-Miércoles-

Mañana de entrenamiento bien temprano como para decir que eso le ayuda a comenzar bien, aunque en el resto del día tenga el dolor en su cuerpo post entrenamiento, más que todo hoy que tiene que entrenar la zona del cuello, sus manos, el agarre en estas y entrenamiento de resistencia, algo realmente importante teniendo en cuenta la dificultad de manejar las maquinas a alta velocidad y las fuerzas que son transmitidas al cuerpo durante las competencias.

Raymond a punto de terminar su última serie en la máquina que tira de su cuello y cabeza con una fuerza hacia la izquierda, el manteniendo firme y haciendo fuerza a la dirección contraria durante el tiempo necesario.

Cuando la maquina con un sonido a la de una alarma indicó que el tiempo terminó, sintió como la presión disminuía en el y las cintas alrededor de su cuello y cabeza, descansando tomando largas y profundas respiraciones... Es de los ejercicios que menos le gustan, aunque sean de los más esenciales.

-Creo que con esto terminas la sesión de hoy.- Dijo el Rino, el jefe del equipo procediendo a quitar las cintas y soltar a Ray de la máquina.

-Gracias por dejarme entrenar más temprano y lo siento por hacerlo madrugar de más jefe.- Dijo algo apenado el gorila.

Y es que para nadie es grato tener que levantarse y estar ahí a las 5:00 de la mañana, claro que el gorila había solicitado dicho permiso por que con eso podría ir al aeropuerto a recoger a su pequeño y a Carol y tener el día libre de hoy y por obvias razones de protocolo de supervisión el jefe del equipo debe de estar presente para dejar seguimiento y apoyo en los entrenamientos, cosa que a Magnus el rino al principio renegó pero con gusto luego y resignándose aceptó a hacerle el favor a Ray, con la condición de que este le deberá un favor que le cobrara en algún momento más adelante.

-No hay de qué, pero eso si no esperes que me cobre esta. - Dijo en tono burlón recordándole el precio de esto.

Raymond río parándose de la maquina estirando sus hombros, brazos, cuello haciendo sonar sus huesos un poco sintiendo como esa presión ejercida anteriormente le dejo un poco adolorido.

-Ya va casi un año de entrenamiento y nada que te acostumbras.-

Raymond negó con un movimiento de su cabeza, de todos este es el que le cuesta más y le da miedo, miedo de que vaya a terminar desnucado en algún momento así que siempre que está a punto de comenzar se pone tenso y bueno eso genera sus complicaciones.

-Lo sé, me cuesta, sabes que le tengo pavor a una lesión grave, en especial si es que esa lesión me puede poner a dormir literalmente.-

Magnus solamente soltó la carcajada, el rino solo piensa que tremenda montaña y flojo para algunas cosas.

-Bien bien Ray, ya dejemos por hoy, yo dejaré organizado ya puedes retirarte y que te vaya bien el día de hoy, cuídate.- Dijo el jefe dándole una palmada suave y amigable en su espalda, yendo a terminar de dejar todo en orden.

Raymond asintió y tomo camino hacia los vistieres, todo alrededor estaba silencioso, solo el sonido de alguna que otra gota cayendo en las duchas, su respiración y la tela de su ropa siendo retirada y el roce de su piel con ella, un silencio relajante se puede decir donde una vez sin nada de prendas sobre él fue a las duchas, tomando un cubículo, abriendo la regadera y dejando que el agua fría lo empapara para comenzar a asearse correctamente.

Disfruto cada segundo en esa ducha que para el gorila parecía que fueron horas ahí bajo el agua, cuando estuvo seguro que cada parte de el ya estaba limpio y fresco, cerro la regadera y salir con sus toalla alrededor de su cintura hasta la banca donde estaba sentado hace rato, con otra secó pacientemente su cuerpo, verificando que su pelaje quedara bien seco, y así fue vistiéndose con ropa de civil, camiseta color amarilla, unos jeans, sus botas y para el frio que está haciendo su chaqueta tipo gabán favorita de cuero café.

Dejando todo en orden en su locker y a punto de cerrarlo su teléfono sonó con el aviso de que llegó un mensaje, rápidamente lo tomó y revisó.

Mensaje de Carol...

Carol: Hola Raymond, ¿Cómo estás? estaremos aterrizando en una hora, Joshua está emocionado.

