Capitulo 13: La alianza.
Eran actualmente las 12: 00 pm en el reino de brozodia. El sol se encontraba en su apogeo, brillando y alumbrando a todos los humildes habitantes.
Blaziken, Lucario y Lopunny se habían levantado con el fin de concluir con su tarea designada: Ejecutar un traslado de prisioneros, ya que técnicamente Sableye era un problema del reino de brozodia y no de Alveria.
Pero de cualquier forma Lucario no estaba muy satisfecho con esta desicion, ya que sentía que era una estrategia para huir de sus problemas y dejarlos en manos de alguien más.
La más inconforme era lopunny, ya que había sido arrastrada hasta la problemática solo por haber sido un testigo clave. Lucario podía percibir el aura de la joven, molesta y con una voluntad inquebrantable por volver a la cama y seguir durmiendo, se podía reflejar igualmente en sus ojeras.
Blaziken por otra parte, caminaba totalmente indiferente con aquella expresión tan neutral y sociopata tan característica de el. Sableye al parecer era el más motivado, ya que no paraba de observar a todos los respectivos Pokémon con su sonrisa tan espontánea pero a la vez inquietante.
El trayecto del grupo había llegado a si fin. Se detuvieron en su destino: El castillo del reino de brozodia, los aposentos del respectivo rey.
- ¡Vaya! Honestamente esperaba que esta cosa fuera más grande. Quiero decir, esto es un castillo -
El comentario de blaziken fue acompañado con una pequeña pisca de sarcasmo, sacando a relucir otra faceta de su personalidad. Esto alertó a lopunny, la cual inmediatamenteborró su expresión de monotonía sustituyendo está por una de asombro e interés.
- ¡Vaya! ¡Al parecer sabes hacer otra cosa además de gritarle a las personas y hacer berrinches y rabietas! -
Exclamó la joven, respondiendo a modo de burla.
Blaziken entrecerró los ojos y enfoco su mirada en lopunny, observándola fijamente mientras apretaba ambos puños con fuerza.
- No creas que solo porque eres mujer no te voy a poner en tu lugar.
Créeme, si continúas con tu insolencia volverás a Alveria en pedazos -
Lopunny retrocedió varios pasos, ocultándose detrás del convicto Sableye. Posteriormente trago un poco de saliva y preparo una respuesta.
- ¡N-No creas que te tengo miedo! ¡Tu solo eres tú estúpido que se cree superior a mi por ser un hombre! -
- ¡¡SOY SUPERIOR A TODOS IMBÉCIL!! ¡¡NINGUNO DE LOS TONTOS GUARDIAS ES LA EXCEPCIÓN!! -
Blaziken comenzó a levantar más su voz, llamando la atención directamente de todos los civiles y peatones que se encontraban cerca.
Ya todos sabían y reconocían al responsable de aquel espectáculo tan ruidoso y violento... El inconfundible blaziken.
Lucario prescindió de la discusión de su escolta, le preocupaba más que nadie atendiera la puerta del castillo.
Golpeó la puerta un par de veces con su puño derecho y espero una respuesta.
Su espera no se prolongó más. El rey de brozodia: Slowking, se había manifestado enfrente de todos. Su sonrisa amigable y empalagosa le daba la bienvenida a cada presente de forma cálida, ya que brindaba confianza y seguridad.
Todo lo contrario de la imponente presencia de Empoleon, la cual directamente provocaba terror en cualquier usuario que lo observara.
- Bienvenido Lucario. ¡Me da mucho gusto que hayas regresado hijo! -
Slowking avanzo un par de pasos y posteriormente rodeó a Lucario con ambos brazos. Envolviendo al Pokémon en un cálido abrazo.
Lucario correspondió, imitando las acciones del rey.
Pero si algo era característico del rey, además de su amabilidad excesiva... Era que no sabía medirse. Estaba aplicando más fuerza de la debida en aquel largo abrazo, llegando al punto en el que Lucario comenzó a sentirse asfixiado.
Sus ojos se expandieron como platos mientras esté jadeaba como el perro que era.
- S-Señor... T-tambien me da gusto verlo -
Lucario era un hijo para Slowking, ya que este fue el primer Pokémon que formó parte de su corte real.
