Ante el desconcierto propagado por la imprevista fuga de los prisioneros del castillo, todos los guardias se pusieron en una alerta roja. El castillo estaba plagado de vigilantes y patrullas que inspeccionaban a lo largo y ancho cada esquina y cada comisura del castillo, procurando inspeccionar todo lo que sus ojos lograran percibir. Era un hecho que los prisioneros habían escapado, ya no se trataba solamente de una de las sucias jugarretas de la maestra de las ilusiones que residía en el calabozo.

Lopunny se encontraba reposando en sus gloriosos aposentos, totalmente relajada y perdida en el mundo de sus inverosímiles sueños. Todo aparentaba ir de maravilla... La joven soñando con el amor de su vida, su príncipe azul, el hombre que anhelaba desde lo mas profundo de su ambicioso corazón. Como era de esperarse, este pokemon se mantenía en el anonimato, pero una sonrisa se dibujaba en el rostro de la doncella mientras dormía pacíficamente.

Pero sin invitación alguna, se comenzaron a evidenciar las pruebas de que los guardias y vigilantes del castillo estaban trabajando, pues se podía percibir como estos caminaban, corrían, charlaban entre si respecto al caso y como examinaban todo lo que se encontrara alrededor de ellos. La sonrisa de la inconsciente Lopunny fue sustituida por un gesto de incomodidad donde arrugaba su rostro como si estuviera a punto de soltar un potente estornudo. La chica abrió sus ojos y apoyándose con sus manos, se inclino hacia adelante para encontrarse con una nada grata sorpresa.

Frente a ella se encontraban ambos hermanos scizor, quienes aparentemente habían allanado su habitación. Ambos hermanos sonrieron de forma forzada mientras saludaban moviendo sus pinzas de izquierda a derecha, sus nervios eran mas que irrebatibles.

- ¡¿Q-Que significa esto?! ¡¿P-POR QUE COÑO ESTAN EN MI HABITACION?! – Las mejillas de Lopunny rápidamente se dibujaron de un color carmesí y la joven tomo sus cobijas con ambas manos para esconderse. Sus cejas se arquearon hacia abajo y su expresión se arrugo, dando a entender que estaba furiosa.

Los ojos de los dos hermanos se extendieron como si fueran platos y el sudor comenzó a correr por sus frentes, era una escena extremadamente incomoda.

- P-Por favor permítame explicarle señorita Lopunny... L-Los prisioneros escaparon y podrían estar refugiándose en cualquier lugar. El rey en persona nos ordenó que revisáramos cada rincón del castillo y eso incluía la habitación de la princesa -

Tras haber esclarecido las dudas de Lopunny, la doncella se aquieto un poco y sus manos dejaron de sujetar aquel cobertor que ocultaba su cuerpo con el cobertor. Con un poco de dificultades de por medio provocadas mas que nada por el sueño, la joven se retiró a si misma de la cama provocando una anarquía de cobijas y sabanas, todo por la curiosidad de ver que estaba sucediendo.

- Entiendo, pero mínimo debieron de haber tocado la puerta o me hubieran avisado. No es correcto entrar así a la habitación de una dama... Imagínense que me hubieran agarrado en uno de mis momentos de intimidad – Lopunny negó con la cabeza – como sea... si tienen trabajo que hacer mejor me retiro –

Y dicho esto, Lopunny ignoro la incomoda presencia de los hermanos scizor y atravesó la puerta de su habitación que conducía a uno de los pasillos del castillo. Coloco su mano derecha sobre su cabeza en reacción al cegador destello de la luz, pues recién estaba despertando de su letargo y esta la molestaba... Su rostro se arrugo mientras se quedaba de pie a medio pasillo, obstruyendo el paso de los guardias y los trabajadores que exhaustivamente buscaban a los prófugos.

En eso, una sarcástica y conocida voz interrumpió a la jovencita quien se encontraba luchando contra las incomodidades que le brindaban su falta de sueño.

- Debes de tener a los guardias muy asustados como para que no quieran ni tocar tu puerta –

Lopunny dejo de frotarse los ojos y retiro las manos de su rostro en seco para rodarlos de forma sarcástica, correspondiendo el tono de voz burlón del contrario... Al darse la vuelta pudo corroborar que, en efecto, Sableye se encontraba detrás de ella recargándose en el muro de su habitación con una de sus piernas flexionadas y otra reposando mientras que analizaba e inspeccionaba sus largas y afiladas garras con un cierto aire de indiferencia y vanidad. Al nuevo recluta no le interesaba en lo más mínimo lo que sucedía en el castillo.

