En contraste con el caluroso y soleado día del continente de Brozodia, el cielo en la capital de Alveria estaba tapizado totalmente por una densa capa de nubes grisáceas. Las gotas de agua caían con cierta mesura hasta golpear el suelo y deshacerse en minúsculos charcos que se filtraban por las coladeras de las calles.

La inofensiva llovizna era acompañada por una agradable corriente de aire helada, que producía una mezcla de escalofríos y placer al golpear la piel de los ciudadanos.

Para la suerte de Aggron, la lluvia había conseguido apaciguar el flamante calor de la arena en la que hendia sus pies; estaba ahí, en la playa, viendo como todos los barcos eran anclados nuevamente al pequeño muelle.

Las gotas comenzaron a deslizarse por sus anteojos, el pokemon parpadeo antes de tomarlos cuidadosamente y retirarlos.

"Tsk... Que molestas son las temporadas de lluvia" se quejó.

Aggron prendió su teléfono y bajó la cabeza, tratando de que las gotas de agua no salpicaran la pantalla; lo que vio consiguió despertar su atención.

— Nave del país de Alveria se ve consumida por las poderosas olas del océano tras adentrarse en una poderosa tormenta que se extendio a lo largo de todo el océano que separa al continente con la nación de Brozodia...

Presuntos muertos, los hermanos Scizor y Primarina de los red gammas. Publicado hace 1 hora —

Levantó su cabeza y lanzó una mirada perdida hacia el nublado cielo, su rostro se ensombrecio totalmente.

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Suspiro.

— Han estado pasando tantas cosas... Sea como sea debo de enfocarme en lo que termine descubriendo — El pokemon siguió caminando sobre la húmeda arena, enterrando su pesado cuerpo con cada paso que daba, se veía forzado a luchar para desprenderse de la superficie que lo succionaba.

— Oye compañero — Levantó su mano para llamar la atención de uno de los encargados del muelle...

Un nidoking con una boina inglesa de un color beige algo oxidado, las costuras se desprendían desde cada esquina evidenciando su poco cuidado... El cuerno frontal del pokemon sobresalía de la misma.

— Muy buenos días caballero... ¿Que se le ofrece? — extendió su mano con amabilidad, Aggron correspondió entrelazando sus dedos con el.

— Hola... Quisiera saber si hay algún barco que viaje hacia Brozodia hoy... Me urge llegar, es algo de suma importancia —

Nidoking negó con la cabeza un par de veces.

— Lo siento compañero, después de la noticia que salió esta mañana se prohibió que los barcos circularán hasta que acabe la lluvia.

Se que esto es solamente una pequeña llovizna, pero no se sabe cómo puede estar en el mar abierto — Nidoking tomo su boina y la ajusto sobre su cabeza. — Además, creo que no tenemos infraestructura necesaria para barcos que soporten el peso de pokemon de tipo acero, me temo que tampoco puedo ayudarte —

— No se preocupe, gracias por la información — respondió con un tono forzado.

— Claro que sí compañero, estamos para servirle — Una vez más, el pokemon tomó su boina desde la parte frontal y la levantó en señal de cortesía, posteriormente se dio la media vuelta y se fue.

Comenzó a frotar sus dientes entre ellos, produciendo leves estridencias con el rose de sus colmillos... Todo mientras apretaba sus puños para evidenciar su estado actual, estaba desesperado por escapar de aquel conflicto en el que se había metido... La ansiedad carcomia su coraza por dentro, no había forma alguna de testificar en contra del traidor sin comprometer la vida y seguridad de la pequeña hija adoptiva de Gallade.

— No entiendo... ¿Como fue que supieron que Gallade los descubriría? Eso ya lo tenían preparado — susurro.

— Pues fue más sencillo de lo que parece —

Los ojos de Aggron se abrieron como platos al darse cuenta de que alguien lo había escuchado y que este no sólo se limitó a tomar sus palabras por algún casual, pues se molesto en responder y eso es porque conocía el contexto.

