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˖ ࣪ ꒷ 𝐆𝐢𝐦𝐧𝐨𝐟𝐢𝐥𝐢𝐚 ꐑꐑ !

Yang Jeongin
𓍯 17 años
𓍯 Rubio

Kim Seungmin
𓍯 16 años
𓍯 Gris-plata

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Gimnofilia o nudomanía: Excitación producida por la desnudez.

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El campamento de verano.

Muchos adolescentes piensan que está es una instancia perfecta para pasarla bien y crear recuerdos, pero ese no es mi caso, por lo contrario, odio que mis padres tengan la audacia de no preguntarme y solo enviarme a este lugar.

No es que desprecie estar con otros, de hecho, me parecería muy divertido estar con otros chicos y hacer nuevas amistades, de no ser porque tengo un secreto que es como una condena que para muchos es solo un juego.

Para mi no.

No sé la razón, ni cuando empezó, pero ver a alguien completamente desnudo me pone demasiado.

Es un drama ser un adolescente hormonal homosexual, que, además, tiene una filia tan difícil de controlar.

Solo a ti pasa te Yang Jeongin.

-¡Hola!- escuché a lo lejos y cuando salí de mi mente vi el rostro de un chico demasiado cercano al mío, lo cual me hizo retroceder sobre el colchón en el cual me encontraba sentado. -¿Te asuste?...Lo siento— murmuró parándose derecho frente a mi.

-Hm no-no- negué rápidamente al notar sus mejillas sonrojadas y tierna su mirada.

-Genial- sonrió volviendo a tener una confianza algo infantil.—Soy tu compañero de cabaña, me llamo Seungmin—ofreció su mano con confianza.— ¡Espero que nos llevemos muy bien!― sus ojos se hicieron pequeños y una sonrisa cuadrada apareció.

Es como un niño pequeño.

-Soy Jeongin-tomé su mano como respuesta a su cordial saludo.

Lo miré por un rato notando como sus facciones aún no se marcaban por completo,lo que complementaba su personalidad inocente, aunque eso no quitaba que fuera apuesto.

Demasiado lindo.

A pesar de ser de la misma altura, cuerpo se veía pequeño en comparación al mío, delicado, pero fuerte al mismo tiempo.

-Uhm Jeongin...¿Puedes soltarme?- nuevamente escuché su voz a la lejanía.

-¡Oh lo siento!- solté su mano de inmediato y me levanté para evitar el contacto visual con el chico.

-No te preocupes- su tono era risueño.— Entonces...voy a ocupar esa cama- mire hacia donde estaba señalando.—Ya que tu estabas sentado en la otra- complementó.

Vi como con cuidado dejaba su bolso sobre el colchón recién señalado.

-¡Todos tienen estar en el sector 5 a las 15:00 horas! — escuchamos una voz proveniente del parlante puesto en una luminaria frente a la cabaña.

Con eso dicho también me puse a ordenar mi parte de la habitación, podía notar la mirada del peligris cada tanto, supuse que era curiosidad.

Lamento ser tan raro, chico risueño.

Al llegar la hora fuimos al lugar indicado, al parecer él si tenía amigos en el campamento, ya que apenas pudo se junto con un chico de pelo morado y otro de pelo menta.

-Buenas tardes chicos la voz del guía se escuchó claramente al estar frente a la gran cantidad de adolescentes.

-Espero que ya tengan sus cuartos listos y estén preparados para convivir en paz con su compañero de cabaña—sonrió amablemente. -Ya con eso dicho podemos dar inicio a las actividades del campamento— su tono era enérgico.

Excesivamente alegre.

Las aclamadas actividades.

A decir verdad toda la diversión de estos lugares se basaba en el caluroso verano, los juegos de agua, lanaturaleza y la supervivencia que suponía alojar en medio del bosque con un gran grupo de adolescentes de ciudad que con suerte sobrevivían sin su móvil algunas horas...eso en el mejor de los casos.