- ¿Qué estas haciendo? Zoroark y Weavile se escaparon y todos los guardias están moviéndose... Hasta irrumpieron en mi habitación con tal de encontrarlos o encontrar mínimo una pista de su paradero –

Las joyas de Sableye no contaban con pupilas, pero este pokemon pudo conservar su aire sarcástico y vanidoso sin necesidad de girar o rotar sus ojos. Solo levanto la cabeza y freno en seco su inspección.

- Estoy cuidando mis garras... Tarde o temprano voy a tener que usarlas para destripar la garganta de alguien o algo así... ¿Te cuento un secreto? Garra sombra tiene muchísima mas fuerza si tienes... Valga la redundancia... Unas garras finas y elegantes que le hagan honor y justicia al movimiento. En cuanto una de esas rameras aparezca yo me hare cargo... Los inútiles guardias del castillo solo están para hacer bulto o atraerlas a mi trampa –

Lopunny inclino ligeramente su cabeza hacia la izquierda con cierto desagrado ante el vocabulario de Sableye, pero no podía negar que sentía un interés... peculiar.... Hacia él.

- ¿Rameras? Esa es una palabra un poco fuerte... ¿No lo crees? –

- Lamentablemente es el adjetivo mas preciso que encuentro para dirigirme hacia ellas. Weavile solo era una interesada, por algo nuestro matrimonio únicamente duro un día, porque solo pensaba en dinero... Zoroark, es agua del mismo pozo... Múltiples veces intento seducir a tus guardias de mente débil y como no cayeron en la trampa quedo atrapada como la zorra que es –

Lucario se encontraba caminando por los pasillos, cumpliendo el rol de uno de los encargados del patrullaje por los mismos o eso hasta que su atenta oreja logro captar la curiosa conversación que estaban teniendo Sableye y Lopunny. Le llamo la atención ver como Sableye solo estaba platicando con indiferencia ante la delicada situación, a pesar de que a todos los guardias se les había ordenado explícitamente que colaboraran en el patrullaje. Lucario detuvo su caminata a unos escasos centímetros de los dos individuos.

- Me parece curioso que critiques a las prisioneras. Quiero decir, no es como si tu fueras mejor. Golpeaste sin escrúpulos a una dama al punto de casi ahorcarla... Si... me di cuenta, lo transmitieron en vivo... Después entraste sin permiso al castillo y atacaste a todos en la fiesta de navidad además de que destrozaste el pastel de Audino y robaste la mega piedra de la princesa... No conforme con eso, descubrimos que estabas dirigiendo un sucio negocio donde incluso la hija adoptiva de Gallade se vio involucrada, luego te trasladamos a otra prisión y nos percatamos de que tenías un historial más extenso – Lucario cerro el puño derecho de su mano y comenzó a levantar sus dedos en orden, enumerando todos sus puntos – Homicidios, robos, asaltos, trata de personas... Y lo único que hiciste fue recuperar un estúpido libro para la investigación de los chicos y con todo eso se te ofreció una segunda oportunidad a pesar de tus atrocidades.

¿Y que estas haciendo para agradecerlo? Se te da una orden y en lugar de eso te quedas a platicar como si nada estuviera pasando –

- ¡Lucario tranquilízate! Solamente lo encontré fuera de mi habitación y comenzamos a platicar, de todos modos, está acompañando a los hermanos scizor – Lopunny levanto su voz con firmeza y observo a Lucario como si le estuviera llamando la atención...Sableye como siempre, indiferente.

- La diferencia es que todos los criminales de aquí son solo villanos... No super villanos como yo –

Dijo esto claramente como una burla. Lopunny sonrió forzadamente mientras aspiraba a que las cosas no se pusieran más tensas. Lucario por otra parte, arqueo ambas cejas hacia abajo y observo a Sableye con fuego en sus ojos.

- ¿Y sabes que es curioso? Cuando atrapamos a Weavile y a Zoroark nunca habían mostrado resistencia o alguna oportunidad para escapar... ¡Eso claramente fue antes de que tu llegaras! Por qué comienzas a trabajar con nosotros en el castillo y mágicamente las dos criminales escapan. Estoy comenzando a sospechar que tu estas detrás de todo esto –

De repente, la sonrisa vanidosa de sableye se esfumo de su rostro y fue reemplazada por una expresión que emanaba furia y hostilidad. Lucario correspondió con una mirada similar.