Giro un poco su cabeza, torciendo la cadera para no tener que darse totalmente la vuelta debido a la fatiga que esto le producía gracias a la arena... Ahí estaba, aquel pokemon de tipo siniestro frente a él... Sentado en una pequeña colina de arena con los pies cruzados uno sobre el otro y sus manos se apoyaban en la incomoda superficie.

— Greninja... ¡¿Tu eres el famoso pokemon?! —

— ¿Ah? ¿Ya me conocías? — pregunto con sarcasmo.

Aggron sabía que no conseguiría nada con sobresaltarse, era un pokemon que había sido influenciado por Blaziken en tantos aspectos que su personalidad se asemejaba a la de su mejor amigo... Dejando de lado esa forma de actuar compulsiva, Aggron no era alguien que fácilmente soportará la presión o no evidenciara su ira por medio del lenguaje corporal.

— Blaziken me habló sobre ti, dice que siempre vienes acompañado de un Incineroar y que ya tuvo que lidiar contigo y tu compañero en un par de ocasiones — Relajo su voz.

— Ya veo... Entonces sabes que Blaziken, el presunto luchador más fuerte de Brozodia fue incapaz de vencer al trabajo en conjunto de mi compañero y yo... Entonces evitarás hacerte el héroe y enfrentarme.

¿De acuerdo? — Greninja se puso de pie.

— De acuerdo, vas a seguir mis instrucciones.

Te vas a quedar aquí sentado, va a pasar un barco dentro de 25 minutos... Obviamente no tiene permiso así que te vas a subir lo mas rápido que puedas antes de que alguien lo reporte y llame a los guardias.

El barco va a navegar hasta Brozodia... Y para que no se te ocurra hacer algo, estarás siendo vigilado por un pokemon de tipo agua que estará nadando en el fondo del mar mientras le da seguimiento al barco, el tiene una cámara con transmisión en vivo a una de nuestras computadoras, así que no pienses en hacer algo estúpido —

— ¿Algo más? — Aggron arqueo las cejas.

— No, eso es todo... Recuerda, no hagas ninguna estupidez porque de lo contrario esa pequeña va a pagar con su vida, se prudente. ¿Quieres? —

Luego de lanzar su pregunta retórica cómo un dardo certero contra la moral de Aggron, Greninja desapareció del escenario en tan solo un abrir y cerrar de ojos, hizo principal hincapié en la pequeña involucrada porque estaba consciente de que aquel científico tenía una familia; tenia esposa, hijos e hijas y fácilmente podía identificarse con Gallade, Aggron no se podía imaginar a si mismo teniendo una vida plena y en paz tras verse involucrado en la muerte de una pequeña inocente.

Se dio la media vuelta y camino hacia el muelle, lanzando alguna que otra mirada ocasional para tratar de identificar al objetivo que supuestamente lo estaría vigilando... como era de esperarse, esta declaración por parte de Greninja fue falsa, no tenían a ningún pokemon aliado excluyéndolo a él que formara parte de la clasificación de los tipo agua, pero eso era algo que Aggron desconocía y aprovecho para delimitar sus acciones y restringirlo usando la paranoia y el miedo como un medio.

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Casi al mismo tiempo que salió el sol, Gallade ya se había puesto de pie y las manos en obra para hacer las labores de la casa, tales como barrer, trapear, escombrar, etc. Después de una larga jornada de tareas domésticas, el pokemon se recostó en el sofá de la sala para ver la televisión.