Pero la estaba pasando bien, los chicos eran amistosos y no había ningún brabucón rondando en el lugar, todos jugaban disfrutando de la calidez en el ambiente del campamento.

Se dio inicio a todo con un pequeño ritual de parte de los monitores unos 20 y poco años, después nos hablaron sobre los horarios designados para el tiempo que estaríamos aquí, para finalizar con una actividad de tirar la cuerda donde en el medio se encontraba algo parecido a un lago de lodo, por lo que el que perdía por temas de física caían en él.

Todo muy divertido.

Al ser 100 chicos en total al interior del alojamiento nos tuvimos que dividir en grupos de 10 personas por equipo para poder participar, a mi me tocó participar de los primeros y pude conocer a dos chicos bastante divertidos, no tuve oportunidad de volver a encontrar a Seungmin, ya que le tocó en uno de los últimos grupos.

Para mi suerte ganamos el enfrentamiento con el otro equipo, por lo que solo nos quedamos mirando al resto de grupos que quedaban hasta el final.

-No esperaba ver a Lee este año— escuché a mis espaldas de uno de los chicos que recién conocí llamado Bangchan.

—¿A quién?— pregunté intrigado al no saber a quien se refería.

—Al de pelo verde, es nuestro cuarto año consecutivo aquí -respondió un castaño que se encontraba a un lado de Jisung, un peli negro que conocí al hacer equipos— Hyunjin- me ofreció su mano y la tomé amablemente.

-Deberías dejar de lado ese rencor Bang- rió el azabache.

—¿Es el chico que está con Seungmin? - pregunté para mi mismo al finalmente distinguir una cabellera verde entre las personas.

-¡¿Ya conociste a Kim Seungmin?!- el peli azul que había dado inicio a la conversación preguntó exaltado.

-Es mi compañero de cabaña - alcé los hombros quitándole importancia.-¿Por?—

-Es uno de los chicos más reconocidos en el campamento, dicen que sus padres son dueños de la mitad de Corea del Sur, pero es muy amigable y siempre trata de ayudar a los chicos nuevos, además de que su innegable belleza hace que tenga una buena cantidad de chicos tras él cada año- respondió Felix mientras miraba disimuladamente hacia el lugar donde estaba peligris.

-Pero siempre los rechaza de la manera más amable— complementó el castaño. -Aunque a mi parecer Changbin es más adorable— los tres lo miramos con el ceño fruncido al no entender de donde venía eso.—Es el de pelo morado —aclaró para mi, en tanto miraba seriamente a los otros dos.

-Kim es un amor de persona,es lamentable que sea amigo de alguien tan monstruoso como ese maldito gato- habló Bangchan primero en un tono sincero que pasó a ser uno desdeñoso.

-Min ya se ha disculpado contigo Bang— el peli negro palmeó su hombro.

-Eso no me devolverá la dignidad Han- se hizo a un lado evitando el tacto.

-Oh vamos ¡Teníamos 13 años!- excuso Jisung conteniendo las carcajadas.

Yo solo reía al ver como estos chicos hablaban trivialidades y contaban una que otra anécdota, explicándome como funciona una amistad en donde se ven pueden constantemente solo por el verano, puesto que los tres eran de distintas escuelas, sin embargo, todas eran de Seúl.

Así atardeció entre conversaciones y bromas hasta que llegó el último enfrentamiento.

-En vista de que es su primer día pueden ir a sus cabañas a descansar por lo que queda de tarde- habló uno de los guías cuando volvió a reunirnos. Recuerden que el comedor está abierto hasta las 21:00 horas y el toque de queda comienza a las 23:00 horas ¿Alguien tiene preguntas?— finalizó.

Al ver que nadie alzó su mano dio por terminada la jornada, los chicos que recién conocí me ayudaron a encontrar mi cabaña nuevamente.

