♡彡 ━ mocoso
Jimin empujó suavemente el plato de comida hacia adelante sobre la mesa, apartándolo de sí. No tenía hambre, y a decir verdad tampoco tenía ganas de fingir.
Miraba a Yoongi sentado junto a él en la mesa, no podía encontrar alguna señal de nervios, o culpa, ni mucho menos una pequeña pista de que tenía la intención de contarle, y eso lo entristecía un poco, le causaba un revuelo de nervios en su estómago, y además de eso, mirar como pretendía que nada había pasado, lo llegaba a hacer sentir un poco molesto también.
— ¿No vas a comer? — Yoongi levantó su mirada de la comida hacia los ojos de Jimin, con una pequeña sonrisa en sus labios — ¿los gatos no comen sushi?
—No tengo hambre — Jimin cruzó sus brazos sobre su pecho e inconscientemente frunció su entrecejo. Podía aceptar que Yoongi por lo menos intentara justificarse, pero que no lo hiciera era peor, además podía percatarse de esa pequeña sonrisa en sus labios, que no podía contagiarse a él.
— ¿Te sientes mal?... — Yoongi miró atento la expresión de Jimin. Jimin se limitó a evadir la mirada de Yoongi y apretar sus labios.
‹¿Cómo debería sentirme?› tuvo que morder su lengua para no preguntar lo que pensó, porque sinceramente no estaba seguro de qué hacer con todo lo que estaba sintiendo.
—No.
—Estás muy raro, Jimin, ¿puedes decirme que tienes ya? — Yoongi insistió. La manera en la que sus cejas estaban suavemente fruncidas y sus brazos cruzados frente a su pecho, le hacían saber que algo estaba mal con su gatito. Jimin se levantó de la mesa, tomó aire, levantó la mirada hacia Yoongi y decidió ser un poco valiente. Un poco aunque sea.
—Sí pasa algo en realidad... — Jimin sonó decidido, como alguien que estuviese totalmente seguro de enfrentar sus problemas, pero ese mágico momento duró muy poco, porque en cuanto sus ojos se encontraron con Yoongi, volvió a ser el mismo gato llorón que sintió sus piernas temblar y unas inmensas ganas de esconderse —bueno, es que, yo... — Jimin balbuceó al apartar la vista del mayor, si empezaba a tartamudear, olvidaría todo lo que quería decir, si miraba a Yoongi a los ojos, recordaría lo que pasó y entonces terminaría llorando. —quería decirte que no tengo muchas ganas de trabajar y, que preferiría quedarme en casa...
—Ah... — Yoongi hizo una mueca ligeramente confundido, no era exactamente lo que se esperaba. A causa de esa expresión de incomodidad y su cola tan inmóvil, esperaba algo un poco más grave que eso, entonces no había mucho porqué preocuparse —está bien, no hay problema con eso, supongo...
Yoongi estaba un poco desconcertado, él creía que Jimin estaría emocionado con la propuesta de su jefa, siquiera un poco sorprendido porque significaba que podrían estás más tiempo juntos sin problemas, al parecer se equivocó. Jimin asintió al ver cómo Yoongi encogía sus hombros, iba a excusarse más o a decir algo más, cualquier cosa, pero su voz no salió, así que simplemente se dio media vuelta para entrar en su habitación y envolverse entre las sábanas.
‹Podría al menos fingir que le importa un poco...› ¿o quizá era que Jimin estaba dándole importancia en demasía? ‹¿o está fingiendo que le importo?› allí estaba de nuevo.
Yoongi había llamado a Jungkook después de haberse deshecho de los restos del desayuno, y haber limpiado un poco la cocina, sin escuchar ni el menor ruido de Jimin. Conocía a Jimin y podía estar seguro de que no que le mintió y de que algo estaba mal, incluso él no estaba siendo sincero con Jimin. Tampoco se sentía de lo mejor, mucho menos sin su habitual y mimoso Jimin.
—Ah, Jungkook... — Yoongi soltó el nombre de su mejor amigo acompañado de un pesado suspiro, cubriendo su rostro con su antebrazo, recostado en el sillón. —ayer apareció Hoseok en mi departamento y me besó — Yoongi habló con voz muy baja, procurando que sólo él fuese capaz de escucharse.
—Algo así me contaron... — Jungkook esperaba la llamada de Yoongi incluso desde más temprano, y no había podido dormir a gusto al estar pensando en la posibilidad de que Jimin hubiese visto lo que pasó.
— ¿Cómo es que lo sabes todo, pequeña rata? — Yoongi se quejó, no le sorprendía que Jungkook ya lo supiera, daba un poco de miedo, pero Jungkook siempre estaba un paso adelante de él, aún cuando le molestaba que fuera así y se esforzara en cambiarlo.
—Es porque también soy como el mejor amigo de Hoseok... — restó importancia. Hoseok le había llamado anoche, justo después de lo sucedido, el resto de su noche fue una buena y sincera plática para Hoseok entre amigos. —me contó lo que pasó ayer, mierda, que es difícil decirle a alguien que deje de intentarlo, en especial cuando siempre le dije que no se rindiera contigo.
—Acabas de decirle a tu mejor amigo que tienes otro mejor amigo, tu nariz es tan social, traidor... — Yoongi escuchó una serie de insultos y otras cosas como respuesta, haciéndolo reír. Suspiró. —no quiero sonar tan malo, pero espero que lo haya entendido ésta vez, es definitivo.
—Hoseok habló conmigo de eso, no sabía que tenías novio, dijo que lo sentía... ya sabes, él en realidad no es un mal chico, sólo no se rinde fácilmente, supongo.
—Tan obvio... — Yoongi comprendía, Hoseok no era malo ni nada de eso, a decir verdad era del tipo que le agrada a todo el mundo, alguien demasiado bueno algunas veces, y muy optimista. Él en otras circunstancias, como cualquier persona, estaría contento de tenerlo cerca, pero esas circunstancias simplemente no se dieron.
—Jimin no miró nada, ¿o si? — Yoongi encontró la preocupación en la pregunta de Jungkook.
—No, estábamos en el pasillo, no lo sabe. — y no estaba seguro de si debería saberlo, le inquietaba pensar que se molestaría, o aún peor, que lo hiciera sentir triste, pero seguía sintiendo eso en su pecho, una pequeña sensación de culpa que le avisaba que algo estaba haciendo mal. — ¿crees que debería decirle?
—Creí que ya lo habrías hecho. Soy tan intolerante a las mentiras que ya deberías saber mi respuesta a esa pregunta, Min.
—No me llames por mi apellido, me intimidas... — Yoongi se quejó y al mismo tiempo se sentó derecho en el sillón —además, no es exactamente una mentira...
—Es más una falta de confianza.
— ¡No! si lo dices así suena muy feo...
—Si fuese yo me gustaría que me lo dijeran, no es como si ocultarlo fuese mejor opción a mi parecer.
—Pero es que Jimin...
—Es porque es Jimin, él no merece ni la más piadosa mentira no intencional de parte de alguien. Además, si te sientes culpable es la solución.
—Jungkook, te detesto por siempre tener la razón.
—Gracias, Yoonie... sabía que harías lo correcto, compra dulces para mi por favor.
—Compraré dulces para ti, mocoso.
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