— Mi madre quiere conocerte.

Chan pausó el juego, por suerte Felix eligió el momento de hablarle cuando estaba fuera de Stream y en el modo entrenamiento, por lo que se permitió mirarlo y parpadear.

— ¿Qué? — le preguntó con una expresión confusa.

— Mi madre, Chan, quiere verte.

— Eres amigo de Jeongin hace mil años, ella sabe quien soy.

Felix rodó los ojos y suspiró.

— Pero ella no te conoce como mi novio oficial, solo sabe que eres él hermano nerd de Jeongin.

— Oh, gracias.

— Chan — chilló sentándose en su regazo, Chan lo recibió felizmente. No lo dirá nunca, pero ama que Felix lo use de asiento —. No seas así, mi madre sabe de ti lo poco que yo sabía de ti antes de salir. Cuando le dije que somos novios hace unas semanas pidió verte, ¡Vamos, será lindo!

— Mhm — asintió él menor —. De acuerdo.

— ¡Si! — saltó emocionado y poniéndose de pie —. Y a mi padre también.

— Espera, acepté ver a tu madre primero.

Felix notó el miedo en su tonito de voz, sabía perfectamente el pánico de Chan por aquel hombre. Sus padres están separados hace años, así que Chan creyó que los conocería en distintas ocasiones y todavía no estaba mentalmente listo para los dos a la vez.

— Mi padre se lleva bien con mamá, sólo será una cena para la bienvenida a la familia.

— ¿Bienvenida a la familia? — sonrió con ternura.

Felix asintió tímidamente, jugando con sus manos y mangas del suéter blanco.

— Sí, eres mi novio.

Chan dejó su lugar en su silla para ponerse de pie, en estos momentos sentía un inmenso cariño por Felix. Más allá de todo, él era feliz a su lado. Si tendría que enfrentar a su madre y padre lo haría, Felix le daba la fuerza para demostrarles que lo quiere demasiado.

Rodeó la cintura de su novio con sus brazos y viendo cierto brillo en los ojos de Felix, fue acercándose para dejar un besito en su frente. Felix los llamaba "besitos de amor" porque según él, esa muestra de cariño era mejor que cualquier otra.

— No me creo que seas mi novio — le confesó Chan en una voz ronca y baja.

— Ni yo — admitió Felix —. No creí que terminaría así contigo, yo sólo quería saber-

Se quedó callado y Chan levantó una ceja, mirándolo ahora con una pregunta en los ojos.

— ¿Qué? — Chan ladeó la cabeza —. Felix, ¿Qué querías saber?

— Uh.

Atrapado.

¿Cómo decir esto sin sentirse un idiota?

— Ah, se me quema el arroz.

— No hay ningún arroz, ni siquiera es hora de la cena aún.

— Bueno, entonces debo ir a hacerlo ya así cenamos temprano, mañana tienes otro evento, ¿No? No habrá tiempo.

— Felix — le dijo de forma firme, no permitiendo que se le escape de sus brazos —. Lo he pensado, créeme. Nunca creí que me hicieras caso, siempre me gustaste pero yo a ti no hasta que un día todo cambió, ¿Por qué?

Felix no quería verlo a los ojos ahora. En su lugar, intentó poner alguna excusa y retirarse sin decir algo tonto. Conocía muy bien a Chan ahora, decirle la verdad podría herirlo de alguna forma y Felix no quería hacerlo.

— Maldita sea, ¿Están cogiendo? ¡Paren que ya llegué!

— ¿Le diste las llaves a Jeongin, Felix?

— Uh, sí, por emergencias.

— ¡Chicos!

— Me voy — se soltó del agarre de él menor y fue casi corriendo a su salvador, viendo a Jeongin con una felicidad enorme.

Chan necesitaba una buena respuesta y esperaba no decepcionarse.