Al entrar aún estaban las luces apagadas, por lo que las encendí y me metí a la ducha de inmediato, no sin antes sacar una toalla y mi pijama, que más bien eran prendas algo desteñidas que aún servían.

Al salir ya estaba Seungmin sentado en lo que corresponde a su cama, tenía un vasito en sus manos y noté que sobre mi colchón también había uno.

-Traje helado para nuestra pijamada- su sonrisa era sincera.—Pero primero me daré una ducha- dejó el pequeño contenedor de lado para dirigirse al baño con toallas y prendas, a las cuales no preste atención, en su mano.

Mientras el sonido del agua cayendo traspasaba la pared, me dedique a ordenar un poco la ropa que ya había ocupado para mandarla a lavar mañana, miré mi móvil para abrir las notificaciones que me llegaron durante el día.

Cosas comunes de adolescente.

A los minutos la puerta del baño se abrió y por instinto miré hacia la dirección del objeto moviéndose.

Grave error...es mi fin.

El chico traía una camisa de un azul casi blanco algo transparente que llegaba hasta más arriba de la mitad de sus muslos, su pecho sutilmente marcado estaba al aire, dejando ver sus clavículas y parte de su hermosa piel acanelada, mas su entrepierna si estaba cubierta por la ligera prenda.

-Ehm...- puedo jurar que la saliva solo cae por la comisura de mis labios.

-Realmente lo siento, me confundí de pijama al salir tan apurado de mi casa...— sus mejillas estaban sonrojadas y mejillas estaban sonrojadas y su cabello comenzaba a tomar lindas ondas que enmarcaban su rostro.

-N-no te preocupes- aclaré mi garganta para sentarme sobre mi cama y poner uno de lo cojines pequeños sobre mi entrepierna.

No ahora por favor.

-Muchas gracias- se inclinó amablemente para ir hasta su lugar de la habitación y volver al espacio que utilizaba antes de meterse al baño. -Aún es temprano así que estaba pensando que este es el momento ideal para conocernos mejor- habló en tanto tomaba el vaso con helado.-¿Qué opinas?- sus largas piernas se encontraban cruzadas y contrastaban у con las sabanas de color amarillo pastel de una forma maravillosa.

Parece salido de un cuadro.

—Está bien— sonreí tratando de que mi erección pasara desapercibida.

-Ven aquí, así podemos hablar mejor- palmeo el lugar frente a él en la cama.

Sin pensarlo mucho hice lo que me dijo para que no viera la duda en mis ojos y preguntara que estaba pasando.

Tratando de aligerar el ambiente y también viendo una oportunidad de que la cosa entre mis piernas se calmara busque una para iniciar la conversación.

-Escuché que vienes hace un tiempo al campamento—trataba de mirar a sus ojos para que no notara mi nerviosismo.

—Algo así— rió con una amplia sonrisa.— Mis padres no toman vacaciones, por lo que apenas salgo de la escuela me envían aquí por todo el verano- alzó los hombros.— Desde los 12 años prácticamente vacaciono aquí a pesar de que fuera algo triste lo que había dicho antes— sus ojos tenían un brillo de sinceridad.-¿Quién te dijo eso?- su tono era amable.

—¿No te vas a enojar con ellos o algo por el estilo?—los chicos dijeron que es una persona dulce, pero no quiero meter la pata sin asegurarme yo mismo de que es así.

-Para nada, es algo de conocimiento público—

-Conocí a tres chicos esta tarde, si no mal recuerdo son Bangchan, Hyunjin y Jisu– los enumere con los dedos, dudando del último.

-Jisung. —me corrigió rápidamente.

—Si-si él— asentí seguro.

-Todos llevamos el mismo tiempo en este campamento, son muy simpáticos— se movió ligeramente hacia adelante dejando ver uno de sus pezones.

Mierda mierda mierda.

-Ehm s-si son buenos chicos–respondí sintiendo el dolor en mi miembro.

