Un cuento de hadas.

Un cuento de hadas es una historia ficticia que puede contener personajes folclóricos -tales como hadas, duendes, elfos, brujas, sirenas, troles, gigantes, gnomos y animales parlantes- e incluir encantamientos, normalmente representados como una secuencia inverosímil de eventos. En el lenguaje contemporáneo, así como fuera del contexto literario, el término es utilizado para describir algo que está vinculado con princesas.

Un Han Jisung de once años tecleó cuentos de hadas en la búsqueda de naver y esto fue el resultado,   le pareció muy lindo hasta que leyó princesas, ¿Y los príncipes qué?, la pregunta rondó por su cabeza logrando que frunciera el ceño en confusión.

Su duda por el género literario le surgió gracias a su profesora, ese día leyeron "La bella y la bestia", muchos niños se quejaron diciendo que ya estaban grandecitos para leer cuentos de niñas, pero ella no dio su brazo a torcer y se defendió, diciendo que la historia iba más allá, quería que analizarán los sentimientos, emociones y diferentes personajes, y sobre todo qué mensaje deseaba transmitir la autora.

Habló de los roles que la mujer debía seguir en aquella época y como algunos aún seguían, cuando se suponía era una sociedad más desarrollada, incluso tocó el tema del síndrome de Estocolmo que se desarrolló en la historia; el poder de la envidia y  del amor, abriéndole los ojos a muchos niños, sin embargo, se centró en el mensaje que hacía memorable al cuento...

— Lo amó sin importar su apariencia — finalizó.

La profesora Choi supo atrapar a cada uno de sus alumnos, tenía muy buenos argumentos, verlo desde otra perspectiva era interesante, más aún cuando mencionó que todos pueden tener su propio cuento de hadas y amor, aunque algunas veces no siempre sería perfecto, tampoco quería ilusionarlos tanto.

Algunos niños y niñas se burlaron, otros lo ignoraron pues no creían en esa basura, y otros pocos - entre ellos Jisung - querían vivir eso.

Ser el protagonista de su propia historia de amor, le sonaba lindo, quería experimentar aquella magia.

Y por eso su confusión, la profesora no especificó si eso sólo se aplicaba a las princesas, ¿ y los niños qué?. Jisung es un príncipe, su mami le decía principito como mote cariñoso a su niño, a su hijito menor, él es su bebito precioso ¿entonces porqué no hablaban de los príncipes?

Resopló desanimado y apagó el computador mientras en su boca tenía un puchero, su madre al otro lado de la habitación notó esto y no dudó en preguntarle a su niño el motivo de su ánimo. El pequeño Jisung confiaba mucho en ella y le explicó desde lo que aprendió con la maestra hasta lo que le dijo naver. A la señora Han le dio mucha ternura y comenzó a explicarle su mal entendido.

—Naver no sabe bien el tema, corazón. — explicaba con mucha paciencia y cariño mientras sentaba en sus piernas al pequeño rellenito y le peinaba algunos mechones — Parece que no le prestaste atención a la profesora, pero también aplica para los príncipes tener su cuento de hadas, incluso si eres un plebeyo, no aplica a nadie en exclusivo, todos merecen ser amados y felices, hasta los ogros si no mira a Shrek y Fiona— tomó la cara de su niño entre sus manos y comenzó a darle besitos en toda la cara, sus risas se escuchaban por toda la casa.

—Así como yo te amo, pero con la diferencia de que yo soy tu madre, algunos día tú querrás encontrar una princesa o un príncipe y eso estará bien— al terminar de pronunciar estas palabras notó el rostro confundido de su hijo así —Tu hermana también algún día anhelara eso, Sunggie, aunque lo dudo, tiene más vibras de bruja — mencionó con toque de burla, pues su hija de ahora quince años desde pequeñita siempre quería ser la villana cuando con sus amigas jugaban a las muñecas.

—Tienes razón mami, no me sorprendería algún día ver a Yoon siendo una villana de Disney — decía entre risas y sus ojos achicaban.

— No creo que lo entiendas ahora pero algún día lo harás y yo estaré apoyando y deseando tu felicidad mi principito — finalizó su discurso dando un pequeños beso en su frente, sonando un fuerte "muack" en la habitación. —Vamos, hagamos los panqueques de que tanto amas. 

Las palabras, panqueques y galletitas de su madre lograban calmar su  inconformidad y además tuvo  respuestas a las tantas preguntas que tenía, así que al niño de once años le bastó con eso, sabiendo que algún día él saldría en búsqueda de una princesa o príncipe, no estaba seguro de eso aún, tenía mucho por descubrir pero si que podía decir con toda seguridad que se moría por tener su propio cuento de hadas.

Jisung se volvió un amante del género de romance y cuentos de hadas, leyendo muchos libros y viendo muchos dramas y novelas junto a su madre, alimentando así la ilusión.

No fue hasta que a sus trece años -gracias a Yoon- descubrió un nuevo mundo.

Su madre le pidió que llamará a su hermana para que bajara a cenar, obedeciendo subió las escaleras y se dirigió a la habitación con la puerta color lila, esta estaba medio abierta y las luces apagadas, decidiendo en el momento que le haría una pequeña broma como venganza a la que le hizo unos días atrás, y más valía si Yoon estaba durmiendo así tendría mayor efectividad.

Entonces, sin ninguna pizca de duda fue a su cuarto de baño y tomó un vaso, llenándolo con poca agua, - en todo momento tenía una sonrisa traviesa- apagó la llave y regresó a la habitación.

Se colocó de rodillas luego se acostó boca abajo, ayudándose con los codos para poder avanzar, a manera de que no se viera y saliera triunfal. Logró pasar la puerta, y visualizó que su hermana estaba en su escritorio viendo la computadora y traía puestos los audífonos - mayor ventaja - , siguió avanzando casi que  pareciéndose a un gusano, ya sus rodillas y codos comenzaban a doler, además sentía que en cualquier momento el vaso se resbalaría de sus manos, todo por no ser atlético.

Creyendo que era el momento indicado se levantó y tocó el hombro de su hermana, esta pegó un brinco del susto y volteó su rostro hacia su hermanito, Jisung sin esperar le dejó caer el vaso en la cara, al ver su cara de desconcierto comenzó a carcajearse, mientras hacía esto su vista se corrió a la pantalla y entonces lo vio...

Yoon veía aquella escena de Boku no pico, y entonces Jisung se desmayó.

Vaya, al parecer fue demasiado para el menor de los Han.

Desde ese día algo cambió dentro de Jisung.

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¿Qué tal les pareció?