosa, quiero saber si tienes o quieres que te diga algo o que te responda algo en específico antes de yo darte explicación y pedirte perdón.- Dylan dijo con la mirada fija a los ojos de Raymond, quien también estaba viéndolo a los ojos directamente.

Lentamente la expresión del gorila cambio, una pequeña expresión de sorpresa sobre lo que le estaba diciendo Dylan y como lo estaba proponiendo y poniendo sobre la mesa dicha posibilidad... Pero...

Raymond soltó un pequeño suspiro, puede que pidiendo la explicación a lo principal que lo tiene dudando y que lo tiene y ha tenido cabezón todo este tiempo evita que la situación de más vueltas de las necesarias y que todo se resuelva al fin con paz y nada de altercados como dicha noche, aunque la duda que tiene y que quiere que sea contestada puede y siente que tiene una gran probabilidad de que no sea contestada, es más, puede que el felino decida no hacerlo o que lo diga de una manera que baile alrededor de la verdad dándole poco detalle pero a la vez confirmándole sus pensamiento de lo que puede estar pasando.

Varias posibilidades, pero que todo lleva a que al fin esto de un giro para bien, no completo como el desearía, no un cierre total, pero es un paso al camino correcto piensa Ray.

-¿Raymond?- Dicha voz lo trajo de vuelta de su pequeño trance que no noto en el que entro.

Parpadeo y miro de nuevo a Dylan a los ojos, se inclinó hacia el escritorio apoyando sus codos sobre la fría madera listo para hablar.

-Sí, lo siento me quedé un poco pensativo, pero si, me parece lo que me dices y creo que con lo que quiero saber, esto no tiene por qué dar más vueltas de las necesarias y no extender esta charla.- Dijo soltando un pequeño suspiro.

Dylan simplemente se quedó esperando a que las palabras del gorila salieran nuevamente de su boca.

Y así fue.

-Solo quiero saber sobre ese papel, es lo único que me inquieta, quiero saber 2 cosas...- Dijo y pausando un momento para organizar muy bien la pregunta. -¿Que dice de mí?... Y quiero saber por qué te empeñaste tanto en ocultarlo...- Dijo sin quitar la mirada de Dylan viendo si había algún tipo de reacción frente a lo que estaba diciendo.

Pero nada, el felino ya estaba listo, sabe que no tiene a donde más ir, o donde quiera ir realmente, Dylan ya había aceptado de antes que eso es lo único de lo que realmente quería hablar el gorila, de lo que más le importa para despejar la duda.

Hubo un momento de silencio, donde Dylan bajo la mirada y tomando un breve respiro volvió a mirar al gorila a los ojos, se recostó sobre la mesa apoyando sus brazos para estar más cómodo listo para decir lo que ya tiene en mente.

-Bueno, para responder la primera pregunta, no es que no quiera darte detalles, pero en estos momentos no puedo de verdad y sé que quieres, sé que eres demasiado curioso, pero confía en mi cuando te digo que no dice nada malo de ti, con toda seguridad y te puedo mirar a los ojos y asegurarte que solo... Dicen cosas increíbles sobre ti, cosa que son totalmente ciertas...- Terminando de decir eso, el felino vio como la cara del gorila abría un poco sus ojos en sorpresa de escuchar eso, sonrió y siguió hablando. -Cosas que realmente siento que son verdad, cosas que aunque muchas veces uno se diga a si mismo que no merece escuchar o que se deban decir, creo que si son necesarias escucharlas de alguien más, cosas que siento que tengo que decirte no solo para hacerte sentir bien, sino, para darte a entender cómo y quién eres para mí y...- Dylan paró por un momento ya que en ese momento se comenzó a dar cuenta que estaba hablando de más, mucho más de lo que realmente quería decir en estos momentos, y que eso ya se estaba subiendo de tono, cosa que hizo que comenzara a sentir como su rostro se calentaba poco a poco y más que todo frente al gorila.

Raymond... El gorila se encontraba en estos momentos sorprendido por como dichas palabras del felino habían salido con tal naturalidad y que en si sintió que venían de una manera poética, además de que vio como el felino paro de forma abrupta de la nada, así que en vez de tomar la palabra se quedó callado simplemente mirando a Dylan detenidamente hasta que el felino reaccionara o siguiera hablando por que como había dicho su amigo, el de por si es bastante curioso y ahora no era la excepción por que más estaba por decir.