Sus piernas cruzadas, una por encima de la otra dibujando una escuadra con las susodichas, su cabeza siendo recargada y casi hendida en las almohadas del sofá... y sus brazos extendidos y casi totalmente apagados, desperdigados sobre su torso y los cojines como si se trataran de un par de piezas inertes y sin vida. Igualmente se podían apreciar otros atributos en el resto de su cuerpo, atributos dignos para alguien rezagado en todo sentido, tanto mental como físico, se podían apreciar un par de bolsas pesadas por debajo de sus ojos, las mismas decoloraban el tono natural de Gallade y le otorgaban un degradado oscuro, como si tuviera sombras materializándose por debajo de sus arrugados ojos.

Parpadeo con cierta pesadez antes de presionar el gran botón rojo del control remoto para encender la televisión.

"No tenemos ningún otro reporte sobre los desaparecidos, lo único que se ha podido testificar sobre ellos es que viajaban en un barco antes de que este fuera consumido por la tormenta... Según la información que se nos proporcionó, ambos iban acompañados de un pokemon de tipo agua... más precisamente Primarina de los red gammas, por lo que no podemos descartar la posibilidad de que sobrevivieran"

- ¿Uh? – Al escuchar aquel apodo característico de sus compañeros provenientes de Brozodia, los ojos de Gallade rápidamente se dilataron y abrieron; el pokemon tomo el control de la televisión con firmeza de forma casi instintiva y no se tardó en subir el volumen del televisor a todo lo que daba.

"- ¿Qué opinas de todo lo que paso? Alcremie...

"- Pues yo pienso que es muy impactante, pero no solo esto... todo lo que ha sucedido en Alveria recientemente, también tenemos la noticia de la traición de Sableye a la nación luego de que un científico Aggron descubriera que este se dio a la fuga y rapto a la dama de compañía de la princesa y el representante del rey de Brozodia... Lucario, el cual desapareció misteriosamente y la opinión publica responsabiliza precisamente a Sableye de la ausencia del pokemon. No olvidemos que se pretendía que Gardevoir y Lucario se casaran para unificar ambas naciones, ¿Qué ganaría el idiota de Sableye con esto? ¿Acaso se pone en contra de su propia gente? Lo único que sabemos es que Alveria es un desastre"

Gallade estaba consciente de todo lo que pasaba a su alrededor... poco después de que Lucario había sido engañado y posteriormente secuestrado por inferencia de la colmena en la nación, Aggron no tardo en revelar que Sableye había secuestrado a Lopunny, por lo que la propia princesa perdió su tranquilidad y su estabilidad mental al estar consciente de que la vida de su amiga estaba en riesgo... Aegislash estaba tranquilo, porque toda aquella situación le favorecía para desviar la atención y enfocar las investigaciones en Sableye, tenía más tiempo para concretar sus maquiavélicos planes por el margen que consiguió con aquel secuestro... evidentemente no sabía que era falso, pero independientemente de aquello, le beneficiaba a todo el movimiento insurgente de Brozodia... Pasaron varios días y Lucario no llegaba, por lo que todos lo asociaron con Sableye, al menos dentro del castillo... El hecho de que el pokemon hubiera amenazado directamente a Charizard con empalarlo no le ayudo a su ya de por si retorcida imagen.

- Todo es un desastre... Lopunny secuestrada, Sableye un traidor... Lucario desaparecido, Aegislash es un traidor también y solamente yo estoy consciente de eso, Litten y Audino como rehenes en otro país...Ahora los hermanos Scizor y Primarina desaparecieron, presuntos muertos ¿Qué se supone que debo hacer? –

Lanzo una mirada hacia el suelo, su mirada se ensombreció totalmente, demasiada información para procesar... y aun así, tenía el presentimiento de que todos esos sucesos estaban ligados, pues todo comenzó cuando descubrió la traición de Aegislash, fue a partir de ahí que las cosas fueron de mal en peor... en su mente solo podía representar lo que acontecía con unas fichas de dominó... la pieza más pequeña e insignificante, la más aislada de todas inclinándose por una pequeña corriente de viento y desplomándose... el plástico chocando entre sí, provocando una oleada gradual de perdición y desastre inminente, inexorable... todas las fichas fueron derribadas dentro de su mente.