Llevaban años trabajando juntos, pero Lucario jamás desistió sin importar toda la desdicha que iba a recaer en el. Ambos tenían y compartían la misma meta de levantar a su país, sin importar lo que fuese.
Una vez concluido el abrazo, Lucario comenzó a respirar de forma mucho más acelerada, mientras se recargaba en sus rodillas usando sus manos como apoyo. La fuerza de su rey era abrumadora.
- M-Mi rey... Creo que Empoleon ya le ha contado absolutamente todo lo que tiene que saber.
Esto es sobre Sableye -
- Creo que tenemos problemas más graves que atender ahora -
Interrumpió Slowking. Ambos Pokémon giraron su mirada hacia la discusión que la escolta de Lucario había comenzado.
- ¡Te lo dije mocosa estúpida! ¡Ahora vas a pagar! -
Blaziken levanto ambos brazos hasta la altura del pecho y posteriormente los lanzó hacia adelante, detonando aquellos musculosos brazos como si fueran cañones.
Sus palmas comenzaron a calentarse en este breve proceso, cubriéndose de fuego y llamas.
Un par de potentes llamaradas se manifestaron como dos poderosas explosiones, las cuales aparentemente habían impactado sobre la chica que había provocado al Pokémon.
Los impactos dispersaron una cantidad exorbitante de humo, que nublo la vista de todos los presentes incluyendo a los civiles. Varios escombros salieron disparados como balas en el proceso, dando a entender que el concreto del suelo había quedado despedazado en su totalidad.
- ¡Blaziken! ¡¿Que mierda te he dicho sobre estallar las cosas?! ¡Tienes que controlar tu temperamento! -
Exclamo Lucario con cierta rabia emanando de su boca. Rápidamente el Pokémon Cubrió la parte inferior de su rostro usando su brazo derecho, esto para evitar que el humo provocado por la poderosa explosión se introdujera a su cuerpo, inhalándo accidentalmente.
Lucario cerro ambos puños y posteriormente comenzó a compactar la energía que emanaba de su poderosa aura, formando así, un largo hueso que se acoplo de ambos brazos partiendo desde el punto de origen respectivo.
Lucario comenzó a girar el hueso a una velocidad excesivamente alta, para ser más precisos a una velocidad de 160 cm/s, simulando el efecto de un ventilador.
El humo fue disipado rápidamente, revelando el resultado del caótico ataque ocasionado por el explosivo temperamento de Blaziken. El resultado fue simplemente impactante para todos, inclusive para Blaziken el cual quedo pasmado por la reacción de uno delos involucrados.
Lopunny estaba siendo rodeada por el brazo izquierdo de sableye, mientras que este extendía su brazo derecho hacia la dirección de Blaziken. Aparentemente había protegido a la joven, aparentemente había interceptado las llamaradas de Blaziken con alguna de sus poderosas técnicas.
La cólera de Blaziken se multiplicó por lo acontecido... Pero esta vez su furia parecía estar acosando a Sableye debido a su inoportuna aparición.
- ¡¿Por que mierda te entrometes en la pelea?! Maldito criminal inadaptado.
¿Acaso crees que por detener una de mis llamaradas eres más poderoso que yo? ¡¿Acaso te estás estas burlando de mi?! Maldita basura -
Sableye reaccionó con indiferencia, como si las palabras de Blaziken no fueran más que simples proyectiles imprecisos e incapaces de estallar en el objetivo; pero al parecer, mientras más preguntas evadía sableye más aumentaba la furia del contrario... Como si fueran conceptos recíprocos y dependientes uno del otro.
La expresión neutral de sableye se comenzó a desvanecer para ser sustituida por aquella sonrisa tan característica de el... Pero en esta ocasión algo era diferente... Algo difería de las otras sonrisas tan espontáneas de aquel oscuro personaje...
Esta sonrisa era más egocéntrica...
A Sableye le era gratificante ver como Blaziken se enfadaba cada vez más, ver al contrario desmoronarse por sus propias emociones.
Planeaba que Blaziken se enfadará tanto que llegara a la gota que derramará el vaso de su paciencia y realizará alguna acción indebida... Algo oscuro.