- ¡No me culpes de la incompetencia de tus estúpidos subordinados! El mismo cuento se repitió en el torneo de luchas. Gengar les vio la cara de idiotas y se introdujo al castillo por encima de sus narices. Mi llegada al castillo no influye negativamente en que tan patéticas son sus defensas –

Lopunny se atravesó rápidamente ante los dos contrincantes dándole la espalda a Sableye y la cara a Lucario. Extendió ambas manos como si estuviera protegiendo al que era aparentemente responsable de dicho problema.

- ¡Lucario! ¡Ya basta! – Lucario observo a Lopunny extrañado... La chica que tanto criticaba y detestaba a los criminales de su clase ahora estaba actuando en su defensa. ¿Cómo terminaría todo esto? – Yo se que es algo sospechoso que mágicamente obtuvieran la capacidad para escapar, pero si Sableye fuera realmente una mala persona no me hubiera defendido cuando Blaziken estallo en ira. Quiero decir, una persona realmente trastornada disfrutaría el ver cómo me hacían pedazos, pero el tuvo el valor para defenderme... ¡Además tiene un buen argumento! No es como si las defensas de nuestro castillo fueran excelentes... A cada rato se logran colar – Lopunny se interrumpió a si misma y junto ambas palmas de sus manos mientras lanzaba sus brazos hacia donde se encontraba Lucario.

- Deja que te muestre que él no tiene la culpa. Presunción de inocencia... ¡Es eso! – Exclamo con certeza. La joven estaba dispuesta a defender a Sableye mientras este observaba a Lucario de forma burlona e irónica.

- De acuerdo, pero quiero que sea algo rápido –

Y de esta forma, todos se trasladaron rápidamente hacia el calabozo, el cual no se encontraba muy distante a la habitación. Era evidente que alguien se había introducido al castillo, pues todas las celdas estaban destruidas en su totalidad. Los barrotes que separaban el corredor de las respectivas habitaciones se encontraban dispersos por todo el suelo y los barrotes que se conservaban en su ubicación original evidentemente estaban cortados horizontalmente, casi con un ángulo de inclinación perfecto, pulcro y sin errores.

Sableye realmente no se veía en la necesidad de probar su inocencia en aquel enredoso y tedioso asunto, pero la insistencia de Lopunny lo había orillado a evidenciar el error de Lucario. Ambos personajes tomaron el rol de espectadores detrás de Sableye mientras le otorgaban la libertad y el espacio para examinar toda la escena del crimen. Lucario estaba cruzado de brazos y con una mirada de indiferencia mezclada con sospecha, una actitud bastante heterogénea si es que así se le podía llamar. Lopunny por otra parte, se conservaba nerviosa y neutral... a veces se detenía a pensar dos veces la confianza que le tenia a dicho pokemon de tipo siniestro.

El pokemon de reducida estatura se flexiono sobre sus rodillas agachándose a pocos centímetros del limite entre una de las celdas y el pasillo; sus ojos rojos como la sangre estaban examinando minuciosamente cada comisura y cada sector por mas insignificante que fuera, ¿un escombro suspendido en la tierra? Era bastante importante como para prescindir de él, aparentaba ser bastante curtido en todo lo que hacía.

Con su mano derecha y utilizando solo sus finas garras, Sableye rozo la áspera superficie de los fríos barrotes de metal que habían sido podados por la mitad. Las garras tenían filo suficiente como para desgastar levemente la zona donde se ejerció la fricción, produciendo un sonido insoportable. Lucario y Lopunny inmediatamente llevaron sus manos a sus oídos en reacción.

- Bueno, creo que ya tengo una idea de quien es el responsable... - Esta declaración solo abrió paso a toneladas y toneladas de dudas y morbo. Lopunny dejo de cubrir sus oídos y coloco su mano izquierda sobre su cadera a la vez que empujaba sus orejas hacia atrás con el movimiento de su cabeza, todo de una forma un tanto sensual o provocativa, pero como era de esperarse, la sensualidad en ella era involuntaria.

- ¿Y bien? Di quien fue –

Sableye trago un poco de su saliva para aclarar su garganta antes de esclarecer todas las dudas.

- Honchkrow... O bueno, eso creo yo - Sableye se dio la media vuelta e hizo contacto visual con ambos espectadores quienes lo observaron con mucha intriga mientras este se preparaba para dar su veredicto – Honchkrow era un pokemon que nació aquí en el reino de Alveria, o al menos eso tengo entendido yo.

