Chismes
Marinette
-¿Marinette? -escuché a lo lejos pero seguí haciéndome la loca- Te estoy hablando, latina. ¡Marinette!
Seguí haciéndome la loca y entré al salón dirigiéndome directamente a mi puesto. Ajusté aún más mis audífonos y les subí más volumen. Alya no tardó en entrar, traía la respiración agitada por haberme estado siguiendo desde que llegué por toda la escuela.
Me empezó a hablar y a hablar haciendo expresiones con un brazo mientras seguía hablando. Me quité un audifono.
-¿Qué verga es?
Alya soltó un suspiro de cansancio al notar que no le estaba parando mucha bola.
Me lanzó un periódico al escritorio para que viera la primera plana.
Abrí bien esa jeta.
-¿Desde cuándo? -preguntó- no puedo creer que no me lo hayas dicho, ¿Has estado saliendo con uno de los superhéroes de París en secreto y aún así no se lo dijiste a tu amiga?
Suspiré cansada. Precisamente esto era lo que no quería.
-¿De dónde sacaste esto? -le pregunté aún sin dejar de mirar la foto.
El michi estaba en primera plana agarrandome la mano y yo lo veía con una sonrisa. Cualquier entrepito malinterpretaria todo, aunque como iban las cosas, seguramente no habría nada que malinterpretar.
-Está por todas partes. Anuncios, las noticias, es el chisme del día -a la verga- lo que me indigna es que literalmente fui la última en enterarme. Pensé que confiabas en mi.
-Coño, marica, bajale dos. No hay que hacer tanto drama -la intenté calmar-- sí, ayer tuve una cita con Chat Noir y digamos que ha frecuentado mi balcón una que otra noche pero no hay porqué hacer un escándalo -confesé- y no te lo dije porque no sabía si él quería que alguien supiera, además me daba miedo que lo subieras al Ladyblog.
Alya me miró con ironía y se sentó a mi lado.
-Amiga, si el gatito no quisiera que nadie supiera de ustedes, no te hubiese llevado a pasear en público por la ciudad, míralo, sólo mira la forma en cómo te ve -señaló la cara del gato en el periódico- apostaría mi teléfono a que le gustas. Y con lo del Ladyblog... -hizo una mueca vacilante- hubiese sido muy difícil no querer publicar que mi mejor amiga está saliendo con el compañero de Ladybug, pero aún así no lo hubiese hecho, ¿Sabes porque? -me preguntó- porque eres mi mejor amiga, Marinette. Yo no te haría algo así.
Sonreí.
-Gracias -le di un corto abrazo- discúlpame por no haberte contado.
Ella hizo un ademán restandole importancia al asunto.
-Al diablo con eso. Mejor cuéntamelo todo con lujo de detalles -pidió acomodandosé en su asiento.
Estuve echándole ese brollo en los quince minutos restantes antes de que sonara el timbre. Los estudiantes empezaron a entrar en busca de sus asientos.
Vi que Adrien entró con Nino y empezó a ver por todo el salón antes de que nuestras miradas chocaran. Le hice una pequeña sonrisa y lo saludé, el catire se puso rojo y me devolvió el saludo nerviosamente antes de arrastrar a Nino a su escritorio frente a nosotras haciéndose el loco.
-Es que aún no puedo creerlo -Alya contuvo un chillido haciendo que le volviera a parar bola- debió ser increíble haber tenido una cita con el chico más candente de París, mira -me mostró su teléfono, estaba metida en Instagram- está de primero en el top diez de ésta semana, incluso ha dejado a Adrien en segundo lugar.
Vi la foto del michi sonriendo a la cámara así todo picioso y relajado recargado de su bastón. En la imagen de abajo estaba Adrien mirando a la cámara de manera profunda mientras estaba apoyando de la pared, curiosamente en la misma posición que el michi. Seguro es coincidencia.
-Tan bello el mishu mishu -sonreí mirando su foto. Alya reprimió una carcajada, seguramente burlándose del apodo- no te rias, pajua. Así le llamamos a los gatos en Venezuela para que vengan.
-Es muy peculiar -admitió- pero es lindo que ya le hayas puesto un apodo. Ya veo la primicia sobre la nueva pareja de Paris en un futuro -la miré entornando los ojos. Ella rió- eso, si me dejas ser la primera en publicarlo.
Rodé los ojos.
-Si por alguna razón llego a tener algo con el gatito, dejaré que seas la primera en saberlo -accedí.
Alya sonrió con emoción.
-Oye, Marinette -Nino llamó mi atención desde el escritorio de enfrente- buena foto la del periódico, ¿Te divertiste?
Alya le metió un lepe.
-No la molestes, Nino -le dijo.
-Sólo estoy jugando un poco -se excusó- Chat Noir parece ser cool. ¿Es así?
Sonreí.
-Es aún más que eso -respondí.
-Pero, ¿Sí están saliendo?
Carajito brollero.
Cuando iba a responderle, Chloe se aproximó al escritorio junto a Sabrina, nos examinó a Alya y a mí y se quitó sus lentes de sol antes de usarlos de cintillo.
-¿Se te perdió una igualita a mí, es la vaina? -le pregunté.
-No, aunque noté que en la primera plana Chat Noir apareció con una indigente rescatada muy parecida a ti -se burló.
Levanté una ceja con fastidio.