No pude hablar más después de pasara ese pequeño incidente en donde la mayor parte de su pecho quedó al aire, al igual que su vientre plano y tierno, pero aún se mantenía oculta su ropa interior.

-¿Qué edad tienes IN? ¿Puedo decirte así?- parecía que se había acercado un poco más en tanto yo estaba en shock aún.

-17 años y no hay problema— respondí a ambas preguntas.

-¿Cómo llegaste aquí?— sus ojos me miraban como si pudieran traspasarme.

Alguien que me ayude por favor.

―A mis padres no les gusta que sea tan solitario, así que esta fue su genial idea - respire lentamente para dejar salir la oración como si no estuvieran pasando mil escenarios eróticos con el chico frente a mi.

—Así que solitario eh— hizo su cuerpo hacia atrás apoyando sus manos sobre lacama, finalmente la camisa se abrió por completo dejando a la vista una pequeña panty básicamente transparente del mismo color de la prenda superior que incluso caía por sus hombros.-Me gustan los chicos así— su sonrisa era socarrona.

¿Dónde está el chico del que todo hablan?

-Seungmin-lo miré con curiosidad sin saber que estaba pasando.

-Dime- el muy descarado acomodó la camisa dejando ver más de su cuerpo.

-¿Qué estás haciendo?— apunte a todo su cuerpo señalando a qué se dirigía mi pregunta.

-Ya que escuchaste que llevo aquí un tiempo, supongo que también te contaron lo dulcey amable que soy, casi como un virginal pastelito- asentí recordando las palabras de los chicos.— No quiero que pienses lo contrario, solo quiero que sepas que pienso que eres muy lindo, realmente muy atractivo- se arrodillo sobre la cama posicionándose frente a mi por completo.-Y no quiero que tengas la idea de que te rechazaré o vas a corromperme en caso de que hagas algún movimiento o algo por el estilo- sus mejillas estaban tiernamente sonrojadas.

¿Estaré soñando?

-Y-yo...ni siquiera sabes si soy gay- me hice el desentendido.

Dejo caer por completo la camisa, por lo que lo único que cubría su cuerpo era esa diminuta lencería transparente que no dejaba nada a la imaginación.

-Jeongin, tu polla está por reventar tu pijama— se acercó lo suficiente como para que nuestras respiraciones se mezclaran.-Déjame verla, por favor- no me tocaba, pero era tentador.

¿Cómo llegué aquí?

-Quítate eso—miré hacia la pequeña prenda que no permitía que su miembro ya duro se extendiera por completo.

Rápidamente se levantó de la cama e hizo lo que le dije dejando su erección al aire, sin que dijera nada se dio una vuelta completa dándome una vista increíble de su trasero relleno, sus elegantes piernas y su delicada espalda, sumado a su hermoso tono de piel que parecía brillar.

-¿Ahora si puedo ver?— preguntó como si nada.

Un total desvergonzado.

Tampoco emití palabra alguna cuando bajé mi short de pijama, no llevaba ropa interior, por lo que de inmediato se alzó mi miembro que era más grande que el suyo por una notable diferencia.

Empezaba a hacer mucho calor en la cabaña, mis manos querían tocarlo tan pronto como fuera posible, parecía estar totalmente consciente de lo que pasaba por mi cabeza, pero lo dudo, ya que gran parte de mi excitación no es solo porque sea un chico lindo de personalidad destacada, sino que su simple desnudez me tiene ardiendo en el infierno.

—Ven aquí— ofrecí mi mano, la tomó con una gran sonrisa ilusionada, tiré de ella lo suficiente como para quesuficiente como para que quedara sentado en mi regazo y sus nalgas rozaran con mi polla.

-Es muy grande- sentí como su zurda tocaba mi miembro desde el glande hasta la base de manera lenta y curiosa.— у ¿Podemos hacerlo?― nuestras miradas se encontraban unidas.

-¿Cómo puedes hablar así como si nada?- pregunté totalmente sorprendido porque este mismo chico era el que todo el mundo creía un adorable bebé.

