Taehyung estaba prestando más atención a la hora que a las clases, había sido inevitable. Dios, quería tanto ya estar junto a Hoseok. Deseaba mucho hablarle y... tocarle.

Se preguntaba del uno al diez que tan extraño debía ser esa necesidad de tocar a tu amigo.

Cuando la hora de salir llegó, su profesor volvió a retenerlos porque una vez más no terminaba de explicar el nuevo tema que les estaba enseñando. Taehyung casi estuvo a punto de levantarse y salir de todas formas. Casi.

Miró su reloj con rapidez cuando el profesor terminó, solo habían sido tres minutos de más ahí dentro. Sonaba a poco pero para él era mucho, cada segundo era valioso cuando se refería a estar con Hoseok. Y le daba igual si eso no sonaba muy heterosexual que digamos... Ciertamente, algo le decía que los últimos pensamientos que había estado teniendo no sonaban muy heterosexual cómo creía que era. No importaba, no iba a ponerse a analizarlo ahora, tenía que ir a verse con Hoseok.

Salió tan rápido del aula que casi choca con alguien que se encontraba cerca de la puerta.

—¿Yoon...?

—Hola. —Yoongi saludó con una expresión extraña, entre incómoda y curiosa—. Solo venía a hablar un rato. —Se encogió de hombros.

—Oh, ah... ¿si? —preguntó entre sorprendido e inquieto. Hoseok debía estarlo esperando. Yoongi asintió de forma tranquila y con una mueca que siempre hacía cuando quería lucir desinteresado. Antes solía afectarlo esa expresión, lo hacía sentir insuficiente, antes solía doler sentirse inferior para quien se suponía que era su mejor amigo. Antes. Ahora no sentía nada de eso—. Estoy... tengo que ir a un lado. Lo siento-

—¿Oh...? ¿Te vas?

—Si, lo siento —dijo riéndose nerviosamente mientras intentaba alejarse.

—¿Estás apurado? —preguntó entre confundido e interesado por saber.

—Un... un poco —titubeó sin querer dar más explicaciones. Dando un paso más alejándose pero sintiendo que no podía aún irse, la mirada de Yoongi parecía prohibírselo.

—¿A dónde vas tan apurado? —Poner de excusa que iría al baño era una buena idea pero justamente el lugar donde Hoseok lo esperaba estaba del lado contrario a los baños—. Ni siquiera estamos en la mitad del receso, puedes hacer lo que sea luego.

—Si, es que... —Se quedó sin palabras cuando vio detrás de Yoongi, a varios metros, a Hoseok. Hoseok estaba de pie ahí, mirando en su dirección. Mirándolos. No se veía feliz, tampoco enojado. Era algo peor, se veía de alguna forma triste.

Taehyung sintió como todo su cuerpo reaccionó en respuesta. Quiso correr hacia él pero cuando los ojos de Hoseok se posaron en los suyos, se perdió. Ambos parecieron perderse mientras se miraban a pesar de lo lejos que estaban.

—¿Es que qué...? ¿Estás ignorándome? —Si, Taehyung lo estaba haciendo. Porque él solo tenía ojos para Hoseok, incluso su corazón estaba atento a él, doliendo por cómo su expresión triste era tan transparente para él a pesar de verse serio.—. Taehyung —mencionó Yoongi y lo hubiese seguido ignorando de no ser porque lo agarró de los brazos, llamando toda su atención.

—Lo siento, Yoon. Tengo que-

—No puedo creer que me estés ignorando, ¿sabes lo cruel que es eso? Me culpas a mi de ignorarte pero tú-

—Estoy ocupado ahora. —No estuvo seguro que había dicho. Bueno, en realidad, sí. Lo había escuchado perfectamente.

Pero realmente le importaba una mierda cuando frente a sus ojos vio como Hoseok bajó su mirada y se dio la vuelta caminando alejándose rápido de ellos. Y no, no estaba yendo al lugar donde habían acordado verse.

A Taehyung le importó muy poco si Yoongi lo estaba mirando, él literalmente corrió detrás de Hoseok.

—¡Hoseok! —Alzó un poco la voz, lo suficiente para que le escuchara cuando alcanzó a estar unos pasos detrás suyo. Hoseok se detuvo y se giró.

—Tae... —Su sonrisa dolió porque a instancia de conocerlo, Taehyung podía notar con claridad cuando era falsa y forzada. Y su sonrisa de ahora era todo eso—. ¿Qué pasa?

—¿Qué pasa? —repitió, para luego fruncirle el ceño—. ¿A qué te refieres con qué pasa? Dijimos de encontrarnos en el mismo lugar que en el receso anterior pero estás yendo por el lado contrario.

Hoseok miró a otro lado, su sonrisa se borró de a poco. Poniéndose serio, pero sabía que estaba ocultando otro sentimiento detrás de esa expresión. El mismo sentimiento que había visto desde lejos hacía unos minutos.

—Creí que podrías no querer verme.

—¿Qué? —Ahora se sentía muy confundido—. ¿De qué hablas?

Hoseok pareció ruborizarse mientras seguía mirando a otro lado.