-¿Sabes que vi yo? -le mostré el periódico en mis manos y señalé la segunda plana- el aviso de la fuga de un animal del zoológico. ¿Qué ocurrió, Bourgeoise? ¿Tu papi no te cumplió algún capricho y decidiste escaparte?
Chloé me miró mal.
-Mi papi puede darme todo lo que yo le pida. Dime, Dopain, ¿Tu padre el panadero podría ganar lo suficiente para comprarte algo como esto? -me mostró su nuevo teléfono- porque estoy casi segura que ni con los ahorros de todo un año podría comprarte el forro.
Me estaba empezando a ostinar.
-Al menos yo no necesito que mi papá me compre cosas, para eso yo soy suficientemente útil para valerme por mi misma. No como otras -me defendí.
Chloé respiró hondo tratando de calmar la arrechera que mi comentario le causó.
-No te ilusiones con el gatito, esa estúpida suerte tuya no va a durar.
Alya la miró con ironía.
-Sólo estás celosa de que a Chat Noir le guste Marinette.
Al escuchar aquello, Chloe se echó a reí.
-¿Celosa yo de ésta? Ridículo, totalmente ridículo -se miró las uñas despreocupadamente- Chat Noir es un superhéroe, ¿Porqué saldría con alguien como ella? Seguramente eres la caridad de la semana.
Sabrina y ella se empezaron a reír. Me levanté del escritorio dispuesta a echarle sus coñazos, pero las palabras del catire, nos callaron a todos.
-Marinette es una chica muy linda y a comparación de ti, no es mala persona -me defendió- deja ya de molestarla.
Chloé lo miró con indignación.
-¡Adrien boo! -se quejó- se supone que eres mi amigo, ¿Porqué la defiendes a ella?
Adrien negó la cabeza decepcionante.
-No estoy a favor de nadie. Pero si me he dado cuenta de lo mala persona que eres y precisamente porque eres mí amiga me meto, Chloé y no sabes lo mucho que me has decepcionado -admitió- tú antes no eras así.
Chloe lo miró y les puedo asegurar que desde que pisé la vaina ésta, es la primera vez que veo a esa caraja avergonzada.
-Buen día, clase -Miss Bustier entró con mucha felicidad al salón- por favor, todos a sus asientos, la clase ya va a iniciar.
Los demás aún con ganas de que ése beta se hubiese prendido, se fueron a sus asientos, y digame esa catira, si antes le caía mal ahora me odiaba más.
Miré a Adrien, estaba jugando con el lápiz entre sus dedos.
Me incliné hacia su oreja.
-Gracias, catire -susurré provocando que su espalda se tensara.
Adrien miró hacia atrás y su comisura se elevó en una sonrisa ladeada.
Miss Bustier empezó con la clase de geografía, el tema de hoy era la cultura china, nawebona, Adrien se encadenó. Ni Chávez en sus mejores mandatos en el infierno, hasta la Miss Bustier se tuvo que sentar porque el carajito prácticamente estaba dando la clase.
Le sonreí cuando en una de esas miró hacia acá. Noté que los muchachos estaban embelezados pendiente de todo lo que decía el carajito e interactuaban con él.
-Hey, mira nada más -me dijo Alya mirando hacia el catire- parece que alguien por fin se está integrando al grupo.
-Si y me alegro por él -respondí- después de todo, se lo merece.
Alya me miró con diversión.
-¿Ustedes dos desde hace cuánto se han vuelto los mejores amigos? Hace un tiempo no querías ni verlo en pintura -se burló- ahora hasta se saludan, te defiende...
-Verga, mami. ¿Te han dado trabajo de cámara de vigilancia o qué lo qué? -me metió un coñazo- Adrien y yo empezamos de cero. No es fácil para él hacer amigos, antes de mi su única amiga era Chloe.
Alya peló los ojos en una mueca de desagrado.
-Pobre de él -dijo- pero veo que se está llevando bien con Nino, seguramente algo bueno saldrá de eso.
Asenti.
Seguimos parandole bola a Adrien cuando cinco minutos antes de que terminara la clase, entró el director, se puso a hablar una vaina con Miss Bustier y luego se volvió a ir.
-Gracias, Adrien por la lección de hoy. Me aseguraré de darte algunos créditos extra por esto -le sonrió dulcemente y lo mandó a sentar- chicos, el director Damocles ha venido para darnos una excelente noticia. El diseñador de modas, Gabriel Agreste ha organizado un concurso.
Marica, no ha dicho ni de qué cuando yo ya había empezado a apretar ese culo.
NOJODA
MI MASTER HABÍA HECHO ACTO DE PRESENCIA, ALÓ.
Varios se sorprendieron y empezaron a atocigar a la chévere profesora para saber más.
-Calmense, calmense -pidió- el concurso consiste en diseñar su propio sombrero y él mismo se los evaluará. El sombrero ganador será añadido a su nueva colección y no sólo eso, sino que será modelado por su compañero, Adrien en la pasarela de la colección dentro de tres días. ¿Alguna duda?
Alya levantó la mano ya que yo aún seguía en shock.
Es que, mARICA MI MOMENTO LLEGÓ, NOJODA.
-Adelante, Alya.
-Eh, si ¿Cuándo inicia el concurso? ¿Hasta cuando tendremos tiempo?
-Buena pregunta. El director les ha dado permiso para retirarse por hoy para iniciar sus diseños. Podrán inscribirse en esta planilla que ocupo en mis manos -la levantó- Tienen prórroga hasta mañana por la mañana. Les deseo suerte, chicos.
