Me despierto por la ténue luz que entra por la habitación, a mis ojos les cuesta acostumbrarse a ella y una vez que lo hacen me percato de que Mike se encuentra a mi izquierda tumbado boca abajo y dejando ver las enormes alas que tiene tantuadas en la espalda.Me toco la cabeza ya que me duele y envuelvo mi torso desnudo con una sábana. Me levanto con mucho cuidado con la sábana al rededor de mi cuerpo y tropiezo con una prenda de ropa que está desperdigada por el suelo, Mike se queja y yo maldigo hacia mis adentros.

- Entonces el viernes en mi casa- Dice Meghan refiriéndose a la fiesta "sorpresa"que están preparando para mi cumpleaños.

-Chicas no hace falta- Digo revolviendo el plato de espinacas que tengo delante.

- ¿A qué hora?- Dice Mike el cual está con su brazo en el respaldo de la silla.

-A las 5 - Responde la misma.

-Y todos tenemos que llevar un regalo - Dice Elisabeth.

- ¡Qué ilusión !- comenta Dakota.

Suena el timbre, recogemos la bandeja y Mike me acompaña a la taquilla.

-Si quieres puedes venir antes de la fiesta de cumpleaños al camping- Dice mientras abro la taquilla.

-Oh vale - Respondo cogiendo el libro de filosofía, el archivados , un cuaderno de notas y el estuche.

Mike me deposita un beso y nos despedimos en el pasillo abarrotado de gente.

Me despierta el estruendoso ruido del despertador y alzo la mano para apagarlo.

Hoy es mi cumpleaños y me hace bastante ilusión ir a la fiesta que han montado las chicas aunque ir de fiesta no sea lo mío.

Me incorporo de la cama, noto el sudor en mi espalda debido a que la calefacción está muy alta.

Bajo los escalones después de haberme arreglado, encuentro a mi madre tomando una taza de café y leyendo el periódico.

-Hola- Digo abriendo la nevera.

-Felicidades- Me responde en un tono como si no le hiciera gracia decirlo.

Salgo a la templada mañana y Mike me está esperando con un pequeño envoltorio en la mano me felicita y me lo da.

-¿Qué es? - pregunto rompiendo el fino envoltorio color chocolate.

Cuando rompo por completo el pequeño objeto, mis ojos se encuentran con un llavero del cual resalta una figura de un lobo blanco el cual se encuentra aullando.

- Es precioso- Digo dándole un beso .

Entramos al instituto y tras unas horas cogiendo apuntes y escuchando a los profesores soltar sermones me dirijo con Mike al comedor.

Las chicas me felicitan y me recuerdan la fiesta de esta noche.

Al salir del instituto me dirijo con Mike al camping. La temperatura es templada y el sol brilla en el cielo.

-Felicidades Ada, me a comentado Mike que hoy es tu cumpleaños- Dice Jack acercándose con su bastón, camina encorvado con una mano en la espalda y a paso muy lento.

-Gracias- Le repondo ofreciéndole una amplia sonrisa.

-Hola- Oigo una voz muy familiar, me giro y allí me saluda una Tiffany despreocupada.

-Siéntate- Añade y ella lo hace, la imito, noto lo dura que es la madera del tronco, la hoguera se encuentra apagada y los árboles sin hojas.

-Ahora vengo- me dice Mike alejándose y dejándome sola con esta arpía.

-Bueno, ¿así que hoy es tu cumpleaños?- Pregunta con una risa burlona.

-Sí- Digo cortante.

-Mañana se celebra una danza popular en nuestra especie, podrías venir y hablamos para conocernos un poco mejor.

-Vale, se lo comentaré a Mike-

Tiffany se ríe y niega con la cabeza, lo cual no comprendo y me desconcierta. El tiempo que paso con ella es muy incómodo y agradezco cuando Mike aparece de entre los árboles.

-Felicidades- Grita alguien mientras me eleva del suelo, George, me río y le exigió que me bajé .

-No- Responde elevándome aún más del suelo y hechándome sobre su hombro, aunque estoy gritando no paro de reírme .

- Bájala - Dice Mike, la sangre está comenzando a acumularse en mi cabeza y me encuentro ligeramente mareada.

- Vale tío no hace falta que te pongas así- Dice George bajándome.

Me tambaleo ligeramente pero George me sujeta para que no me caiga.

- Creo que ya es hora de irnos- Dice Mike cogiéndome la mano.

Me despido de Jack el cual me hace un gesto de despedida, los pasos de Mike son rápidos y me cuesta seguirle el ritmo.

Cuando llegamos a casa de Meghan la música sale a un volumen demasiado alto, gente que no conozco se halla en ella, la mayoría borrachos y botellas de alcohol desperdigadas por el suelo es lo que se puede apreciar cuando entras.