Lucario se percató de esto rápidamente y solamente le dirigió una rápida y firme mirada al rey de brozodia: Slowking.
- Bueno hijos. Las cosas se están poniendo un poco turbias. Hay que calmar su colera -
El rey extendió su brazo derecho y sus ojos se tornaron de un color lavanda.
Con su dedo índice apunto a Blaziken, rodeando al objetivo con una increíble ráfaga de poder psíquico que inmediatamente lo dejo inmóvil e incapaz de ejecutar más ataques. Posteriormente blaziken comenzó a elevarse en el aire y al cabo de un par de segundos aterrizó en frente del rey.
- Querido guerrero. Por favor cálmate.
No olvides tu propósito. Respetar, proteger y servir a tu nación.
Si la joven te provocó... No te dejes caer en sus infantiles juegos... Es una mujer loca -
Bromeó con una sonrisa en su rostro, con la intención de que Blaziken se relajará.
Blaziken observo a lopunny con una expresión egocéntrica, observándola con una perspectiva donde ella era la inferior.
Inmediatamente blaziken dejo salir una risa en reacción a la broma del rey.
- ¡Tiene razón mi rey! ¡Las brujas inferiores como ella no deberían ni tener el privilegio de dirigirme la palabra!
¿Entramos o que? -
Blaziken había dejado atrás aquella ira que acumulo en contra de ambos Pokémon. El rey había apelado a su lado egocéntrico para poder domar a la bestia y afortunadamente resultó
Suspiro pesadamente y toco el hombro izquierdo de Lucario.
- ¡Afortunadamente funcionó! Si no hubiera halagado al joven guerrero probablemente hubiera hecho pedazos mi humilde "castillo" y de paso todo el entorno.
Sabes... La próxima vez que se descontrole solamente dirígete a el con cumplidos. Ese joven tiene el ego bastante inflado, no se qué clase de educación recibió cuando era niño -
Observo el rey con preocupación a su fiel subordinado.
- Lo siento... ¡Fue una mala idea traerlo! Este maldito enano es exageradamente manipulador.
Ya nos hizo algo similar cuando estábamos atravesando el océano...
Eso y con lo susceptible que es la gallina... ¡Santo cielo! ¡Mantener a estos dos idiotas a raya va a ser una tarea difícil!
¡Y para culminar tenemos a esta señorita! ¡Igual de egocéntrica que este par de pelmasos! -
Se interrumpió para observar directamente a la que el creía, era la responsable de aquella riña.
- ¿No te has puesto a pensar en que si le sigues respondiendo de la misma forma en la que el lo hace, solo vas a hacer que se enoje más? No se lo digo a el porque de plano no es razonable... A el hay que halagarlo y seguir inflando su estúpido ego para que deje de hacer volar cosas... ¿Y que hay de ti? -
La chica observo a su jefe con los ojos humedecidos... Sabía perfectamente en el fondo que ella era la que provocaba a Blaziken y eso daba paso a nuevas discusiones... Cada una más desastrosa que la anterior... Aunque sableye igualmente tenía cierta influencia en estas discusiones, no podían pedirle nada a el. Después de todo continuaba siendo un criminal.
Las palabras de Lucario habían sido algo hirientes para la joven. Afortunadamente el rey se puso al nivel de la joven para hacerle comprender la delicadeza de la situación de una forma menos dolorosa. Realmente la culpa no la tenía ella, no toda.
- Señorita lopunny... Solo te pido que intentes ignorar a Blaziken...
Realmente... Hay que preocuparnos más por lo que su actitud le obligue a hacer... Qué preocuparte por darle siempre una respuesta
¿De acuerdo? Solo ignóralo y listo -
Lopunny asintió lentamente y retiro el brazo de Sableye que la protegía para poder continuar con la caminata.
Pero algo le impedía el poder retirarse de la presencia de aquel prisionero... ¿Tal ves era remordimiento por sus palabras y pensamientos?
En más de una ocasión le había reiterado al prisionero que no era más que un sucio criminal, una persona totalmente desechable para la sociedad, una persona sin moral, incapaz de pensar en el bien de terceros por sobre el bien ajeno.
