Empezamos explorando las inahbitadas tierras orientales. Nos tomó más de medio año cubrir todas las posibilidades por ese lado, estuvimos más tiempo fuera que dentro del refugio, así que me pareció que todo lo que crecieron y cambiaron todos los miembros de mi familia en ese tiempo pasó en un parpadeo.

Pasamos desde tierras tranquilas hasta bosques infestados de demonios, afortunadamente sin ninguna baja o herida grave.
Exploramos hasta el último de los sitios por ese lado sin éxito alguno.
Se llegó a cumplir más de un año desde nuestro escape de Grace Field, y aún así no localizamos nada similar al templo que buscábamos o a las aguas doradas.
Y aún en todo ese tiempo, no tuvimos noticias de nuestros aliados.

En medio del gran problema que esto representaba, fue sumamente fácil ignorar otro tipo de problemas más personales.
Cosas de las que ni siquiera te das cuenta hasta que te las recuerdan.

- Seguiremos con las tierras del oeste, no hay tiempo que perder. ¡No podemos permitir que esto nos desanime!

- Entiendo, pero será mejor que vayas a descansar. Ese último viaje nos tomó toda una semana para regresar, ve a ducharte y a comer

- ¡Pero...!

Le quité el mapa de las manos a Emma, alzándolo sobre mi cabeza cuando ella hizo ademán de querer quitármelo.
Negué suavemente y señalé la puerta.

- Ve a ducharte, tu cabello parece castaño en lugar de anaranjado. Le pediré a Yuugo y Lucas que me ayuden a preparar todo para salir mañana mismo, pero en ese caso tendrás que estar limpia y descansada... ¡Igual que todos!

Alcé la voz al final, mirando a los otros chicos que nos habían acompañado en esta ocasión.
Cómo siempre, Ray también fue con nosotros, pero en esta oportunidad quienes nos acompañaron fueron Oliver, Gillian, Don y Sonia.

Todos parecían tener un poco de motivación para renegar, pero el cansancio en sus cuerpos terminó ganando y obedecieron a mi orden, incluso el par de alfas.
Me parece que Sonia y Don están demasiado cansados como para salir mañana, hablaré después con Emma para discutir quien debería suplirlos.

Mientras todos abandonaban la biblioteca, abrí el mapa que le había quitado a Emma para echar un vistazo a nuestro siguiente destino.

Si seguiremos con las tierras orientales, lo mejor sería empezar desde las más cercanas. Por este lado las distancias no son un problema, pero en su lugar hay otro detalle mucho más grave.

- Un omega gritándole a betas y alfas... Cada vez te pareces más al viejo

- Callate

Hice una mueca cuando Ray llegó a mi lado, apoyando su brazo en mi hombro y quitándome fácilmente el mapa de las manos.

- En verdad estás creciendo, no había tenido tiempo de darme cuenta de eso

- Mira quién lo dice

Ray me acarició el sucio cabello bruscamente, dejándolo aún más desordenado de lo que ya estaba.
Por mi parte, me limité a limpiarle lo mejor que pude una mancha de suciedad del rostro.

Sé que a los alfas la pubertad les empieza a pegar muy pronto y bastante más fuerte que al resto de tipos, pero esto es un poco ridículo.
Ray apenas tiene trece, y está creciendo bastante. Incluso su rostro está cambiando... Pero sigue siendo muy lindo.

- Esto... Es un problema

- ¿También lo notaste?

Me metí entre los brazos de Ray, apoyando mi espalda contra su pecho para poder mirar el mapa que ahora él estaba sosteniendo frente a nosotros.

- Las posibles ubicaciones del agua dorada están bien, pero las del templo...

- Todas son dentro de villas de demonios

Ya sabíamos eso desde mucho antes, cuando marcamos las ubicaciones en el mapa, pero supongo que fue fácil olvidarnos de ese detalle en estos últimos meses.
Suspiré, examinando el mapa con la mirada. No hay manera de evitarlo, si queremos encontrar el templo tendremos que infiltrarnos en las villas del alguna forma.

- Si... Pero está bien, podemos preocuparnos por eso después. La ubicación más cercana es una de las aguas doradas, así que tenemos tiempo para pensar en algo

Ray quitó el mapa de mi vista, me giré hacia él para mirarlo.
Él dejó el objeto a un lado mientras con su mano libre me despejaba el rostro suavemente.

- Por ahora, sigue tu propio consejo y ve a preocuparte un poco por ti. Las duchas están calientes y pronto servirán la cena

- ¿Y qué hay de ti?

Me apoyé contra su pecho, acurrucándome en su calor y aroma.
Ray me acarició la cabeza y me aseguró que haría lo mismo en un momento.