No soportaba la idea de perder a la pequeña que había adoptado, porque en el fondo se identificaba con ella, era como verse a sí mismo proyectado en otra persona, una persona a la que no podía abandonar, nadie tenía porque atravesar por el mismo martirio que el sufrió, sin padres y sin madres, sin una educación o alguien que enseñara modales, valores, nadie que tomara la regadera para que la planta creciera... Comenzó a forzar su rostro para estrujar y estremecer sus dientes, cerrar ambos puños con una fuerza abrumadora... las venas se marcaban en todo su cuerpo.

- ¡¿Qué se supone que debo hacer? - Exclamo entre dientes... su percepción había cambiado completamente, estaba tan inmerso en sus pensamientos negativos que de pronto dejo de escuchar las bocinas de la tele y toda su visión se distorsiono, al punto de que no podía distinguir nada que no fuera una fuente de luz.

De pronto, algo lo hizo reaccionar... Un par de golpes resonando desde la puerta principal que conducía a la sala, la visión del pokemon se aclaró después de parpadear un par de veces.

- ¿Si? ¿Quién es? –

Gallade no tardo en ponerse de pie para caminar hacia la susodicha puerta de madera blanca, giro el picaporte dorado con su mano derecha y empujo la puerta hacia afuera con la precaución de que esta no fuera a golpear a los pokemon que estaban esperándolo del otro lado.

- Oh... Chesnaught, ¿Qué es lo que haces aquí? –

- ¿Acaso ya lo olvidaste? Todos estamos en una misión de investigación para seguirle el rastro a Sableye y a Lopunny... Lo más probable es que Lucario también haya desaparecido buscándolos o por obra de ese traidor.

Cuando lo encontremos, ayúdame a reventarle la cabeza... ¿Vale? – Chesnaught levanto su puño en alto al terminar aquella oración. Los pokemon realmente ignoraban el hecho de que Lucario había desaparecido mucho antes de que Sableye decidiera incriminarse para escapar del país en compañía de la doncella... y a ninguno de los aliados del reino se les ocurrió atribuir aquel desastre en el salón del castillo a la desaparición de Lucario... después de que todos sospecharan injustificadamente de Sableye, el crimen de los daños colaterales al castillo se le inculparon a una banda de vándalos sin identificar y naturalmente se percataron de la ausencia de Lucario unos días después de que Sableye abandonara la nación.

- No, no sabía que estaban en una misión de investigación para encontrar el paradero de Sableye, jamás se nos informó nada.

Además, ¿Cómo podríamos encontrarla si ni siquiera tenemos pistas de que pudo haber sucedido con ella? –

Chesnaught abrió el puño y mostro únicamente su dedo índice, nuevamente en alto.

- Sobre eso... Según lo que Aggron testifico, los vio escapar en un gigantesco galeón de madera después de que comenzara a sospechar de Sableye por ciertos motivos personales... Como todos – Chesnaught negó con su cabeza un par de veces. - ¡Pero ese no es el punto, el punto es que si escapo en un barco, deberíamos tener un registro del mismo.... Es decir, todos los barcos que entran en el país están registrados, pero revisando los expedientes nos dimos cuenta que desde que Sableye apareció aquí, jamás registro un bote o algo similar.

Eso quiere decir que presto la embarcación a otro pokemon. Si podemos dar con el verdadero propietario del barco, podríamos interrogarlo y ver a donde diablos se dirigió Sableye con el... Para eso deberíamos de identificar no solo expedientes, también tenemos que filtrar el tipo de barco acorde a las características que nos describieron como el color, las dimensiones, que clase de madera se empleó al construirlo, para eso tenemos que preguntarle más cosas a Aggron de todo lo que pudo ver –

Los pokemon también ignoraban que el gigantesco galeón de Sableye había sido robado de manos de unos piratas y que el susodicho posteriormente compro, el barco ni siquiera estaba registrado como tal... ya que dicha embarcación pertenecía a un grupo de piratas que en aquel tiempo era muy celebre por robar todo lo que se cruzara frente a ellos, eso incluía la gigantesca nave que fue reportada como robada pocas semanas después de que los piratas se apropiaran de ella... ignoraban el hecho de que no había ningún registro de aquel barco y todos los que fueran similares no corresponderían o tendrían cohesión con el bandido que buscaban.