Dylan miró de nuevo a Raymond el cual tiene sus ojos en el sin vacilar, el felino tomo una profunda respiración de nuevo y soltó un suspiro calmándose y ordenando de nuevo sus ideas antes de seguir abriendo la boca.

-Y... decía y me refería a que, si, son cosas buenas, cosas que en su momento o que simplemente no puedo o no soy capaz de decírtelas, por eso fue que decidí plantarlas ahí, pero no para entregártela, creo que fue más que todo como una manera de desahogo pienso yo o que simplemente me ayudara a decírtelas en algún momento como un guion.- En su mente, el felino realmente espera que esto resuelva y calme un poco la curiosidad del gorila sobre ese punto, como se diría, bailó alrededor de la verdad, dando poco detalle y dirigiéndolo a una temática amigable y de respeto con un poco de admiración.

Terminando de hablar el gorila siguió atento al felino sentado frente a él, nuevamente cambió de postura en la silla y se recostó en el espaldar, asintiendo.

-Bueno, supongo y creo que es lo más detallado que escucharé y sabré sobre ese papel y más que todo viniendo de ti...- Nuevamente mirando a los ojos a Dylan el cual aún seguía recostado en el escritorio, diría el gorila con expresión un poco nerviosa.

Dylan al escuchar eso abrió sus ojos un poco más, atento a lo que el gorila decía y sus expresiones.

-Aunque debo de ser sincero que no me deja del todo tranquilo y a gusto lo que me respondes, aun me sigue dejando la duda... - Claro, no es tan fácil como que se tenga que tragar eso completamente pensó el felino.

Pero Dylan si estaba siendo sincero en estos momentos, lo que le estaba diciendo a Raymond son cosas que realmente siente solo que no al nivel que el felino desearía estárselas diciendo como si fuera un anuncio con bombos y platillos, el felino en cierta parte le confeso cosas que él siente con fervor hacia Raymond.

-Entiendo lo que me dices y puedo llegar a entender cómo te sientes y sé que tampoco puedo llegar a pedir mucho, más de lo que ahora en estos momentos debería, pero, confía en mí, no es nada malo, nada de eso, todo es bueno créeme. - Dijo de manera calmada el felino en la misma posición en el escritorio de Ray.

Finalmente, el gorila dejo salir un leve suspiro esta vez dirigiendo su mirada al techo recostándose en la silla lo más que podía.

Y luego de esto soltó...

-Y... ¿Por qué tanto empeño en ocultarlo? - Simple pero contundente pregunta, el gorila solo dejo las palabras salir, dejándolas que viajaran hacia las orejas del felino.

Dylan por su parte bajo la mirada por un momento al escuchar la pregunta, porque en si tiene que pensar bien antes de hablar, sobre todo porque hay la posibilidad de que llegue a relacionarlo con esas cartas que el de manera anónima le envió, cabe la posibilidad y eso siempre ha estado rondando la cabeza del felino desde que comenzó este jueguito, por muy loca que pueda ser esa posibilidad, pero viendo esta situación no es muy lejana de la realidad dicha posibilidad ahora... Mucha posibilidad si es que se tiene que ser demasiado reiterativo.

Ese y más pensamientos comenzaron a rondar en la mente de Dylan mientras levanta la cabeza para ver como el gorila sigue reclinado y su cabeza viendo hacia el techo supone el de manera pensativa y esperando la respuesta de Dylan a su pregunta.

-Por qué lo oculto... Bueno, supongo que... No quiero... No quiero que lo sepas. - Un silencio después de dichas palabras donde el felino bajo la mirada de nuevo, el gorila seguía con su mirada al techo, obvio había escuchado dicha respuesta.

"No quiero que lo sepas de esta manera, no por un tonto error" es lo que se dijo a sí mismo la pantera en su mente.

Raymond finalmente bajó su mirada viendo el cabizbajo Dylan frente a él.

Y el gorila tomó de nuevo la palabra mirándolo fijamente.

-Sabes... Que hay confianza entre nosotros, ¿No?.- Con eso el felino subió la mirada de inmediato, haciendo que sus ojos se encontrara con los de Raymond.-Sé que a pesar de que haya cierto grado de confianza, habrán secretos, todo el mundo los tiene y hay que aceptarlo... - Al escuchar esas palabras el felino, la pregunta del por qué estaba diciendo eso el gorila estaba invadiendo su mente aun con su mirada fija en Ray.

-... Aun así, en este caso respeto que quieras mantenerlo en secreto, por tu razón de que no quieres que lo sepa, tú también tendrás tu razón sobre el por qué no quieres...- El gorila tomo un tiempo para tomar una bocanada de aire y soltando un suspiro frente a la atenta mirada de Dylan y seguir hablando. -Dylan...-

Eso fue un llamado que entendió el felino.

-¿Si?- Dijo el felino dándole a entender al gorila que tiene toda su atención a lo que dirá.

-No quiero que este secreto dañe nuestra AMISTAD...-

...

...

...

Para Dylan eso fue... Lo puede interpretar de una manera que no le gusto para nada, el énfasis en dicha palabra, la importancia de esa palabra, como la dijo y la importancia que le dio en esa petición.

Y sobre todo como el tiempo pareció ir más lento después de que el gorila soltara dicha petición le causó pánico.

Solo miraba atentamente a Raymond el cual aún seguía con su mirada fijamente en él, el rostro de Dylan a pesar de su remolino de emociones en ese momento, mantuvo su rostro apacible sin darle mucho chance a cambiar y demostrar lo que siente, sin dejarle a Raymond la oportunidad de leerlo.

Fue cuando sus oídos le trajeron de nuevo a la realidad, estuchando las palabras que comenzaron a salir de la boca del gorila nuevamente.

-Quiero que me lo digas cuando estés listo... Aunque si sientes que irá por mal camino, quiero entonces que por favor siga así, siendo un secreto para ti y olvidaré el tema, pero... Si sientes que sea para bien, entonces aquí estaré listo para escucharte y ver como todo comienza un buen camino, ¿Vale? - Al finalizar de hablar le dio al felino una sonrisa genuina.

Una sonrisa cálida, amigable, tierna y real según a los ojos de Dylan, pero si puedo asegurar que fue real.

Dylan no soltó más palabras, solo asintió con una pequeña sonrisa, la mejor que pudo dar en ese momento ante los ojos de Raymond el cual sin más se levantó lentamente de su silla y caminó hacia la puerta de la habitación, el felino solo se quedó ahí escuchando los pasos alejándose sin querer mirar hacia el gorila.

Raymond en el momento que tomó el pomo de la puerta y abriéndola giró una última vez hacia el felino que seguía sentado frente a su escritorio dándole la espalda.

-Viniendo de ti, dudo que sea algo malo si me lo preguntas. - Dijo con tono animado para finalmente salir de la habitación dejando al felino solo finalmente.

El sonido de la puerta cerrándose le dio la señal al felino que estaba solo en dicho estudio, soltó un suspiro largo y pesando dejándose recostar en el espaldar de la silla, copiando la acción de Raymond de mirar hacia el techo entrando por un momento en estado pensativo, repasando lo que había pasado en esta charla de principio a fin...

Solamente unas palabras salieron de su boca terminando de analizar todo lo que pasó y se habló a si mismo...

- ¿Ya lo estas imaginando? o....-

-... ¿Ya lo sabes?-

Dijo el felino al aire una vez más como en el parque, dejando que el sonido de dichas palabras se las llevara el viento, ojalá a la persona a la que van dirigidas, el cual solo se encuentra a unos cuantos pasos, paredes de distancia.

Y esperar si algún día llegaran a su destino.

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Que trabajo que me dio este capítulo, fue de los hiatus más grandes que me he dado mientras la escribía porque de verdad sentí que me quede en un punto muerto, pero siento que le di un giro que va para bien a la trama, ya que siento que se va un poco de lo común como lo tenía planeado inicialmente.

¡Espero les guste nenes, cuídense y quiéranse mucho, los quiero!!!