-Soy virgen, no estúpido, ni mucho menos sumiso— su mano se movió de mi miembro a la orilla de mi camiseta y comenzó a alzarla con ayuda de su diestra hasta que logró sacarla. Joder tus brazos comenzó a tocar mis músculos mientras los miraba condetención.-Eres muy caliente IN- cuando sus ojos nuevamente se dirigieron a mi no pude contenerme más.

Mi boca termino sobre la suya de una manera brusca, mordí su belfo inferior para que dejara entrar mi lengua provocando algo más parecido a una lucha entre ambos, mis manos se dirigieron a su trasero para apretarlo con fuerza mientras alzaba mis caderas simulando penetraciones.

-También es mi primera vez - hablé en sus belfos algo hinchados gracias a la salvaje caricia anterior.

-Mejo aún, dulzura— este chico es una cajita de sorpresas.

Ya me encanta.

Tomó mis manos y las alejó de su cuerpo para dirigirse a su bolso que estaba a los pies de su cama, con toda la tranquilidad sobre la faz de la tierra, aprovechando para calentarme aún más con todo su cuerpo expuesto, lo abrió para sacar un contenedor de color rosa.

—No quiero que me rompas— antes de sentarse a horcajadas sobre mi, terminó de sacar la prenda en mis tobillos. Se delicado, por favor, hizo un hermoso puchero en tanto me entregaba el objeto.

-Al parecer venías preparado – dije irónicamente abriendo la tapa del lubricante para verter sobre dos de mis dedos.

-Era por si tenía que autocom-¡Mierda!- chilló cuando metí mi índice en su entrada sin cuidado alguno gracias a la horrible imagende que alguien más pudiera disfrutar de su hermoso cuerpo.-Te dije que con cuidado-se quejó cuando solo deje la punta de mi digito en su interior.

-No, dijiste que fuera delicado -lo corregí para volver a introducir por completo mil falange notando como la hendidura de su glande ya dejaba salir pre-semen.

-Es lo mism-¡A-aah!—metí la segunda falange sin precaución alguna.— ¡A-ahí! — gimió cuando doblé ambos dedos en su interior frotando su punto p.

-To-tocame... jadee cuando mi polla rozó con su abdomen gracias a que él alzaba sus caderas para autopenetrarse con mis dedos.

Con sus largos dedos rozó mi glande torpementedistribuyendo por todo el falo los hilos de fluidos que salían por él, generando sonidos inconfundibles a la hora de rodear toda mi polla y comenzar a masturbarme, en tanto movía mis dígitos en su interior al mismo ritmo.

Parecía una lucha por el control sobre el cuerpo del otro, nos movíamos en busca de más placer, pero sin llegar a su punto culmine.

Perfecto.

-Fóllame Jeongin... jadeo en mi oído cuando su pulgar rozó la hendidura de mi glande.

-No creo que sea muy delicado- susurré en su cuello para después besar la y succionar parte de su piel contrastando el color miel con las manchas violáceas.

-N-no importa— alzó sus caderas hasta que mis dedos salieran de su interior y llevó mi polla a su entrada. Solo jódeme, ya- tomé su cintura para penetrarlo certeramente.

Sus paredes abrazaron mi falo de manera ideal, se sentía apretado y maravillosamente cálido su interior.

-Seungmin...- gemí gravemente cuando nuestros cuerpos chocaron sin cuidado alguno.

Los sonidos obscenos llenaban la habitación, sus chillidos no hacían más que calentarme y la manera en que su cuerpo se movía me dejaba disfrutar por completo de él, el sudor cubría su piel dándolo un aspecto lujurioso, su diestra se encontraba en uno de mis hombros en tanto su zurda tiraba de mi cabello para alzar mi rostro lograndoreencontrar nuestras miradas y labios.

-¡M-más IN!- lo abrace por la cintura para movernos sobre el colchón para acostarlo sobre él.