- Pues bueno, lo que dices tiene sentido... Pero tampoco sabemos hace cuánto tiempo ingreso el barco al país por primera vez, podría haber sido registrado hace 30 años y no tendríamos forma de saberlo –

Chesnaught nuevamente negó.

- No, porque se pagan impuestos por tener el barco en las aguas del país... Es decir, cada registro por más antiguo que sea, se ve actualizado y se le da seguimiento por medio de las facturas y esas cosas... los barcos registrados que no han pagado sus facturas se consideran como caducados y los expedientes son desechados, además de que al pokemon en cuestión se le impide navegar en las aguas del país hasta que pague sus impuestos.

Si Sableye tenía un barco con el que escapo, debía de estar pagando impuestos quizás por medio de otro pokemon para que se le permitiera transitar o tenerlo en un muelle, si ese es el caso podemos identificar al bote de Sableye en los registros... en consecuencia encontrar al propietario y después interrogarlo para ver si sabe a dónde fue Sableye. Lo tenemos todo cubierto –

- Oye, ¿pero y si robo el barco? –

- ¿De qué hablas? – Chesnaught inclino su cabeza sobre el hombro derecho.

- Si hipotéticamente Sableye hubiera robado el barco, no tendría la necesidad de registrarlo en algún expediente y entonces podría usarlo con total libertad sin que nadie lo supiera.

Conociendo a Sableye lo veo como algo que el haría y ya ha demostrado en varias ocasiones ser mucho más inteligente que todos nosotros, no me imagino a Sableye pretendiendo escapar y dejando pasar por alto algo tan importante como esto –

- Eso es imposible Gallade... El último reporte por el robo de un barco fue hace casi 20 años... es decir, tu y yo probablemente ni existíamos y si estábamos vivos usábamos pañales. No creo que el reporte de robo de hace más de 20 años sea obra de Sableye y después de eso se mejoró muchísimo la seguridad en el país, al menos en lo que respecta a embarcaciones y transporte.

Independientemente de esto, si Sableye hubiera robado un barco hace un par de días... ya tendríamos el reporte del robo –

- Bueno, realmente tiene sentido para mi... Vamos a ver los registros –

- ¡Excelente! – Exclamo chesnaught con euforia, acto seguido emprendieron camino hacia el castillo, no sin antes hacerse cargo de cerrar la puerta detrás de ellos y ponerle llave.

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Mientras tanto en Brozodia, el pequeño grupo conformado por Sableye y sus compañeros ya se había levantado de la cama en aquel hotel y partieron en su misión de reunir información para dar con el paradero de la guardia de Gengar, de Audino y de Litten para rescatarlas... Pichu le había informado a Sableye y al resto que los tenían confinados en un departamento de la misma ciudad donde se hospedaron antes de que consiguiera escapar.

Ya todo el grupo se encontraba en el susodicho apartamento.

- Bien pichu... ¿Estás seguro de que aquí es donde Honchkrow, Banette y Mismagius los tenían retenidos? –

Pichu asintió ante la pregunta del disfrazado Sableye, asomando su cabeza desde uno de los bolsillos de su mochila; el pokemon se había visto obligado a repetir su camuflaje empleado anteriormente, con más razón tenía que estar oculto después de que la noticia sobre la desaparición de los hermanos Scizor y Primarina hiciera eco en los dos países casi vecinos... Nadie podía descubrirlo.