Nojoda, nada más dijo eso y unos pegaron la carrera pa largarse por haber terminado temprano y otros corrieron a inscribirse, entre ellos yo fui una de las primeras en arrancarle la hoja a Miss Bustier. De que yo me ganaba esa vaina, lo iba a hacer.
-Suerte con el concurso, Dopain -Chloe me arrancó la hoja cuando terminé de anotarme.
-Es Dupain. Y no gracias, no vengas tú a echarme mardiojo porque de igual forma voy a ganar. Para eso tengo algo que ni con todos los cobres del mundo tu papi podría comprarte -la imité- se llama talento.
Y dejándola con la palabra en la boca. Me fui, tenía mucho trabajo que hacer y muy poco tiempo.
(...)
-Pensé que iríamos a casa, ¿Qué hacemos aquí? -me preguntó Tikki saliendo de mi bolsito cuando saqué mi libreta de bocetos con mis lápices de dibujo.
-Si vamos a la casa terminaré durmiendome si me fastidio, y yo me fastidio muy rápido -le respondí mientras buscaba mi playlist de Ed Sheeran- preferí venir a la plaza, es tranquilo y casi no hay gente.
Dejé puesta Afire Love y la empecé a tararear mientras miraba la hoja en blanco.
Así perdí toda una hora.
Tikki frunció el ceño.
-¿No se supone que debes empezar a dibujar en esa cosa en vez de quedarte mirándolo como una estúpida? -preguntó.
Suspiré pesadamente dejando caer mi cara sobre la libreta.
-No se me ocurre un coñoelamadre -lloriqueé- que arrechera. Se supone que es una gran oportunidad para mi y estoy en blanco, ¡En blanco!
-Relájate, Ya se te ocurrirá algo.
-¿Relajarme? -ironicé- Tikki, no tengo tiempo para relajarme. Debo entregar un diseño original para mañana y aún no he empezado, ya he perdido una maldita hora de mi vida.
-Sólo enfocate, mira a tu alrededor y busca algo que llame tu atención. Quizás así logres conseguir lo que...
Bufé.
-Tikki, literalmente estamos tú y yo solas aquí. ¿Qué puedo encontrar?
-Sólo enfócate. Tú puedes hacerlo -sonrió- confío en ti.
Suspiré.
-Creo que has puesto mucha esperanza en mi Tikki. Podría decepcionarte.
La coquito sonrió.
-Sé que puedes lograr todo lo que te propongas, es un don que nadie puede quitarte.
-Sí, no dejaré que Hawk Moth toque mi Miraculous o yo misma lo arrastraré de las greñas -le aseguré.
-No necesitas del poder de Ladybug para tener el don de la creación. Tú ya lo tienes y se lo has dicho a Chloe -se abrazó a mi nariz- se llama talento.
Sonrei.
-Cuando no te pones de vende patria me caes bien -admiti- ahora vamos, ayúdame a buscar una idea. Debe estar por... -empecé a mirar a mi alrededor como Tikki me había dicho pero lo único que veía eran palomas y más palomas. Entonces una idea me llegó a la cabeza- ¡Eso es! -exclamé- puedo usar plumas para el sombrero. Ahora sólo falta decidirnos por cuál hacer.
Tikki se puso a echarle coco.
-¿Porqué no haces algo simple? Ya sabes, como el sombrero del Mimo.
Frunci el ceño.
-¿Hablas de hacer un bombín? -ella asintió, traté de considerarlo. Las plumas no lucían mal pero no sé, tendría que echar coco- déjame ver qué sale.
Empecé a dibujar un bombín común y corriente. Luego empecé a hacerle detalles en la parte superior, tal vez podría hacer que la tela le diera un aspecto emplumado como una paloma y la pluma iba a ser el toque final.
Terminé.
Tikki lo examinó.
-¡Lo has hecho! -gritó emocionada- sabía que podías hacerlo, ¿Has visto?
Sonreí y me levanté de las escaleras donde estaba sentada. Llámenme loca pero tuve la extraña sensación de que me estaban observando.
-Vamos, tenemos bastante trabajo para hacer.
(...)
-¡Marica es que hubieras visto! -repitió Diego con emoción- de vaina no atravesó la pared.
Christian lo miró mal.
-Haceme un favor y te callai la jeta, ¿Podei? -le pidió- me cargai ostinao. Y vos sabei cómo somos los maracuchos arrechos.
-Relaja la totona, Vale -le pedí al maracucho- ¿No ves que el carajito está emocionado porque ganó bastante plata apostando?
Christian miró a Diego Alexander y éste último sonrió con autosuficiencia.
-No me parece que se haya hecho la plata por la pelea entre mi jeva y mis tres culitos -se quejó- ahora Ana se ostinó conmigo y no sólo me quedé sin mi totona por derecho sino que también me quedé sin mis totonas de reserva.
-Yo muy bien que te lo dije a ti que no te pusieras a estar metiéndole cacho a Ana porque hasta vos ibas a llevar coñazo, pajuo -le recordó mientras estaba contando sus ganancias- pero usted palante, eso te pasa por no pararme bolas.
Christian me miró en busca de ayuda.
Me encogi de hombros.
-¿Qué se le puede hacer, miamor? Business son business -respondí y dejé de acomodar los materiales alrededor de mi máquina de coser sólo para pegarle a la mesa con la palma de mi mano- he dicho, ¡Caso cerrado, nojoda!