—Por el beso que te di...

—Oh, espera, m-mejor hablemos allá. —Lo agarró de la mano y arrastró al lugar en el que habían estado en el receso anterior, tan seguro como nunca antes pero a la vez tan tímido por la mención del beso. Sentía un estremecimiento dentro suyo, placentero.

Se sentó e hizo que Hoseok se sentara a su lado, exactamente en el mismo asiento que la vez anterior. Miró a Hoseok, aún con su mano tomando la suya. Hoseok también lo miró, pero estaba en silencio. Ambos en silencio. Taehyung se inquietó, Hoseok no era del tipo que le gustara los silencios así que sabía que si estaba callado era por algo. Quería saber el porqué, sabía que era algo importante. Relamió sus labios sin dejar de mirarlo, preguntándose qué decir.

Tenía que hacer una muy .buena pregunta. Todo dependía de él:

—¿Hola...?

Hoseok soltó una risa bajando la mirada. Se avergonzó de que se estuviera riendo de lo que había dicho pero no lo culpaba, a Taehyung también le causó gracia y comenzó a reír. Aunque bien podría ser que se riera porque la risa de Hoseok era contagiosa y era imposible al menos no sonreír cuando reía.

—Creí que... —murmuró Hoseok cuando dejaron de reír, comenzando a hablar—. Estuve preguntándome toda la clase si estuvo bien lo que hice antes de irme corriendo, cuando me despedí de ti de esa forma... Cuando el receso comenzó vine directo aquí, pero estaba tan ansioso y preocupado por no saber si lo que hice estuvo bien que decidí ir a buscarte cuando no venías. Pero ni siquiera llegué hasta tu aula porque te vi a lo lejos, estabas hablando con Yoongi. Supuse que habías salido hacía tiempo pero preferiste quedarte hablando con él por lo que yo había hecho...

—¿Cómo...? ¿Creíste que no vendría?

—Estabas en todo tu derecho. Te besé...

—¡En la mejilla! —Se indignó—. ¿Creíste que no vendría porque me besaste en la mejilla?

—Bueno...

—No es la gran cosa —interrumpió—. Me refiero a que no me molesta. Es como cuando me dejaste tomarte de las manos que dijiste que no te molestaba, es... es normal. Es más, puedes besarme ahora. Hazlo, vamos.

—O-oh, no, no, no. —Hoseok rió bajito, sus risitas era nerviosas y tímidas—. Ya, ya entendí que no estás molesto —agregó bajando su mirada. Taehyung se dio cuenta que aún tenía agarrada su mano cuando se movió levemente.

Relamió sus labios, esta vez controlándose cuando estuvo a punto de repetirle que lo besara para que comprobara que no era la gran cosa. Porque comenzaba a cuestionárselo a sí mismo. Si no era la gran cosa, ¿por qué se desesperaba para que lo repitiera?

—¿Están bien las cosas con Yoongi? —preguntó de pronto. Taehyung acariciaba su mano distraídamente.

—Mm, no realmente. —Definitivamente no si recordaba lo último que le dijo. Hoseok lo cuestionó—. Nunca nada está del todo bien con él. O no dura mucho cuando lo está... Es tan... —Solo hizo silencio y negó, no tenía ganas de hablar de eso y ni siquiera sabía él mismo que decir de su amistad.

—Luego de todo lo que me contaste de ustedes dos... La forma en que él te trata o exige cosas, como que le digas que lo quieres y como a ti te da miedo perderlo, ¿has pensado en la posibilidad de que...? ¿De qué él pudiera gustar de ti o tú... de él?

—¿Uh? —Lo miró sorprendido, demasiado sorprendido. Nunca había pensado en esa posibilidad pero cuando lo hizo en ese momento, casi ríe. Claramente no se gustaban, de hecho, Taehyung sabía quien le gustaba a Yoongi en esos momentos—. No lo creo. —Rió bajo.

—¿No lo crees? —Hoseok cuestionó, intrigado, como si realmente le importara saberlo. Como al borde de decirle que le dijera todo.

—Sé quien le gusta a él, sus gustos son un tanto particulares. —Hoseok siguió mirándolo de esa forma intensa. Taehyung rió bajo—. Le gusta las mujeres que tienen más años que él... muchos más años.

—Oh... —murmuró Hoseok pero no parecía satisfecho—. ¿Y si él cambió de gustos? ¿Y si le gustas?

—Es imposible... De todas formas, no pasaría nada entre nosotros. No me gusta, nunca podría verlo como algo más que un amigo.

Hoseok hizo silencio por un momento. Fueron segundos eternos.

—Porque no te gustan los chicos, ¿cierto...? —Era casi una afirmación, sonaba a eso. Su mano sobre la de Hoseok de pronto se sintió más, tan consciente que tomaba su mano—. Una vez lo diste a entender...

—¿Hice eso? —preguntó sorprendido porque no recordaba habérselo expresado, aunque se suponía que era así. No le gustaban los chicos... nunca le había gustado uno—. Supongo que lo hice... Sin embargo, tú también, en realidad lo dijiste en voz alta. Lo recuerdo, cuando te molestó-

—Mentí. —Quedó con la palabra en la boca mirando a Hoseok a los ojos como si lo mirara por primera vez, aunque Hoseok miró a otro lado—. O tal vez no lo hice en ese momento, solo que... luego cambié de parecer.