- Antes quiero revisar brevemente las descripciones de villas de demonios que pudimos encontrar en los libros, no tardaré

- Hmmm... Ah, de acuerdo. Pero date prisa

Nos dimos un breve beso antes de que yo me alejara en dirección a la salida de la habitación, sin embargo, me detuve en el marco de la puerta cuando Ray llamó mi nombre.

- ________

- ¿Qué sucede? ¿Quieres ayuda?

Me giré a ver a Ray, apoyándome en el borde de la pared.
Él dudó un momento, pero finalmente lanzó la misma pregunta que me había hecho desde que sucedió lo de Goldy Pond.

- ¿No has tenido... calor?

Era lo mismo, en algún día de las últimas semanas de cada mes sin falta. Y la respuesta, para bien o para mal, siempre era la misma.

- No, y no creo entrar en mi celo pronto

- Está bien, solo revisaba

- ...Iré a ducharme

Entiendo que de alguna forma Ray pregunta por mi celo de una manera indirecta, para no "lastimarme" de alguna forma.
Pero en ese caso, casi preferiría que lo preguntara directamente.

- Y con eso son... Casi tres centímetros más que la última vez, bichito. Yo diría que tú estirón ya terminó de momento, pero sigue siendo...

- Demasiado, ¿Verdad?

Yuugo dejó la cinta métrica a un lado y suspiró con pesar antes de asentir.
Me limité a irme a sentar en un pequeño taburete cercano.

- No te preocupes, es cierto que no es lo más común que los omegas sean muy altos, pero mírame. Le llego a la altura a Lucas

No respondí, entendía que la intención del señor era animarme pero eso solo me ponía a pensar más.
Yuugo estuvo aislado por años, depresivo y con su parte omega prácticamente muerta. No estoy del todo seguro ya que no estuve en ese momento, pero tengo entendido que fue en ese periodo en que el señor se volvió como es ahora.
Más allá de las posibilidades físicas comunes de un omega.

En ese caso, la deducción lógica que eso me deja no es demasiado alentadora.

- Bueno... Supongo que es un poco divertido poder hacerle algo de competencia a Ray en la altura

- Eso es

Yuugo me acarició el húmedo cabello, sonriendo con alivio.
Le regresé la sonrisa alegremente.

Está bien, incluso si ya no soy un omega del todo normal. Todo está bien.
Ahora mismo, las prioridades son otras, ya tendré tiempo de preocuparme por esas cosas después.

- ¿Puedo dormir con ustedes hoy? Me parece que Ray se quedará en la biblioteca hasta tarde

- ¿No estás mayor para eso?

- Tengo trece... Bueno, tal vez si sea un poco mayor

- ... ¿Sabes qué? Olvidémonos de eso, ustedes niños actuaron tanto tiempo como adultos que se merecen una libertad así de vez en cuando

Asentí, feliz de que Yuugo aceptara.
Puede que sea un pedido infantil, pero realmente me gusta.
Nunca se lo diría en voz alta, pero el señor Yuugo es lo más parecido a un padre o una madre que he tenido.
Isabella me cuidaba, pero no la quería de esta forma.

Y con Yuugo y Lucas... En verdad se termina de completar toda nuestra familia.

La primera expedición en tierras orientales fue un completo fracaso al igual que las anteriores, y no pudimos posponer por más tiempo más expediciones dentro de villas de demonios.

Nigel y Gillian, junto con Sonia, nos facilitaron unas máscaras de demonios hechas a mano para las expediciones en estos sitios.
Yo ayudé también, colaborando para la materia prima con los cráneos, pieles y plumas que quedaban de mis cacerías.

Esos lugares eran... curiosos cuando menos.
Había niños, y mujeres (demonios por supuesto). Ancianos, enfermos... Y enormes guardias demonio, mercados llenos de comercios con partes humanas.
Eran lugares con conductas familiarmente humanas, pero no lo suficientes como para despertarme una gran simpatía.
Seguían siendo demonios, y por causa de cada uno de ellos, desde cada niño hasta cada anciano, era que nosotros habíamos sido criados en una mentira en la cual también estábamos originalmente destinados a morir.

- Oye, vamos

Escuché un muy suave susurro a mi lado al mismo tiempo que sentí un pequeño empujón en mi hombro.
Miré por unos segundos más el puesto que ofrecía grandes frascos llenos de pequeñas extremidades humanas en conserva, antes de agachar la visita tras la máscara de demonio que cubría mi rostro y seguir a Ray y a los demás.

Estás ropas dan calor, pero no hay otra opción.
Si no vamos totalmente cubiertos nos descubrirán fácilmente... como en el viaje anterior.
El idiota de Don se dejó ver los tobillos por un instante y casi nos atrapan por culpa de un demonio que lo vio.
Afortunadamente el demonio era solo un mocoso, así que nadie le hizo mucho caso al decir que había visto unos "pies chistosos".