Christian soltó un gruñido. El mmaguevo de Diego no sólo se empezó a reír sino que le extendió un billete y se lo puso en el bolsillo de su camisa.
-Toma, para que te compres una teta e' tizana y te calles la jeta -le hizo un guiño ganándose un coñazo del maracucho.
Me empecé a reír.
-Los extraño burda. Ya quiero verlos otra vez.
-Regresate a Venezuela entonces -sugirió Diego.
-Verga, tampoco los extraño tanto así -ambos pusieron una cara de indignación. Escuché que tocaron mi puerta- ya va, mrcs. ¡Pase!
Colette asomó la cabeza.
-Marinette, tu amiga Alya está aquí -avisó.
-Gracias, Colette. Dile que pase, por favor.
La pelo e' chavista asintió y salió.
-¿Qué tanto hacei, malaya? -me preguntó el maracucho- mientras andai hablando con nosotros andai de aquí pa allá sacando y moviendo corotos.
-Men, utedes saben que a mi me gusta el diseñador éste francés, el Gabriel Agreste -les empecé a contar.
-Coño, ¿Cómo no saberlo? -ironizó Diego- no hablas de otra vaina más que el tipo ése, ¿Ya le mamaste ese webo?
Le saqué el dedo del medio.
-El man organizó un concurso. Tenemos que diseñar un sombrero original y el ganador no sólo será parte de la colección sino que lo modelará el hijo del catire en el desfile de modas de la colección.
Christian bufó con incredulidad.
-Ya vos tenei esa vaina ganada. No hay nadie más talentosa que vos -dijo.
Sonreí.
-Gracias, beibi.
-Si, gracias, Jala bolas -le dijo el Diego.
Christian le metió su coñazo.
-Apenas nos avisaron hoy y hay que entregarlo mañana -suspiré y me acaricié las sienes algo estresada- esto es muy estresante.
-Imposible -respondió Diego- no hay nada más estresante que tú.
Christian le sentó otro coñazo.
-Deja en paz a la carajita, nojoda -lo regañó.
Escuché que la puerta fue abierta.
-Bien, Marinette. Aquí estoy -Alya entró con una bolsa llena de corotos- no tenemos mucho tiempo para hacer tu sombrero así que debemos empezar de una vez.
-Hola cham...
-¡Marica, que negra tan bella! -Diego pegó ese grito- estás en el deber y la obligación de presentármela.
Alya miró al monitor de mi computadora.
-¿Interrumpi algo? -preguntó señalando la computadora.
Hice un gesto restando importancia.
-No, vale. Sólo estaba beteando con estos dos. Ven acá -la llamé para que se acercara- el blanquito bello es Christian y el otro blanquito pero el feo, es Diego. Plastas, ella es Alya.
-Eh... hola -saludó la de lentes algo avergonzada.
-Háblame de miamor, no de tú -el Diego le picó el ojo.
Christian lo miró.
-Vergación, papi. Invitale un helado primero.
Diego le sentó un coñazo por imprudente.
-Men, Alya y yo nos vamos a poner a hacer el sombrero, más tarde les escribo.
-Coño, Marinette, ¿Ves que la cagas? -se quejó Diego- ¿Estás en contra del amor a primera vista es la vaina?
Rodé los ojos.
-No le parei bola, mana. Te queremos -el maracucho se despidió lanzandonos un beso antes de colgar.
-Veo que ya tienes una idea -observó mi libreta de bocetos- me gusta mucho. ¿En qué puedo ayudar?
Sonreí. Más amigas como ella.
(...)
-Tengo. Una. Ladilla. Descomunal -suspire pesadamente recostando mi cabeza sobre el escritorio.
-Yo muero de hambre -se quejó- iré a buscar algo de comer allá abajo, regreso en unos minutos.
-Gracias, la gerencia.
Alya salió de mi cuarto y cinco segundos después, algo aterrizó en mi piso desde la buhardilla superior. Contuve un grito cuando noté que era el michi.
-¿Qué haces aquí? -le pregunté.
-Esperando a que tu amiga se fuera para saludarte -besó mi mano- buenas tardes, my Lady.
Sonreí.
-Hola gatito. ¿Me responderas qué haces aquí? Es raro verte a la luz del día.
Chat empezó a mirar mi cuarto.
-Te extrañaba, eso es todo -respondió- o... ¿No te alegra que esté aquí?
Frunci el ceño.
-¿Qué te hace pensar eso? Nunca me molestaría tu presencia.
Hizo una mueca y esquivó mi mirada algo avergonzado.
-Pensé que estabas enfadada por el anuncio del periódico -confesó- anoche dejaste en claro que no te gusta llamar la atención, luego por mi culpa nos han tomado una foto y la han puesto en la primera plana.
Levanté su carita y acaricié el cabello de su nuca sacándole unos ronroneos.
-No estoy molesta contigo, Chat.
El gatito miamor frunció el ceño.
-¿Ah, no? -preguntó- entonces, ¿Qué haré con esta rosa?
Sacó la mano que traía escondida en la espalda mostrándome la rosa azul. La tome en las mías tratando de disimular que se me habían puesto los cachetes rojos.
Nawebona, estaba que le dedicaba esa de Chino y Nacho de
Mi corazón hace tuku tuku tu ku
Mi corazón eres tú tú tú tú tú
Gato pa bello
-Gracias, Kitty -dije.
Chat empezó a caminar alrededor de mi cuarto examinandolo con la mirada. Notó la estructura del bombín con cartón sobre la mesa al lado de la corotera así que se acercó a ver.
