Sábado, 23 de enero de 2021, 19:38

-¡Buenas! -Hoseok entró gritando al lugar cuando Taehyung le abrió la puerta-. Ya llegó la fiesta.

Primero no sabían de qué hablaba, hasta que notó a Namjoon detrás de él con una caja de latas de cerveza en sus brazos.

-Te dije que ellos traerían.

Taehyung volteó a donde Jeongguk cuando él le dijo aquello.

Sólo que había un pequeño problema.

Sin pensarlo demasiado (cegado un poco por la preocupación), tomó a Jeongguk de la camisa, acercándolo. Con su mano tapó su boca de la vista de los demás y susurró en el oído de Jeongguk.

-No soy tan bueno bebiendo.

Kim no se dio cuenta de qué hizo exactamente, pero Jeon sí.

Sentía su oreja cosquillear y esperaba no verse sonrojado. Se alejó inconscientemente de Taehyung tan pronto él terminó de hablar.

-S-Si quieres no bebas, nadie te va a obligar.

-Oh, llegaron antes que nosotros.

Jimin y Yoongi aparecieron en la puerta ya abierta. Al verlos, el pelirrojo fue a con ellos rápidamente.

Jeongguk iba a ir también, pero una mano en su hombro lo detuvo.

-Algo pasará esta noche, y espero que te dé valor.

Y se fue, dejando a un confundido azabache.

Todos se sentaron en la sala, algunos en los sillones y otros en el suelo, comenzando a abrir cada uno su lata de cerveza.

-Taehyung, ten una -Hoseok, con toda la amabilidad y emoción del mundo, le extendió al mencionado una lata, sin embargo Jeongguk la apartó un poco.

-Tae hyung tiene trabajo mañana, así que no beberá.

-¿Y tú sí aunque tengas que viajar?

Taehyung volteó a ver al menor con una mirada de "tiene razón", prácticamente diciéndole que él tampoco debería de hacerlo.

Jeongguk puchereó.

-Ni en mi noche de despedida puedo beber un poco...

-Una lata sí que aguantará -Jimin se rió un poco antes de seguir diciendo-: Tae no aguanta ni un sorbo.

-A la media lata ya está bailando la Macarena.

-¡Oigan! -las risas no tardaron absolutamente nada en escucharse, provocando que Taehyung se pusiera a la defensiva y su rostro se tiñera-. No mientan, y tampoco soy tan malo bebiendo...

-Entonces ten -Jung volvió a extenderle la lata, y antes de que Jeongguk volviera a rechazarla por él, Taehyung la tomó.

Jeongguk iba a reprocharle por ello con el fin de que no se le ocurriera beber por mucha burla que le hicieran, pero Namjoon carraspeó llamando la atención de todos.

-Antes de que todos se pongan borrachos -dijo con serenidad, no sorprendido de que sus amigos quisieran que todos tomaran-, necesitamos decirles algo.

-¿Necesitamos...? -Jeongguk volteó a ver a Seokjin y cuando éste bajó la mirada, supo qué pasaba.

Seokjin carraspeó un poco. Se le veía nervioso, dudando de si quería decir lo que había planeado. Su mirada chocó con la de Jeongguk y, como si hubiera agarrado valor de ello, dijo:

-Hace un mes que Namjoon y yo salimos, y hace unos días decidimos formalizar -su voz era tan bajita por la vergüenza que apenas fueron escuchados.

La mano de Namjoon tomó la de Seokjin y las entrelazó, eso sólo hizo que todo se sintiera más real.

Taehyung miró a Jeongguk. El azabache se veía muy sorprendido.

-Somos amigos de los dos pero ninguno sabía que ustedes podrían llegar a... verse así -dijo Hoseok luego de mirar la expresión de Jeongguk, ambos sonrientes-. ¡Ahora tenemos algo por lo que brindar!

Mientras todos alzaban sus bebidas, Jeongguk sólo podía pensar en una cosa.

Así que esto es lo que debía de darme valor.

-Ugh -Taehyung tosió-, esto sabe feo.

Y todos rieron.

;;---;;

Jimin y Yoongi tenían mucha razón cuando dijeron que Taehyung no aguantaba nada.

Lo único bueno de la situación era que el pelirrojo no se ponía gritón y escandaloso al embriagarse, sino que actuaba de una forma un tanto... curiosa.

-Hay que barrer... y lavar ropa...

-Hyung, hicimos todo eso hace unas horas.

Con sus ojitos somnolientos volteó a ver a Jeongguk quien le veía divertido. Era el único que podía ver a Taehyung en ese estado, pues los demás estaban muy entretenidos jugando Jenga.

Taehyung se asustó un poco con el estruendoso ruido de la torre de ladrillos caerse, y como resultado tomó a Jeongguk de la manga, acercándose.

Taehyung actuaba demasiado adorable estando borracho.

-¿No quieres descansar? ¿Ir a la cama?

La mirada de Taehyung volvió a ver al menor, asintiendo ante la idea.

-Quiero... dulce.

-Tenemos los Kisses.

Taehyung miró hacia los chocolates que estaban en el centro de la mesa.

-Sí...

Jeongguk quería, seriamente, darle un abrazo.

-Tomaré algunos e iremos a tu cuarto, ¿sí?

Y eso hicieron luego de que Taehyung se levantara a duras penas del sofá. Los chicos le vieron raro cuando, luego de tomar una gran cantidad de Kisses, se dirigió con Taehyung a las habitaciones.

¿Por qué no me creyeron cuando les dije que sólo iba a acostarlo en su cama? ¡¿Por quién me toman?!

Jeongguk dejó los dulces en la mesa de noche y por consiguiente, aventó lo menos fuerte posible a Taehyung sobre la cama.

-Fuera zapatos...

Se agachó tomando los cordones de una de las zapatillas y, cuando iba a desatarlos, Taehyung se sentó en la cama, asustando al menor.

-¿Hyung?

-¿Jeongguk se fue ya?

El silencio reinó por un buen rato.

-¿Qué?

Kim boqueó, quería decir algo y no sabía qué.

-Jeongguk.

-¿Qué pasa con él? -preguntó mientras seguía con su tarea de quitarle el calzado al menor.

Un murmuro deprimente le interrumpió:

-Se irá.

Jeongguk hizo una mueca triste, pues la mirada de Taehyung se veía decaída.

-Él debe-

-Él debe volver -completó el mayor-, pero no quiero... que me deje.

-Hey, hey -Jeongguk dejó ir la segunda zapatilla de Taehyung cuando la quitó, acunando de inmediato el rostro del contrario en sus manos-, él no te dejará. Te seguirá pensando, llamando... y extrañando mucho.

Se vieron a los ojos, incluso si el pelirrojo no sabía que estaba hablando con Jeongguk.

-La casa se sentirá vacía.

-Jeongguk espera que tu corazón no se sienta vacío en su ausencia.

El cuerpo de Taehyung se sintió pesado de la nada, provocando que se fuera acostando poco a poco. Jeongguk le ayudó a acomodarse y taparle con una sábana.

-Mañana... debería decirle.

-¿Decirle qué?

Taehyung cerró sus ojos lentamente, abrió su boca y susurró con las pocas energías que le quedaban:

-Lo mucho... que me gusta.

;;♡;;

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