Sonrió al leerlo, se sentó y sin dudar contestó el mensaje.

Ray: Hola Caritol, bien gracias espero que tú también.

Ray: ¡Qué bien! Ya voy a salir en camino al aeropuerto y me alegra saber que están emocionados, yo igual.

Con eso salió del chat revisando si tenía más mensajes y si, tenía unos que vio esta mañana, que no había leído y estaba resaltando como no leído en su bandeja...

Leyó parte del mensaje cuando saltó la notificación... Mejor leerlo ahora, luego responderá.

Dylan: Tranquilo... No tienes nada de que disculparte, soy yo quien tiene que pedir tu perdón por que como actúe estuvo muy mal, antes digo que me lo merecía la verdad.

Dylan: De verdad quiero pedirte perdón, pero no por aquí, quiero hacerlo en persona de la manera correcta.

Dylan: Solo espero que me lo permitas, nos vemos luego, descansa...

Terminó de leer y soltó un suspiro, bloqueo el celular y cerrando todo salió de ahí hacia su auto pensando en el mensaje del felino, claro que le permitirá disculparse, claro que le permitirá explicarse, sería inmaduro no dejarlo, no hacerlo... y aprovechando dicha situación le pediría respuestas a sus dudas.

Igual en el momento quita ese pensamiento y se concentra en su alegría este día, al fin ver a su pequeño después de un largo tiempo...

Se siente ansioso, con mariposas en el estómago esperando el aviso de la llegada y de la salida de sus pasajeros, tiene listo el letrero con sus nombres ya que por lo visto hay muchas familias y fursonas alrededor esperando en un grupo bastante numeroso que tapona la zona de recibimiento.

Viendo el letrero de los vuelos pudo ver como el vuelo de su pequeño marcó que estaba en etapa de salida de los pasajeros y la emoción explotó en su interior, una enrone sonrisa apareció en su rostro y con sus ojos comenzó a buscarlos y comenzó a abrirse paso entre la multitud para estar de primero y alzó el letrero bien alto para que lo vieran...

Esperó...

Esperó... Y observó, los pasajeros ya se veían a los lejos, casi ni parpadeando busco a su pequeño...

Cuando al fin lo vio, su pequeñín, su pequeño diablillo que tanto ama, con una sonrisa en el joven rostro a pesar de que ya casi o bueno es un adolescente novato, para el sigue siendo su pequeño niñito.

El chico lo vio también entre toda la multitud en la zona de espera, sonrió y corrió hacia su padre, Acción que copió de inmediato Raymond que se saltó el separador y se acercó a su pequeño...

Cuando estuvo lo suficientemente cerca se arrodilló y entre sus brazos atrapó a Joshua en un fuerte abrazo.

¿Emocionado? Creo que dicha escena reboza felicidad y emoción, las demás fursonas sonreían viendo esa tierna escena y los guardas de la zona un poco irritados porque no había cumplido la regla de esperar, así que cerca del enorme gorila esperaron que terminara ese cariñoso abrazo entre padre e hijo.

-Te extrañé tanto mi pequeño...- Dijo casi al borde de las lágrimas el gorila.

El pequeño Joshua sonrió y asintió en el abrazo, los guardas al escuchar las palabras no pudieron evitar sonreír, aunque sea un poco, sí que era realmente encantadora dicha escena...

[...]

-Estaba que me vomitaba dios mío.- Dijo Carol temblando aun tomando su taza de té de manzanilla dulce.

-Sigues sin acostumbrarte a la sensación. - Respondió Ray burlonamente a lo que la chica le miró con un puchero en respuesta, claro que aún le cuesta demasiado el volar en avión.

-Para nada, y sufro aún más en el momento del aterrizaje, te juro que estaba que me moría.- Dijo dando otro sorbo a su taza.

Ray río y giro su mirada a su hijo quien está concentrando comiéndose una hamburguesa, el chico se dio cuenta y lo miró de vuelta aun masticando.

-¿Disfrutaste el viaje Joshua? ¿O también viste el otro lado como tu madre?- Dijo en tono burlón la última pregunta recibiendo en su cara una servilleta hecha bolita en modo de reproche ante su broma, el gorila soltó una carcajada ante la reacción de su ex mujer.

El chico sonrió tragando y dejando su comida en el plato un momento.