-¿Éso es un sombrero? -preguntó ya que aún no se le veía muy bien la forma.
Dejé el aweboniamiento de lado y fui a estar pilas de que no lo tocara porque me lo podía dañar.
-Si, es un bombín para ser exacta -le expliqué- mi diseñador favorito está haciendo un concurso para los chamos de mi escuela. Resulta que...
Me encadené a contarle el beta del concurso, lo del premio, la unión a la colección de Gabriel's y un poco e' vainas más mientras él me escuchaba con mucho interés y atención. Sus ojos verde moco de gorila seguía mis movimientos con la mirada mientras buscaba mi libreta de bocetos para enseñarle el diseño y le explicaba cómo lo quería hacer y ajá. Pero luego caí en cuenta de que no paraba de hablar y hablar vainas que seguramente a él le aburrían.
-Mala mía, man. Sé que estoy hablando mucho -hice una mueca.
-Para nada me molesta. Estás contándome algo que te fascina -dijo- así que continúa, por favor.
Sonreí ligeramente.
-Está bien -accedí- bueno, como te decía: el sombrero que escoja Sugar Gabriel será modelado por su junior aka su hijo, el Adrien. El carajito lo tengo que ver haciendo esa vaina porque como que es medio tímido para estar frente a tanta gente, aunque fíjate que hoy se echó su encadenada hablando de historia frente a toda la clase y admito que me sentí súper orgullosa de él. Sé que no es fácil hacer amigos tan rápidamente pero sé que puede llegar a hacerlo. No es tan malo como creí.
Marica, ni idea del porqué pasé de hablarle a Chat del concurso a hablarle de Adrien pero al parecer no le molestaba escucharme, al contrario, me dio una sonrisita y me pidió que siguiera hablando.
-Y éste chico Adrien... -me interrumpió- ¿De alguna forma te... atrae?
Hice una mueca.
-No, la verdad no.
Su sonrisita disminuyó.
-¿Ah no? -preguntó- ¿Porqué no?
Me encogi de hombros.
-No lo sé. Empezamos con el pie izquierdo, resolvimos nuestros conflictos y ahora somos buenos amigos -rasqué mi fleco- quizás, sólo...
-¿Quizás? ¿Quizás qué?
-No lo sé. Quizás si no hubiesemos empezado con el pie izquierdo y él no hubiese sido así tímido y aweboniao' para invitarme a salir, yo no me hubiese negado.
Chat frunció el ceño.
-¿Hablas en serio? -preguntó. Me encogi de hombros en forma de afirmación.
Soltó un suspiro.
-Pero ajá, la vaina cambió -agregué- después te conocí a ti.
Su sonrisita seductora apareció.
-¿Y qué ocurre con eso? -insinuó- ¿Podré tener yo alguna oportunidad?
Levanté las cejas.
-¿Una oportunidad para qué? -me hice la loca.
Chat relamió ligeramente sus labios y con su dedo índice levantó mi barbilla.
-Para lanzar una llave al río Sena por ti -susurró.
AAAAAAAAAAAAAAA
AAAAAAAAAAA
AAAAAAAAAAAAAAAAAAAA
-Ay si, tú -bufé tratando de disimular la convulsión de qk que me estaba dando en ése momento- ¿Qué vas a estar haciendo tú esa vaina?
El gatito abrió la boca para responder pero el sonido de la buhardilla lo interrumpió.
-Marinette, tu papá nos ha preparado croissants para la merienda y un batido de... ¡Joder! ¡¿Qué hace Chat Noir aquí?!
El grito que pegó esa mujer hizo que nos separaramos inmediatamente y fingimos que no estuvimos casi a punto de chuparnos las caries.
El gatubelo aclaró su garganta.
-Ehm... Si, parece que todo está en orden por aquí -rascó su cabello- si me necesitan, estaré cerca de...
-Alya es mi mejor amiga, sabe de toda vaina -se la corté.
Él miró a Alya y la muy marica asintió tipo diciendo: asies, osiosi.
-¿Incluso de la...?
-Si, incluso de la cita -lo interrumpió la negra- aunque no te lo voy a negar. Al principio creí en la posibilidad de que tú y Ladybug tenían algo en secreto.
Chat al escuchar eso, rió un poco.
-No, nada que ver -respondió- Ladybug sólo es mi compañera, la posibilidad de que exista una relación más allá de una amistad entre nosotros es nula.
Ay si, oilo.
-Entonces tendré que descartar esa idea y quedarme con la del romance secreto entre tú y Marinette.
-Así e... -el catire cayó en cuenta muy tarde de lo que Alya le había dicho y en seguida se puso rojo- espera, nosotros...
Me empecé a reír por su nerviosismo.
-Alya sólo te está jodiendo, no le pares bola -dije- por cierto, ella es Alya. Negra, él es...
Me miró con ironía tipo que: marica, ¿Quién no conoce a ése man?
-Es todo un placer, señorita -Chat le sonrió haciendo una pequeña reverencia.
-Igualmente, Chat Noir.
El michi me miró.
-Debo ir a hacer una última ronda de patrullaje esta tarde antes de regresar a mis responsabilidades de civil -se acercó a mi oído- pero prometo pasarme esta noche por aquí -susurró- ¿Está bien para ti?
Asenti.
-Por mí no hay peos. Lleguese.
El michi sonrió y se despidió dejando un beso en mi mano.