—¿Qué quieres decir? —soltó de inmediato, sabiendo perfectamente lo que estaba diciendo pero esperando que lo confirmara con una muy extraña emoción creciendo dentro suyo—. ¿Quieres decir que tú...?

—Sí... —Sintió como de tibia era su mano debajo la suya, tan consciente que él no se había alejado aún porque se lo había permitido desde el principio. Los momentos de como se había acercado tanto a su rostro, de como miraba sus labios y le susurraba paralizándolo por completo, llegaban a su mente. Y el hecho de que besó su mejilla... ninguno de sus amigos haría algo como eso, nunca había escuchado a sus amigos siquiera mencionar algo parecido. Pero entonces, ¿significaba que le gustaba? ¿Le gustaba a un chico? ¿A Hoseok?

¿Por qué no le disgustaba el hecho de que podría gustarle? ¿Por qué lo único que le disgustaba era que en realidad estuviera confundiendo las cosas y Hoseok ni siquiera lo viera de esa forma?

—Estás muy callado... Creí que ya habíamos superado esa etapa —murmuró Hoseok intentando sonar divertido. Podía sentir su nerviosismo y cierta timidez.

—Solo, solo me quedé pensando.

—¿Ah, si? ¿En qué? —El brillo en sus ojos se intensificó. Taehyung se ruborizó, decirle que se había quedado pensando en la posibilidad de gustarle sonaba muy mal porque lo más probable es que no fuera así y sería demasiado vergonzoso. Y, tampoco es como si pudiera corresponderle, a Taehyung no le gustaban los chicos...

—En que... ¿Irás a casa de Jungkook? —Y ese era él cambiando de tema por lo nervioso que estaba—. Nos invitó en el receso.

—Ah... estabas pensando en eso —murmuró Hoseok bajando su mirada sus zapatos, parecía tan decepcionado y otra emoción negativa—. Todavía no lo pensé. Oh, terminó el receso.

—¿Te vas solo así? —Se quejó levantándose y agarrando su mano cuando se puso de pie para irse. Quería que se despida bien, como la última vez. Quería de nuevo hiciera lo mismo—. En el receso anterior-

Hoseok besó su mejilla, dejándolo mudo otra vez. Si, eso quería. Lo había esperado tanto. Su corazón latió rápido sobre todo al ver a Hoseok sonreírle de forma que sus hoyuelos se marcaban.

—Eres el primero y el único del que me despido de esta forma... Espero que entiendas lo que quiero decir.

—¿Qué... Qué debo entender? —Podría culpar al beso de dejarlo en un estado como si estuviera dopado, era incapaz de pensar un poco lo que le decían.

Hoseok se acercó de nuevo a su rostro, tan cerca que sintió su respiración en sus labios. Se volvió loco. Contuvo su respiración, tensándose, esperándolo. Desesperado pero por fuera paralizado. Cuando Hoseok se acercó más, cerró los ojos instintivamente.

—Estoy seguro que en algún momento lo entenderás —susurró subiendo sus manos por sus brazos hasta sus hombros y luego a su cuello. Taehyung sintió que sus piernas temblaron sintiendo las suaves manos de Hoseok en la piel sensible de su cuello—. Y... que no me alejes justo ahora, me da esperanzas de que también sientas lo mismo. —Volvió a susurrar, antes de pegar sus labios en su mejilla, muy cerca de la esquina de sus labios.

No fue un beso fugaz como los dos anteriores, fueron varios segundos pero le pareció igual de corto. Cuando se alejó, lo quería de vuelta con él. Abrió sus ojos chocando con su mirada, sus dedos aún seguían tocando la sensible piel de su cuello, quemándolo hasta por dentro. Hoseok sonrió, su sonrisa arrogante nunca antes le había parecido tan maldita mente sexy como hasta ese momento.

—Nos vemos en la biblioteca para el trabajo final —murmuró Hoseok, antes de soltarlo y darse la vuelta para irse.

Apenas fue consciente del paso adelante que dio, su cuerpo actuando solo para intentar seguirlo fue desconcertante, como si fuese un imán al que estaba siendo atraído. Estaba tan perdido y no quería admitirlo.

Caminó a su aula casi inconsciente. Pensando en cómo se había sentido sus manos en su cuello y sus labios tan cerca pero a la vez lejos de los suyos. Aún le parecía sentir el tacto de ellos. Se sintió agitado tan de repente.

Las palabras de Hoseok volvieron de nuevo a su mente. Pero Taehyung solo suspiraba internamente viviendo de los sentimientos que le había provocado todas esas últimas horas. No tenía tiempo para definirlos, solo para disfrutarlos. Solo los disfrutaría un momento más antes de cuestionarse que demonios estaba pensando y sintiendo. Y qué era Hoseok para él ahora.

Porque, muy por dentro sabía que ya no sentía solo "amistad" por Hoseok.