- Si... Aunque este es solamente el Lobby del departamento –

- ¿Crees que podrían haber dejado alguna pista en la habitación donde los tenían retenidos? – Pregunto Lopunny, esta vez pichu negó.

- Realmente lo dudo... Son estúpidos, pero no creo que sean TAN estúpidos, si pasaron por alto lo del teléfono cuando nos secuestraron en Alveria es posible, pero al estar conscientes de esa metida de pata sería lógico intuir que se volvieron mucho más precavidos.

Igual creo que no perdemos nada en echar un vistazo –

Alakazam y Lopunny asintieron casi al mismo tiempo, la chica llevo su mano derecha hacia su cadera.

- Bien, creo que Alakazam y Lucy deberían encargarse de investigar en la habitación donde los retuvieron mientras que Sableye y yo vemos si el recepcionista del apartamento sabe algo... Sableye puede poner dinero en juego y si no, tengo mis poderes para seducirlo –

- ¿Cuál seducción? Tu no seduces ni a un tipo bicho, niña tonta –

- ¡Cállate! – Lopunny golpeo la cabeza de Sableye con su puño en reacción a su broma, sableye no pudo evitar reírse entre dientes mientras sobaba su cabeza.

El grupo rápidamente se dispersó, siendo Alakazam y Lucy los primeros en adelantarse y subir por unas escaleras que se encontraban adyacentes a una pared, justo frente al mostrador donde residía el pokemon encargado... este no era otro aparte de un gigantesco Drapion, el cual rápidamente se alarmo.

- ¡Oigan! ¡Ustedes! ¡No pueden solamente subir! ¡¡TIENEN QUE REGISTRARSE!! – Exclamo totalmente iracundo, golpeando el mostrador con sus dos tenazas gigantes.

- Ehem... -

El pokemon recepcionista giro su cabeza al escuchar que alguien le hablaba, desviando su mirada hacia el respectivo pokemon que interrumpió su momento de cólera... frente a él, yacía una linda Lopunny que lo miraba con ojos seductores, entrecerrados cuidadosamente para darle un aire sensual a su mirada, las pupilas apuntaban al contrario de forma meticulosa.

- Oye lindo... ¿Tienes un minuto que me regales? – no tardo en llevar sus manos a sus orejas, para comenzar a jugar con estas como si se trataran de una deslumbrante cabellera; drapión se ruborizo levemente.

- ¡E-Eh! ¿Qué se le ofrece linda dama? Estoy algo ocupado, no puedo dejar que los pokemon pasen y accedan a las habitaciones sin antes registrarse – Trato de ignorar a Lopunny, lanzando su mirada hacia cualquier otra parte del lobby con una desesperación notoria, Lopunny se enfadó e inflo ambas mejillas.

- ¡Oye! ¡Hazme caso! ¡No soy una cualquiera! –

- Te dije que no seducías ni a un tipo bicho... déjame demostrarte que el poder del dinero es superior al de la belleza, ¡Compañero! – Exclamo Sableye, introduciéndose a la conversación. Drapion nuevamente desvió su mirada hacia donde se encontraba Lopunny, esta vez observando a su llamativo compañero disfrazado.

- ¡¿Qué quieren?! ¿No ven que estoy ocupado? Si vienen a dañar a uno de los residentes o a la infraestructura me va a castigar mi jefe –

- Tú no te apures amigo, yo me encargare de reparar cualquier cosa que esas personas dañen... pero a cambio necesito que me hagas un pequeño favor -

Drapion inclino su cabeza hacia los lados y observo al pokemon misterioso con cierta curiosidad, trataba de examinar su lenguaje corporal para ver si transmitía confianza. Drapion camino lentamente hacia donde estaban los dos contrarios.