Cuando el gato miamor dejó mi cuarto, Alya pegó otro grito fangirl.
-No puedo creerlo, ¡Simplemente no puedo creerlo! -exclamó- es todo una dulzura, tal cual lo habías dicho... a tú manera tan marginal.
-Estoy clara -miré la rosa entre mis manos- es una belleza.
Alya notó la rosa en mi mano y levantó una ceja en una mueca de diversión.
-¿Y esa rosa?
-Apareció mágicamente tipo en La Rosa de Guadalupe -respondí sarcásticamente ganandome una fea mirada- no te piques pues, mejor terminemos el sombrero porque ahora es que hay...
Se empezaron a escuchar un coñazo e' pajaros cerca del edificio. Escuché un grito de Colette en la planta baja quejándose de que en la casa había entrado un viaje de palomas. Alya y yo nos miramos las caras.
Ese mamaguevo había soltado una mariposa.
Alya fue la primerita en sacar el teléfono dispuesta a salir a la calle a grabar el peo, esa caraja era indestructible será. Lo más arrecho es que se había empeñado en que la acompañara pero le tiré la coba de que me estaban dando ganas de cagar así que se tuvo que ir ella sola.
Tikki salió de mi chaqueta.
-Eres tan ordinaria.
-Coño, no se me ocurría otra vaina para decirle.
-Por lo menos hubieras dicho que...
-¿Te vas a quedar ahí regañandome o vas a transformarme para Miraculous, lo más genial a resolver lo que anda ma-al? -aplaudi rápidamente para que agilizara.
Suspiró pesadamente.
-Sólo di las palabras.
(...)
-¡Lucky Charm! -grité al ver que el loco de las palomas ya me iba a atacar.
Si, el loco de las palomas. El maricón de Hawk Moth transformaba a una gente que ay no fos. El man éste es un tipo mayor que alimenta a las palomas en el parque, tuvo un peo con un pajuo oficial porque le había prohibido alimentar a las palomas y de paso lo había corrido de esa mierda, el tipo se picó y el mariposón se aprovechó de sus emociones negativas.
Situación actual: estaba junto a Chat Noir metida dentro de un edificio completamente vacío peleando con el man ése. De paso el michi andaba con una estornudadera porque tenía una arrecha alergia a las plumas.
El Lucky Charm cayó en mi mano y me aguanté las ganas de formarle peo a Chávez al ver que esa vaina era una mamagueva moneda.
-¿Cómo coñoelamadre voy a coñacear yo al palomo este con una moneda? -gruñi.
El michi estaba esquivando los golpes del viejo y distrayendolo para que no soplara el pito ese para llamar a las palomas. Debíamos destruir esa vaina porque era ahí donde estaba atrapado el Akuma.
-¡Sólo enfoca! -esquivó un coñazo y se defendió con su bastón. Estornudó- eres buena para eso, Bugaboo.
Fruncí el ceño.
-¿Cómo me has dicho?
-¡Es sólo un apodo! -respondió volviendo a estornudar- ¡Ladybug!
-Coño, que ya voy.
Me puse a ver pa' todas partes hasta que el bastón del michi se iluminó con la visión infrarroja de puntos esa que me indicaba lo que tenía que hacer, luego una máquina expendedora y finalmente la mugrosa moneda.
Epa, se me ocurrió una vaina.
Fui rápido a comprar un pepito a la máquina.
-¡Chat, tu bastón! -le pegué un grito. El gato se puso pilas y agarró el bastón como un bate.
Agarré vuelo y luego de calcular toda vaina, se la lancé. El gatito bateó la bolsa a la perfección y esa vaina explotó de coñazo haciendo que la reguera de papitas cayera sobre el viejo y las palomas lo fueron a atacar.
Chat Noir le quitó el coso ese de llamar palomas y me lo lanzó.
Lo rompí haciendo que el zamuro negro ese saliera.
-No más maldades para ti, zamuro er diablo porque más marvada que yo no hay. ¡Es hora de acabar con la maldad de esta mierda, nojoda! -lancé el yoyo y la atrapé- ¡Te tengo! -exclamé y luego la liberé- ahí los vidrios, mariposa. Que papi Guaidó te bendiga.
-¿No se te olvida algo? -preguntó el kitty haciendo que le parara bolas. Me arrojó la moneda y la atrapé.
Lancé la moneda al techo y de vaina no rompí una de las ventanas del tragaluz.
-¡Ladybug es senda lacra, yayayayajuuu!
Luego de que las mariquitas regresaran todo a la normalidad y de que Chat y yo acompañaramos al señor de regreso al parque, me extendió su puño.
-Ganamos.
Al gato miamor le empezó a sonar el anillo.
-Mierda, estoy a punto de transformarme -se dio cuenta mirando cómo se estaba empezando a desaparecer la huella de gato en su anillo- parece que es hora de irme, Bugaboo.
Me acerqué a él y toqué su cascabel.
-Que raro tú poniéndome apodos a mí.
-Que raro tú no decirme apodos a mi -se burló. Reí- siempre tienes uno para mí, creí que era justo ponerte uno también.
-Me gusta.
El michi sonrió.
-Ya es hora de irme -activó su bastón y tras despedirse con una sonrisa, se fue.
Sonreí mientras lo veía alejarse corriendo por los techos.
-Adiós, mishu mishu.
(...)