-Fue aterrador cuando nos levantamos del suelo, fue una sensación fea... ¡Pero luego pude ver todo por la ventana y fue algo increíble!- Alzó sus brazos con emoción narrando la última parte mirando fijamente a su padre, el cual enternecido asintió y acarició su cabeza y sonrió.

-Me alegro, más me alegro de que hayan llegado bien y de tenerlos aquí.- Dijo pasando su brazo alrededor del pequeño dándole un fuerte abrazo mientras el chico continuó con su comida.

Carol quien mira la escena del otro lado de la mesa sonrió levemente.

Nuevamente el gorila habló.

-Ya tengo todo listo donde vivo para que se queden y estén totalmente cómodos.- Dijo y Carol se detuvo de tomar su te dejando la taza en la mesa.

Negó con la cabeza dejando confundido a Raymond, Joshua estaba tranquilo a pesar de que vio la negación de su mamá, él ya estaba al tanto.

-Yo me quedaré con mi prima María, disfrutare de mis vacaciones con ella.- Dijo sonriendo casi de manera traviesa, más que todo porque no le mencionó nada de esto a Raymond en sus planes.

Cosa que dejo sorprendido y descolocado al gorila.

-Pe-pensé que estaríamos todos... ¡No me dijiste nada!- Uuuuy se indignó el chico...

-Vamos es momento de que te quedes con Joshua y recuperen tiempo perdido, ¿No era este el motivo del viaje y del reencuentro?- Dijo aun de manera burlona, Raymond se encuentra entre alegre pero también temeroso...

-Que tierna manera de decir que me lo dejas tirado a mi.- Dijo con puchero de reclamo.

Carol sonrió victoriosa.

Joshua mordía y seguía masticando su hamburguesa observando la escena.

Vamos, seamos sinceros, de paternidad casi nada, la mayor parte del tiempo cuando vivían juntos por trabajo poco estaba, así que la mayoría de lo hogareño y de atender al chico era Carol, lo típico si se puede decir, ahora sí que tendría que estar 24/7 pendiente cosa que le aterraba en que no fuera lo suficientemente bueno y le daba miedo no desempeñar bien su papel como tutor sin algún apoyo que en este caso esperaba que fuera Carol, sumándole que cuidar a un chico que está en la entrada de la adolescencia sin haberlo conocido mucho de su niñez le daba mayor peso a ese reto.

Ese miedo se le vio reflejado en el rostro de Ray tras ese pensamiento, cosa que Carol y Joshua notaron soltando una risa entre los dos...

Ray avergonzado se tapó la cara con su mano como si eso lograra ocultarlo.

-No hay lio pa... Me portaré bieeeeeen...- Ese bieeeeenn que soltó Joshua viene con malicia, malicia que sabe Raymond que aprendió de su madre que se caracterizaba por tener una personalidad bastante maldadosa y jugarreta.

"Dios" Pensó...

-Más te vale.- Dijo ya un poco más calmado y ya llevando la vibra alegre de la situación, tratando cabe aclarar.

-No prometo nada.- Dijo Carol tomando su taza nuevamente dando un sorbo.

-Yo tampoco...- Dijo el pequeño gorilita comiendo el ultimo bocado de su hamburguesa sonriendo.

Ray soltó una risita, al fin y al cabo, se alegraba que esa fuera su familia, no la cambiaría por nada...

-Ok, puedo con ello, vamos...- Dijo Ray parándose de la silla, pero vio como Carol seguía sentada. -¿Te llevo?- Dijo esperando respuesta a lo que Carol negó.

-Gracias pero María viene por mi.- Dijo parándose y acercándose a Joshua, para abrazarlo fuertemente. -Pórtate bien, hazle caso a tu padre, te estaré llamando, cualquier cosa me escribes y gritas por auxilio a través de la ventana más cercana, ¿Vale? Te amo.- El pequeño sonrió asintiendo mientras que Raymond los mira indignado.

-Carol ya...- Reclamó el gorila mayor, haciendo reír a Carol.

-Cuídense.- Dijo Carol despidiéndose.

Ray asintió y de la mano llevó al chico, la escena de lo más enternecedora, Raymond contento de poder hacer eso después de tanto.

Ambos tomaron camino hacia el hogar de Raymond para aprovechar lo que les resta de día como padre e hijo.

Dylan...