Entre nosotros hubo una peculiar rivalidad... Pues ya hace más de dos décadas nosotros dos operábamos en el mercado negro. Ya saben, trata de personas, venta de cosas ilegales y de un exagerado valor monetario y eso... Resulta que Honchkrow y yo trabajábamos en sectores bastante cercanos o barrios muy cercanos, por lo que mis negociaciones se veían afectadas porque el se involucraba en ellas directa o indirectamente, ninguno de los dos podíamos progresar y éramos fuerte competencia. No podía vender mega piedras robadas porque él tenía la misma mercancía a precio más económico y tampoco podía secuestrar personas porque el muy hijo de toda su ditto las rescataba únicamente para que yo perdiera potenciales clientes, o en otros casos el robaba mi mercancía para revenderla. El punto es que era un espectáculo, una guerra entre dos mafiosos adinerados de la alta sociedad, el con subordinados y yo con los míos.

Llego un día en el que tuve la iniciativa de acabar con nuestra mórbida rivalidad, por lo que entre a su enorme mansión, intente violar a su esposa, de alguna forma conseguí que sus esbirros se unieran a mi y lo abandonaran y al final hice volar su propiedad privada. Luego de eso lo exhibí públicamente en los medios quizás con un poco de información falsa para empeorar su imagen y el pobre sujeto termino tras las rejas luego de intentar ser empalado múltiples veces por los incivilizados ciudadanos. Después de eso salió la noticia de que supuestamente un Bisharp había ejecutado a su propia esposa y esa fue la gota que derramo el vaso para el pueblo de Alveria, ya estaban prendidos con el tipo siniestro por toda la mala fama que le di a Honchkrow... ¡Ahora probablemente se pregunten como se que fue Honchkrow! –

- ¡Esa es una excelente pregunta! Porque una historia así cualquier tonto se la puede inventar y sospechosamente conoces a la perfección cada plan trazado por los tontos criminales – Interrumpió Lucario. Sableye lo observo detenidamente y posterior a esto continúo hablando.

- Es porque los planes de Gengar son mas que evidentes. Bueno, al parecer no tanto desde los ojos de ciudadanos descerebrados como tú. Creen que todo es miel sobre hojuelas y han vivido en un reino disque pacifico durante dos décadas, por eso no son capaces de sacar conclusiones o deducciones, porque no están acostumbrados a lidiar con esto... ¡Son débiles! – Lucario frunció el ceño y exhibió sus dientes cual feroz depredador, sableye solamente lo estaba provocando y no era lo suficientemente listo como para no ceder a su voluntad. Nuevamente, el tipo siniestro/fantasma reanudo su explicación.

- Estuve trabajando en su contra por mucho tiempo... Las cortadas en esos barrotes están hechas con una precisión impecable y milimétrica... Incluso al ojo mas certero de todos pasaría desapercibido. Pocos movimientos son capaces de hacer un corte tan exageradamente preciso como este, soy capaz de filtrar únicamente 2:

Corte y aire afilado, pero ustedes ya conocen todos mis movimientos y en ninguno de ellos se encuentra el ya mencionado "corte" ... si fue un crimen reciente, es imposible que su servidor fuera el responsable. Ahora bien, Weavile y Zoroark podrían aprender la técnica, pero conozco a las dos y son unas estúpidas de primera – Sableye dio una bocanada de aire – La biología de Weavile la hace incapaz de separar sus dedos o garras, de haber sido ella, tendríamos pedazos de barrote muchísimo más pequeños ya que al hacer el movimiento de corte haces como si estuvieras cortando la parte superior, la parte inferior y la parte del medio respectivamente al verse obligada a ocupar sus 3 garras, pero como pueden ver solo hay pedazos de barrote muy grandes ... Por lo que no hubo un corte que se atravesara por en medio, solo se cortó la parte posterior e inferior de la celda y la biología de Zoroark es bastante semejante a la de Weavile, para ella seria imposible ejecutar un corte como el que estamos viendo. Ninguna de ellas fue la responsable, eso nos deja con una sola opción –

Sableye se quedo en silencio durante un par de segundos, únicamente para añadir un efecto de pausa dramática:

- ¡Lo hizo un tercero! Lógicamente, al ser imposible que ellas escaparan, alguien mas las tuvo que haber liberado y podríamos ir sacando sospechosos del juego.

