Gi-Cheol se terminó de vestir y vió a Cheonseo que estaba esperando al frente mientras se pintaba los labios con el lapiz labial.
Gi-Cheol la miró y se acercó para darle un beso, Cheonseo lo recibió y lo profundizó, algo que Gi-Cheol lo aceptó con justo, él se apartó y la miró.
- Dame tu nombre, como piensas que vuelva y pregunte por tí? - Dijo como excusa y Cheonseo negó
- No hay nombre - Dijo ella, dando un ultimo beso rápido y abrir la puerta.

Al momento de abrir la puerta Gi-Cheol estaba serio no le gustaba que nadie se rehusará a él, la siguió, en medio del gentío Cheonseo se perdió de su vista, él la buscó bastante tiempo adentro hasta que salió para ver si estaba ahí pero al momento de salir se consiguió sus amigos que lo esperaban.
- Jefe! - Dijo uno de sus amigos emocionados, todos le hicieron una clase alabanza.
- Quien fue la afortunada? - Preguntó uno
- Ya basta! Vámonos - Dijo Gi-Cheol aguantando su risa manteniendo esa expresión estoica, sus amigos dejaron de reírse aunque dos de ellos.
- Jefe, se ve bastante relajado aunque no pensé que se quedaría - Dijo él
- Déjalo también tiene necesidades - Lo defendió el otro
- No me iba a quedar, solo qué, una mujer me hizo quedarme y, fue todo lo que esperé - Dijo Gi-Cheol empezando a irse con sus amigos...

Al día siguiente Gi-Cheol se vistió para irse con su banda a la casa de Kanemoto iban a estar con él para hacer nuevos negocios y aparte que conocería al sucesor de Kanemoto.

Cuando el llega a su casa rápidamente la recibe una sirvienta, Gi-Cheol ve como se va y de inmediato viene Kanemoto
- Aah ya llegaste - Dijo Kanemoto revisando su reloj
Ellos terminan conversando sobre sus negocios y en un momento Gi-Cheol decide ir a contestar una llamada, sintió como alguien llegó a la casa de Kanemoto, el colgó la llamada y al volver, ve una joven presentarse, tenía ropa de colegio, era alta con una cola, a pesar de su respetuosa presentación no sonreía.
Gi-Cheol de pronto se le hace parecido ese cabello, decide caminar hacia allá, Kanemoto lo presenta mientras está joven se voltea y mira a Gi-Cheol, ella hace una referencia de 90 grados y vuelve arriba con una pequeña sonrisa.
- Es una placer conocer al Cartel de Gangnam mi abuelo está más que complacido contigo, espero que cuando también tome el mando me complazcas mucho mejor que a él - Se presentó Cheonseo sonriendo dándole esa pequeña insinuación a Gi-Cheol
que a pesar de su expresión fría, estaba sorprendido de ver quién era realmente la chica de anoche.
- Es un placer conocer a la sucesora de Kanemoto, Cheonseo - Dijo Gi-cheol entonces mirándola con su uniforme escolar. 

"Que puta broma es esta"- Pensó Gi-Cheol pero al ver a Kanemoto tan orgulloso de ella supo que no tenía que ver, sin embargo al verla a ella vio una pequeña mirada, esa mirada.
"Quieres ver algo audaz?" - Recordó sus palabras del día anterior...

Cheonseo se fue de ahí al jardín, ese momento siente un jalón de brazos de Gi-Cheol
- Que puta broma es esta? - Preguntó Gi-Cheol
- Broma? - Dijo Cheonseo
- Yo no juego niña! Sea lo que sea que fue tú actuación de ayer no volverá a pasar - Por un momento Gi-Cheol se sintió un estúpido por sentir como ella se había burlado de él.
- No fue una actuación - Dijo Cheonseo
- Mi abuelo no sabe que estuve ahí contigo, yo te vi un día antes de nuestro encuentro en una foto y... Me gustaste - Dijo Cheonseo entonces sonriendo un poco
- Así que fui al lugar, te cogí bien rico y después me fuí - Dijo ella satisfecha, ya que Gi-Cheol aunque no lo quisiera admitir eso lo estaba haciendo estremecer.
- No va a volver a pasar - Contestó él entonces
- No importa ya lo hecho está hecho porqué tú crees que te dejé tan seco ayer? - Dijo Cheonseo sonriendo ampliamente
- Maldita niña caprichosa - Maldijo Gi-cheol, agarrando del brazo a Cheonseo, ella respondió y sonrió
- Gi-Cheol si no te conociera diría que jamás has tenido sexo casual, no es para tanto - Dijo Cheonseo mirando a Gi-cheol a los ojos retándolo.
- Tú abuelo - Dijo Gi-Cheol pero Cheonseo lo interrumpió.
- Mi abuelo qué? Ve entonces dile todo lo que hicimos, dile las veces que grité tu nombre dile todas las cosas sucias que hicimos y dijimos, dile, a ver cuál de los dos le pone la bala en la cabeza - retó Cheonseo.

Gi-Cheol estaba frustrado no sabía si por la forma en que le estaba hablando y lo estaba volviendo a hechizar, o porque la verdad no podía decir nada, estaba totalmente metido hasta el fondo.
- Me voy a vengar de tí Cheonseo - Dijo entonces Gi-Cheol
- Intentalo, Hazlo, vamos a ver quién nada - Retó de nuevo Cheonseo
Gi-Cheol se le escapó una risa por las agallas de Cheonseo, literalmente estaba amenazando y apostando con un cártel sin importarle ni un bledo esto.
- Tú abuelo si que te crío bien - Habló Gi-Cheol entonces empezando a soltarla y dejar que fuera, miró como ella caminos hacia adelante sin siquiera voltear ni mostrar una pizca de miedo.

"Me dejé manipular con una colegiala" -Penso Gi-Cheol aunque estaba rechazando la idea de ella, ya que era una niña...

En la noche Gi-Cheol se sentó al lado de Cheonseo
- Cuantos años tienes? - Preguntó ya que Gi-Cheol estaba impresionado por todo lo que le hizo y porque no hablaba como alguien joven
- Cumplí 18... Aunque el barco de la virginidad zarpó hace mucho - Dijo Cheonseo entonces mientras sonrió levemente.
- Bueno, ya pareces una Ganster en donde pones la mira ahí accionas - Habló Gi-Cheol
Cheonseo se rió un poco
- No es mi culpa que fotógrafo halla tomado muy bien esa foto - Susurró y lo miró con una pizca de picardía.
Gi-Cheol agarró su cola de caballo y se la quitó, cayendo su cabello suelto y largo.
- Te ves mejor así... Y no me siento tan culpable cuando estás así - Habló Gi-cheol
- Por qué? Acaso no te acuerdas que también agarraste mi cabello e hiciste cola de caballo con tus manos? - Preguntó Cheonseo, Gi-Cheol evitó su mirada, ya que eso ya tuvo un efecto en él; haciéndole recordar todas las cosas que hizo con ella y que aún sigue siendo candente.
- Ya basta - Susurró Gi-Cheol entonces tratando de detenerla, Cheonseo lo miró de manera fría mientras arreglaba su cabello.
- Claro lo siento - Susurró ella y sonrió de medio lado, Gi-Cheol suspiró la miró, tratando de descubrir porqué le atraia.