El estridente sonido de la alarma me había despertado de coñazo. Me había quedado dormida en la mesa con los materiales y de vaina y había terminado la mitad del bombín. Miré la hora en el teléfono y pegué ese grito al ver que tenia una hora exacta para terminar esa vaina y entregarla.
Tikki voló hacia mí al ver que había entrado en desesperación.
-¿Qué ocurre?
-¡Me quedé dormida, marica! -empecé a coser a mano los detalles en cuero sintético oscuro.
-¿Cómo no? Si luego de salvar a la ciudad tenías a otro diablo encerrado en tu habitación.
Y no se equivocaba. Papi a lo mejor pensó que yo me estuve contando los pelos de la qk en el transcurso de la tarde porque Nadia pasó y nos zumbó a la Manon así que me puse a cuidar a la carajita er diablo esa hasta las diez de la noche porque la mamagueva de la mamá se había quedado beteando en el trabajo. Cuando se llevó a la carajita me puse a terminar de hacer el sombrero pero así sería el cansancio que tenía encima que me quedé dormida, gracias a Dios no me abrí la cabeza con la máquina de coser. Me dio burde pena porque el michi había dicho que iba a venir y me había quedado dormida.
-Estoy de que me vuelvo loca, Tikki -gruñi al pullarme con la aguja. Tikki me fue pasando todo lo que necesitaba hasta que por fin pudimos terminar el sombrero- ¡Nojoda, triunfó el mal!
Tikki me miró con ironía.
-Eres una superheroina, se supone que...
-Si, si, si. Mala mía pues, la costumbre -me excusé- aún tengo tiempo para echarme un baño e' bomberos antes de pegar la carreta al liceo.
Tikki miró mi sombrero y luego el boceto.
-Oye, ¿Notaste que te hace falta algo?
Frunci el ceño y miré el boceto.
C
O
Ñ
O
E
L
A
M
A
D
R
E
A ESA VERGA LE FALTABA LA PLUMA.
-¡Marica, la pluma! -grité.
Corrí a bañarme y luego de vestirme y buscar una caja para guardar el sombrero, bajé a la panaderia.
-Bendición, papi -lo saludé pasando por la fábrica y quitándole un cachito ya listo y una galleta para Tikki- bendición, papi -me despedí yéndome de ahí.
Tikki se jartó rápido su vaina para después ayudarme a comerme lo mio porque necesitaba mis dos manos para llevar la caja.
Al llegar al parque conseguimos una pluma y ahí sentadas en un banco se la pegué rápidamente en un costado al sombrero. Nos regresamos corriendo al liceo, era un poco tarde, Alya me estaba reventando el teléfono a punta de llamadas y mensajes.
Al llegar al patio vi que varios de los muchachos ya tenían sus sombreros en un pequeño exhibidor y la asistonta de Sugar Gabriel iba acompañada del director, Adrien y Miss Bustier mientras paseaba una table... MARICA YA VA.
ESTABA HACIENDO UNA VIDEO LLAMADA CON MI PAPI TODO BELLO Y PRECIOSO GABRIEL AGRESTE.
QK CONVULSIÓN.
-¿Dónde estabas? -Alya llegó con el teléfono en la mano- te estuve llamando desde hace una hora, estás llegando tarde.
La seguí hacia el exhibidor que me había apartado mientras trataba de regular mi respiración.
-Me quedé dormida y tuve que terminar el sombrero en lo que me desperté -le di la vuelta a la caja y dejé el precioso bombín sobre la superficie del exhibidor- ¿Tú qué opinas? Digalo que quedó buuuurrrrde chikiluki.
Alya lo miró y frunció el ceño. Miró tras mi hombro.
-¿Es mi imaginación o es exactamente igual al de Chloe?
Al escuchar esa vaina inmediatamente me volteé. Nathalie estaba mostrándole el sombrero de Chloe a Sugar Gabriel. El mamaguevo sombrero e' mierda ése era la cagada del mío, de vaina y no lo hice también yo. Esa perra de alguna forma me robó el boceto, por algo era que me sentía observada en la plaza, esa pajua seguramente me estuvo siguiendo con Sabrina.
Traté de respirar calmadamente para poder relajarme.
Alya frunció el ceño.
-¿Qué se supone que haces?
-Respiro hondo para apaciguar mi alma.
-¿En serio? ¿Eso quiere decir que no usarás el cabello de Chloe para limpiar todo el patio de la escuela?
Entorné la mirada.
-Verga chica, uno tratando de no sucumbir al salvajismo y tú echando cizaña -la regañé.
-¡Pero ha robado tu diseño! -se quejó- mínimo tienes que sacarle un diente.
Nawebona de consideración. Lo más arrecho es que es la primera en contra de que las vainas se resuelvan a punta e' coñazos.
Le hice una seña para que le bajara mil a su intensidad cuando Nathalie llegó con su combo. Adrien me sonrió tímidamente.
El catire de semblante serio a través de la pantalla observó la pieza. Automáticamente apreté el culo al ver esos ojazos piciosos.
MARICA, ERA GABRIEL AGRESTE POR VIDEO LLAMADA.
Calmate, chama, relaja la totona.
Respiré hondo pero inmediatamente me ahogué con la respiración al escuchar su voz.
-Nathalie, regresa nuevamente al sombrero de la señorita Bourgeoisé, por favor -pidió. Nathalie giró la tablet para que él viera el sombrero de Chloe otra vez antes de volver a ver el mío- como lo supuse, son exactamente iguales.