Pero, en un momento aparentemente critico el se lanzó a salvarla a pesar de todo esto. Obviamente un remordimiento bastante amargo y doloroso había materializado dentro de su ser.
| No lo puedo comprender... Rumores sobre homicidios, narcotráfico, robo, varios ataques a mis compañeros y aun así me protegido desinteresadamente.
¿Pero por qué? ¿Será acaso que lo he juzgado mal? Mis estereotipos estúpidos me han hecho juzgar con prejuicios a una persona a la cual estoy lejos de conocer... Me hace pensar que a pesar todas las personas son una moneda con dos caras... Y a pesar de que no siempre actuarán como esperamos... Todos pueden tener algo bueno.
Esto es algo difícil de digerir|
Admitiendo toda la derrota que cargaba en sus hombros... Finalmente reunió suficiente fuerza para dejar salir lo que tenía que decir.
- Sableye... Gracias por protegerme de ese ataque. No sé si hubiera podido hacer algo para bloquearlo. Realmente soy bastante dependiente de mi mega evolucion y eso que solo pude usarla una vez antes de que robarán mi mega piedra -
Sableye se puso en marcha, siguiendo al resto de los individuos. Lopunny imitó las acciones del prisionero
Ambos caminaban a la misma velocidad y al mismo nivel.
- Realmente Blaziken me parece un civil bastante... Predecible.
Era evidente que iba a reaccionar así tarde o temprano. Pude leer las ganas de atacar en su expresión... Entonces fue sencillo repeler las llamas con mis potentes garras -
Comenzó a mover y manipular meticulosamente cada uno de sus dedos, como si los estuviera examinando cuidadosamente. Cada uno igual de afilado que el anterior... Podría incluso considerar sus afiladas garras cómo herramientas muchísimo más cortantes y afiladas que un cuchillo o los mensajes de tu crush. Eso era otro nivel.
Herramientas para degollar y asesinar...
En menos de lo que canta un torchic, todos habían llegado a la sala principal del castillo de la capital de brozodia.
Reiterando el hecho de que el castillo era aproximadamente 30 o 40 veces más pequeño que el de Alveria. Esto explicaría el porque desplazarse de la entrada al salón principal era una acción que se podía ejecutar en tan poco tiempo.
Slowking se acercó a Sableye caminando con un ritmo bastante desacelerado.
Finalmente se detuvo en seco al estar a unos cuantos centímetros enfrente de sableye.
El resto de los espectadores presentes se inclinaron con una reverencia a modo de respeto...
Excepto claro Blaziken y Sableye..
- Muy bien Sableye... El rey de Alveria envío a sus leales subordinados y a su recluta temporal a trasladarte de celda.
Desafortunadamente... Entre sus crímenes se encuentran los siguientes, que al parecer tienen más peso.
- Robo.
- Homicidio.
- Tráfico ilegal de objetos de alto valor en el mercado negro.
- abandonar el país de forma ilegal.
Pero me complace anunciar que tengo un cambio de planes.
Si realmente hay una persona enfocada en crear más conflictos que perjudiquen a los dos reinos... No podemos simplemente dejarte como un prisionero.
Si quieren tu cabeza es porque tienes información valiosa... Además piensas y actúas como ellos...
Si accedes a cooperar con nosotros te brindaremos protección y tendrás total amnistía por todos tus crímenes pasados.
Sableye extendió su brazo derecho, dejando su palma boca arriba. Posteriormente flexiono todos sus dedos hacia atrás un par de veces... Ademán bastante popular que las personas frecuentaban a la hora de buscar pelea o exigir altas recompensas.
El rey ya sabía de que se trataba todo esto. Sableye estaba exigiendo una recompensa aún mayor.
- De acuerdo sableye... Se te retirarán todos los cargos.
No pagarás condena por tus crímenes y se borrará tu historial criminal para que puedas reintegrarte a la sociedad cuando todo acabe -
- Ahorra lo segundo. No me interesa integrarme a su podrida sociedad. Con que me dejen de perseguir me basta -
- Entonces es oficial... Ahora eres parte de nuestros reclutas -
Lucario no se encontraba muy satisfecho con aquella conclusión. Creía firmemente que sableye debía pagar por todos sus crímenes...