Ustedes tienen registro de que movimientos aprenden cada uno de sus reclutas y ni necesitan tenerlos, conviven con ellos día a día, pensar o llegar a la conclusión de que el responsable fue uno de los trabajadores del castillo es absurdo, porque no solo no tienen motivos para hacerlo, muchos ni tienen capacidad para aprender los movimientos requeridos para hacer el corte tan preciso de la escena del crimen y los que tienen la capacidad de aprenderlos, o directamente no los conocen o no se encuentran aquí de momento: Aegislash y Gallade podrían ser 2 de los que mas se acercan, pero Gallade y Aegislash no se encuentran aquí, evidentemente ellos no son los responsables. Los hermanos scizor podrían, pero yo he estado todo el turno acompañándolos incluso desde antes del incidente.

No fue ningún recluta o trabajador del castillo... ¡PERO! – Levanto su voz con elegancia – Si sabemos que últimamente han estado atacando al castillo, por dentro, por fuera... Y todos los perpetradores tienen una característica en común: ¡El tipo siniestro! Greninja, Incineroar, Weavile... ¡Incluso yo cuando ataque en la fiesta de navidad! Todos los criminales que han estado encabezando la oleada han sido de tipo siniestro... Y si filtramos, solo hay 3 especies de pokemon capaces de aprender Aire afilado que es otra de nuestras alternativas: Murkrow, Shiftry y sorpresa.... ¡Honchkrow! Además, se necesitaría un pokemon tipo volador para darse rápidamente a la fuga por lo que shiftry queda descartado junto con el movimiento de corte que es muy poco convencional en tipos volador y solo tenemos a dos pokemon de la misma línea evolutiva. Pero Murkrow es demasiado pequeño como para poder cubrir el ancho de la celda con un solo ataque – Sableye realizo una pose en T, como si estuviera imitando a una cruz – Pero las alas de un Honchkrow son mas extensas y cubren el ancho de la celda a la perfección... En otras palabras, es capaz de romper la celda con un par de aleteos precisos a diferencia de Murkrow... Y si te detienes a pensarlo bien tiene lógica. ¿Qué pokemon ha perdido toda su fortuna y sus riquezas y en consecuencia puede ser persuadido con más facilidad por Gengar? ¿Quién se vio fuertemente involucrado en todo este tema hace más de dos décadas y probablemente pueda sentir un fuerte remordimiento que lo obligue a solucionar su error siguiendo las ordenes de ese tirano sonriente? Honchkrow, el responsable de que Weavile y Zoroark escaparan de su celda, si señores –

Sableye concluyo con toda su explicación y dejo el resto a criterio de Lucario. El pokemon comenzó a examinar cuidadosamente todo lo que Sableye le había dicho y su rostro de duda era lentamente consumido por el asombro mientras mas lo analizaba, por que cada vez que se profundizaba más, todo tenía muchísimo más sentido.

Pero de pronto, aquella expresión de Lucario que reflejaba asombro y admiración por la rápida conclusión de Sableye, se comenzó a transformar en una expresión de miedo... Sus pupilas se dilataron a niveles exorbitantes y la parte inferior de su mandíbula colgaba en el aire como si esta fuera incapaz de cerrarse. El aura de Lucario podía percibir las intenciones de los demás, pero los responsables del atraco sabían disimular tan bien que fueron capaces de hacer impotente la habilidad de Lucario, sin embargo... Otras personas no tenían ninguna intención de disimular sus emociones y el aura de Lucario era mucho mas efectiva para detectar gente con quien tuviera fuertes lazos. El pokemon descubrió algo terrible.

- ¡Sospecho que no solo vinieron para liberar a los prisioneros! –

Audino abrió lentamente sus ojos, luchando contra el sueño y la fatiga que un dolor vigoroso que se originaba en su frente le provocaba. Se encontraba totalmente desorientada y sin noción alguna de que había pasado antes de entrar en aquel enigmático letargo. Su visión distorsionaba y volvía borroso todo lo que sus ojos podían alcanzar. Su única forma certera de poder interactuar con el entorno era por medio de sus oídos, los cuales únicamente podían captar el relajante sonido de las olas del mar que solo la alentaban a seguir durmiendo al ver tantos colores distorsionados.