Dudo bastante que alguien de los que están aquí sepan que hoy es mi cumpleaños pero aún así nos adentramos entre la multitud de gente y esquivamos las botellas desperdigadas por el suelo, la música está demasiado alta e inunda mis oídos, la preciosa alfombra blanca que adorna el suelo del salón ahora es amarilla y la mesita le faltan patas al igual que se pueden apreciar cuadros rotos por el suelo.

- Ya habéis llegado- Dice una Dakota muy borracha, su aliento huele a alcohol y su equilibrio no es muy bueno.

-Bebe un poco- Dice acercándome un vaso. Miro a mi alrededor, no veo a Mike por ningún lado.

- No gracias- Lo rechazo y comienzo a desplazarme por la casa en busca de Mike.

Subo la escalera de mármol y abro la primera puerta de la izquierda, un grupo de chicos se encuentran bebiendo y formando alboroto, me disculpo y cierro la puerta. Lo que encuentro en la siguiente prefiero no recoradarlo y borro ese horroroso recuerdo de mi mente. En mi cabeza comienza a habitar un fuerte y agudo dolor, mis oídos solo me permiten escuchar la música y me empiezo a cuestionar y preocupar por el lugar donde se pueda hallar Mike. Entonces alguien irrumpe mis pensamientos cuando me coge la mano, me giro y allí se encuentra Mike.

- Vámonos- Grita encima de la música.

-¿Dónde estabas? me has dado un susto de muerte-

-Eso ahora da igual tenemos que irnos- me comenta y su voz tiene un tono nervioso y se muestra istérico.

-No quiero irme-

-Prometo contarte todo más tarde, ahora vamos- no deja tiempo a que pueda meditar una respuesta cuando enrrolla una de sus manos a la mía.

Salimos de aquella fiesta y aquel dolor de cabeza se encuentra luchando para darme una mala pasada.

Caminamos en silencio a mi casa, la música todavía retumba en mis oídos.

- Tiffany me ha invitado mañana a una danza que dice que es popular entre vosotros. - Rompo el incómodo silencio.

-¡¿Qué?! Ni de broma vas a venir-

-¿Por qué?

- Porque es muy peligroso y no lo soportarías-

Paro en seco en aquella calle.

- No te entiendo, primero por un extraño motivo me dices que nos tenemos que ir de mi fiesta de cumpleaños y ahora esto.- Se empieza a poner más que nervioso y se pasea por el asfaltado camino que emprendimos.

-Explícame qué está pasando.-
Todo esto me está pareciendo más que extraño.

- Por favor - añado al ver que no me responde.

- Tengo que irme-

- ¡¡Mike!! - intento que mi voz no se quiebre ante sus palabras. Pero él ya no está, giro todo mi cuerpo en su busca pero no hay rastro de él.

Aquella noche no consigo pegar ojo, mi mente solo me tortura con posibles hipótesis para justificar el comportamiento de Mike.

Paso el día intentando ignorar a Mike además de que no me apetece hablar con nadie debido al cansancio de no haber pegado ojo. A la hora de la comida inspecciono el área donde me encuentro para encontrarme como los días atrás a las chicas y Mike en la misma mesa, me acerco a ellos no sin que en mi cuerpo habite la curiosidad y el enfado , al llegar a su altura me siento al lado de Mike, pero no mantengo contacto visual con él. Todas hablan de temas diversos, pero yo las ignoro debido a que mi mente se concentra en Mike. Éste rompe el silencio cuando dice

- He estado pensando , que si quieres puedes venir a la danza de esta noche- como respuesta asiento y en cuanto suena el timbre me alejo lo antes posible de aquel horroroso lugar.

Me miro en el espejo de mi baño y solo deseo ir acorde con las espectativas. Esta noche mamá trabaja en casa de los Bradley así que abro la puerta y permito que los tacones se desplacen por la escalera de madera, que produce ese horroroso crujido cuando choca contra la madera que compone la misma. Miro el reloj del pasillo para percatarme de que no solo llego tarde sino que Mike no ha venido a buscarme.

- No entiendo qué es lo que le ocurre, se comporta de forma extraña desde el día de mi cumpleaños- estas palabras las pienso mientras introduzco la metálica llave en la cerradura y una vez la puerta cerrada me encamino hacia el ya oscuro bosque.

Cuando llego hay una gran fiesta, gente bailando, la hoguera se encuentra encendida y en el ambiente se nota la diversión. La música no está muy alta y la noche es templada y está nublada. Empiezo a buscar con la mirada a Mike, cualquier rastro que halla de él pero en ese momento alguien me roza el brazo, giro todo mi cuerpo para encontrarme con Jack.

-Hola Jack - le digo animadamente.

-Ven, rápido, tengo algo que contarte-

-¿Qué ocurre?- Empiezo a asustarme y pienso que algo malo le ha ocurrido a Mike.

-Tengo que contarte una cosa y no te va a gustar- me dice, pero antes de que pueda procesar sus palabras, éste se desvanece por el camping, con su bastón como guía y su arrugada mano apoyada ligeramente en su encorvada espalda.