Ser animadora es divertido, una salta y aprende nuevas cosas. No tengo porque preocuparme por el color de mis uñas, ni enloquecer en mi closet por que chaqueta usar. Alzo con una liga mi cabello tras cepillarme, ato bien mis agujetas y estoy lista. Por los pasillos me topo con Jenna y nos acompañamos a comprar una soda o unas patatas. De allí no separamos hasta la hora de practica. 

Entramos un poco antes, aún no llegaban las demás. Estábamos en el cambiador y nos quedamos mirando ¿que quería? le besé el sostén y luego la boca. Me dio una bofetada, no dolió. Me miró como si fuese peste y escupió, creo que también me insultó. Jenna anda chiflada por el chico ese que me hablo el otro día. Con todo, no creí que se enfadaría cuando la bese. Da igual, es su culpa por usar bajo la falda encaje negro.