- ¿Ya te despertaste amiga? Al amo Gengar le va a gustar mucho esto jiji, dijo que jugáramos a aguantar la respiración un rato –

Dijo una voz chillona como la de una chica embriagada. Audino sospecho que quizás, ya no se encontraba en un sueño. Entrecerró ambos ojos para poder aclarar su vista y a pasos rebajados, su vista se encontraba nuevamente en su punto fuerte... Para su sorpresa, estaba frente a frente con una Banette de aspecto curioso, llena de ojeras y cortadas sobre todo su cuerpo de felpa. Su cínica sonrisa consiguió intimidar inmediatamente a Audino.

- ¡Tsk! ¡¿Q-Quien eres tú?! – Audino intento moverse y alejar a la contraria con sus manos, pero se percato de que estaba atada de las manos y de los pies con una fuerte soga de acero inoxidable, metal capaz de repeler todos sus movimientos de tipo normal para impedir que se diera a la fuga. Comenzó a forcejear y a moverse de un lado a otro con desesperación, pero para su infortunio, sin éxito alguno.

- ¡S-Suéltenme! – Sus ojos rápidamente se humedecieron, Audino no estaba hecha para soportar tal situación ni para mantener la calma, rápidamente rompió en llano y su respiración comenzó a precipitarse. Al lado de Banette se encontraban otras dos chicas, quienes alguna vez residieron en el calabozo del castillo: Weavile y Zoroark... Ambas acompañadas de un elegante Honchkrow.

- Cariño, nada de esto es personal. Enserio, literalmente ni nos importas o eres parte de nuestro plan, solo eres un peso muerto. Realmente quien nos interesa es la mocosa. Te pondré en contexto... Gallade descubrió algo que no debió de haber descubierto y que pone en jaque todo el plan de nuestro líder Gengar... ¿Podemos extorsionarlo para que se quede callado? Si, por medio de su tonta hija adoptiva. Nadie te mando a cuidar de la mocosa mientras Gallade no estaba, simplemente vamos a lanzarte al océano y a dejarte a tu suerte, evidentemente en una zona donde no hayan pokemon de tipo agua que puedan auxiliarte –

Litten se encontraba en el otro extremo del barco, durmiendo plácidamente sin darle importancia a la incómoda posición en donde sus cuatro extremidades eran inmovilizadas por una soga del mismo tipo que se usó con Audino. Ella siempre fue el objetivo y como Audino se vio involucrada por estarla cuidando, alguien tenía que evitar que ella hablara. Eso había sido todo, su destino estaba aparentemente sellado... Pero súbitamente se materializo un estruendoso impacto en los cielos nocturnos. Un proyectil no identificado tuvo presencia segundos después de que se escuchara aquel impacto, esto despertó la atención de todos los individuos en el barco.

- ¿Qué fue eso? – Pregunto Weavile retóricamente... Todos comenzaron a monitorear los alrededores con sus miradas, examinando el cielo y el mar como si fueran radares para tratar de identificar el origen de aquel misterioso estruendo que rompió la barrera del sonido, algo bastante sugerente y nada convencional.

En una de estas acciones, Weavile dirigió una mirada rápida y casual hacia la proa del barco (todos se encontraban en la popa) y su sorpresa no fue nada grata. La expresión siempre neutral y sensual del pokemon rápidamente sufrió de un drástico cambio, ahora su mirada emanaba terror y aquella chica solo dio un par de pasos hacia atrás mientras se conservaba a la defensiva. Intento llamar la atención del resto de sus compañeros.

- C-Chicos... M-Miren – Su voz se cortó de raíz por el miedo y con su afilada y fina garra índice del brazo derecho apunto hacia la dirección respectiva. Todos imitaron las acciones de Weavile cuando sorprendieron a un Mega Lucario justo frente a ellos.

Sus ojos se encorvaban abajo y exhibían todo el vigor y la vehemencia del pokemon, su hocico cerrado y firme como una roca, pero exhibía una gran hilera de colmillos que ejercían presión entre sí. Toda su expresión resaltaba una obstinada ambición por despedazar a los desdichados individuos responsables por el atroz crimen de meter sus manos con personas indebidas. Esta vez no tendría piedad. Las piernas y los brazos separados a una distancia razonable eran la piedra angular de la postura que adoptaba aquella intimidante silueta.

Audino quedo pasmada al ver a Lucario con esa expresión en su rostro, simplemente su estado actual era la antítesis del pokemon quien ella alguna vez admiro y del cual irónicamente se enamoró. El sudor corrió por su frente incomodándola por, sobre todo, ya que no tenia forma de asearse estando inmovilizada.