Pero ese sentimiento de inconformidad se desvaneció cuando su aura comenzó a vibrar intensamente dentro de su cuerpo... Alertandolo de algo.
Rápidamente el Pokémon se puso de pie y corrió hacia la enorme ventana que alumbraba toda la sala.
A 700 metros... Un fisgón se encontraba vigilandolos... Para ser más precisos:
¡Greninja!
Aquel fugitivo observaba atentamente los movimientos y las expresiones de cada uno de los presentes en el salón... Y contaba con cierto entrenamiento que le otorgaba la particularidad para leer los labios. Se había enterado absolutamente de todo.
Sus elegantes ojos rojos se toparon con los de Lucario... El cual ya se había percatado de su presencia.
- ¡Maldita sea! Ese perro es bastante problemático.
Nos ha descubierto -
Greninja se puso de pie con una velocidad asombrosa, listo para emitir una rápida retirada.
Su exorbitante agilidad y fuertes extremidades le permitían al Pokémon desplazarse sin muchos problemas cuando escapaba en las ciudades gracias a que le era bastante sencillo saltar de tejado en tejado hasta perder de vista a su verdugo.
- ¡Nos están espiando! ¡Greninja está escapando en este preciso instante! -
- ¡¿Nani?! - exclamaron todos los presentes al unisono, pasmados por esta noticia.
Blaziken fue el primer en tomar la iniciativa y el primero en dirigirse a la salida, más que dispuesto a capturar al fisgón y darle alguna golpiza en el proceso.
Lucario lo detuvo obstruyendo su camino con su brazo izquierdo.
- Si greninja estaba espiando eso puede significar que incineroar está cerca ya que el no es precisamente rápido.
Y tú Blaziken tienes ventaja de tipo contra el. En caso de que mis suposiciones sean ciertas necesito que te quedes aquí y le hagas frente.
Yo no soy tan rápido pero puedo rastrear el aura de greninja. ¡Aunque también tengo un límite! ¡Quedate aquí! -
Y así, Lucario salió en busca de greninja, corriendo lo más rápido que sus piernas le permitían.
Empujo las puertas de la entrada principal del castillo con fuerza y así dió inicio a la persecución.
- ¡No! ¡Idiota! ¡Tu igual tienes ventaja de tipo contra el felino! ¡Pero yo si puedo atrapar a greninja!
¡Me importa una mierda lo que me órdenes! ¡Ire a detener a ese estúpido renacuajo! -
Blaziken se inclinó hacia adelante flexionando la espalda, desplazó sus brazos hacia atrás y se preparó para correr a máxima velocidad... Imitando el estilo de Naruto.
Sus candentes extremidades inferiores calcinaban el suelo al más mínimo contacto.
Así, igualmente salió por la puerta principal del castillo siguiendo a Lucario.
Al principio su velocidad no aparentaba ni de cerca ser igual o superior a la de greninja. Pero esto comenzaría a cambiar en cuanto su habilidad impulso le permitiera multiplicar la velocidad a la que se desplazaba...
Tampoco le preocupaba mucho su resistencia. La forma en la que Blaziken estuvo entrenando toda su vida le dió paso a la posibilidad de correr incluso a distancias de 1000 km sin problema alguno... Sin cansancio... Sin dolores musculares. Era una máquina de la velocidad que cualquiera envidiaba, no por nada su ego era lo más pesado en este bendito mundo.
En cuestión de segundos, Blaziken ya había logrado rebasar a Lucario... Su habilidad continuaba aumentando su velocidad a cada minuto que transcurría.
Lucario solo quedo desconcertado cuando observo al respectivo Pokémon aparecer a su costado y posteriormente desvanecerse en el entorno.
- ¡Blaziken! ¡Maldita sea te dije que te quedarás a vigilar a Sableye! ¿Quien mierda va a detenerlo si intenta escapar? -
Lucario freno en seco al percatarse de que ya no podía percibir a Blaziken... Intuyó que probablemente el mismo no lo había logrado escuchar gracias a la prolongada distancia entre ambos Pokémon.