-¡Que falta de respeto, Dopain! -exclamó la catira portando un papel de vistima- ¿Cómo te atreves a robar mi diseño? ¡Esto es ridículo! ¡Completamente ridículo!
La miré con una arrechera descomunal que nawebona, ¿Cómo alguien podía ser tan caretabla?
Pero en vez de formarle su peo, preferí hacerla pasar pena con algo mucho mejor que palabras: pruebas.
-Disculpe, pap... digo, Señor Agreste, pero puedo probar que el diseño es completamente mío -aseguré.
Él asintió. Cojeme.
-Adelante, señorita.
Agarré el bombín en mis manos.
-Todo está completamente hecho a mano, desde las costuras y los accesorios -le fui mostrando cada cosa del sombrero- además, como todos lo diseñadores saben: sólo hay un detalle particular que sólo el diseñador conoce -pusé el sombrero al revés y levanté la solapa para que pudiera ver que los detalles dorados en ella no eran simples detalles, era mi nombre grabado de forma cursiva- en otras palabras: rescata, sapa.
La arrechera que agarró Chloe fue bella, oyó. Digame cuando tiró el sombrero al piso y también pude notar mi nombre bajo la solapa de forma invertida. Miré a Alya y ella me miró con orgullo.
-En ése caso: felicidades... eh...
-Marinette -le informó el Adrien, aka su Junior- su nombre es Marinette, padre.
-Pues, felicidades, señorita Marinette -me felicitó ahí con su cara toda seria- eres la ganadora. Pronto nos pondremos en contacto contigo para realizar el desfile de la colección. Puedes entregarle el sombrero a mi hijo.
Asenti. Nathalie se retiró a terminar de cuadrar unas vainas con Miss Bustier y el director dejándome con Adrien y Alya. La negra como que se sintió lámpara porque se hizo la loca y se fue a ver el sombrero de Rose.
-Sabía que ganarias -confesó en una pequeña sonrisa.
-¿Porqué no me habías dicho nada del concurso?
Se encogió de hombros.
-No quería que pensaras que yo había organizado todo esto para que mi padre te eligiera a ti, además me había pedido guardar el secreto -admitió- de todas formas ya no importa. Me alegra que hayas ganado el concurso, te lo mereces.
Sonreí.
-Gracias, Catire.
Sonrió.
-De nada, My Lady.
Epa, ya va.
Frunci el ceño.
-¿Qué dijiste?
Frunció el ceño divertido.
-¿Qué? Es sólo un apodo -se defendió con inocencia.
-Que raro tú poniéndome apodos a mí -frunci el ceño con diversión. El carajito al fin estaba aprendiendo a agarrar más confianza y eso me gustaba.
-Que raro tú no decirme apodos a mi -se burló. Reí- hablo en serio: siempre tienes uno para mí de esos nativos de tu país, creí que era justo ponerte uno también.
-Me gusta.
El catire sonrió.
Nawebona de Deja vú arrechisimo me dio. Pero ajá, ¿Dónde habré tenido yo una conversación así antes?
Ay no, a lo mejor eran vainas mías.
Adrien miró el sombrero en mis manos y lo tomó.
-Te ha quedado muy bien -lo examinó.
Dejé mis mentes a un lado y le paré bolas.
-Pues que bueno que te guste, después de todo tú serás quien lo modele.
-Créeme, lo haré con todo gusto -sonrió.
-Esa es una vaina que me gustaría ver porque no puedo ni imaginarte, carajito.
-¿Quieres un vistazo? De acuerdo... -el carajito se colocó el sombrero y no pasó mucho tiempo antes de que empezara a estornudar. Se lo quitó y rascó su nariz- lo siento, soy alérgico a las plumas.
Que casualidad. El gatubelo también era alérgico a las plumas.
-No hay peos, yo después le pondré una sintética -le resté importancia.
Nathalie llamó a Adrien.
-Ya debo irme. Sesión de fotos -hizo una mueca- te escribiré luego.
-Así dijiste ayer, pajuo.
-Ya sé, lo siento -sonrió un poco apenado- había olvidado dónde había dejado mi teléfono, pero esta noche sin falta.
Sonreí.
-Eso espero -me despedí con la mano dispuesta a ir para que las muchachas- adiós, Catire.
-Adiós, My Lady.
Aquél sentimiento de familiaridad volvió a mí. Fue entonces cuando me acordé de la vaina. Sólo había una persona que me llamaba así.
Chat.
🔴⚫🔴⚫🔴⚫🔴⚫🔴⚫🔴⚫🔴⚫🔴⚫
MARICAS HIPERVENTILO. MI PRIMO SE CONSIGUIÓ A CHINO MIRANDA ALLÁ EN PANAMÁ Y LE PIDIÓ QUE HICIERA UN VIDEO ENVIANDO UN SALUDO A NUESTRA FAMILIA. AÚN NO SUPERO ESA VAINA.
En otras noticias: ya conseguimos a Marian, estuvo perdida en Disney la boca abierta.
En los deportes tenemos que los Mets le ganaron 4-1 a los Red Sox
Y en farandula: tenemos la nueva canción de la Ariana Grande con la Hannah Montana y Lana del Rey, no me llames Ángel, está bestial oyó.
Capítulo dedicado a @La_Abuela_Larry Zu, lo prometido es deuda bebé.
Eso fue todo por hoy. Noticiero Venevisión reporta, ustedes deciden. Feliz día.
¡Besos! La yocsy se despide...
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro