El sábado mi madre entra en la habitación y abre las cortinas para despertarme, yo gruño y me tapo la cara con la almohada.

- Ada a levantarse que hoy vamos al centro comercial -

- Yo no quiero ir - Digo con voz ronca y con los ojos cerrados

- Me da igual lo que quieras necesitas ropa así que arriba- Dice y escucho sus tacones alejarse por el suelo.

Mi madre me grita unas cuatro veces mientras me estoy preparando, la verdad es que necesito ropa de invierno.

Bajo corriendo y ya me está esperando con esos siniestros ojos azules y su pelo rubio teñido recogido en un perfecto moño.

Me subo en el coche , me acomodo en el asiento y pongo la calefacción porque el coche está helado.

Conducimos durante un breve periodo de tiempo, aparca en el primer sitio libre que encuentra y decidimos quedar aquí en tres horas.

Entro en aquel terrorífico lugar, entro en un par de tiendas y me compro tres vaqueros uno de ellos color coral, el otro morado y el otro es uno simple, de color oscuro y roto en una de las rodillas, dos jerseys y una sudadera, cuando me dispongo a esperar las dos horas que faltan sentada en un sillón una tienda llama mi atención, es una pequeña librería donde no hay demasiada gente y decido entrar tras unos segundos de duda. No hay muchas estanterías pero una llama mi atención, son antiguos periódicos y uno en especial llama mi atención. Es un suceso que ocurrió al rededor de 1980 en Bothell trata sobre que un pescadero afirmó haber visto a un hombre lobo decía que venía de otro día de duro trabajo cuando decide ir por el bosque y vio a un lobo transformarse en un humano, su hijo murió pero él logró escapar a partir de ese día múltiples desapariciones acechan el pueblo. Al principio nadie le cree y le ingresan en un psiquiátrico.

Mi lectura se ve interrumpida por el sonido de mi móvil.

-¿Sí?- Contesto a la llamada.

-¿Dónde estás?- Se escucha la voz de mamá desde el otro lado del teléfono y no especialmente contenta. Visualizo la hora en el reloj de la librería para sorprenderme de la fugacidad del tiempo.

-Eh... ya voy- respondo y cuelgo sin tan siquiera escuchar la respuesta de mi madre.

Me acerco a un señor cuyos cabellos canosos descansan sobre su frente ocultando los ojos y la mayor parte de la cara.

-Disculpe, ¿me podría llevar este ejemplar?- pregunto y aguardo su respuesta.

-Lo siento no está en venta-

Al salir de la tienda con notable fastidio visualizo que mamá ya se encuentra en el coche.

La tarde la paso estudiando y me es inevitable apaciguar la curiosidad acerca del artículo.

El lunes entro en clase de español y me siento con Mike.

- Hola - Saludo

- Hola, ¿Qué tal? - Me responde este

El profesor nos informa que ya tiene los exámenes y yo me ilusiono al ver mi nota, un 9 está escrito en el folio con tinta negra.

Cuando llego a casa le enseño el examen y mi madre lo mira con el ceño fruncido

- Ya puedes estudiar para un 10 la próxima vez -

Me quedo de piedra y como si nada vuelve a hacer lo que estaba haciendo segundos atrás.

El viernes bajamos a ver un campeonato de rugby que se celebra en el instituto contra el de Portland. Cuando llego al gimnasio no veo a mis amigas por ningún lado y ya cientos de personas se encuentran repartidas por la estancia formando un tremendo alboroto.

Me siento en el primer sitio libre que visualizan mis ojos y noto que alguien se sitúa a mi izquierda cuando me giro los ojos avellana de Mike me saludan.

- ¡Cuánta gente ! - Exclama

Pues la verdad que sí-

¿A tí te gusta el Rugby ? -

Me río y le digo

¿Tú que cees ? -

El partido comienza y yo le doy todo mi apoyo a mi equipo los cuales están jugando muy bien y al final ganamos.

Al salir de aquel estruendoso y alborotado lugar Mike me pregunta

- ¿ Qué haces este fin de semana ? -

Espera pienso, ¿Mike me está pidiendo una cita ? Quito ese pensamiento de mi cabeza pero por algo mil mariposas comienzan a revolotear en mi estómago.

-Nada-

-Vale, pues entonces el sábado voy a recogerte sobre las tres.- Me quedo de piedra.

-Como amigos, claro- explica.

Aunque acepto su propuesta, hay algo en ella , en realidad hay algo en él que no me convence, como si me estuviese ocultando algo.

Tras un largo y para mí eterno día, por fin llega el sábado, me encuentro en el salón más nerviosa de lo que debería dando vueltas en círculos por la pequeña habitación. Llevo una fina blusa de botones color rosa pastel, unos sencillos vaqueros con mis plataformas y el pelo ondulado y completamente suelto. Para que el momento hasta que llegue Mike se me haga más ameno decido escribir mi historia de Wattpad, el tema que escojo es sobre mi nueva obsesión : los hombres lobo:

Aquella criatura, para muchos tenebrosa y peligrosa , cuyo pelaje es de un negro radiante y ojos caramelo.

En seguida me doy cuenta de lo que he escrito y rápidamente borro el contenido. En ese momento alguien llama al timbre me empiezo a poner muy nerviosa, me sudan las manos y mi corazón late a toda pastilla solo de pensar que puede ser Mike, la verdad es que es el chico más guapo que mis ojos han podido apreciar.

Me miro en el espejo de la entrada y me echo brillo de labios y me coloco el pelo, otra vez alguien vuelve a llamar al timbre abro la puerta y Mike me espera apoyado en la farola de enfrente de mi casa con las manos en los bolsillos y aire despreocupado, lleva su ropa casual de siempre, sudadera negra con vaqueros del que cuelgan cadenas, esa ropa le queda de maravilla y le pega con su oscuro cabello. Mi corazón late desbocado y no puedo evitar pensar que me va a dar un infarto en cualquier momento.

- Hola - Me dice y su voz es ronca en ese momento me derrito en mi sitio

- Hola- Digo visiblemente avergonzada

Cojo el bolso y cierro la puerta con llave pero me tiemblan las manos y se me resbalan las llaves produciendo un terrible sonido al caer al suelo, oigo acercarse a Mike y me susurra en el oído

- ¿Estás nerviosa? - Su aliento caliente hace cosquillas en mi oreja.

Está demasiado cerca de mí y rezo para que no escuche mi corazón latir tan rápido.

Alza sus manos y las envuelve junto a las mías , están calientes y suaves, mi piel se eriza ante su contacto y lleva nuestras manos a la cerradura. Me giro y él me imita.

- ¿ A dónde vamos? - Digo para olvidarme de lo sucedido y para relajar mi pulso.

Mike se aleja y coge dos cascos que se encuentran descansado sobre una moto de color negro, esta es bastante grande y moderna. Mike me acerca un casco blanco y yo me lo pongo pero con bastante dificultad ya que pesa un montón. Mike se sube a la moto y yo me coloco detrás de él, en este momento estoy super emocionada y nerviosa y por supuesto culpable porque mi madre no sabe nada acerca de esto. La moto arranca emitiendo un rugido y en seguida nos incorporamos a la carretera, mis manos se encuentran rodeando su cintura y ahora entro en un estado de pánico ya que vamos doblando la velocidad de lo permitido. El viento que realiza aquel despejado día mueve mis ondas.

Pasado un rato no demasiado agradable para mí , Mike para el vehículo y me doy cuenta de que un cine se alza sobre mi cabeza. Me bajo de la moto con la débil sensación de poder caerme en cualquier momento, escucho una dulce risa a mis espaldas, lo que hace que como acto reflejo gire todo mi cuerpo y me encuentre con Mike riéndose.

-¿Qué te hace tanta gracia?- pregunto incrédula.

-Tenías que haberte visto la cara.- Pongo los ojos en blanco y me adentro al cine. Mike me sigue de cerca.

-Y,¿qué película vamos a ver?- No puedo evitar preguntarle y mi curiosidad aumenta a medida que transcurre el tiempo.

Mike ignora mi pregunta y se adelanta , le dice algo a la señora que se encuentra vendiendo las entradas y vuelve a donde yo estoy en este corto tiempo no he parado de mirarle.

Me enseña las entradas, el título no lo he oído nunca pero la foto de un lobo como portada me hace intuir que tratará sobre lobos.

- ¿Qué es lo único que tenemos en común? - Pregunta

- Los lobos-

Me río y él me imita y nos dirigimos a la sala del cine que nos indica un guardia, nos acomodamos en nuestros sitios cargados de palomitas y bebidas que previamente hemos comprado. Cuando transcurre la película en varias ocasiones observo de reojo a Mike el cual me dice chistes durante toda la película acerca de los personajes y yo no paro de reírme y en varias ocasiones un grupo de chicas que redondean nuestra edad nos mandan callar.

- Me ha encantado la película- Digo mientras me termino mi bebida.

- Sí ha estado bien-

Cuando salimos afuera nos recibe un viento gélido , nubes bañan el cielo y lluvia cae de ellas.

- Perfecto- Digo.

- Vamos - Dice Mike cogiéndome la mano y echando a correr nos empapamos y yo no paro de reírme. Cuando llegamos a la altura de la moto Mike tiene el pelo mojado y gotitas le caen de las puntas del pelo, me pasa mi casco y conduce de vuelta a casa de la misma forma temeraria que en la ida.

Cuando veo la puerta del chalet que compartimos mi madre y yo lo maldigo y lo odio más que antes.

- ¿ Quieres entrar a secarte?-

- Vale-

Mike y yo entramos en casa y lo acompaño a mi habitación y allí lo dejo , voy al baño y cojo dos toallas y enciendo la calefacción.

-Toma- le digo y ofrezco una de las dos toallas que llevo encima.

-¿No me lo vas a secar tú?- Me pregunta y yo me quedo de piedra, sin saber qué responder o hacer.

Antes de que pudiese reaccionar Mike envuelve sus brazos a mi cadera y tira suavemente de mi cuerpo, el cual aterriza en mi cama.

Mike se sube encima de mí. No puedo parar de mirar sus preciosos ojos caramelo, éste acerca suavemente sus labios a los míos . Al principio duda, pero luego se decide y los acerca más a los míos. Noto suavemente su labio superior rozar el mío inferior, y de repente el ruido de la puerta de la habitación abrirse hace que nos separemos a la vez.