Comenzó a observar el entorno actual con miradas certeras y precisas, pasando de largo ante los ciudadanos aterrorizados por la persecusión...
Estaba buscando atajos para poder adelantarse, pero al parecer su búsqueda no planeaba arrojar algún resultado a su favor.
Resignado, el Pokémon reanudó su participación clave en aquella carrera... Comenzando a correr nuevamente.
Ahora todo quedaba en manos de Blaziken.
Al percatarse de que ya nadie lo estaba siguiendo, greninja se detuvo en seco, usando su pie derecho para crear fricción entre su cuerpo y el suelo con el propósito de frenar más rápido. Su rostro que precedentemente se encontraba angustiado y alarmado por la persecución de lucario, había sufrido un cambio radical que emanaba confianza y una aura egocéntrica bastante fuerte.
- ¡Son todos unos lentos! ¡Ja! -
Exclamó victorioso mientras se burlaba con euforia de la situación y su conclusión que aparentemente había conspirado en favor suyo.
Su principal error había sido bajar la guardia, porque en fracciones de segundo... Blaziken se había materializado detrás de greninja, interrumpiendo su prematura victoria con una patada que chocó justo en la parte alta de la cabeza de greninja, con la intención de matarlo o noquearlo, blaziken no se molestó en medir o meditar la fuerza aplicada de dicho ataque, pues era absolutamente indiferente ante la salud y seguridad de sus contrincantes.
- ¡Kghhh! -
Exclamó el pokemon unos segundos previos a su declive. El rostro de greninja en cuestión de unos segundos encaraba al suelo, dejándolo impotente e indefenso ante su rival blaziken, que aparentemente había obtenido ya su máxima velocidad a causa de su habilidad.
- ¡Levántate! ¡¿Por que nos estaban espiando?! ¿Acaso estaban planeando un ataque en contra del inútil duende violeta? ¡Levántate para que te saque la informacion a golpes! -
Greninja llevó su mano derecha a su cabeza en reacción al dolor que le provocó la contundente patada de su rival. Posteriormente se puso de pie, con ciertas complicaciones de por medio.
Su rival lo observaba detenidamente, con una mirada de furia exorbitante, sin ni una pizca de empatía por el.
- No me subestimes -
Greninja materializó en sus manos una daga compactada de energía oscura, siendo este su movimiento de tajo umbrío. En cuestión de segundos, greninja preparó su contraataque y comenzó a correr en línea recta hacia blaziken sujetando una daga en cada mano; Blaziken ni se inmutaba ante este repentino movimiento por parte de su oponente, pues al momento de efectuarse una estocada lateral con ambas cuchillas, blaziken había desaparecido sin dejar rastro.
- ¡¿Que?! ¡¿Es asi de rapido?! -
Quedó pasmado al ver la desmedida velocidad que poseía el enemigo. Greninja rápidamente saltó hacia atrás, recuperando su posición original y posteriormente comenzó a observar y analizar meticulosamente todo su entorno. Blaziken se desplazaba tan rápido que inclusive era complicado poder atraparlo con la vista.
Para mala suerte de greninja, blaziken decidió atacar casi instantáneamente, dejando a su rival sin tiempo para poder pensar en una estrategia o trazar un plan.
- ¡Muere! -
Un veloz y poderoso puño impactó en directamente en el estómago de greninja, provocando que los ojos de este se ampliarán como platos en reacción al repentino golpe. Antes de caer al suelo, greninja fue rematado con 6 golpes más, que impactaron como balas en todo su cuerpo en cuestión de segundos.
- ¿Vas a continuar con tu inútil resistencia o vas a cooperar? - Su voz emanaba prepotencia y despotismo, observando con cierto nivel de odio al contraria que ya hacía en el suelo. Greninja nuevamente se levantó, apoyándose de sus rodillas mientras resguardaba su abdomen con ambos brazos. El oxígeno le comenzaba a faltar, por lo que daba grandes bocanadas de aire, lo que lo llevaba a fatigarse todavía más debido al esfuerzo excesivo.
