Cuando Jin tenía tres años vio un asesinato, no cualquier asesinato sino el de su propia madre.
Gritó y pataleo hasta que su padre lo obligó a callarse golpeandole por todo lado, Jin entró en coma por esos golpes y cuatro días después cuando despertó, estaba solo en una habitación de un horrible hospital.
El entierro de su madre ya se había dado y según todos los medios, la pobre e inestable mujer se había suicidado después de casi matar a su pequeño Seok Jin, mentira, el verdadero asesino de la heredera Kim no era ni más ni menos que su padre.
Él la había asesinado y luego golpeado hasta el borde de la muerte, pero tenía tres años y nadie creyó nada de lo que dijo.

— Estas mintiendo— una cachetada impactó en su mejilla, Jin retrocedió asustado y cubrió su cuerpo con las sábanas— ¿Como una puta podría ser hijo del ministro Jeon?

Jin no contestó, su vida había sido difícil desde siempre.
En primera, su padre era un hijo de puta, cuando se casó con su madre cambió su apellido a Kim para poder heredar la empresa de su familia, por lo tanto cuándo el nació no recibió el apellido Jeon sino Kim, técnicamente el solo era hijo de su madre.
Años después, dejó de utilizar el apellido de su madre y retomó su apellido de soltero "Jeon", se casó y tuvo un hijo al que si dio su apellido y Jin fue arrojado a la calle.

— Es verdad — sollozo avergonzado— Estoy diciendo la verdad

— No te creo, maldita puta— Namjoon tomó el teléfono enojado— Llamaré a seguridad, voy a denunciarte por intento de homicidio

A los ojos del.mundo, el.pobre Kim Seok Jin había sido confinado en un instituto mental.
En la realidad, el chico había escapado a los doce años de las tortura de su padre y había terminado viviendo con Jiminnie en una.pocilga de mala muerte.

— Por favor, te lo suplico, Namjoon— Jin se arrodilló y suplicó llorando— No hagas eso, por favor...

Ya había rogado antes, había sido medigo durante varios años para pagar sus estudios y huir de su padre, había trabajado en.cafeterías y muchos otros lugares, pero todo cambió cuando conoció a Namjoon.

— Por favor, haré lo que me pidas, pero por favor, no me denuncies—

— Lo único que quiero no me.lo.puedes dar, eres una puta inservible—

—Escuchame, por favor...— sollozo sonrojado— Puedo darte dinero, mucho dinero pero no me denuncies

— No tienes ni donde caerte muerto— soltó riendose— ¿Cómo puedes ofrecerme dinero?

— Jungkook— soltó entre lágrimas— Déjame llamar a mi hermano, por favor

Namjoon asintió disgustado, le lanzó con asco el teléfono y se sento frente a él dispuesto a escuchar toda la llamada.

— ¿Jin?— la voz de Jungkook resono.en toda la habitación— ¿Está todo bien?

Jin rompió a llorar sin poder contenerse.

— Necesito dinero, Kookie—

— ¿Te hizo algo? ¿Ese mal nacido te tocó? Le rompere la cara, lo mataré—

Definitivamente esa si era la voz de Jungkook, le.arrancó el.teléfono y colgó la llamada enojado.

— Así que dices la verdad, putita—

Jin asintió intentando calmarse, Namjoon le.sonrió macabramente y de un solo tirón colocó a Jin debajo suyo.

— El.ministro Jeon nunca me.agradó— solto.mordiendo.su oreja— Divertirme con su pequeño retoño será una bonita venganza contra él

Cuando tenía tres años, su padre lo violó alegando casi lo mismo.

"Tu madre nunca me gustó, pero tu, su pequeño retoño, eres toda una joyita"