- L-Lucario... ¿Qué estas haciendo aquí? – Pregunto Audino gritando a los 4 vientos, su voz resonaba en los horizontes. Honchkrow, Zoroark y Weavile simplemente se aproximaron hacia Lucario dando un paso no muy bien meditado hacia adelante. La tosca y decidida expresión del pokemon acero/lucha se reafirmó todavía más; Audino ya estaba enterada de los planes de Lucario.

- Entiendo que tengas una Mega Evolución... P-Pero... ¡Son 4 contra 1! –

- ¡Entonces es una batalla justa! – Exclamo Lucario mientras cubría su rostro con ambos puños de forma defensiva y ofensiva. Estaba esperando el primer ataque por parte de los adversarios. Weavile y Zoroark prepararon sus garras y se inclinaron unos cuantos centímetros adelante, pero sus expresiones fueron de una sorpresa no muy grata al ver que Honchkrow había extendido su ala derecha para bloquearles el paso.

- Disculpen señoritas... ¿Qué dirían de mi si se enteran de que deje a un par de bellas damas a la merced de un lunático? Dejen que yo me haga cargo de este intruso... No puedo permitir que se arriesguen – Y entones Honchkrow se colocó en posición de vuelo extendiendo ambas alas de forma adyacente... Su pecho ya apuntaba al suelo y su flexible cabeza se mantenía firme y justo donde debía estar.

Como era de esperarse, Honchkrow comenzó a batir sus alas hacia abajo y hacia arriba levantando una cantidad ridícula de aire a su alrededor; el pokemon se dio un leve impulso catapultando sus patas hacia adelante y la fuerza de sus alas le permitió emerger hacia los cielos con una velocidad moderada. El avión ya había despertado.

- ¿Qué esta haciendo este tonto? Lo van a destrozar si no lo ayudamos... - Weavile estaba insatisfecha con la decisión tomada por Honchkrow, pero finalmente decidió quedarse quieta. La lóbrega silueta del pokemon comenzó a desplazarse con mayor velocidad conforme transcurría el tiempo, llegando incluso a distorsionar su aspecto a ojos externos. Las alas de Honchkrow comenzaron a emitir un brillo blanco en su totalidad el cual se desvaneció de un instante a otro, las alas ahora estaban recubiertas por una densa capa metálica que desacelero levemente la velocidad del usuario, pero este no modifico su trayectoria activa que solamente planeaba concretarse con un poderoso impacto sobre Mega Lucario. El movimiento fue poderoso ala de acero.

Lucario se mantuvo inexpresivo y estático, conservando aquella posición anteriormente mencionada y figuradamente parecía que no tenia intenciones de evitar aquel movimiento. A pocos segundos antes de que las mortíferas alas de Honchkrow golpearan contra el cuerpo del oponente, Mega Lucario levanto rápidamente ambas manos y las extendió en contra de las alas de Honchkrow extendiendo sus palmas y cerrándolas rápidamente en el acto... Todos se quedaron pasmados con esta fugaz acción y se evidencio en sus rostros de sorpresa... De todos ellos, Honchkrow era el que conservaba una expresión menos agraciada que las del resto de sus compañeros... Las manos de Mega Lucario habían detenido sus alas unos cuantos segundos antes de que el ataque consiguiera llevarse a cabo, sin embargo, Honchkrow continuo ofreciendo resistencia al agarre de Lucario y eso se evidenciaba en sus pies... Dichas extremidades se aferraban al suelo con firmeza y sin intenciones de moverse o bajar la guardia; a pesar de que Honchkrow había fallado su ataque, era persistente en tratar de empujarlo con la fuerza de su cuerpo mientras se mantenía en el aire... Pero no importaba cuanto peso pusiera y cuanto impulso se diera para tratar de tirar al oponente hacia las turbias aguas del océano... este no se desplazaba ni un solo centímetro.

