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Ambas expresiones eran tan distintas, Jungkook miraba a Taehyung como lo haría un niño pequeño al ser descubierto por su madre cuando intentaba comer un dulce a escondidas, sus labios estaban sellados, pero aquel silencio fue la respuesta a la cuestión, por su parte, Kim estaba destrozado, se aferraba a la idea de que todo fuera alguna broma pesada por parte de su novio, pero no sería así, todo le indicaba que era real, sin soportarlo más le regaló una última mirada a Jungkook antes de que su vista se nublara por las lágrimas, deseaba recordar aquel lindo rostro, sorbió su nariz y pasó de lado de Jungkook empujándolo intencionalmente, su cordura se había terminado ahora solo quería escapar de aquellas cuatro paredes lo antes posible.

—Espera, no puedes irte así — no sabía con certeza si justo ahora Jeon tenía la suficiente fuerza para detenerlo o simplemente estaba tan cansado que un simple tirón le obligaba a quedarse.

Taehyung buscó la mirada del menor y encontró sus ojos cristalizados, Jeon bajó la mirada y soltó con pesadez la muñeca de su Hyung, la imagen destrozó aún más su corazón, solo dejó que sus impulsos actuaran por si solos y rodeo con sus brazos el cuerpo tembloroso.

—Perdóname Taehyung — se atrevió a llorar sobre el pecho del más alto empapando con sus lágrimas la camiseta que llevaba puesta —, todo se me fue de las manos, no quería hacerte daño.

Taehyung tomó el mentón de Jungkook obligándole a mirarlo, le tomó en sus manos y sus pulgares limpiaron las lágrimas que se escurrían sin parecer detenerse, le dedicó una sonrisa sincera y presionó sus labios con los ajenos. Se fundieron en un dulce pero amargo beso, entre el vaivén de aquellos labios saboreo las lágrimas saladas que lograron colarse, aquello no fue suficiente para querer separarse si no al contrario él quería permanecer ahí, los labios de Jungkook siempre le habían robado sus sueños, aquellos dulces labios habían permanecido constantes en sus pensamientos, habían sido tan dulces hasta ahora que justo en ese momento parecían tan amargos, la suavidad había desaparecido y es que claro, ese no era un beso lleno de amor, ese beso carecia de aquel sentimiento que Jeon siempre había querido transmitir, ahora el único sentimiento que podía sentir Taehyung era la lastima, era un beso no correspondido, un beso que estaba lleno de culpa, sí, de lastima...

Por un momento Taehyung creyó poder cambiar eso, acarició la mejilla húmeda de Jungkook y con la diestra libre, le tomó la nuca impidiéndole que este se separara. Cuando sintió el sofoco y quiso separarse de aquellos labios permaneció aun con los ojos cerrados, unió su frente con la del menor y permaneció ahí llenando sus pulmones con el aliento cálido que se colaba de entre los labios rojizos e hinchados de Jungkook.

—Esto no está bien Taehyung, no debemos hacer esto, ya no.

— ¿Por qué no está bien? — Kim tomó distancia y quitó los cabellos que descansaban sobre su frente echándolos hacia arriba con ese movimiento de mano tan peculiar de él —. ¡Claro! Ya lo entiendo, sientes que esto no está bien porque estás pensando en él, piensas que lo estás lastimando con una supuesta traición, ¿no es así Jungkook?

El menor mordió su labio inferior y evadió la mirada de Taehyung por milésima vez esa tarde. Para Taehyung era absurda su reacción no quería evitarlo, pero esos celos lastimeros le quemaban el pecho.

— ¿Por qué no pensaste así de mi cuando te divertías a su lado? O ¿es qué, con él no estabas jugando, pero conmigo si? Yo solo fui un juego, conmigo te divertiste, para ti no significó nada esto, siempre fue un sucio jueguecillo para ti, no te importaron mis sentimientos o lo que yo podía llegar a sentir por tus acciones.

No confundas esto Tae, digo que esto no está bien porque estas lastimándote — esta vez el menor tomó la iniciativa y en sus manos tomó el rostro de Taehyung obligándole a mirarlo, una punzada en su pecho apareció teniendo tan cerca aquel perfilado rostro se dio cuenta del peso de sus palabras, aquella mirada reflejaba cuan destrozado estaba su corazón, entonces Jungkook tuvo piedad, era hora de decir la verdad —. Escúchame, desde hace tiempo las cosas no funcionan, todo el tiempo estas sobre mí, me llamas en todo momento, me sigues a donde voy, si quiero salir debo hacerlo cuando tu estas dormido. Tae, tu amor pasó a ser una absurda obsesión, yo no quiero que ambos sigamos con esto, las cosas podrían terminar peor, esto ahora solo te está lastimando, te quiero demasiado pero, no podemos seguir así.

Jungkook por fin se sentía tranquilo había guardado aquello por mucho tiempo, había creído que Taehyung le amaba demasiado y por ello demostraba su amor de esa manera, siendo completamente dependiente de él. Taehyung no se daría cuenta de esto si no fuera por las palabras de Jungkook, Kim siempre había tenido en claro que era una persona muy demostrativa con sus sentimientos, es verdad a veces, por las noches revisaba el móvil del pequeño intentando buscar algo fuera de sitio, sin embargo Jeon había puesto un PIN evitando de este modo que el otro revisará su bandeja de mensajes.

—No es verdad Jungkook — Taehyung se apresuró a tomar las manos contrarias apartándolas de su propio rostro, Jungkook había hecho esa confesión con total tranquilidad siendo claro y objetivo —, nunca te quejaste de mi forma de ser, te gustaba que yo fuera de ese modo. Solo estás confundido, yo voy a demostrarte que estar a mi lado está bien...

Entrelazó sus manos con las del pequeño quien le miraba confundido, le sonrió ampliamente decidido a lo que haría, después de aquella dulce expresión, Taehyung llevó sus labios sin previo aviso a los ajenos, dejó un beso fugaz y continuo su camino recorriendo el mentón pasando después a la piel suave de su cuello. Disfrutó de cada roce, Taehyung no olvidaba que quizás esa sería la última vez que podría dedicarse a pintar ese hermoso lienzo con sus labios.

No quería detenerse aun si Jeon se lo pedía, así que continuó descendiendo por aquel camino que él mismo había dibujado. Pronto, Jungkook le arrastró a la cama y permitió que Taehyung le arrebatara las prendas que estaban de sobra. Jeon no podía negar que aquellos besos le quemaban la piel, cada uno encendía el deseo por poseer al mayor, sus pensamientos estaban siendo olvidados ahora solo se permitía disfrutar el momento.

Quizás Jeon había aprendido a depender también de Kim Taehyung...


Funesto Final

No sé si escribir un capitulo más y subirlo más tarde... 

o publicar dicho capitulo mañana...

Odio las dudas dudosas T.T

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