Medio día de ese miércoles, ya con hambre y deseando degustar el almuerzo que se había preparado, así que su camino ya estaba en su mente hacia una de las cocinas del recinto, más que todo la de su área.

En parte de la mañana desde que llegó, busco al gorila, pero nada que daba con él, hasta que hablando con Stefano quien se lo encontró, le dijo que hoy fue a recoger a su pequeño y EX al aeropuerto, ya con eso el felino desistió de su búsqueda y volvió a su puesto concentrándose en su labor diaria o tratando al menos ya que no quería dejar pasar más tiempo para poder hablar con Raymond.

En fin, el pasillo se encuentra solo, pacifico ya que salió un poco más temprano para poder calentar su comida cuando fue llamado por una voz conocida.

-¡Dylan hola!-

Giró de donde venía la voz sin dudar encontrando a su portador.

-Melissa...-

La chica asintió sonriendo. -La misma en persona, gusto en verte ¿Cómo estás?- Dijo parándose al lado de la pantera.

-Bien puedo decir, en camino a comer... ¿Y tú?- Dijo caminando junto con ella nuevamente.

-Bien, gracias por preguntar, yo también salí para ir a comer aunque me falta algo de compañía, te vi y pensé que podríamos ir juntos a comer, no hemos tenido la oportunidad de conocernos... ¿Qué dices?-

Eso lo tomó por sorpresa.

-Bueno...- Miro su pequeña mochila con su almuerzo y luego de vuelta...

Melissa entendió el mensaje silencioso sonriendo.

-No importa, tu caliéntalo y yo iré por algo y nos vemos en la cafetería ¿Te parece? Guárdame puesto no tardo.- Dijo para irse dejando a Dylan sin si quiera haber respondido sobre si quería o no.

Dylan parpadeo varias veces procesando la rápida e incómoda escena que pasó, y tomó camino de nuevo hacia la cafetería del recinto.

Raymond...

Raymond se encuentra en estos momentos, luego del almuerzo y dejando organizado lo que trajo su pequeño y de ver como Joshua estaba que se caía de sueño y cansancio, lo dejó en su cama a lo que su cabeza toco la almohada este cayó en un sueño profundo, Raymond sentado en el borde de la cama, sonriendo y sin quitar la mirada de ese cuadro tierno que hace tiempo ya no presenciaba, se encuentra realmente feliz.

Puso su mano en la cabeza de Josh acariciándolo suavemente a lo que el chico entre su sueño se movía reaccionando al tacto de lo que fuera que lo estaba acariciando, acurrucándose aún más.

Sonrío ante dicha reacción, se paró de la cama y salió de la habitación dejándolo que descansara, fue a la sala y tomo su teléfono para revisar si alguien le había escrito y si, su amigo Jaguar Stef era de los primeros mensajes que estaban en su bandeja pendientes por leer.

Stef: Holaaaaaaa!!! ¿Cómo te fue recogiendo a tu cría?

Ray sonrió vio que el mensaje ya llevaba unas horas de enviado y recibido, así que se dispuso a contestarlo.

Ray: Hola Stef, muy bien, el pequeño ahora está durmiendo ya que llego molido del viaje.

*Foto enviada*

Stef: AAAWWWWWWWWW ¡Tienes que traerlo para que lo conozcamos!

Raymond sonriendo ante los mensajes cómicos de su amigo, observando también la foto que envió de Joshua durmiendo en una pose muy tierna, siguió con la conversación.

Ray: Lo más seguro es que si, además necesito aprovechar todo el tiempo que tenga, y no quiero molestar a Carol, me prometí que me haría cargo de el así fuera por poco tiempo.

Stef: Entiendo, es mejor así pasarás buen tiempo con el...

Stef: También puedes decirle a Dylan si puede cuidarle, no siempre el chico podrá estar contigo, más que todo en el taller.

Raymond lo pensó... Dos veces, pero Stef tiene un punto a su favor, habrá veces que por seguridad Joshua no podrá estar presente con el... Pedirle dicho favor a Dylan... Le suena la idea, le gusta, pero primero tienen que tener dicha charla además de que el mismo le prometió que cuando se diera la oportunidad le iba a presentar a su hijo.

Ray: Buena idea, tendré que hablar con él, igual Dylan también estaba esperando conocerlo.