- ¡¿Q-Que diablos?! ¡¿Por qué no consigo hacer que te muevas?! Puedes reaccionar al ultimo segundo y frenar un ataque... Y ni siquiera con fuerza consigo que te muevas un solo centímetro – Se quejo con la voz entrecortada mientras observaba al rival con unas desesperadas ganas de vencerlo. Lucario se mantuvo serio y callado hasta que, en una jugada bastante sorprendente... Soltó sus alas y antes de que Honchkrow siguiera avanzando por inercia... Conecto una desmesurada cantidad de puñetazos a velocidades imperceptibles sobre el cuerpo de Honchkrow... Cada golpe se podía escuchar a kilómetros y los impactos emulaban los sonidos de una poderosa bala siendo detonada por el gatillo de una pistola. Una vez terminada dicha incursión, Lucario desplazo su puño izquierdo unos cuantos centímetros hacia atrás y lo cargo para dar el golpe de gracia... Un ataque de puño meteoro fue disparado por su parte. El nudillo de Lucario se rodeó de un aura color lavanda y eventualmente fue disparado cual cohete impactando sobre la cabeza del discrepante. Honchkrow salió catapultado en la dirección contraria y se estrello salvajemente contra el mástil del barco fracturando este en dos.

- ¡Cuidado! - Exclamo Weavile segundos antes de apartarse de su ubicación original. Lo que una vez fue el mástil, se encontró con la superficie y despedazo toda la cubierta. Zoroark cerro sus ojos a causa de todo el polvo que se levanto con el fuerte impacto. Banette por otro lado, ya no se veía muy agraciada... estaba furiosa y lo comunicaba a través de su arrugado gesto.

- ¡Mi precioso Gengar se va a molestar! ¡Aplástenlo YA YA YA! – Ordeno mientras golpeaba repetidamente un par de barriles mientras hacia su puchero. Weavile fue el siguiente pokemon que en conjunto con Zoroark se haría cargo de Lucario.

- Zoroark... Haz lo tuyo – Insinuó Weavile. Zoroark asintió dándole la razón, era hora de utilizar sus habilidades para influir en la mente de su oponente.

De pronto, Mega Lucario pudo percibir cambios extraños en el panorama... el cielo se pinto totalmente de un color rojo sangriento y la superficie del barco se desvaneció, dando paso a un vacío total donde no podía apreciar nada mas que su propio cuerpo. Observo como el ya inconsciente Honchkrow se desvaneció sin dejar rastro junto con Weavile, Banette, Zoroark, Audino y Litten. Por simple curiosidad, Mega Lucario observo sus propias manos de izquierda a derecha.

- ¿Piensas acaso que tus ilusiones van a servir de algo? Mi aura es tan poderosa que no hay forma de que alguno de ustedes pueda escapar, con o sin trucos baratos – Lucario levanto rápidamente su brazo dibujando un semicírculo en el aire e impactando fuertemente su muñeca contra el oponente que intentaba pasar desapercibido a pocos centímetros de él; inmediatamente la ilusión se Zoroark se desmorono mientras se retorcía del dolor. El golpe fue tan fuerte que la chica cayo inconsciente al suelo un par de segundos después de que fuera ejecutado el movimiento.

Lucario giro su cabeza rápidamente y observo como Weavile ejecuto un ataque de "chuzos", un movimiento que materializaba fragmentos de hielo que se dispersaban por el aire para ejercer daños de proporciones catastróficas. Mega Lucario simplemente se desplazo un par de metros hacia atrás llevando a cabo un anticipado salto, provocando que los proyectiles que estaban dirigidos hacia él golpearan sobre la frágil superficie de madera vieja.

- ¡Deja de moverte maldito! – Exclamo Weavile encolerizada... solo para que segundos después, Lucario se teletransportara frente a ella y la golpeara con una ráfaga de 70 puñetazos en tan solo un par de segundos; cada impacto era super eficaz en ella al ser un "puño bala" movimiento de tipo acero con una fuerza descomunal, sus ojos se rodearon por moretones, sus dientes se quebraron y se rompieron como frituras... La chica cayo rendida y debilitada frente al violento pokemon que ya había arrasado con todos sus compañeros.

Banette dio un par de pasos hacia atrás y esta vez su miedo se hizo mas evidente que nunca por sus labios estrechados y contraídos hacia atrás. Su sonrisa cínica y su aura de arrogancia se desvaneció.

En un abrir y cerrar de ojos, Mega Lucario apareció justo frente a ella. Sus ojos rojos estaban repletos de furia.

- Ustedes van a venir conmigo ... -

¡Alola entrenadores! me quiero disculpar por la ausencia últimamente. No encontraba la inspiración que necesitaba para seguir escribiendo y estuve ocupado estos últimos días por las fiestas decembrinas. Quiero desearles a todos las mas felices fiestas y que tengan un gran año nuevo. Como siempre, gracias por acompañarme y disfrutar del contenido.