- ¿Qué es lo que necesitas o quieres de mí? –

Sableye le dio la espalda a drapion y recargo su espalda sobre el mostrador, coloco su brazo izquierdo por encima de la tabla, apoyándose con el susodicho y su pierna derecha, la cual recargo en la pared... posteriormente torció un poco la cadera para observar al pokemon aun al darle la espalda.

- No es algo complejo, lo único que necesito es que me des toda la información que sepas sobre los pokemon de la habitación... eh... la habitación 5 del segundo piso... si no me equivoco eran un Honchkrow, una Banette desquiciada y una Mismagius –

- Uhhmm... Ya que lo mencionas creo que sí, pero no creo que pueda decirte mucho sobre ellos, solo sé que el Honchkrow y Mismagius estaban bastante peleados, pero esos son problemas que cualquier casado obtiene después de varios años... ¿Uh? –

Drapion se percató de como un bulto se formaba en la mochila de Sableye, justo en la parte del bolsillo más grande; el ya mencionado bulto comenzó a moverse hasta dirigirse al cierre... es ahí donde Pichu asomo su cabeza.

- ¡El miente! Mimikyu (refiriéndose a sableye)... a él le pagaron para quedarse callado, lo sé –

Pichu señalo dramáticamente a Drapion, apuntándole con su dedo índice del brazo derecho mientras que recargaba todo su brazo izquierdo sobre su cintura... esto fue a propósito, pues el drama era indispensable para sus intromisiones como detective, no tardo en ponerse aquella gorra.

Los ojos de Drapion se dilataron hasta extenderse y tomar el tamaño de un par de platos, el sudor se hizo evidente en su rostro.

- ¿Me estás diciendo que tú eres aquel niño que entro por el departamento a manos de esos tontos? – Drapion suspiro pesadamente, deshaciéndose de aquella carga que mantenía sobre su espalda por tratar de disimular sus crímenes y relaciones con el antagonista, Pichu acomodo su gorra con un movimiento determinado.

- Claro que sí, pero como puedes percatarte... logre escapar –

- ¿Podría saber cómo? Ahora que me atraparon, me gustaría deshacerme del morbo que ahora mismo carcome mi cabeza – Pichu asintió en respuesta.

- Pues no fue muy complicado... No tengo control pleno sobre mis descargas, por lo que me es complicado concentrarlas en un ataque que sea preciso, atacar a los secuestradores implicaba lastimar a mis compañeras, pero el único pokemon importante de todos nosotros era Litten, por lo que intuí que tanto a Audino como a mí nos terminarían liberando... No.

Sería tonto asumir eso, no son tan estúpidos como para liberar a dos pokemon que fácilmente podrían delatarlos, por lo que lo que realmente intuí es que nos ejecutarían, pero si algo termino por ser su debilidad fue Banette...

Veras, ella es una... una hembra muy extraña, se ve que tiene varios fetiches sexuales con solo mirarla, lo note porque estaba saboreando a la pobre de Audino con sus feroces y lujuriosos ojos de camino a Brozodia... entonces confiando en su excéntrica forma de actuar, pensé que primero se desharían de mi para que Banette pudiera tener sus fantasías con Audino antes de matarla.

Que Honchkrow me llevara a mí solo fue una ganga... ahí sí puede descargar mi impactrueno sin problemas sobre él y para todo lo demás solo fue necesario escapar usando mi ataque rápido. No tiene ninguna ciencia.

¿Y a ti... ¿Qué piensas que deberíamos hacerte? – La mirada del pokemon se intensifico en gran medida, este entrecerró sus ojos y observo de forma amenazante a Drapion mientras que una aura negra decoraba totalmente su rostro para puntualizar su lúgubre apariencia, Sableye y Lopunny lo observaron con cierto asombro.