- Por alguna razón... siento que esto estoy teniendo un deja vu -
Respondió con la voz entrecortada a causa de los dolorosos moretones que residían en su cuerpo. Blaziken había bajado la guardia y justo en el peor momento, Incineroar salió de las sombras sigilosamente, impactando un poderoso golpe de su brazo derecho en contra del distraído blaziken. La fuerza aplicada fue tal, que blaziken fue expulsado del tejado en donde se había librado la batalla, aterrizando en un cubo de basura que posteriormente fue sellado con una roca, obra de incineroar por supuesto.
- ¿Estas bien? - Preguntó el imponente tigre, extiendo la mano a su compañero greninja para ayudarlo a ponerse de pie. Greninja correspondió tomando la mano del contrario.
- No te preocupes. Todavía puedo caminar, aunque me cuesta. Blaziken es un dolor de cabeza -
- ¡¿Quien mierda me atacó por la espalda?! -
Una gigantesca explosión tuvo presencia en aquel lugar, llamando la atención de todos los ciudadanos que transitaban por las calles cercanas.
El cubo de basura en el que Blaziken había aterrizado, salió disparado por los aires de forma violenta mientras que el respectivo Pokémon estaba de pie en la vía pública, apuntando con su brazo derecho al cielo. Su expresión era ocultada por una siniestra sombra.
— ¡¿A donde se fueron?! Voy a abrirles la cabeza —
Tanto greninja como incineroar habían tomado una ruta de escape a través de las alcantarillas, afortunadamente Blaziken había tardado en recuperar la consciencia.
— Tenemos que ir rápido a informarle a Gengar lo que el rey Slowking está planeando. Antes de que Lucario logré interceptarnos —
Ambos Pokémon se desplazaban rápidamente por las alcantarillas, aparentemente ya tenían una ruta a seguir por medio de las mismas.
— Espera... Incineroar. ¡Mira! —
Exclamó greninja, totalmente pasmado al darse cuenta de que sus problemas no habían terminado.
El siniestro Pokémon sableye... Se encontraba enfrente de ellos, dispuesto a encararlos. ¿Como se había desplazado tan rápido? Ninguno de los dos lo podía deducir con lógica simple.
— Escuchen. Al parecer ustedes ya saben que tienen algo que me pertenece — La característica sonrisa tétrica de sableye tuvo aparición en su rostro, la cual además emanaba una confianza tan excesiva en si mismo que incluso resultaba aterradora. Incineroar dió un paso hacia adelante a diferencia de su lastimado compañero greninja.
— Es una gran oportunidad. ¡Nuestra misión original era asesinarte! ¡Nos haz ahorrado el trabajo de tener que buscarte! —
Incineroar comenzó a correr rápidamente hacia sableye, extendiendo ambos brazos de forma lateral para ejecutar su primer movimiento. Un poderoso lariat oscuro estaba por impactar contra el antagonista del encuentro. Sableye no movió ni un solo músculo y espero a que el movimiento fuera conectado exitosamente.
Las llamativas gemas que tenía en lugar de ojos, se enfocaban en la peculiar cangurera que incineroar llevaba consigo. Muy probablemente ahí ocultaba aquello por había venido a reclamar.
— ¡P-Pero! ¿Por que los profesores cambian las matemáticas? A mi me enseñaron a realizar está cochinada de otra forma —
Gallade se encontraba ubicado sobre una silla, acompañado de su hija adoptiva litten en la biblioteca pública de la ciudad capital del reino de Alveria. Se encontraba ahí con la intención de ayudar a litten a realizar su tarea de álgebra.
Pero no lograba comprender absolutamente nada acerca del tema, puesto que era álgebra bastante avanzada para su atrofiado cerebro.
La princesa gardevoir también se encontraba en la biblioteca. Luego de que gallade se recuperará, se ofreció como voluntaria para acompañarlos ya que todas sus responsabilidades habían sido postergadas hasta el regreso de Lucario, por lo que no tenía nada que hacer.
— Es que te juro que yo tampoco entendí. Le pedí explicaciones al profesor pero todo se volvió 3 veces más confuso —
Litten salto de su silla y caminó hacia los estantes de libros, buscando uno que milagrosamente tuviera la respuesta de la actividad designada. Gallade leía y analizaba el problema detenidamente sin éxito alguno mientras movía el lápiz de la mesa de izquierda a derecha en señal de desesperación.