Su cabello quedo desordenado sobre la sabana aumentado su toque de sensualidad, mientras mis manos se posaron a los lados de su rostro para no aplastarlo.

Los movimientos eran bruscos y agradecía por completo estar en una cabaña solo para ambos, sus brazos pasaron por mi cuello para acercarnos aún más y succionar la piel en mis clavículas hasta parte de mis pectorales.

Nuestros cuerpos se complementaban al igual que los sonidos que salían de lo más profundo de nuestras gargantas, su interior comenzóa apretar cada vez más y sentí como el pre-semen salía de su glande sin control alguno.

-E-estoy cerca- -jadee en su oído sintiendo como tiraba del cabello de mi nuca con fuerza para que nuestras frentes chocaran.

-Yo tam-bién... - mordió su labio cuando las estocadas se hicieron lentas pero más duras.

Cuando la presión en mi vientre llegó a ser dolorosa me quedé en su interior para dejar toda mi esencia en su interior y a los segundos sentí la viscosidad de su semen sobre mi abdomen, mientras sus ojos se quedaban en blanco.

Salí de él para acostarme a su lado y atraerlo hacia mi abrazando todo su cuerpo como si quisiera protegerlo.

Esto es nuevo.

El ambiente había pasado de uno ruidoso y excitante a uno más relajado y lleno de satisfacción, como si fueran dos lugares por completo distinto.

Por unos minutos observé su rostro hasta que decidí meternos bajo las sabanas ligeramente manchadas con nuestros fluidos, al parecer estaba por quedarse dormido.

Joder lo hicimos...

- IN- escuché su suave voz y pude ver su cara por completo, puesto que se puso de lado.

—¿Qué pasa?— alejé el cabello que tapaba sus ojos para poder admirarlo por completo.

—Tengo que decirte algo—agachó su mirada totalmente avergonzado.

Tengo miedo.

-Dime, Seungmin- sonreí amablemente para que hablara.

-Te conozco hace años y me gustas mucho- habló rápidamente así que dude de lo que había escuchado.

-Yo voy a Dwight School Seoul, pero soy un año menor que tu esa es mi escuela.— La verdad sé quien eres y de donde vienes, gracias a que tus padres le preguntaron a los míos que hacia yo durante el verano llegaste aquí, te juro que lo de las cabañas fue una coincidencia, aunque lo agradezco con todo mi corazón—se alejó de mi con su voz apenas hecha un susurro.

-¿Nuestros padres se conocen? ¿Vamos a la misma escuela? ¿Hay algo más quetenga que saber?— solo eso me llenaba de curiosidad.

-Si, si y no-respondió también con su cabeza asintiendo y negando.

-¿Seguro?- tomé su mandíbula para que me mirara a los ojos, solo asintió con su cabeza.—Entonces...creo que será aún más fácil mantener esto— asentí observando la manera en que sus ojos se agradaron por la sorpresa.

-¿Te refieres a nosotros? — preguntó con sus ojos brillantes.

-Exactamente— sonreí al ver como se iluminaba su rostro.

-Pensé que te daría miedo y me ignorarías por el resto del verano— lo miré algo ofendido.

Creo que no es nada comparándolo con un jodida filia.

-No, de hecho, ahora muchas cosas tienen más sentido— recordé la precaria ropa interior, lo determinado que estaba y como se entregó sin dudas algunas.

-S-si, perdón por eso— rió nerviosamente.— Pero pensé que me tomaría más tiempo provocarte,
— fijó su mirada en mi pecho, en tanto sus dedos hacían figuras imaginarias en él.

-Mejo vamos a dormir—terminé de enlazar por completo nuestros cuerpos esperando que se olvidara de eso.

Tal vez tengamos una conversación donde mis secretos también tengan que salir a la luz.


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Sweeties aquí un capítulo, espero y lo hagan disfrutando, nos leemos en el próximo, cuídense <3

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