- ¡¿Me estas amenazando?! ¡mocoso estúpido! No soy un pokemon cualquiera –

- Ya lo sé... Es por eso que mi escolta se hará cargo de reducirte a cenizas... tenemos a una bella dama que es capaz de ponerte inconsciente de un solo ataque. ¿Verdad Lopunny? –

- Ahora que tengo mi mega piedra, no creo que sea mucho problema golpear a Drapion, ¿Qué hay de ti Sableye? - la susodicha clavo su nudillo derecho sobre su palma opuesta y observo al pokemon disidente con un rostro que imitaba al del pequeño... Sableye no hacia otra cosa aparte de sonreír cínicamente mientras observaba a Lopunny.

- Claro que no linda, ya probamos que eres mucho más sanguinaria que yo. Lo dejo todo en tus manos, además... tu mega evolución reafirma levemente tus glúteos, eso es algo que nadie de aquí se quiere perder –

Drapion se puso a la defensiva, dando un par de pasos hacia atrás y extendiendo sus enormes extremidades para buscar distancia entre él y el mostrador. Lopunny comenzó a tronar sus dedos, provocando pequeñas estridencias que solo conseguían alterar más al pokemon... finalmente cedió.

- Por favor... Está bien, ustedes ganan... ¿Qué es lo que quieren o pretenden obtener de mí? –

De un poderoso salto, pichu ascendió hasta el mostrador tras salir de la mochila, marcando sus pequeñas huellas sobre el mostrador.

- Quiero que nos digas si hay algún pokemon que tenga relación con los insurgentes, alguien que tenga el más mínimo detalle o información... si eres tú el que sabe algo con peso, nos lo vas a hacer saber o nuestra pequeña amiga te va a reducir a cenizas –

- ¡De acuerdo! ¡Pero ya cálmate por favor! – Drapion se alteró más al tener al pequeño roedor tan cerca, por lo que pichu dio un poderoso salto para regresar a la mochila del Sableye encubierto, Lopunny recargo ambos brazos en su cintura.

- No sé mucho, ellos solo me pagaron para que no denunciara el secuestro que vi a las autoridades, después de todo entraron en seco contigo y los otros pokemon amordazados a plena madrugada... -

- No tiene sentido que te pagaran, yo estuve ahí y jamás lo vi – Pichu levanto la voz, provocando que el pokemon nuevamente se alterara.

- ¡Lo hicieron! Después de que los dejaran en el apartamento donde están ahora sus amigos, Honchkrow bajo y me ofreció un jugoso billete del reino de Rankof, el cual tiene un valor aproximado de 1, 000,00 unidades de nuestra moneda local... Le pregunte de dónde saco ese billete que hace que el nuestro palidezca por su devaluación, solo menciono que tenían una empresa extranjera y que después de invertir en tantos proyectos finalmente habían comenzado a tener ganancias leves para cumplir sus objetivos... Ahora que lo pienso, eso explica porque cargaban con una botella de vino de la marca de Dragalge & Pasión que es una marca ridículamente cara, dijo que le enviaba suministros a su amigo que es adicto al alcohol en cuanto le pregunte por la botella

Sin embargo me resistí, les dije que no me iban a comprar con un billete extranjero por mas bueno que fuera el trueque, finalmente exclamo que con el mismo pago consiguieron doblegar al más recto de todos los funcionarios de nuestro gobierno, que yo solo sería un juego para niños pequeños y después de insistir un par de minutos termine aceptando el pago.

Por favor, es todo lo que se... no le digas a tu amiga caliente que me reviente –

Los pokemon no tardaron en verse inmersos en sus pensamientos, buscando dentro de sus mentes alguna idea o noción de quien podría ser considerado el más recto de los funcionarios... A Lopunny se le prendió el foco sin mucha dilación.

- ¿Recuerdan al pokemon que tuvo que registrar nuestro barco en el país? Se veía muy noble y decidido a ser un ciudadano ejemplar, incluso tuve que batallar con él para ofrecerle un pago razonable, apelando a su familia para lograrlo.

Aparentemente ese Krookodile es muy justo, pero no hay alguien en esta tierra que sea imbatible –