Al menos esa vez él riesgo valió la pena, en ese viaje logramos encontrar el agua dorada.
Espero que tengamos la misma suerte ahora.

En esta ocasión, quienes íbamos éramos los de siempre. Únicamente cambiamos cuando alguno estaba herido o demasiado agotado.
Zack iba con Emma a la cabeza, marcandonos el paso de hacia dónde debíamos ir.
Don, Gilda y Violet iban en el medio, mientras que Ray y yo íbamos últimos, supuestamente cuidando que nadie nos fuera a seguir.

Caminamos hasta las afueras de la villa, dónde nos detuvimos de golpe cuando Emma nos señaló una llamativa construcción que se elevaba varios metros frente a nosotros.

- ¡Es aquí! Es el templo que vi en Cuvitidala

Don y Gilda se pusieron a festejar, pero Violet los hizo callar de inmediato.
No debería de haber demonios lo suficientemente cerca como para escucharnos, pero aún así era mejor prevenir.
Zack nos señaló que, más adelante en el largo sendero de piedra que llevaba hasta el templo, parecía haber alguien.

No teníamos motivo alguno para esperar si Emma ya nos había confirmado que esta era la ubicación que tanto habíamos buscado estos últimos meses, así que me limité a decirles a todos que guardaran silencio y reanudamos la marcha.
El tipo en el sendero resultó ser una especie de demonio anciano que parecía estar alimentando unos curiosos y pequeños pájaros de un solo ojos.

Pasamos a su lado sin siquiera mirarlo, siguiendo el sendero hasta llegar al templo.
Se veía más pequeño de cerca, y lo más llamativo de su construcción era que había seis pequeñas torres huecas, todas con una puerta rejada que permitía ver su interior.
Nos separamos para examinar el lugar rápidamente, las que yo vi parecían ser una especie de altares extraños, con estatuas y ofrendas tales como lo que parecía ser alcohol, fruta o flores de gupuna.

Emma descubrió que una de las torres tenía una pintura en el techo, así que de inmediato nos mandó a todos a mirar si el resto también tenía pinturas.
6 pinturas diferentes, pero relacionadas.
Y si las imaginabas juntas...

Lo encontramos.

- ¡¿Encontraron el camino para ir allá?!

- ¡Lo hicimos!

El festejo en el refugio fue general.
Todos estaban felices y emocionados, desde los más pequeños hasta el par de adultos.
Al fin, después de tanto tiempo. Por fin estábamos en el camino de nuevo.

- Quedan dos meses, así que aún tenemos tiempo

- Por supuesto que sí

Acaricié la cabeza del pequeño que preguntó eso, él de inmediato se me abrazo con emoción.
Intercambié miradas con Ray, él tampoco podía evitar sonreír... Así como tampoco podía evitar ser realista.

- _____ tiene razón, lo mejor será no celebrar muy pronto... Pero ahora podemos ir al lugar del día y la noche para rehacer la promesa

Estuvimos atascados tantos meses, pero de repente habíamos dado un salto enorme en nuestro plan.
Un movimiento más, tan sólo teníamos que rehacer la promesa y tendríamos un mundo nuevo y seguro a nuestro alcance.

- Es verdad que no sería bueno celebrar antes de tiempo, pero aunque sea todos se merecen una gran cena por su esfuerzo

- ¡Si!

Los pequeños (y varios de los mayores también) apoyaron con emoción la gentil propuesta de Lucas.
Él me miró con esa calida tranquilidad característica de él y me preguntó si teníamos algo de carne de sobra.

- Hmm, déjame pensar... ¡Sí! Si no mal recuerdo dejamos en conserva una muy buena parte de carne de ese gran caballo raro de hace unos días. Aún debería haber bastante en buen estado como para un pequeño banquete... Si nuestro cocinero estrella está de acuerdo, claro

Miré a mi alfa, desviando intencionalmente la atención de todos hacia él.
Intentó oponer algo de resistencia por un momento, pero terminó bufando y resignandose.

- Si nuestro proveedor estrella lo acepta... Entonces supongo que está bien

Sentí un poco de vergüenza cuando Ray me llamó de esa forma, pero vale la pena con tal de tener la promesa de una maravillosa cena para hoy.

- ¡Todos! ¡CORRAN! ¡AHORA!

Fue increíble lo repentinamente rápido que la alegre y emocionada energía del lugar se rompió en el momento en que Pepe entró al comedor de golpe, claramente acelerado y jadeando.

- ¡Es el enemigo! ¡Está aquí!

~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~

Perdón por lo apresurado que seguramente se siente este capítulo pero es que a partir de aquí se viene todo el descontrol y a mí me llama el ✨desmadre✨ así que ya me urgía llegar ahí.
Prepárense porque la siguiente actualización vendrá con todo.