Actualmente eran las 7:00 pm. Habían pasado una cantidad considerable de horas desde el incidente en el reino de brozodia que involucraba a Blaziken, Lucario, lopunny, sableye y los dos responsables al ataque que se efectuó hace un par de días antes.
Lucario entro de golpe a la biblioteca alarmando a todas las personas que actualmente se encontraban en el establecimiento.
Gardevoir estaba ayudando a litten cuando Lucario irrumpió en la escena, acompañado de Blaziken, lopunny y un renovado sableye.
— Ya regresamos. Y tenemos que darles una noticia importante chicos.
A partir de ahora... Sableye se une a nosotros como un recluta más. Espero que todos le den una cálida bienvenida —
Eso dejo a todos con la boca abierta, incluyendo a los extras que solo actuaba como espectadores de la situación. Gallade observo a Sableye con los ojos entrecerrados, dándose cuenta que tenía un collar con su mega piedra incrustada en el.
Había logrado recuperarla... Además, en su mano derecha cargaba un antiguo y maltratado libro de texto.
— Sableye se enfrentó a incineroar y a greninja y logró ahuyentar a ambos sin mucho problema, sin mencionar que recuperó su mega piedra — Informó lucario.
— Incineroar estaba usando una cangurera cuando apareció y atacó a Blaziken. En su cangurera también había un libro viejo de texto.
Aparentemente el autor es anónimo y el libro habla sobre la ciencia de los ultra umbrales. Es una investigación bastante meticulosa... Y si los subordinados de Gengar tenían este libro dudo mucho que sea para entretenerse - Agregó Sableye. Lucario desde luego ya se había preparado para presentar a una persona determinante en todo este pequeño conflicto, que conforme iban avanzando los días este continuaba escalando.
Un gigantesco pokemon de aproximadamente 2 metros de altura se materializó detrás del pequeño grupo. Era uno de esos pokemon que con solo verlos, te imponen miedo e infunden respeto en cualquier persona. Curiosamente, el pokemon llevaba consigo unos lentes de aumento los cuales adornaban su cara.
Lucario señaló amablemente al individuo, listo para presentarlo.
- Les quiero presentar a Mr.Rock, o le pueden decir Aggron. Un pokemon puede llamarse como su especie y es perfectamente válido. El es un científico que por años estuvo trabajando y estudiando los ultra umbrales, además también trabaja en seguridad con el rey slowking y es un viejo amigo de blaziken. Al enterarnos de que el libro hablaba sobre los ultra umbrales pensamos que el seria la persona más indicada para ayudarnos a comprender lo que dice el texto -
- Es un honor conocerlos a todos. Sobre todo a ti, gallade. ¡Me llevaré el libro para analizar lo que dice y poder sacar una conclusión en base a todos los percances que han estado sucediendo últimamente. Pero antes que nada, lucario me trajo aquí para hablar específicamente contigo... Gallade -
Gallade estaba desconcertado, no tenía las mas minima idea del propósito de aggron al hablarle, pero penso que quizas seria mejor escucharlo.
- Lucario me comentó que tus padres adoptivos se fueron a través de un ultra umbral hace muchos años y desde entonces no haz podido volver a verlos.
Si me ayudas realizar mi investigación... Podríamos conseguir una forma de abrir el ultra umbral por el que tus padres entraron... La razón por la cual un ultra umbral se abre es por una ruptura en la línea espacio/tiempo, todavía no hemos descubierto porque sucede esto. Pero este libro podría ser la clave -
Gallade quedó estático en reacción. No tenía palabras para contestarle a su aparentemente nuevo compañero. Aggron lo observaba de forma afable, esperando una respuesta afirmativa.
¿Qué es lo que están planeando gengar y sus subordinados?
Alola chicos. Me quiero disculpar por la demora en el capítulo. Lamentablemente tuve un bajón de ánimos y no tenía ganas de hacer nada. Afortunadamente la inspiración llegó justo a tiempo. Espero que lo disfruten.
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