Stef: Me parece, bueno te dejo que iremos a la pista, cuídate, me saludas a tu cría!.

Ray: Igualmente, envíale mis saludos a todos, nos veremos.

Una vez terminado la conversación, bloqueo su teléfono y lo dejó en la mesa al lado de él, aún faltaba mucho para que el día terminase, el clima estaba realmente fresco con una ventisca sin sol, su hijo durmiendo, su hogar en completo silencio... ¿Qué podía hacer? Jugar video juegos la verdad no tenía ganas, comer no, porque no tiene hambre ya, salir un rato no quiere ya que no desea dejar solo a Joshua...

Mejor esperaría a que su pequeño despertara, luego podrían tener y planear algo para hacer, así sea en la noche...

En ese momento de pensamientos sus ojos comenzaron a pesar... Cierto, se había levantado más temprano que de costumbre, por lo tanto, le estaba pasando factura y sin dudar se acostó en el sofá mirando hacia el techo.

-No sería mala idea una siesta...- Dijo levantándose y quitándose la camisa, quedando solamente con una de tirantes.

En el sofá no sería buena idea, más bien en su cama, tomó su teléfono y en el camino hacia su habitación este sonó avisando la llegada de un mensaje, algo extrañado revisó dicho mensaje...

-Dylan...- Dijo viendo que marcaba el nombre del felino en su centro de notificaciones.

Lo abrió viendo que es lo que le envío.

Dylan: Hola Ray, ¿Cómo te fue hoy?

Dylan: Stef me dijo que hoy fuiste a recoger a tu hijo, espero que te haya sido genial para ti hoy.

Ray no se dio cuenta, pero ese mensaje hizo que una muy leve sonrisa apareciera en su rostro.

Y en ese momento su mente hizo clic, puede que si tenga algo que hacer hoy con el tiempo libre.

Rápidamente decidió contestar, ignorando los mensajes anteriores que le dejó el felino el día de ayer.

Ray: Hola D, Si...

Ray: Fue bueno verlo después de tanto.

Ray: Y gracias por eso... ¿Tienes algo que hacer en la noche?

Después del último mensaje enviado pasó si no fue mal conteo, 2 o 4 minutos donde el mensaje se quedó en visto, hasta que la palabra escribiendo apareció debajo del nombre de Dylan.

Dylan: No la verdad, más que llegar a casa jeje... ¿Necesitas algo?

Ray solamente fue directo.

Ray: Hablar contigo.

Dylan...

El felino quedó en shock por lo directo de dicho mensaje que le había enviado el gorila, con eso que había pasado hace poco en el chat con Raymond junto con un almuerzo algo incómodo con Melissa la cual realmente estaba demasiada interesada en conocerlo para su gusto, aunque al final estuvo entretenido y cambio un poco su manera de verla a algo más amigable, no deja de ser un día que denomina raro, bueno peculiar para no usar esa otra palabra.

En fin, Raymond le había pedido que fuera a su casa esta noche ya que necesitaba hablar con él, cosa que imaginó Dylan sobre que sería dicha charla, así que sería buena oportunidad para aclarar las cosas, arreglarlas, aparte de que Raymond le presentaría a alguien, que ya obviamente el felino sabe que es el pequeño hijo de su crush.

Se encuentra emocionado y nervioso, solo faltan menos de 2 horas para que salga de aquí directo a la casa de Raymond y pareciera que el tiempo comenzó a irse más lento de lo normal.

"Maldito universo"

Nuevamente su teléfono sonó avisando de la llegada de un nuevo mensaje, cuando lo vio le dio pena, era Raymond preguntando si aceptaba ir a su casa esta noche... Dylan aun no había respondido confirmando que irá por el shock y lo pensativo que lo dejó cuando leyó el anterior mensaje.

Rápidamente le contestó que claro que irá, soltando un suspiro por haberlo dejado así, aunque no haya sido mucho... Mentira fueron 20 minutos donde dejo en visto al gorila flotando en sus pensamientos...

Que grosero...

Espera que entre todo lo que ha pasado, sea una buena noche y que las cosas se calmen un poco.

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Ayyyyyyy.

¿De verdad que puedo decir??? Me probé dejando algunas incógnitas que se explicaron así por encima porque eran escenas más de relleno pero que más adelante por si solas se explicarán.

Disfrútenlo nenes los quiero!!!!